Nota 1: Todos los derechos de la serie Neón Génesis Evangelion pertenecen a Gainax/Khara, o quienes les sucedan legalmente en el futuro. Esta historia fue escrita sin fines de lucro, solo como medio de esparcimiento. No me demanden.
Nota 2: Este capítulo contiene escenas de tipo LEMON (descripciones explicitas de contenido sexual) por lo que no es apto para menores de 18 años.
Nota 3: Shinji tiene dos tipos de diálogos, "Normal" y "Cursivo", esto es para poder diferenciarlos correctamente. Ya lo entenderán cuando lean.
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Domingo, 12:30 de la mañana. Instalaciones de NERV.
— Las cifras muestran una ligera mejoría en la sincronización de los tres Pilotos — dijo Ritsuko.
— Es agradable escuchar una buena noticia entre tantos problemas — comentó Misato.
— ¿A qué te refieres con eso? — preguntó Ritsuko, levantando una ceja.
— A todos los enredos que ha causado Shinji con su doble personalidad.
— Trastorno de identidad disociativo — la corrigió Ritsuko.
— Como sea — dijo Misato, rodando los ojos — Hablando de eso. ¿Cómo vas con lo de la solución al problema de Shinji?
— Completado al 40 por ciento. Espero tenerlo pronto. Pero debes entender que no es algo fácil. Aún con la ayuda de MAGI — explicó Ritsuko con seriedad.
— Entiendo. Solo espero que todo salga bien. No sé qué podría llegar a pasar si tuviéramos que vérnoslas con el "Shinji Hentai" las 24 horas — comentó Misato, con un escalofrío recorriéndole la espalda de solo pensarlo.
— De partida, no habría que hacerlo enojar o te mandaría directo al hospital — dijo Ritsuko.
— No me lo recuerdes. Esos dos desgraciados van a estar por un buen tiempo fuera de circulación, aunque se lo tenían bien merecido.
— Lo que aun no entiendo es cómo Shinji pudo hacerle eso a dos Agentes de Seguridad. Se supone que son hombres entrenados. Aunque Shinji reciba entrenamiento de combate, se me hace difícil de entender que pudiera hacer lo que hizo — comentó Ritsuko.
— Bien, tú sabes que el Capitán de Corbeta Mason le ha dado un entrenamiento intensivo a Shinji, por orden del Comandante Ikari — dijo Misato.
— Pero no creo que con eso haya sido capaz de noquear a dos Agentes de Seguridad. O Shinji es demasiado bueno peleando, o nuestros Agentes están peor preparados de lo que pensamos — comentó Ritsuko, para luego devolver su atención a las pruebas.
Misato por su parte no pudo evitar analizar lo que dijo Ritsuko.
En un principio, no estuvo de acuerdo cuando el Capitán de Corbeta Steve Mason, quiso modificar el régimen de entrenamiento de Shinji. Lo que él proponía era demasiado rudo y avanzado para su gusto, pero el hombre le aseguró que pese a que Shinji es tímido e introvertido, en las situaciones límites demostraría lo que vale.
Luego de analizar su postura, finalmente le permitió proceder por dos razones. Primero, porque Mason es un militar de carrera, había entrenado personalmente a un montón soldados y tenía la suficiente experiencia en combate como para saber de lo que estaba hablando. Segundo, porque Shinji se mostró interesado en el entrenamiento y porque parecía tener una gran facilidad para aprender. Cosa que quedó demostrada en sus progresos en combate cuerpo a cuerpo, junto con convertirse en un excelente Francotirador.
Al final Mason demostró tener la razón. En las situaciones más complicadas, Shinji demostró tener una gran sangre fría, valor y determinación. Lo demostró cuando acabó con un Ángel bajo el mar en compañía de Asuka, o cuando luego salvó a la pelirroja del fondo de un volcán, y sin contar con la menor protección. Esto mismo se repitió en varias otras ocasiones. No se arrepentía de su decisión, y estaba segura que todo ese entrenamiento extra podría salvarle la vida un día; y no solo a él.
