Andrés se había despertado al sentir unos labios suaves rozando los suyos. Abrió los ojos lentamente, su mente aún no estaba clara. Pensó que estaba soñando o algo así.
—¿Qué estoy viendo? ¿Alveena? —Andrés estaba confundido sobre por qué Alveena estaba en su sueño, besándolo.
En su estado somnoliento, cerró los ojos de nuevo pero aún podía sentir los suaves labios de Alveena presionando contra los suyos. Ella lo estaba besando suave y tiernamente. Andrés estaba siendo cautivado por su beso sensual. Le gustaba.
Pronto, los labios de Andrés empezaron a moverse, respondiendo a ella. Sus ojos seguían cerrados. Su mano llegó hasta la nuca de Alveena. La atrajo más a él para profundizar el beso.