Nota 1: Todos los derechos de la serie Neón Génesis Evangelion pertenecen a Gainax/Khara, o a quienes les sucedan legalmente en el futuro. Esta historia fue escrita sin fines de lucro, solo como medio de esparcimiento. No me demanden.
Nota 2: Shinji tiene dos tipos de diálogos, "Normal" y "Cursivo", esto es para poder diferenciarlos correctamente. Ya lo entenderán cuando lean.
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— Haré todo lo que esté en mis manos para sacarte de aquí — dijo Misato, de pie ante un deprimido Shinji, que solo pudo hacer una mueca en respuesta.
Misato observó con cierta pena a su protegido y compañero de celda. Había sido bastante duro soportar las vejatorias condiciones a las que fueron forzados; sobre todo en lo que se refiere a la parte higiénica, lo cual fue muy vergonzoso para ambos. Aun así, pese a todo lo malo, se habían apoyado mutuamente y creía que eso les había dado las fuerzas para resistir toda la mierda por la que estaban pasando. Por eso ahora sentía algo de pena al dejar solo a Shinji.
La Directora de Operaciones apretó los labios, sabiendo que no había nada que pudiera hacer por ahora, pero al estar libre tenía una oportunidad de interceder por Shinji, y luchar por su libertad. Con eso en mente, se quitó la chaqueta roja de su uniforme y la puso sobre los hombros de un cabizbajo Shinji, que levantó la vista sorprendido por esta acción de su tutora.
— Arriba el ánimo. Te sacaré de aquí. Es una promesa — dijo Misato esbozando una sonrisa.
Shinji forzó una sonrisa en respuesta, luego de lo cual Misato salió de la celda. La pesada puerta de acero se cerró con fuerza, dejando a Shinji una vez más en la penumbra.
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La escuela transcurría con aparente normalidad esa mañana de día viernes. Los alumnos estudiaban y los maestros pasaban sus materias. Hasta ahí, todo normal; entonces llegó el primer cambio de hora. El maestro dejó el salón y los alumnos quedaron con algunos minutos libres hasta que llegara el siguiente maestro, momento que fue aprovechado por tres lindas chicas, para trasladarse al salón donde se suponía debía estar cierto Piloto EVA.
— Hola chicos — dijo Isuzo, saludando a Touji y Kensuke, que conversaban en torno al escritorio del último. Detrás de la chica, Aya y Mouki saludaban con las manos.
— Hola — dijeron unos sorprendidos Touji y Kensuke.
— No sabíamos que habías regresado de Paris — comentó Touji.
— Regresé ayer por la tarde — respondió Isuzo, para luego pasear la vita por el salón de clases buscando algo — ¿Dónde está Shinji? — preguntó.
Touji y Kensuke se miraron entre ellos con cierta aprensión, ya que la respuesta a esa pregunta era algo compleja y un tanto comprometedora.
— No vino a clases — se animó Touji a responder.
— ¿Otra vez? Shinji no viene a clases desde el martes — comentó Aya.
Isuzo estrechó los ojos ante la respuesta de Touji y el comentario de Aya. Su rostro pasó de risueño a serio en cosa de segundos, lo que preocupó a todos.
— No pude comunicarme con Shinji cuando llegue ayer tarde, ni hoy por la mañana para venir juntos a la escuela. Ahora me entero que lleva días venir a clases. ¿Ocurre algo? ¿Es otra de esas cosas secretas de NERV? — preguntó la chica con algo de preocupación.
Touji y Kensuke se miraron entre ellos. Tenían una gran posibilidad de salir librados de esto con una mentira razonable. La propia Isuzo se los puso en bandeja de plata, pero era algo que les terminaría explotando en la cara, ya que al ser novia de Shinji, era imposible que no se terminara enterando de todo este desastre post fiesta. Finalmente y con un leve asentimiento de cabeza, decidieron ir con la verdad.
— Conversemos afuera — dijo Touji poniéndose de pie y saliendo del salón de clases, seguido de Kensuke y las chicas.
Una para nada contenta Asuka, observaba como el grupo salía para conversar en otro lugar, maldiciendo su suerte. La "Vaca Lechera" había regresado y no pudo hacer ningún avance con Shinji, porque el muy idiota estaba encarcelado junto con Misato. No tenía la más mínima idea por qué esos dos estaban compartían una celda, pero tenía serías sospechas de que era por algo relacionado con esa famosa fiesta.
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— ¿¿Qué?? — dijeron las tres chicas, cuando Touji les contó el motivo de la ausencia de Shinji.
— Lo que escucharon. En un principio pensamos que estaba en alguna de esas pruebas que realiza todo el tiempo, pero ayer fuimos a verlo a su casa y nos encontramos con Kaji. Él nos contó todo esto — explicó Touji.
