Al parecer, mientras Vale examinaba los alrededores, se dio cuenta de que el espíritu del Santo Demonio, que estaba disfrazado de un Espíritu normal, en realidad estaba atado a algo...
Para ser exactos, estaba atado al relicario en el Altar.
—¿Fue capturado por el Pecado Mortal? ¿O es otra cosa? —Shane reflexionaba mientras se sentía confundido sobre su conexión.
Era lamentable que el espíritu del Santo Demonio ya hubiera desaparecido, pero, sin embargo, la pista que había dado era ciertamente importante.
Ni siquiera sabía que Aubrey podría realizar un ritual así.
—Como se esperaba de una estudiante que se graduó en la cima de su clase —Vale pensó para sí mismo.
—P-pero, destruir el Altar... Eso sería... —El Alcalde no pudo evitar sentirse confundido sobre esto.
Los demás podían entender esto ya que se suponía que era sagrado.