—Veo que es una ciudad antigua que quedó en ruinas, pero...
—Te preguntas por qué te trajimos aquí, ¿verdad? —sonrió el viejo comerciante—. Ven, síguenos y conocerás la respuesta.
A William no le gustaba tal actitud. Sin embargo, estar en un lugar tan antiguo le hizo superar sus dudas.
Cualquier ruina antigua estaría llena de tesoros y conocimientos perdidos del pasado. Lo extraño era que un sitio antiguo tan grandioso estuviera justo debajo de la ciudad bulliciosa y animada en la superficie.
William no podía decir si esta ciudad era el origen de la de arriba, o si quienes construyeron la ciudad arriba encontraron este lugar por accidente. Sin mencionar que quien obtuvo acceso aquí era un grupo de comerciantes.
Parecían ricos, no menos que cualquier grupo de comerciantes del Gran Siete en el fuerte antes de la gran guerra. Sin embargo, no eran tan ricos o poderosos como para aprovechar al máximo este sitio o incluso protegerlo.