— Pero… ¿Por qué? ¿Qué hizo? — preguntó una angustiada Isuzo, sin entender.
— No lo sabemos. Pero por lo que Kaji dejó ver entre líneas, fue por alguna especie de discusión con su padre — comentó Kensuke.
Isuzo arrugó el entrecejo ante ese pedazo de información, antes de hablar.
— Shinji me comentó que no se lleva muy bien con su padre, pero de ahí a que lo encarcele… — comentó, dejando el final de la frase en el aire.
— En realidad no es la primera vez que Shinji es encarcelado por su padre. Tiempo atrás estuvo a la sombra por una semana — añadió Touji, sorprendiendo a todas las chicas.
— ¿Pero qué clase de padre encarcelaría a su propio hijo? — preguntó una sorprendida Aya.
— La clase de padre que tiene Shinji — respondió Touji, con un encogimiento de hombros.
— Nosotros lo vimos una vez y realmente da miedo. Aunque su lado salvaje es muy parecido al de Shinji. Bueno; son padre e hijo después de todo — reflexionó Kensuke.
— ¿Lado salvaje? — preguntó Mouki, levantando una ceja.
— Olvida eso — dijo Kensuke, con una gota de sudor en la nuca.
— Oigan ustedes, entren al salón. Ahí viene el maestro — dijo Hikari, asomándose desde la puerta del salón de clases.
— Ya vamos — respondió Touji — Tenemos que irnos chicas. En todo caso, si quieren saber más sobre esto, deberían preguntarle a Asuka. De seguro ella está más informada que nosotros.
Isuzo asintió con la cabeza y los chicos entraron al salón de clases seguidos del maestro, que cerró la puerta al ingresar. Luego de eso, las tres regresaron a su propio salón de clases.
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— Muy bien. Eso sería todo por el momento — dijo Ritsuko, cuando vio a Shinji ingresando al Cuarto de Control, luego de unas pruebas de sincronización.
— Entonces, ¿es todo por hoy? — preguntó un desanimado Shinji.
— Por la tarde también tendrás que hacer unas pruebas hasta entrada la noche. Tenemos que recuperar el tiempo perdido — comentó Ritsuko, obsequiándole una sonrisa al joven Piloto EVA.
Shinji solo hizo una mueca ante eso, por lo que la rubia caminó hasta él, y le puso las manos en los hombros para llamar su atención.
— No te desanimes. Misato y Kaji están intercediendo con el Comandante Ikari para sacarte de esa celda lo antes posible. Ahora ve a tomar un baño, cámbiate de ropa, comer algo y luego descansa un poco.
— No es como si tuviera algo mejor que hacer — comentó Shinji resignado.
Lo siguiente fue algo que Ritsuko odió hacer, pero era una orden del Comandante Ikari y no tenía otra opción más que obedecer. Llamó a los dos Agentes de Seguridad que custodiaban a Shinji, y les ordenó que lo llevaran a los vestidores para que tomara un baño y luego a la cafetería para que comiera adecuadamente, solicitando que lo trajeran de vuelta dentro de dos horas, para realizar más pruebas de sincronización.
La científica observó con pesar y molestia, como esposaban a un deprimido Shinji y como luego lo sacaban casi a rastras del laboratorio.
— No es justo — comentó Maya, que había presenciado todo eso con el ceño fruncido — Shinji no obligó al Comandante a hacer todo lo que hizo esa noche. Todos perdimos el control. Es ridículo culpar a Shinji por eso y desquitarse con él — añadió la mujer, molesta.
— Lo sé, Maya. Pero el Comandante Ikari no lo ve de esa forma. No hay nada que podamos hacer al respecto. Te recomiendo no volver a hablar de este tema, a no ser que quieras ser despedida, como le paso a otros que hablaron más de la cuenta — comentó Ritsuko.
— Sí doctora — dijo Maya, bajando la cabeza.
Aun así y pese a sus palabras, Ritsuko sabía que Maya tenía razón en sus dichos. De alguna forma, todos habían perdido el control la noche de la fiesta, haciendo cosas que normalmente no harían, pero eso no había sido responsabilidad de Shinji. Cada quien es responsable de sus propios actos. Es por eso que Ritsuko no estaba para nada de acuerdo con la forma en que el Comandante ordenó que trataran a Shinji. Más aun después que Misato le contó las condiciones en las que se encontraban en esa celda. Gendo Ikari estaba actuando con saña contra Shinji, por algo en lo que no tenía culpa. El problema era hacerle entender eso.
Dando un suspiro de resignación, Ritsuko decidió que era mejor apartar esos pensamientos de su cabeza por ahora y dedicarse a revisar los resultados de las pruebas de sincronización.
