—Su Xiaofei, cuéntanos... ¿Es verdad que Su Haoran traicionó a mi hermana? —Esta vez fue Yun Shao quién le preguntó a Su Xiaofei.
—General Yun, respetables Tíos, esta es la razón por la que acepté encontrarme con ustedes hoy —respondió con el rostro imperturbable—. Por favor, ayuden a mi madre a recuperar su libertad de Su Haoran.
—Cuéntanos qué sucedió primero. Empieza desde el principio y no te atrevas a mentirnos —Yun Zhaonan, el segundo hijo, miró a Su Xiaofei como si ella fuera su subordinada. Estaba sentado con las piernas cruzadas, sus gafas le daban un aspecto más distinguido, como un erudito con vasto conocimiento.
—Zhaonan, Xiao Shao, no intimiden a la Señorita Su —El mayor de los hermanos Yun sonrió y le hizo un gesto a Su Xiaofei para que tomara asiento frente a ellos.
—Mi mamá se levantó temprano hoy para hacerles esto a ustedes, Tíos —dijo antes de dar un sorbo al jugo de naranja que le habían preparado.