La expresión de Lewis Jiang se tornó fea. Quería estallar contra su hija mayor, pero no podía hacerlo frente a sus padres. Era evidente para él que Adrienne no le estaba dando ninguna importancia frente a los mayores. Cuanto más miraba a Adrienne, más molesto se sentía.
—¿No puedes oír las groserías que estás diciendo? ¿Le diste tus modales al perro cuando saliste esta mañana? ¿Cómo puedes decir algo así a tu hermana? —la fulminó con la mirada a Adrienne, pero esta permaneció impasible en su asiento.
Mientras tanto, una mirada sombría cruzó el rostro de Camilla mientras Elise se sentía injustamente acusada en su interior. Maldecía a Adrienne repetidamente en su corazón pero se calmó al instante cuando escuchó a su padre regañar a Adrienne. ¿Qué hacía pensar a Adrienne que era mejor que ella? ¿Acaso Adrienne no sabía que su padre preferiría a Elise sobre ella sin importar lo que sucediera?