Max caminaba desolado hacia las gradas del público temiendo la reacción de su hermano.
Sin embargo, sus suposiciones nunca se materializaron, ya que fue recibido por un Rudra y una Naomi con sonrisas de oreja a oreja.
—Wooo, aquí viene el campeón —Naomi dijo con la sonrisa más luminosa, mientras la cara de Max se sonrojaba un poco.
—Perdí… —Max dijo, sin aceptar su cumplido.
—Pfft, ¿y qué? Eres mi campeón sin duda —Naomi dijo, haciendo todo lo posible por animarlo.
Max miró a los ojos de Rudra y los encontró tan llenos de amor como siempre.
Para su placer, Max no vio ninguna decepción en los ojos de Rudra al mirarlos, solo alegría y amor.
—Fue una buena pelea, has mejorado mucho como luchador —Rudra dijo, expresando su genuina satisfacción por el crecimiento de Max.
—Podría haberlo hecho mejor —Max dijo, quitando importancia al cumplido.
Rudra sonrió al rodear con sus brazos los hombros de Max y dijo —¿Dónde crees que te equivocaste?, dime tu análisis.
