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Chapter 33 - 33:¿Podré tener una cita... normal? (4)

[POV Acedia]

Luego de ese momento en la tienda de ropa terminé llevando a Muriel por todos los sitios turísticos dentro de la segunda muralla para disfrutar de todo lo que pudiéramos hasta que llegue la noche.

Aunque hubo momentos que lamente cuando [Pereza] me asaltaba, pero como le dije a Muriel que quería disfrutar de este día con ella hice todo lo posible por aguantar hasta esté momento.

"Creo que al fin llegamos" dije al gratificado mientras miraba el lujoso edificio de 20 pisos frente a nosotros.

"¿Realmente lograste una reservación en este lugar?." Muriel ya estaba empezando a dudar demasiado de las conexiones que Acedia y ese enano poseían en esta ciudad.

Y lamentablemente no podía decir que no la entendía.

El Loud. Un restaurante de 5 estrellas del mundo sobrenatural, tanto su prestigio como su larga lista de espera para conseguí una reservación aquí era de las más difícil de conseguir. A menos que no seas un embajador o algo similar no conseguirás ni siquiera una mesa al lado del baño en este prestigioso restaurante.

"Bueno... Digamos que Harp termina haciendo muchos favores a personas muy importantes y desgraciadamente me terminó debiendo algunos favores a mí a la vez". Terminé dándole cansadamente la versión muy resumida de mi relación con ese enano.

Momento seguido mire a Muriel.

Incluso si fue un poco complicado, logré que sucumbiera y usará el hermoso vestido que acababa de comprar en la tienda de esa elfa. Y tengo que recalcar que era perfecto para Muriel.

En vez del traje de Maid que ella usaba durante éstos días, ahora fue reemplazado por un hermoso vestido que parecía que fue hecho de detalladas plumas blancas con detalles negros de una pieza, con atado en el cuello, de brazos y espalda descubiertos y de una apertura lateral en la pierna, el vestido emulaba lo que usaría un hada y no necesitó de muchos detalles ya que buscaba resaltar más la belleza de quien la usaba.

Estiré mi brazo y hablé con la mayor cortesía que logré mientras sonreía tranquilamente. "¿La hermosa ángel al frente mío le gustaría disfrutar de la velada especial que le prepare?"

"¿...?" Muriel termino parpadeando incredula.

Ella ya estaba sin palabras por la devoción que Acedia había mostrado hasta esté momento, para ella que sabía cómo lo afectaba su habilidad, que haya logrado mantenerse despierto tanto tiempo y que haya hecho grandes esfuerzos para hacerla feliz durante todo el día ya le llenaba de felicidad.

Debido a eso ella terminó sosteniendo su brazo con una sonrisa gentil. "Juro que si el angel perezoso se atreves a quedar dormido durante la cena nunca lo perdonaré"

Una sonrisa gentil llena de veneno...

"Fufu, no lo haré, pero..." Terminé sonriendo por su habitual actitud de querer burlarse, pero sentí que a la vez podría obtener un poco de beneficio de ésto. Por lo que termine tomando gentilmente su cintura con mi mano vacía para que estemos frente a frente...

"¿Entonces si él angel perezoso logra resistir su sueño podrá obtener una recompensa de su hermosa acompañante?" Sonreí tentativamente hacia Muriel dándole a entender que no la dejaría escapar una vez entremos.

Muriel termino suspirando con un rostro sonrojado por mis motivaciones. "Sigh... ¿No estás siendo más descarado en estos días?"

"Me parece bien cuando involucra a las personas que quiero... ¿Entonces?"

"Verdadera eres un caído sin esperanza..."

Ambos terminamos entrando con una ligera sonrisa en nuestros rostros.

...

...

...

"Por aquí por favor"

Cuando terminamos entrando, fuimos acompañados por los mozos del restaurante hasta nuestra reservación que organizó Harp.

Realmente me sorprendió el lugar. Mesas elegantes, sillas de aspecto tan lujoso como cómodo y gracias a que el restaurante estaba situado en el último piso del edificio podíamos disfrutar de una terraza que daba vista a toda la ciudad.

Realmente un lujo de 5 estrellas.

"Sigh... Con todo esto ya no puedo estar enojado con Harp" dije cansado mientras nos los mozos acomodaban nuestras sillas mientras nos sentamos.

"Incluso con esto no le daré las gracias" Muriel aún parecía tener un poco de resentimiento por su anterior encuentro.

Yo solo termine riendo ligeramente mientras la miraba.

Aunque... 'Esas molestias' molestaban demasiado...

"Bueno, olvidemos al enano y disfrutemos de la velada"

"Si, hagamos eso"

Con esa señal llame a los camareros y les pedí una entrada ligera con un poco de vino para ambos.

"¿Oh?, ¿no esperarás mi decisión?" Muriel termino dándome una mirada juguetona por mis acciones.

"Solo es una entrada para relajarnos, no tenemos prisa ¿Verdad?" Quise mantener un poco de misterio en mis acciones, pero...

"Fufu, ciertamente... Entonces utilizaré este tiempo para que me digas algunas cosas que ocultas de nosotras" Muriel sonriendo seductivamente sin dejar perder esta oportunidad.