Misato devolvió su atención a los monitores, que mostraban el rostro de los tres Pilotos con los ojos cerrados, totalmente concentrados en lo que debían hacer. Era cruel tomar a unos chicos inocentes en la flor de su juventud, entrenarlos y usarlos como armas de guerra, pero no tenían otra opción. El futuro de la humanidad dependía de ellos. Desgraciadamente, la vida no era justa.
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Shinji notó un cambio en la forma en que la gente lo miraba al pasar. Al parecer su pelea con esos dos Agentes de Seguridad había traído otra consecuencia. Ahora lo miraban raro y algunos con respeto. Bueno, era algo comprensible, lo que hizo no fue algo menor.
Volviendo al presente, ahora tenía dos horas libres para comer y reposar la comida, antes de continuar con las pruebas de sincronización hasta solo Dios sabe qué hora. Decidió comer un plato bien contundente. Tenía que recuperar las calorías que había perdido con Ritsuko. Le subió la temperatura de solo recordar lo que hicieron.
Entró a la cafetería que estaba repleta a esa hora. Apenas lo vieron aparecer, todos se lo quedaron mirando y cuchicheando entre ellos. Se sintió incómodo. Ni siquiera estaban los técnicos EVA-01 para comer junto con ellos. Definitivamente no se quedaría ahí.
— Oigan, ¿Sería posible que fuéramos a comer a otro lado? El lugar está repleto — dijo Shinji a los dos Agentes de Seguridad.
Clinton y Reagan decidieron hacerle caso a Shinji. El lugar estaba demasiado atiborrado de gente para su gusto, además, Shinji seguí en calidad de reo y no podía andar por ahí conversando con medio mundo. Si alguien lo veía, la bronca les llegaba a ellos.
— De acuerdo. Conocemos otro lugar más tranquilo — dijo Reagan.
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Los dos Agentes de Seguridad y el Piloto EVA llegaron a uno de los tres miradores que había en NERV, que tenía una hermosa vista del Geo-Frente. El lugar tenía la apariencia de un pequeño parque, con bancas, césped y algunos arbustos para dar un aire silvestre. No era algo exuberante, era un espacio más bien pequeño y bastante humilde, pero era una de las pocas áreas de NERV donde te podías sentir a gusto, y todos cooperaban para mantenerla bien cuidada.
Por suerte, había solo algunas personas en el lugar. Los Agentes de Seguridad ocuparon la única banca disponible y Shinji estaba por sentarse junto a ellos, cuando reconoció a una solitaria persona que ocupaba otra de las bancas. Dudó si ir o no a sentase con ella. Después de lo que había ocurrido la última vez, no estaba muy seguro de qué reacción esperar. Finalmente se armó de valor y fue a sentarse con la chica.
Clinton y Reagan lo observaban divertidos. Habían ocasiones en que Shinji se veía realmente patético; como ahora, y había que disfrutarlo. Además, la persona con que se fue a sentar tenia contacto con él pese a su calidad de reo, así que no importaba si comían juntos.
— ¿Puedo… acompañarte? — preguntó Shinji tímidamente. Para su alegría, obtuvo una respuesta positiva y se sentó junto a la chica.
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Asuka entró a la cafetería luego de un largo y relajante baño para quitarse los restos del LCL. Buscó a Shinji por el lugar, pero luego de recorrerlo de arriba abajo no lo encontró por ninguna parte.
— ¿Dónde rayos se metió ese idiota? — se preguntó con el ceño fruncido y las manos en las caderas.
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Shinji y Rei comían sus respectivos almuerzos en total silencio. Shinji observaba de reojo a Rei de tanto en tanto, pero la chica parecía no darse por enterada. Estaba en su habitual forma de ser, ignorando todo lo que ocurría a su alrededor. Pero él sabía que había algo detrás de esa aparente apatía, y sentía curiosidad por saber que más escondía esa chica de misterios ojos escarlatas.