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Los dos Agentes de Seguridad arrastraron a Shinji a los vestidores y lo lanzaron dentro sin ninguna diplomacia. Este, luego de reincorporarse y rumiar algunas maldiciones, tomó un baño caliente para quitarse los restos de LCL, luego de lo cual fue arrastrado nuevamente, ahora hasta la cafetería.
Una vez dentro, Shinji tomó una bandeja para colocar su comida, pero al verlo esposado, deprimido y con dos Agentes de Seguridad dándole empujones para que se apurara, las chicas que servían la comida se apiadaron de él, llenando la bandeja con una contundente ración. Shinji agradeció el gesto de las chicas, ya que estuvo tres días sin comer casi nada.
Como aún faltaba una hora para el almuerzo, la cafetería estaba casi vacía en ese momento, así que Shinji escogió una mesa en un rincón apartado y tranquilo para sentarse a comer, con sus perros guardianes comiendo su propia comida sentados en la mesa de enfrente.
Shinji comía en forma ausente, notoriamente deprimido y apagado, algo muy diferente a como había estado solo días atrás. Tan ausente; de hecho, que no se percató de que una chica de ojos escarlata se sentó a su lado con un plato vegetariano. La chica observó su rostro decaído y abrió los ojos en sorpresa al notar las esposas en sus muñecas, que le complicaban la tarea de comer al momento de llevarse la comida a la boca. También vio feas marcas en sus muñecas, que demostraban que no era la primera vez que traía puestas las esposas y que más que ponérselas, se las clavaban en la piel.
— ¿Estás bien? — preguntó suavemente la chica peliazul.
Shinji regresó a la realidad al escuchar la voz de la chica. Se sorprendió al ver Rei sentada junto a él. Estaba tan ausente que la sintió llegar y ahora ella estaba ahí, escrutándolo con esos hermosos ojos color escarlata.
— ¿Estás bien? — insistió la chica, al no obtener respuesta.
— ¿Eh? Sí, estoy bien — respondió Shinji, esbozando una sonrisa tranquilizadora, pero fracasando miserablemente.
— No lo pareces — dijo Rei con su tono de voz monocorde — ¿Por qué las esposas?
Shinji observó sus entumecidas manos, gracias a las esposas que se clavaban con saña en la piel y sintió una repentina oleada de rabia hacia su padre. Cosa que no pasó desapercibida para Rei, que vio como la mirada de derrota de Shinji, fue reemplazada por otra de furia.
— Mi padre lo ordenó — dijo Shinji, casi escupiendo las palabras.
Rei estudió a Shinji con detenimiento, y por un momento pensó que había cambiado de personalidad, pero al ver su pulsera se percató que estaba en azul, por lo que seguía siendo él.
— Tal vez hiciste algo que molestó al Comandante — razonó Rei.
— ¡Por supuesto que no! — regañó Shinji, sorprendiendo a Rei por la molestia en su voz.
— ¡Oye mocoso! Compórtate — ladró uno de los Agentes de Seguridad, haciendo que el chico guardara la compostura; y de paso, dándose cuenta de que había descargado su enojo con la persona equivocada.
— Perdón, Rei. No debí hablarte así — dijo Shinji con una mueca; su enojo ya totalmente desinflado.
— No te preocupes — dijo la chica, comprendiendo el porqué de su actitud — ¿Qué ocurrió?
Shinji observó a la chica con sorpresa. Por lo general, Rei no es muy comunicativa, pero hoy estaba hablando como una persona normal. Es más, podía sentir genuino interés en sus palabras; incluso su rostro mostraba interés. Quedó fascinado. No todos los días se podían ver expresiones en ese rostro. Sin querer, recordó ese día cuando le pidió que sonriera y lo hermosa que se veía cuando lo hizo. De un momento a otro, se descubrió deseando ver esa sonrisa otra vez y fue quedando atrapado por esos misteriosos ojos que lo fascinaban desde el día en que conoció a la chica peliazul.
Por su parte, Rei observaba fijamente al Tercer Elegido, que a su vez la miraba fijamente a ella. Podía sentir como si esa intensa mirada llegara hasta lo más profundo de su ser. Se sentía desarmada y desnuda ante él, pero lejos de sentirse intimidada, se sentía bien, como si estuviera en sintonía con él, como si ambos fueran parte de algo muy profundo e íntimo.
Las risas de los Agentes de Seguridad; que reían de alguna broma en la mesa de al lado, trajeron de regreso a la tierra a los dos Pilotos EVA, que se sorprendieron al encontrarse ligeramente inclinados, como a medio camino de besarse. Regresaron a la posición firme de un salto, Shinji furiosamente rojo y Rei con un leve sonrojo en las mejillas.