"..." Ya empezaba a sudar por lo que preguntaría y mi única esperanza era cuando la comida llegaría o si 'eso' actuaría primero.

"Entonces no voy a contenerme" Muriel comenzó a lanzarme preguntas de los sucesos de éstos días y de incluso trabajos anteriores en dónde estaba solo.

"¿Que pasa con tu incapacidad para hacer amigos hombres?"

"Eso fue demasiado cruel. Además,no es incapacidad... El la crueldad de mi vida"

"Aja... Okey, ya que terminamos en ese tipo de charla debería hacer una pregunta más importante para 'nosotras'"

"¿Nosotras?... Bueno, mientras no sea nada complicado..."

"¿No sedujiste a ninguna mujer aparte de las que ya se conocen?"

"... Lo haces ver cómo si fuera un Playboy andante y la respuesta es no... Creo que no"

"¿Creés?"

"En mi defensa algunas personas solo se me tiraron encima sin que yo haga algo... Fueron momentos muy extraños" yo terminé respondiendo con un rostro sombrío al recordar el pasado.

"Te creeré, por ahora... ¿Eran mejor o peor que Jeanne?" Muriel termino sonriendo divertida con esa duda.

"... Le dan buena pelea a Regina" terminé mirando el vacío del techo con esa respuesta.

"Ohh~... Ya veo... Ah, mira ya llegó nuestro pedido" Muriel dejo de lado el asunto mientras daba la llegada del mesero y veíamos como nos servía.

Realmente agradecía ese buen momento para llegar. Aunque con eso también noté la llegada de nuestra acompañante en las sombras.

Ya había visto el hermoso vestido negro que Ann tenía vestido que dejaba una vista muy detallada de su cuerpo ahora. Pero ahora, con la luz de las luces nocturnas de la ciudad no pude evitar pensar que ese vestido le quedaba demasiado perfecto para ella. A pesar de ser un vestido de mangas largas, debido a su detalle de hombros descubiertos, dejaba una vista muy sensual de sus tersa piel pálida y de sus magníficos pechos que siempre estaban ocultos, sumado a que ese vestido también poseía una apertura lateral dejo una gran vista de sus bien formados muslos.

Realmente nadie creería que está mujer tenía poca confianza en si misma hace poco con esta ropa.

Ann se había mantenido al margen en la terraza del restaurante durante todo este tiempo mientras analizaba a todos los demás personas en los alrededores... Y cuánto más veía, más sombria se sentía. Debido a eso termino viniendo hacia nosotros.

"¿Que sucedió Ann?" Muriel termino dudando de su llegada cuando sabía que se mantendría al margen.

"Acedia... La situación es-" Pero Ann estaba con un rostro muy sombrío en este momento por lo que fue directa a Acedia, pero se detuvo cuando vio mi rostro.

No... El aura que me estaba rodeado lentamente la detuvo.

"Lo sé... Desde el comienzo lo sé..." Dije de manera pesimista mientras notaba como la comida que nos trajeron poseía un ligero contenido extraño escondido.

Incluso me basto una sola mirada para notar como fue alterado el vino que nos trajeron.

Incluso si fue sutil... Fue suficiente para entender que pasaría en esté lugar.

"Acedia... ¿Estás bien?"

"Acedia..."

Tanto Muriel como Ann terminaron preocupadas por mi comportamiento, a su vista mis ojos parecían tan fríos y al borde del colapso de destruir todo en este lugar.

Pero yo realmente no estaba tan alterado como ellas suponían, solo estaba excesperado con todo esto. Ni enojado, aunque un poco frustrado por como la cita que se arruinó.

Pero realmente ahora solo estaba triste y cansado por mis esfuerzos destruídos.

Debido a eso mire a las dos mujeres delante de mi con una sonrisa pesimista. "Perdón Muriel, realmente intenté tener una cita normal contigo... Perdón contigo también Ann... Incluso cuando ambas se arreglaron tanto para verse así de hermosas está noche..."

"Acedia, no necesitas preocuparte por eso, pasar juntos este día fue divertido también" Muriel intento animarme un poco, pero...

"No me refería a eso... Realmente me quería disculpar por lo que sucederá ahora..." Dije eso cansado mientras me levantaba de la silla y me acercaba a ellas.

"Muriel, toma a Ann y entren en mi sombra." Terminé hablando con una voz fría y con una mirada sin vida en mi rostro.

"Ahora"

No fue una solicitud, ni siquiera un pedido. Fue una orden sin esperanza de negación para ellas.

Debido a eso ambas chicas terminaron temblando mientras me veían, incluso cuando me lastimaba ser tan severo con ellas, necesitaba ser firme ahora.

A cada segundo que pasaba aqui, más y más se profundizaba 'ese' sentimiento...

Esa maldita sed de sangre dirigida hacia mí.

De los camareros, desde la cocina e incluso en cada una de las demás mesas repetidas en el restaurante.

Aquí, no había ningún comensal, ninguna pareja, ni siquiera personas de una junta de negocios...

