En el mismo momento en que Vaughn comenzó a presentarle a Valyr su próxima recompensa, un tenue indicio de expectativa apareció en los ojos de este último, preguntándose si sería tan asombrosa como las otras recompensas que había obtenido hasta ahora.
Sin embargo, después de ver al hombre convertir un tronco de aspecto normal en un talismán de madera ante sus propios ojos, así como darle un aviso previo de que la recompensa podría parecer insuficiente, esa expectativa desapareció instantáneamente.
«Un talismán que me permitiría solicitar su ayuda donde y cuando fuera», pensó Valyr para sí mismo, asintiendo ligeramente al tener una idea de por qué Vaughn le estaba dando algo así.
En su mente, la razón por la que Vaughn le había dado algo así era para que pudiera escapar básicamente cada vez que estuviera en una emergencia o en una situación increíblemente grave.