Ambos jóvenes decidieron centrarse en comer sus respectivos almuerzos. Permanecieron comiendo uno junto al otro en completo silencio por unos minutos, hasta que Rei rompió el silencio.
— Aún no me dices qué fue lo que pasó — comentó.
Shinji el dio una mirada extrañada, como pidiéndole que se explicara mejor.
— El por qué el Comandante te mandó encarcelar — añadió Rei, dando más contexto a la pregunta.
Shinji volvió a mostrar de enojo en su rostro, pero esta vez, con algo de resignación. Suspiró.
— Pienso que es por lo de la fiesta. Supongo que has escuchado los comentarios — dijo Shinji.
— Lo escuché. Dicen que fue una fiesta muy desenfrenada — comentó Rei.
— Sí, bien; mi padre estuvo cantando y bailando delante de todos en esa fiesta. Debe estar culpándome por eso, pero yo no lo obligué. Él hizo todo eso por su propia voluntad — explicó Shinji.
— ¿El Comandante Ikari cantó y bailó? — preguntó Rei, con la sorpresa pintada en el rostro.
Shinji no pudo evitar una sonrisa al recodar a su padre cantando a todo pulmón, mientras las chicas gritaban y se desmayaban de la emoción.
— Sí, y no canta nada mal. Creo que Kensuke le tomó algunas fotografías. Cuando salga de aquí se las pediré… ¿Sabes? Tal vez pueda mandar a imprimir algunos carteles para pegarlos por todo NERV, o mandar las fotografías por correo electrónico a todos los noticieros de Japón. ¿Qué te parece la idea? — preguntó Shinji con una sonrisa traviesa.
Rei dio un par de pestañadas de sorpresa ante el repentino cambio de actitud de Shinji, ya que había cambiado deprimido a alegre en un par de segundos. Al mirar la pulsera en su muñeca marcando en rojo, lo comprendió. Shinji había cambiado de personalidad.
— Oye Rei… ¿Te había dicho alguna vez que tienes unos ojos hermosos? — dijo Shinji de pronto, quedando prendado de esos misteriosos ojos escarlata que tanto le fascinaban.
Rei no pudo evitar un leve sonrojo ante ese comentario, pese a saber que estaba frente al "Shinji Hentai". Se sintió extraña al reaccionar de esta forma. Ella nunca se sintió cómoda con este "otro Shinji"; de hecho, sentía cierto rechazo hacia él. Ella solo se sentía cómoda con el verdadero Shinji. Solo él podía hacerla sentirse bien, protegida, apreciada y… sintió que le acariciaban una mejilla.
— ¿Qué haces? — preguntó Rei con su tono serio, apartándose de la caricia.
— Tu piel es tan suave como la seda. Podría pasar todo el día acariciándola — dijo Shinji con la pose seductora y una sonrisa de un millón de dólares… o yenes, en este caso.
— Tranquilízate y termina tu comida — dijo una seria Rei, devolviendo la atención a su comida.
Shinji sintió un literal muro de hielo formarse entre Rei y él, lo que le hizo pensar que esto sería más difícil de lo que creía; pero no se rendiría. Ya habían caído en su cama tres chicas del Nekomania, Isuzo, Keiko, Yuka, Maya, Misato y Ritsuko, ¿Cómo no iba a caer también en sus redes esta linda chica de ojos escarlata?
Algo le decía que Rei no le era del todo indiferente. Solo tenía que encontrar la forma correcta de botar sus defensas, y la haría suya. Luego de eso iría por la pelirroja gruñona; después de ella… ¿Hikari? No, no podía hacerle eso a Touji. Por otro lado Aya y Mouki no estaban nada de mal, así que esas dos podrían ser una muy buena opción. Además, si pudiera convencer a Isuzo, harían un interesante cuarteto. Ya se podía imaginar a Isuzo y él trabajando juntos para complacer a sus amigas, o Aya, Mouki y él, trabajando juntos para darle con todo a Isuzo. Eso sería genial. Luego de ella, ¿quién más?
Entonces recordó a su hermosa y escultural profesora de Inglés, que tenía un perverso parecido con "Integra Fairbrook Wingates Hellsing" (*) personaje del manga de "Hellsing" que era uno de sus favoritos. De solo imaginarse enredado entre las piernas de esa mujer, se le hacía agua la boca.
— ¡¡Ikari!! — gritó uno de los Agentes de Seguridad, mientras lo zarandeaba.
Shinji fue traído violentamente a la realidad, cuando fue levantado de la silla de un tirón y empujado sin contemplaciones por uno de sus perros guardianes.
— ¡¡Oigan!! ¿Qué rayos les pasa? — preguntó Shinji con una mirada peligrosa.
— Camina. Te llevamos a tu celda — dijo uno de los hombres de negro.
