—Estos son los hilos de mi sangre. Cuando inyecto mi sangre dentro de los hilos y planto uno de estos hilos dentro del corazón de alguien, esa persona se convertirá en mi persona. Mientras esa persona piense en traicionarme, puedo castigarlo de inmediato. —Huang Donghai pareció notar sus dudas, por lo que explicó con paciencia. Parecía calmarse, y sus ojos ya no estaban tan rojos como antes.
—¿Son estos hechizos, o algún tipo de herramienta artefacto? —Shenlian Yingyue clavó su mirada en los hilos de sangre que eran tan diminutos como los hilos.
—Es el Hilo de Sangre Divina, una herramienta de grado divino que tuve la suerte de obtener en mi aventura hace cien años. Cuando hice un contrato con él, aprendí cómo usarlo. Un Hilo de Sangre Divina se puede dividir en cientos de hilos. —Huang Donghai respondió respetuosamente.
No le permitían dirigirse a sí mismo como 'este inferior', por lo que usó 'yo' pero en un tono respetuoso.