El resto del almuerzo transcurrió de la misma forma. Con Rei comiendo su ensalada, ausente de todo a su alrededor, con Shinji comiendo nerviosamente y dándole una que otra mirada sin atreverse a hablar. Una vez que ambos terminaron su comida, permanecieron en el mismo lugar contemplando la hermosa vista que tenían frente a ellos. Cuando Shinji ya estaba por darse por vencido, Rei lo observó fijamente por unos instantes.
— ¿Qué querías preguntar? — cuestionó la chica peliazul.
— ¿Eh? — fue todo lo que pudo decir el Tercer Elegido, sobresaltado de escuchar la voz de la chica.
— Hace un tiempo que me estás observando. Parece que quieres preguntarme algo.
Shinji apartó la mirada, sonrojado. Por supuesto que quería preguntarle algo, pero, ¿Cómo hacerlo? ¿Cómo preguntarle por ese beso que habían compartido? ¿Qué significó para ella?
Por un momento, el joven Piloto EVA deseo tener la personalidad de su "Otro Yo", pero luego desechó la idea. Si fuera su "Otro Yo", lo más probable es que ahora estaría sobre Rei tratando de meter la mano bajo su falda. No, esto era algo que tenía que hacer siendo "Él". Si había tenido los cojones para decirle a Ritsuko que era su fantasía sexual y luego pedirle que tuviera sexo con él, entonces era condenadamente capaz de enfrentar a Rei y aclarar lo que hay detrás de ese beso. Tomó una profunda respiración y miró a la chica directo a los ojos.
— Rei… quisiera hablar contigo por lo del otro día.
— ¿Sobre tu pelea? — preguntó la chica con voz monocorde y rostro inexpresivo.
Shinji observó a Rei con detenimiento. Por un momento le pareció que la chica le estaba tomando el pelo. Fue cosa de un segundo, pero le pareció ver una mirada traviesa al momento que hacía ese comentario… No, seguramente vio mal.
— No me refería a eso — dijo finalmente el Tercer Elegido — Es sobre lo que ocurrió después.
— ¿Cuándo me besaste?
Shinji volvió a sonrojarse, pero se obligó a no apartar la vista en esta ocasión y se limitó a afirmar con la cabeza.
— No eras tú en ese momento. Te dije que lo comprendía — respondió ella con seriedad.
Shinji estrechó un poco los ojos. Al parecer no estaba tan equivocado con su primera impresión. Rei no era ninguna tonta; por el contrario. Rei Ayamani es una chica muy despierta e inteligente, por lo que debió deducir desde el primer momento a qué beso se refería. Ella estaba deliberadamente esquivando el tema. Pero no parecía hacerlo por sentirse avergonzada, más bien parecía hacerlo para divertirse con él. ¿Acaso había descubierto una nueva faceta de la Primera Elegida?
— Tú sabes a qué me refiero — dijo Shinji con cansancio — Hablo del segundo beso. Ese que nos dimos cuando… cuando volví a ser yo.
La chica no respondió, solo se limitó a mirar por el ventanal. Por su parte Shinji estrechó un poco la mirada, sintiéndose un poco cabreado con todo esto. Suspiró.
— Cuando no era yo, me rechazaste. Pero al volver en mí, tú… bueno; nosotros… nos besamos — dijo Shinji, con algo de frustración.
— ¿Adónde quieres llegar? — preguntó Rei, mirando fijamente a los ojos del Tercer Elegido.
— ¡¡Nos besamos!! — exclamó Shinji, ya harto con el jueguito de la chica — Yo te besé, tú me besaste, ambos nos correspondimos, y yo… yo…
— ¿Por qué me besaste? — preguntó de pronto Rei.
Shinji quedó congelado ante esa pregunta. En realidad era una buena pregunta ¿Por qué besó a Rei? ¿Qué lo llevó a dar ese paso? Observó a la chica por un momento y descubrió algo diferente en ella. Los ojos de Rei habían cobrado vida.