— Pero si falta una hora para que me lleven de regreso con la doctora Akagi — dijo Shinji, mirando el reloj colgado en una de las paredes de la cafetería — ¿No podríamos espera aquí? Estaba conversando con Rei.
— ¡Cállate y camina! Recuerda que estas bajo arresto. Solo saliste de tu hoyo para las pruebas de sincronización. Ahora camina — dijo el otro Agente, dándole otro empujón que casi lo bota al suelo.
— No deberían tratarlo así. Es el Tercer Elegido y piloto exclusivo del Evangelion Unidad 01 — dijo una seria Rei, poniéndose de pie.
— ¡Tú no te metas, niña! — le gritó el otro Agente a la chica peliazul.
— No le hables así. Ella no tiene nada que ver en esto — dijo Shinji con ojos estrechos.
— Cuida tu boca mocoso. Eres un reo de NERV y tenemos órdenes de no darte trato especial, así que mide tus palabras — escupió el Agente de Seguridad.
— Se creen lo máximo porque visten de negro y tienen licencia para patear traseros, pero no son más que un montón de mierda de perro — dijo Shinji con una sonrisa cínica.
— Mocoso de mierda — dijo uno de los Agentes y le lanzó un derechazo al rostro, pero Shinji lo bloqueó con un brazo.
Ambos hombres quedaron sorprendidos, ya que Shinji había logrado bloquear ese potente golpe con un solo brazo, pese a tener ambas manos esposadas. Entonces Shinji levantó el otro brazo, sosteniendo en su mano un par de esposas.
— Te quité las llaves mientras me zarandeabas — dijo con una sonrisa burlona.
Antes de que el Agente supiera lo que pasaba, Shinji le colocó una potente patada entre las piernas y el sujeto cayó aullando de dolor. Shinji saltó sobre el otro Agente con una patada al rostro y este logró bloquearla mientras sacaba su arma, pero en un rápido movimiento, Shinji le botó el arma de las manos de un manotazo.
— Estás muerto — gruñó el Agente de Seguridad y se lanzó sobre el Tercer Elegido.
Shinji comenzó un intercambio de golpes con el hombre de negro, que quedó completamente sorprendido de que el chico pudiera bloquear cada uno de sus golpes. Aun así su mayor envergadura y fuerza física lograron romper la defensa de Shinji, conectándole un derechazo que lo mandó volando por sobre su compañero, que aún estaba en el suelo revolcándose de dolor.
Shinji cayó sobre la mesa que ocupó con Rei y rodó sobre ella llevándose las bandejas con los restos de comida, mientras que el Agente de Seguridad recogía su arma. Al momento de apuntar, una bandeja lanzada por Shinji volvió a quitarle el arma de las manos y antes de poder hacer nada, Shinji saltó hacia delante y le conectó una patada en el pecho que lo lanzó de espaldas. El hombre alcanzó a rodar a un lado antes de que Shinji cayera sobre él, con un pie para aplastarle la cabeza y en un rápido movimiento, le lanzó un barrido con la pierna izquierda que lo mandó de espaldas. Shinji rodó por el suelo y se puso de pie, solo para ver al hombre ya casi sobre él. Alcanzó a esquivar el golpe a la vez que lo sujetaba de la ropa y se dejó caer hacia atrás aprovechando el impulso del Agente y con ayuda de sus piernas, lo lanzó por sobre él. El hombre voló hasta estrellarse contra una máquina expendedora de bebidas, que vació su contenido sobre su cabeza.
Rei observaba con ojos casi desorbitados, como Shinji se ponía de pie y se limpiaba la sangre de la boca con el dorso de una mano. Tenía una mirada acerada y una sonrisa cínica que le daban un aire amenazador. A Rei le dio la impresión de que Shinji estada disfrutando de todo eso.
Por su parte, Shinji caminó hasta el otro Agente de Seguridad, que aún se revolcaba de dolor en el suelo y lo mandó a dormir de una patada en la cabeza, mientras observaba al otro hombre que acabada de ponerse de pie.
— No sé dónde habrás aprendido todo eso, pero acá se te acaba la suerte, hijo de perra — dijo el sujeto, sacando un cuchillo.
— Tú no aprendes, ¿verdad? — dijo Shinji aumentando su sonrisa, mientras separaba las piernas y levantaba los brazos frente a él, sin apuñar las manos.
— ¿¿Qué están haciendo?? ¡¡Deténganse!! — gritaron las chicas que servían la comida.
— ¡¡CÁLLENSE!! — ladró con furia el Agente de Seguridad, haciendo que las chicas se congelaran.
— Shinji, detente — dijo Rei, dejando entre ver algo de tensión en su voz.
