—Objetivo fijado —Alveena acababa de encontrar el blanco perfecto para este desafío. Y estaba contenta de que él fuera el chico afortunado de esta noche.
—Oye, ¿por qué sonríes como un tonto? ¿Has encontrado al hombre más guapo del club? —preguntó Erica a Alveena, siguiendo su mirada.
Selena hizo lo mismo. Ambas amigas se asombraron en el momento en que sus ojos encontraron a Andrés sentado en la barra del bar. De hecho, era guapísimo. Destacaba entre los hombres presentes en el club esa noche.
Alveena levantó una ceja en el momento en que notó la clase de mirada que sus amigas le estaban dando a Andrés. Parecían leopardos listos para saltar sobre su presa.
Dado que estaba sentada en medio de Erica y Selena, Alveena les cubrió los ojos con ambas manos al mismo tiempo.
—Hey chicas, ese hombre está prohibido. Es mío. Él es mi objetivo y mi presa. Busquen a otro —declaró Alveena a ellas.