Refal se estremeció al mirar a Sierra. Primero sintió miedo y luego vergüenza.
—¡Puta maldita! —Su orgullo estaba herido y ardía de ira por dentro, pero no lo demostraba.
—¡Tenía que salir vivo! ¡Necesitaba vivir para vengarse de esta humillación!
—P-Por favor, déjame ir. Lo siento —dijo Refal con la cabeza gacha, mirando al suelo. Aún no podía mover su cuerpo y estaba en posición de rodillas—. Perra, juro que te humillaré y te mataré.
—Tos, tos... *Puchi*... ¡Mierda! ¿Cómo diablos pasó ese piso? ¡Es una mierda! —Arkhen apareció de un pequeño parpadeo al lado de Sierra mientras tosía, vomitaba sangre y maldecía antes de mirar la situación—. Eh, ¿qué está pasando?
...
Arkhen hizo medio día de preparación e incluso logró entrar en la Fortaleza Mecha. Sin embargo, ¡la seguridad era demasiado estricta! Logró llegar a la habitación donde estaba colocado Motor Chispa, ¡pero lo atraparon robándolo!