Recomendación Musical: The Crawling de Kensuke Ushio.
Cuando Madeline abrió los ojos, se encontraba en medio del estrecho callejón y las paredes a ambos lados se veían embarradas por la lluvia que había salpicado el barro del suelo hacia las paredes. El cielo estaba oscuro y nublado, y caía una llovizna. El callejón estaba tranquilo, y ella alzó la mano para atrapar las gotas de agua, cuando notó lo pequeña que era su mano.
Acercándola, le pareció extraño, como si su mano hubiera encogido de tamaño. Se dio cuenta de que no solo estaba observando recuerdos, los estaba viviendo.
—¿Madeline? —escuchó a su madre llamarla.
Miró hacia el suelo que había formado un charco. Al ver su reflejo, vio a una niña pequeña que le devolvía la mirada. Cuando Raphael había hablado de adentrarse en los recuerdos, Madeline había creído que se quedaría al margen y observaría a la gente hablar, no que sería parte de la conversación.