— Tranquila preciosa. Acabo con este idiota y seguimos donde nos quedamos — dijo Shinji con una mirada seductora y una sonrisa de un millón de dólares, mientras le guiñaba un ojo, pero al devolver la vista al hombre frente a él, cambió el rostro inmediatamente por uno de total concentración.
El Agente de Seguridad saltó sobre Shinji intentando cortarlo, pero este esquivó el cuchillo de un manotazo. El Agente lo volvió a intentarlo reiteradas veces, pero le fue imposible acertar un golpe. Shinji estaba frente a él, moviendo y cruzando los brazos a la altura de la cara a intervalos irregulares. Daba la impresión de que con un movimiento podrían cortarle los brazos, pero era todo lo contrario. Esos movimientos de los brazos frente a él, hacían que el Agente de Seguridad no tuviera un blanco fijo y que cada vez que atacara, Shinji pudiera usar eso como ventaja, esquivando el corte, o desviarlo de un manotazo. En una de esas estocadas, Shinji desvió el corte y le conectó un derechazo en la nariz, que lo hizo retroceder sangrando.
— ¡Ups! Lo siento. ¿Te dolió? — preguntó el Tercer Elegido, con evidente burla en la voz.
El hombre gruñó de rabia y se fue encima de Shinji, este lo esquivó otra vez, sujetándolo de un brazo y usando su propio impulso y peso para mandarlo volando sobre una de las mesas, que se rompió con el impacto. El hombre se levantó y miro a Shinji con odio.
— ¿Quién demonios eres? — preguntó, sin creer que un simple mocoso le estuviera ganando.
— Bond; James Bond.
El Agente de Seguridad rugió de furia y se lanzó sobre Shinji; grave error. Un luchador experimentado sabe que nunca debe dejarse llevar por el enojo. Esto hace que pierde la calma y sus ataques se vuelven irregulares y poco efectivos, lo que inevitablemente lo lleva a la derrota; pero parece que nadie le explicó eso al Súper Agente de NERV. El resultado fue por demás predecible.
Shinji esquivó fácilmente el ataque, a la vez que le sujetaba el brazo mientras se lo giraba. El Agente de Seguridad supo lo que venía, pero ya no lo podía evitar. Aprovechando el impulso y peso del hombre, Shinji lo hizo darse una vuela en el aire, al tiempo que le desencajaba el brazo con un fuerte "Crack", que hizo que todas chicas cerraran los ojos imaginando el dolor del pobre tipo.
Shinji soltó al hombre, que gritaba de dolor sujetándose el hombro derecho con su brazo colgando muerto a un lado. Entre su dolor, logró levantar la vista y vio a Shinji observándolo con una mirada demasiado intimidante para un chico de 15 años.
— Eso fue por la paliza del otro día, y esta porque me caes mal — dijo Shinji con voz fría, y en un rápido movimiento levantó su pierna derecha y la dejó caer con fuerza sobre la cabeza del hombre, en un potente golpe al estilo Muay Thai. (**)
Unos metros más atrás, Rei observaba impactada; pero sin demostrarlo, como la cabeza del Agente de Seguridad dio un bote en el suelo por la fuerza de esa patada descenderte y como Shinji quedaba de pie y triunfante, observando a los inconscientes Agentes de Seguridad con un evidente desprecio. Por un momento, a Rei esa imagen no le cuadró con la del Shinji que tenía en su mente, era tan distinto. ¿Este era realmente el "otro" Shinji?
El joven Piloto EVA sintió unas miradas en su espalda y al darse la vuelta observó a Rei y las chicas que servían la comida, observándolo con sorpresa y horror. Bueno, en realidad Rei tenía su rostro serio de toda la vida.
— Shinji, tú… ¿Qué hiciste? — preguntó una de las chicas que atendía la cafetería de NERV.
— Se lo merecían por prepotentes — explicó Shinji, limpiando con el dorso de su mano la sangre que corría por la comisura de sus labios, entonces se acercó a la chica peliazul.
— ¿Sabes lo que acabas de hacer? Te meterás en problemas — dijo Rei mirándolo con seriedad.
— ¿Y qué me van a hacer que no me hayan hecho ya? Me encarcelaron, me dejaron sin comida, me golpearon…
— ¿Te golpearon? — preguntó Rei, cortando la diatriba de Shinji.
— Sí, después de que soltaron a Misato. Pero olvidemos eso por hora y vamos a dar una vuelta. Aún tenemos una hora libre antes de volver al trabajo — dijo Shinji con una sonrisa, mientras le guiñaba un ojo a la chica peliazul. Pasó un brazo sobre los hombros de la aún impactada chica y la llevó gentilmente hasta una de las salidas de la cafetería.