Como ya le había pasado antes, el Tercer Elegido quedó atrapado en ese par de misteriosos ojos color escarlata que lo miraban con intensidad, como si quisieran ver hasta el fondo de su alma; ojos que lo escrutaban preguntándole algo, ojos que lo miran con…
— ¿Por qué me besaste? — insistió Rei, sacando a Shinji de sus reflexiones y trayéndolo de regreso a la tierra.
— Yo… no lo sé — respondió él, con cierto pesar.
— Cuando encuentres la respuesta, házmelo saber — dijo Rei, para luego levantarse de la banca y alejarse del lugar.
Shinji dio un par de pestañadas en sorpresa por este desarrollo, y observó como la chica se perdía al girar para adentrarse en un corredor. Eso no resultó como había esperaba. Se había acercado a Rei por algunas respuestas, pero quedó con muchas más interrogantes. Lo único claro, es que Rei Ayanami es mucho más de lo que la gente piensa. También había visto algo en sus ojos. No estaba muy seguro de qué fue lo que vio, pero sea lo que fuera, lo había remeció de pies a cabeza.
— Ya es hora — dijo Reagan, apareciendo junto al Tercer Elegido.
Shinji resopló con resignación. Se acabó el tiempo libre y era el momento de regresar a esas somnolientas pruebas de sincronización. Lo único bueno es que ahora tenía a Clinton y Reagan como carceleros, y ellos lo trataban considerablemente mejor que los dos Agentes anteriores. Además que se llevaban mejor desde la "Fiesta del Siglo", y eso era algo que debía agradecer.
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Eran las 7:00 en punto de la tarde cuando finalizaron las pruebas de sincronización. Los tres Pilotos EVA estaban exhaustos y fueron despachados de inmediato para que pudieran irse a casa a descansar. Bueno, en el caso de Shinji, a "descansar" a su celda.
Asuka se metió a la ducha de inmediato y se quitó los residuos de LCL lo más rápido posible. No se molestó en quedarse un rato bajo la ducha para que el agua caliente le masajeara la espalda. Tenía que darse prisa si quería hablar con Shinji antes de que lo metieran de regreso en su celda. Salió de la ducha y secó su cuerpo aceleradamente, se vistió, se peinó y se colocó un poco de maquillaje; nada excesivo, solo algo para resaltar sus virtudes. Luego de eso, salió rápidamente del vestidor de mujeres.
Durante todo ese tiempo, la pelirroja fue observaba por una silenciosa Rei Ayanami, la cual ya se imaginaba el motivo del apuro de la pelirroja. Se vistió con su calma habitual y salió al corredor para encaminarse directo a la salida de NERV. No se molestó en mirar atrás; ya sabía lo que iba ocurrir.
Por su parte, Asuka esperaba afuera de los vestidores de hombres a que el motivo de sus preocupaciones saliera de una vez, pero el susodicho no daba señales de vida. Hasta Clinton entró para ver si seguía con vida, y al salir dijo que estaba bajo la ducha. Asuka, corta de genio como siempre, no aguantó más la espera y entró al vestidor de hombres, diciendo a los dos gorilas de Seguridad, que no los molestaran porque tenían que conversar de algo que no les incumbe.
Cuando Asuka ingresó a los vestidores no divisó a Shinji, pero dedujo rápidamente donde se encontraba por el sonido del agua corriendo desde las duchas. ¿Seguía ahí después de tanto tiempo? Se acercó al lugar donde presuntamente estaba Shinji y se paró a un costado, un poco sonrojada ante la idea de un Shinji desnudo.
— ¿Shinji?... ¿Shinji, me escuchas?... ¿Shinji? — preguntó la pelirroja, pero no hubo respuesta.
En ese momento, Asuka comenzó a preocuparse. ¿Tal vez el idiota de Shinji había sufrido un desmayo o algo por el estilo? Recordó como Misato le dijo que no estaba siendo bien alimentado y que le habían dado una paliza en su celda. Ese recuerdo la hizo preocuparse aún más.
— Shinji, voy a mirar. No me importa si estás desnudo. ¿Me oíste? — dijo la chica con voz algo temblorosa, para su total fastidio.
