Arkhen se sentó en la piscina con los ojos cerrados mientras las bellezas exóticas a su alrededor le hacían cosas ecchi.
Una mujer con grandes tetas empezó a frotar sus pechos en su cara, mientras que otra planeaba meter la polla de Arkhen en su coño.
Sin embargo, a Arkhen no le estaba permitido hacer nada.
—Tampoco puedo correrme, ¿verdad? Tengo que controlar eso. —pensó.
—Efectivamente. Si es posible, trata de bajar tu erección. —respondió una voz en su cabeza.
—…
—Está bien. Déjame intentarlo. —se resignó Arkhen.
…
—Esta prueba es demasiado, jajaja. —comentó Zoe.
Zoe, Evelyn y Meya se reían mientras observaban a Arkhen, mientras otros también sonreían irónicamente.
—Pero él pasará la prueba —dijo Sierra con una sonrisa aguda—. Tiene que hacerlo.
—Efectivamente. —asintió otra persona.
—Jaja, claro. Tiene que pasar la prueba. —coincidieron todos.
Arkhen en realidad estaba teniendo dificultades para contenerse porque no eran solo esas chicas desnudas tentándolo.