Rei pestañeó un par de veces en sorpresa por ese repentino cambio. En cosa de segundos, Shinji había pasado de ser la versión japonesa de Steven Seagal a ser la versión más joven de Kaji.
— ¡Shinji! ¿Qué va a pasar con ellos? — preguntó una de las chicas que atendían la cafetería, señalando a los inconscientes y lastimados Agentes de Seguridad.
— Arrójenlos a la basura — dijo Shinji con un encogimiento de hombros y salió de la cafetería en compañía de una Rei, que aún no lograba procesar todo lo que había pasado.
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En la escuela había llegado la hora del descanso y los alumnos estaban distribuidos por todo el patio comiendo sus almuerzos. Asuka comía junto con Hikari; y para su absoluto pesar, junto a Touji, el novio de su amiga, y el idiota de Kensuke. La pelirroja trataba de mantenerse ocupada en una conversación con Hikari, por lo que la pelirroja no se percató de un trío de chicas acercándose a ella.
— ¡Hola Asuka! — saludó Isuzo.
La pelirroja levantó la vista y se encontró con una… ¿preocupada? Isuzo Masaki. Levantó una ceja.
— Hola — respondió con tono frió y cortante la pelirroja.
Isuzo hizo caso omiso de la actitud de pelirroja y continuó con lo que tenía que hacer.
— Asuka, tengo algo que preguntarte. ¿Qué fue lo que pasó con Shinji? — preguntó la chica.
La pelirroja arrugó el entrecejo ante esa pregunta de la "Vaca Lechera". Suponía que a estas alturas ya sabría todo los detalles del encarcelamiento del idiota de Shinji.
— ¿Por qué me preguntas eso a mí? Tú eres su novia. Se supone que tú deberías saber mejor que nadie lo que pasa con tu novio — dijo Asuka, mirando a la chica con ojos estrechos.
— Estaba en Paris, por eso no sé lo que pasó. Solo sé que está encarcelado en NERV, por lo que me dijeron los chicos — explicó Isuzo, señalando a Touji y Kensuke — Tú también trabajas en NERV, así que debes saber algo más que ellos.
— Bien, entonces pregúntale a los chicos lo que pasó el domingo por la noche. Hasta donde tengo entendido, ese fue el motivo por el que metieron en una celda al idiota de Shinji — dijo Asuka, para luego devolver la atención a su comida.
— ¿¿Fue por eso que lo arrestaron?? — preguntaron al mismo tiempo, unos impactados Touji, Hikari y Kensuke.
— ¿Qué se supone que significa "eso"? — preguntó Isuzo con ojos estrechos, mirando al trio.
Hikari, Touji y Kensuke se miraron entre ellos, preocupados, para luego suspirar con resignación. No sacaban nada con ocultarlo a estas alturas. No tenían más alternativa que contarlo todo.
— Bien. Los técnicos que le dan mantenimiento al EVA de Shinji, organizaron una fiesta. Shinji, Kensuke y yo le ayudamos a comprar todas las cosas y a preparar el lugar — reconoció Touji.
— Y esa fue la misma "Súper Fiesta" que se comenta por todo Tokio-3 — añadió Asuka.
Isuzo y sus amigas quedaron impactadas ante semejante revelación.
— Pero se comenta que en esa fiesta pasó de todo — comentó una incrédula Aya.
— Sí, bien; en realidad fue bastante desenfrenada — comentó Touji.
— Creo que todos perdimos un poco el control esa noche. Aún no me explico por qué, pero tienes que considerar que era una fiesta de adultos y nosotros éramos los únicos jóvenes en el lugar, por lo que no hicimos tanto alboroto. Comimos, bebimos refrescos, bailamos, y Shinji estuvo cantando toda la noche — añadió Kensuke.
— ¿Shinji cantó? — preguntó Isuzo, sorprendida.
— ¿No lo sabes? — preguntó Hikari — Shinji tiene una excelente voz. La profesora de música siempre lo está persiguiendo para que ingrese al coro de la escuela, pero Shinji siempre se niega.
— Entonces ese ese fue el verdadero motivo por el que faltaron a clases el lunes. Estaban con resaca — dijo Aya acusadoramente.
— No estábamos con resaca porque no bebimos alcohol. Solo estábamos agotados después de estar toda la noche bailando y cantando con Shinji y la banda que estaba ahí esa noche — explicó Touji.
— Y supongo que esas chicas que estaban buscándote, también las conociste esa noche — dijo Mouki cruzándose de brazos y dándole una mirada gélida a un nervioso Kensuke.
— No, sí, bien; veras, vinieron a preguntar por… la policía. Sí, eso. Es que la policía todavía nos anda buscando — dijo Kesuke a una enojada Mouki, tratando de desviar el tema de las chicas con las que tuvo su primera vez y su primera orgía, solo para ganarse un codazo por parte de Touji.