Con un suspiro, Asuka se armó de valor, dio un par de pasos y se adentró en el sector de las duchas.
Shinji estaba justo de espaldas a ella, con las manos apoyadas en la pared de al frente, dejando que el agua cayera sobre su cabeza y corriera hacia abajo por su espalda. Asuka abrió los ojos en sorpresa al ver los feos moretones y magulladuras que cubrían el cuerpo de Shinji. La paliza que le dieron esos dos miserables fue peor de lo que imaginaba. No le extrañó que Shinji se hubiera desquitado de la forma que lo hizo.
Aun así, y pese a su asombro, Asuka no pudo dejar de echarle una mirada con otros ojos al cuerpo del Tercer Elegido. Su espalda estaba más ancha, sus brazos más fuertes y además tenía un lindo trasero. Shinji estaba dejando de ser ese chico raquítico que conoció una vez, para pasar a convertirse lentamente en un hombre. Si seguía así, en un par de años sería más que interesante.
Por su parte, Shinji estaba totalmente ajeno a lo que ocurría a su alrededor. Todos sus sentidos estaban enfocados en recordar el momento que había compartido con Rei a la hora del almuerzo. Repasada en su mente todo lo que habían conversado; pero más importante que eso, recordó lo que vio o creyó ver en los ojos de la chica.
Para ese momento, Asuka se cansó de esperar una reacción por parte de Shinji, así que lo sujetó de un hombro y lo sacudió con fuerza para llamar su atención. No fue para nada una buena idea.
Shinji reaccionó más por instinto que por otra cosa, y en cosa de segundos había estrellado a una sorprendida de Asuka de cara contra la dura pared de azulejos, mientras le retorcía un brazo y la sujetaba del cabello para inmovilizarla. Para cuando Shinji fue consiente de quien era la persona que tenía sujeta, sintió un escalofrío recorrerle la espalda; sobre todo al ver la mirada furibunda de la pelirroja a través de la cortina de agua que caída desde la ducha.
— Shinji… tú… — gruñó Asuka mostrando amenazadoramente los dientes, mientras que el susodicho soltaba de su agarre de la empapada pelirroja, que apuñó las manos mientras sus ojos se tornaban peligrosamente asesinos.
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La Segunda y el Tercer Elegidos estaban dándose la espalda mientras se secaban cada uno con una toalla. Asuka estaba visiblemente molesta, mientras que Shinji se veía resignado, con un gran chichón en la cabeza.
— Asuka, yo… — comenzó Shinji.
— ¡¡Si volteas te mato!! — rugió Asuka.
Shinji se encogió sobre sí mismo ante el grito de la pelirroja.
— Rayos. ¿Ahora cómo se supone que regrese a casa con toda mi ropa mojada? — regañó Asuka, al ver su empapado vestido tirado en una banca junto a ella.
Shinji se amarró una toalla en la cintura y caminó hasta su casillero, lo abrió y tomó una muda de ropa extra que manejaba en caso de alguna emergencia. Retrocedió, siempre dándole la espalda a la pelirroja para evitarse más problemas, y dejó la muda de ropa en la banca cerca de ella.
— Puedes ponerte eso. Es una muda extra de ropa que manejo en mi casillero en caso de algún accidente — dijo Shinji con algo de reticencia, esperando que la pelirroja estallara en otro arranque de furia por estar ofreciéndole ropa de hombre.
Por su parte, una sorprendida Asuka envuelta en una gran toalla blanca, miró la banca junto a ella, donde efectivamente había una muda de ropa limpia y perfectamente doblada, mientras que Shinji permanecía de espaldas a ella a una prudente distancia. Al mirar con más detenimiento la ropa, se percató que era esa tenida de color negro que le sentaba tan bien al idiota de Shinji.
La pelirroja sintió como su enojo se evaporaba. Tomó la muda de ropa en sus manos, para luego observar la maltratada espalda de Shinji.
— Gracias — dijo la chica con voz suave, esbozando una pequeña sonrisa — Voy a vestirme. Pobre de ti si miras — añadió, sin su enojo característico.
