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—¡Ding! Has matado una Araña Devoradora de Almas del Cuarto Orden. Tus puntos de experiencia han sido guardados.
—¡Ding! Has matado una Araña Devoradora de Almas Principiante del Quinto Orden. Tus puntos de experiencia han sido guardados.
—¡Ding! Has matado una Araña Devoradora de Almas del Pico del Terce...
—Huff... ¡Uff...!
—Finalmente... —finalmente, Aditya había terminado. Le había tomado más de 5 horas eliminar a todas y cada una de las Arañas Devoradoras de Almas de los alrededores de la capital. Durante estas horas no había tomado ni un descanso. Al principio, parecía que no importaba cuántas matara, siempre había más, y más de estas Arañas Devoradoras de Almas. Cuantas más mataba, más seguían apareciendo.
—Continuó durante horas hasta que terminó con la última Araña Devoradora de Almas Principiante del Quinto Orden que quedaba.
—¡Suspiro!
—Hace tiempo que no me sentía tan exhausto —dijo Aditya en un tono cansado—. Realmente estaba exhausto en ese momento.
