"Después de la discusión de negocios, Harold intentó invitar a la pareja a cenar, pero Víctor declinó cortésmente.
La pareja se despidió de Harold y su mansión, Víctor llevó a Mónica de vuelta al hotel. En el camino, Víctor no pudo resistir preguntar:
—¿Cómo se siente interactuar con un niño?
—Un poco agotador… —Mónica reflexionó un momento antes de responder—. Katherine es realmente un puñado.
—Está bien, lo recordaré —Víctor respondió de repente—. ¿Eh?
—En el futuro, nuestro niño no debe ser muy travieso —dijo Víctor con total seriedad.
Mónica se rió, mirando a Victor
—¿Crees que los niños son algo que puedes reproducir selectivamente?
—Yo podría enseñar…
Al escuchar estas palabras, Mónica no pudo evitar imaginar a Víctor sentado seriamente en el sofá de la sala de estar mientras un pequeño estaba delante de él admitiendo sus errores. Sería una vista conmovedora.
—¿Realmente quieres tener uno?
Esta vez, Victor fue sincero al negar con la cabeza a Mónica
