—¡Maldición! ¡Lo vio! —Matthew se maldijo interiormente, mordiéndose los labios.
—¿Qué? ¿Por qué me miras así? —dijo Matthew intentando fingir inocencia.
Tristán se rió antes de arrebatar la bolsa de papel de la mano de Matthew. Luego, rodeó con sus brazos el hombro de Matthew mientras le susurraba algo.
—Lo vi. Estás mirando a Sofía. Mmm... es hermosa, ¿verdad? —dijo Tristán, burlándose de Matthew.
Los ojos de Matthew se abrieron de sorpresa al escuchar eso. Así que la encantadora mujer frente a ellos no era otra que Sofía, la amiga de Lillie.
Casi no la reconoció. Es diferente de la Sofía que conoció ayer.
Zhen-Zhen y Sofía se acercaron para unirse a Tristán y Matthew.
—¡Matt, tú también estás aquí! —Zhen-Zhen lo saludó alegremente.
—Sí, estoy aquí porque Tristán me pidió que trajera algo —respondió Matthew sonriendo tímidamente a Zhen-Zhen mientras se rascaba la cara.
Sofía también saludó a Matthew. —Hola, Señor Mateo.