— ¿La policía? — preguntaron Isuzo, Aya y Mouki.
— Está bien. ¡Basta ya de todo esto! Yo les diré lo que pasó — dijo una mosqueada Hikari.
— ¿Tú también fuiste a esa fiesta? — preguntó sorprendido Isuzo.
— Touji me invitó — respondió Hikari un poco sonrojada — Dejando eso de lado, lo que pasó es que se consiguieron un departamento con balcón y piscina, lo prepararon para la fiesta con luces, parlantes enormes y una banda. El lugar literalmente se llenó de gente. Todos reímos, cantamos y bailamos. Hubo una competencia de limbo que casi gana Kensuke, otros se bañaron en la piscina, Shinji se la pasó toda la noche cantando y… bien, otros hicieron cosas de adultos en algunas de las habitaciones. Al final de la noche todos arrancamos cuando llegó la policía, supongo alertados por el ruido que hacíamos. Eso es todo.
Las tres chicas miraron sorprendidas a Hikari por la explicación de lo que pasó en esa fiesta. Aun así, se calmaron un poco al saber que la chica de pecas estuvo ahí esa noche, ya que es bastante seria y juiciosa, por lo que les daba la seguridad de que a Shinji y sus amigos no se pasaron de la raya. Claro, las chicas no tenían cómo saber que una desenfrenada Hikari gritaba como una posesa encaramada en los hombros de Touji, mientras giraba su sujetador sobre la cabeza con las tetas al aire.
— Ahora entiendo. Como la mayoría de la gente esa noche era de NERV y como causaron tanto alboroto, arrestaron a Shinji como castigo por haberles organizado la fiesta — comentó Asuka para sí misma.
— Debió ser una gran fiesta — razonó una impactada Isuzo.
— Como no te lo imaginas. Incluso tu ex-novio apareció por ahí y casi mata a Shinji a flechazos con una ballesta — comentó Touji.
— ¿¿QUÉ?? — preguntó Isuzo, impactada.
— Sí, casi lo atraviesa a flechazos. Si no fuera por Shinji, Clinton y Reagan lo hubieran matado — añadió Kensuke.
— ¿Clinton y Reagan? — preguntó Asuka.
— Los Agentes de Seguridad de NERV que vigilaban a Shinji — explicó Kensuke — Tenían orden matar a cualquiera que amenazara la vida de Shinji. Tu ex-novio tuvo suerte de que Shinji los detuviera a tiempo o ahora sería comida de gusanos — añadió mirando a Isuzo.
Isuzo y las chicas quedaron bastante sorprendidas por todo eso, pero Isuzo aparte de eso, quedó muy preocupada. En realidad a ella no le interesaba la famosa fiesta. Sabía que no podía impedirle a Shinji divertirse mientras no estuviera; ella misma asistió a dos fiestas en Paris. Lo que en realidad le preocupaba era Shinji. Quería y necesitaba verlo y hablar con él lo antes posible.
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Dos jóvenes caminaban entre los árboles hasta llegar a los pies del lago que se encontraba dentro del Geo-Frente y observaron el lugar por un momento.
Para estar kilómetros bajo tierra y tener un cielo artificial, era un lugar verdaderamente hermoso. Shinji se sentó y se apoyó contra en tronco de un árbol con una espectacular vista al lago frente a él. Rei observó al Tercer Elegido por unos instantes antes de imitarlo y sentándose junto a él. Luego de eso, permanecieron así por un rato, simplemente disfrutando de la vista y la paz del lugar.
Continuará...
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Notas del Autor: ¡Hola a todos! Por fin apareció Rei después de tanto tiempo ausente y con más de una consecuencia. A Shinji se le alborotaron las hormonas con esta chica, su "Otro Yo" ya le echó el ojo y se le va a ir con todo.
En otro punto, a Shinji finalmente se le escapó el guerrero que lleva dentro, en una pelea bastante ruda. Este es un pequeño adelanto de lo que se viene más adelante, que será bastante extremo; espero.
- Integra Fairbrook Wingates Hellsing (*): Es un personaje de HELLSING, una serie de vampiros bastante conocida, siendo el manga mucho mejor que su versión en animé; al menos hasta la aparición de los OVA, que retoman la línea argumental del manga.
- Muay Tai (**): Es el arte marcial tradicional de Tailandia, conocido como "Boxeo Tailandés" en occidente. Se basa en golpes de brazos y piernas (puñetazos, codazos, patadas y rodillazos) No lo confundan con el Kick Boxing (versión japonesa del Muay Thai), ya que si bien tienen elementos comunes, existe una marcada diferencia entre uno y otro.
Eso es todo. Saludos y nos leemos.