—El sonido de los labios aplastándose se podía escuchar en toda la habitación —Tristán comenzó a responder a su beso con necesidad y ansiedad fervientes.
—Le gustaba besarla. Había una oleada de sensaciones placenteras que le hacía sentirse extasiado —Tristán se sentó. Sus manos ya estaban sujetando su rostro y sosteniendo la nuca para acercarla más a él mientras profundizaba el beso.
—El intenso placer que le proporcionaba la boca experta de Tristán era abrumador —Zhen-Zhen comenzó a gemir subconscientemente. Entonces, un sentimiento desconocido empezó a florecer en lo profundo de su corazón.
«¿Qué es este sentimiento? Me está haciendo perderme... ¿mi control? Mi corazón late rápidamente. Es muy fuerte y tan rápido. Siento calor pero se siente tan bien. Quiero... algo más.»
—Con ese pensamiento en mente, Zhen-Zhen de repente empujó a Tristán, inmovilizándolo en la cama mientras ella se colocaba encima —Sus labios no dejaban de saborearse y explorarse mutuamente.