Los enanos transmiten la solicitud del rey enano, explicando la importancia crítica de reunir tres medallones especiales para abrir una puerta oculta en el corazón de una montaña. Según la leyenda, esta puerta conduce a un poder antiguo, esencial para su lucha contra las fuerzas oscuras que amenazan su mundo.
El rey semibestia, llamado Taranis, escucha atentamente antes de responder con una voz profunda y serena. Explica que el medallón que buscan no está bajo su custodia, sino en un templo en la Isla de Yelara, un lugar sagrado y peligroso protegido por enigmas y guardianes poderosos. Sin embargo, Taranis muestra disposición para ayudar, conmovido por la urgencia de la situación y la propuesta de alianza del reino enano.
Taranis se compromete a participar personalmente en la expedición para descubrir los secretos ocultos detrás de la misteriosa puerta, pero establece una condición: que Alex, Lyria y Elren lideren la misión para recuperar el medallón. Para garantizar su éxito y seguridad, asigna a la guardia real a Niamh, una semibestia con la elegancia y astucia de un zorro de ocho colas, cuya belleza es tan legendaria como sus habilidades en combate y sigilo.
Niamh, con su pelaje plateado y ojos que reflejan la sabiduría de su linaje, se acerca a los héroes. Su presencia es cautivadora, y aunque su forma es la de un zorro, en sus ojos brilla una inteligencia casi humana. Promete guiarlos a través de los peligros que les esperan en la Isla de Yelara, advirtiendo sobre los desafíos y criaturas que resguardan el medallón.
La misión es clara: deben viajar a la Isla de Yelara, enfrentar los desafíos que les esperan y recuperar el medallón antes de que caiga en manos equivocadas. La alianza entre el reino de Thornfel y los enanos, reforzada por la participación de Taranis y la guía de Niamh, marca el comienzo de una aventura que podría cambiar el curso de la guerra contra las sombras.
The vessel sets sail at dawn, cutting through the calm waters towards Yelara Island, a place shrouded in mystery and ancient magic. The island, visible only when sincerely sought, emerges from the horizon like a mirage, its contours bathed in an ethereal light.
As they draw nearer, the island reveals its secrets: beaches of white sand surrounded by imposing cliffs and a dense jungle that conceals the temple at its heart. The atmosphere is charged, as if the island is alive, watching the newcomers with curiosity and caution.
They disembark on the beach, and before them stretches the jungle, a labyrinth of green promising both wonders and dangers. Niamh takes the lead, her senses attuned to the vibrations of the earth, guiding them along hidden paths among the vegetation. The jungle teems with life, with sounds of unknown creatures and the whisper of leaves, narrating ancient stories to the wind.
The temple rises in the center of the island, an ancient stone structure covered in moss and vines, a testament to a forgotten civilization. Its walls are engraved with symbols and runes that speak of magic, protection, and the power that resides within.
The group enters the temple, where sunlight filters through cracks in the structure, creating a mosaic of light and shadow. The air is cool, charged with a mystical energy that tingles their skin. As they advance, they realize that the temple is both a sanctuary and a challenge, designed to test those who seek its secrets.
The silence is profound, broken only by the echo of their footsteps. Corridors branch off in multiple directions, each promising to reveal its mysteries to those brave enough to explore them. The group stays together, aware that the true test is yet to come.
The temple, a guardian of ancient secrets and powers, waits patiently to reveal its treasures to those who prove worthy. With each step, Alex, Lyria, Elren, and Niamh draw closer not only to the medallion they seek but also to truths about themselves and the world they are fighting to save.