```
—Oh, dios mío... —Axel estaba casi llorando mientras conducía el vehículo hacia el autódromo—. Ni siquiera puedo oír nada.
Sus labios se estiraban hasta alcanzar sus ojos, riendo en cuanto llegaron al autódromo. Piso el pedal, listo para probar qué tan rápido podía ir, pero luego cambió de opinión.
—¿Por qué conduces tan despacio? —preguntó Cielo desde el asiento del pasajero.
—Bueno, estás aquí —Axel frunció el ceño—. Hermana, ¿por qué no bajas primero para que pueda probar su límite?
'Cierto' Recordó Cielo, sabiendo que Axel sabía que a Cielo le daban miedo este tipo de cosas. 'Qué considerado de su parte. Pensé que lo olvidaría, pero aunque tiene poco o ningún orgullo e integridad, fue una tontería pensarlo'.
—Está bien —Cielo sonrió—. Solo estamos nosotros en el autódromo, así que no tendré miedo de que choquemos con alguien.
Sus cejas se levantaron.
—¿Segura?
—Sí —Asintió ella.