Todo el maldito lugar estaba infectado de los cazarrecompensas detrás de mí.

Debido a eso esperé a actuar hasta que por fin Muriel y Ann se pusieron a salvó dentro de mi sombra. Solo así podría sentirme más tranquilo con lo que pasaría.

Luego de eso me senté sin preocupaciones en mi asiento inicial mientras estiraba mis piernas sin preocupaciones.

"Solo quiero saber una cosa..." Mi voz cansada resonó en todo el restaurante haciendo que todos dejen al fin su disfraz. "¿Cuál es su objetivo verdadero?..."

"¿La Avaricia de la recompensa de Lucifer... o el deseado honor en su finalización?"

Crack

Al instante de decir eso, una 'camarera' ancló un cuchillo en la mesa donde estaba... Y en el, había un gran papel con los detalles de mi captura con mi imagen impresa en el.

"Obviamente eso no interesa ahora, ¿Verdad?, ángel caído" Ella solo se divirtió con la situación dando a entender que solo buscaba la recompensa.

"Tanto esa jugosa recompensa, como el honor es insignificante para algunos..." Un hombre sentado cerca de mi mesa termino mirándome con una gran sonrisa.

"¡Todos los enemigos que formaste en tu larga vida por fin tienen la escusa perfecta para cazarte!... La causa de Lucifer fue solo la última gota que colmo el vaso" Otro tipo detrás de mí empezó a jugar con sus armas mientras daba los motivos principales de la mayoría de estos tipos.

"Sigh... Ya veo... Con todo eso en medio la recompensa ciertamente no importaría..." Suspiré dándoles la razón.

Fue algo entendible para mí...

Pero... No significa que no sea frustrante...

Y con ese pensamiento... Fue el comienzo...

En ese momento... Todos los sintieron.

No solo los cazarrecompensas reunidos en ese lugar... Ni siquiera fue solo la ciudad de [The Whitered Abyss].

¡Una fuerte opresión mágica capaz de aplastar a todos los seres sobrenaturales débiles de la zona fue sentida incluso en el Vaticano!

"Ciertamente no importa..." Seguí hablando fríamente mientras liberaba mi magia que generalmente estaba dormida dentro de mi.

"Igualmente todos ustedes morirán aquí..." lance la sentencia que ameritó sus agresiones de hoy.

"No importa como rueguen... No importa cuánto griten... No importa como supliquen por misericordia..."

Todos los cazarrecompensas reunidos terminaron poniéndose en guardia con sus cuerpos temblorosos.

Antes ellos...

"Lo único que les espera ahora... Es la muerte"

Se presentó la mayor de sus pesadillas.

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A lo lejos de la zona de ese suceso, en unos tejados perteneciente a una de las casa de la segunda muralla se formó una situación extraña para muchos.

"¡¡Jajajaja!!, ¡¿lo sientes niñata?!... ¡¿Sientes esta maldita opresión que no te abandonará incluso en la más cruel y aterradora de tus pesadillas?!" Saros rio con locura recordando el pasado mientras miraba esa escena de pesadilla.

"¡¿...?!" La joven que lo acompañaba no lograba dejar de temblar de miedo mientras más sentía esa opresión.

¡Ellos fácilmente estaban al otro lado de la ciudad y esa presión aún se sentía tan vivida en sus cuerpos!.

"... (¡Ese tipo es un monstruo!)" La joven termino llegando a el mismo sentimiento de todos los reunidos en la ciudad.

Lo que todos terminarían recordando por mucho tiempo.

...

...

...

[Dentro de la cuarta muralla]

Una grann cantidad de casas pertenecientes a la nobleza de esta ciudad termino en un gran caos por la abrupta liberación de maná.

Mucho preparaban sus tropas con tal de defenderse de una posible amenaza mientras otros intentaban buscar la fuente de tal irá que se sentía en esta magia.

Pero hubo una casa que terminó totalmente indiferente a ésto... No.

Este clan de demonios solo sentían lastima por aquellos que 'despertaron' a ésa bestia dormida.

Aunque hubo una excepción de esto...

"Ahhh~" una joven termino sosteniendo su cuerpo lujurioso lleno de exitación por las ondas mágicas que sentía.

Ella rodaba por la cama y apretaba fuertemente sus sábanas de seda con una sonrisa intoxicada con tal de sentir está magia en todo su cuerpo.

"¿No deberíamos de ayudar a ese tipo?"

"No siento que sea necesario... Además..."

"Si... Nuestra señora ya se está metiendo en sus delirios..."

""De nuevo""

Un par de chicas en la puerta terminaron sintiendo cansancio al ver cómo su señora, la líder de este clan estaba rodando en su cama como toda una pervertida masoquista.

Y los ojos blancos de sus rostros demostraba demasiado bien que este suceso no era algo infrecuente.

"Ahhhhh~ mi cariño, más, quiero sentirte más en mí... Tu magia, tu ira, tu sueños... Tu cuerpo~" la joven ya estaba empezando a ir a un fondo demasiado profundo.

"Está pérdida"

"... Eso era sabido desde hace tiempo hermana"

"¡Aún así!"