Andrés sentía que estaba extasiado en ese momento. Este era uno de los momentos más felices de su vida. Ya había propuesto matrimonio dos veces, una a Hannah y otra a Alveena, pero esta vez se sentía muy especial para él.
No quería comparar, pero podía sentir la diferencia. No podía explicar por qué, pero esta sensación… Esta era la primera vez que la experimentaba.
Solo Alveena podía hacerle sentir esta felicidad genuina.
Andrés todavía estaba jubiloso mientras continuaba abrazándola y elevándola cuando de repente el cielo nocturno se pintó con distintos colores y luces brillantes procedentes del espectáculo de fuegos artificiales.
Andrés también había preparado un espectáculo de fuegos artificiales para Alveena. Los dos alzaron la vista mientras observaban las hermosas luces brillantes en el cielo.
Alveena estaba abrumada por la sorpresa de Andrés. Él había sido tan dulce y romántico preparando todo esto solo para ella.