— No te preocupes, soy yo esta vez — respondió Shinji, aun de espaldas a la pelirroja, levantando su brazo, para mostrar la pulsera en la muñeca, marcando en azul.
Luego de ese intercambio, ambos Pilotos EVA procedieron a vestirse dándose la espalda. Una vez que estuvieron listos, se voltearon quedando frente a frente. Shinji vestía unos pantalones de mezclilla azul oscuro, junto con una polera gris. Asuka vestía totalmente de negro.
— ¿Cómo me veo? — preguntó la pelirroja con algo de timidez.
— Te ves bien — respondió Shjnji con una leve sonrisa.
— Sí, bueno; yo me veo bien con cualquier cosa — dijo Asuka en forma altanera, aunque no con el desplante y la fuerza habitual.
— Aun así, te queda un poco grande.
— Sí. Esa es una verdadera sorpresa — reconoció la pelirroja, mirando la tenida de color negro que vestía y que le quedaba efectivamente grande — No eras más grande que yo, pero parece que has crecido un poco — añadió con una sincera sonrisa.
Shinji fue gratamente sorprendido por esta actitud de parte de la pelirroja, ya que pensaba que ella lo iba a matar después de lo que le había hecho hace algunos minutos. Asuka por su parte, observó los brazos de Shinji llenos de moretones y sus muñecas con feas marcas y heridas ya cicatrizadas producidas indudablemente por un par de esposas.
— ¿Cómo te hicieron eso? — preguntó Asuka, repentinamente seria.
Shinji miró sus brazos y no pudo evitar fruncir un poco el ceño y hacer una mueca.
— Me esposaron de manos y pies, luego me dieron una paliza después de que soltaron a Misato.
— ¿Por qué hicieron eso? — preguntó Asuka, entre sorprendida y enojada.
— Por orden de mi padre; supongo — respondió Shinji con un encogimiento de hombros, para luego sentarse en una banca junto a él.
— ¿Te duele mucho? — preguntó Asuka, sentándose junto a su ex-compañero de vivienda.
— Ya no. Solo me quedan los moretones.
Asuka estrechó los ojos ante esa respuesta. No pudo evitar sentirse molesta, pero no había nada que hacer al respecto. Al menos las marcas y moretones comenzaban a atenuarse.
— Al menos te desquitaste. Según los comentarios que escuché, casi matas a esos dos gorilas de Seguridad. ¿Cómo rayos pudiste hacer eso, de todos modos? — preguntó Asuka con verdadero interés.
— Suerte; supongo — respondió Shinji algo sonrojado.
Asuka sonrió con satisfacción por esta reacción. Este era el Shinji que ella conocía y al cual quería acercarse. Por fin podría mostrarle su mejor cara. Una que no le había mostrado a nadie aún. Ni siquiera a Kaji.
— Eres bastante humilde. Algo muy diferente a cuando te conviertes en ese mujeriego que besa a cada chica que se le cruza por delante — comentó Asuka, llevando el tema para donde a ella le interesaba.
Shinji se tensó inmediatamente ante ese comentario de la pelirroja. Aquí era donde normalmente ella le gritaba cuanto insulto se le ocurría en alemán, mientras lo golpeaba a mansalva. Pero a diferencia de otras veces, en esta ocasión no pasó nada de eso. Por el contrario, Asuka se veía tranquila. Lejos de calmarlo, esto preocupó un poco al Tercer Elegido, ya que tratándose de la pelirroja, esta no era una buena señal.
— Asuka, yo… por lo del beso de ayer, bueno… yo…
— Está bien, lo entiendo. No eras tú en ese momento. Solo trata que no se vuelva a repetir — dijo la pelirroja en tono conciliador.
— Está… está bien — dijo Shinji, sorprendido una vez más, ya que nunca imaginó que Asuka le perdonaría esa indiscreción.
— Pero sabes una cosa — dijo Asuka, llamando la atención del Tercer Elegido — El Shinji Hentai besa mejor que tú — dijo Asuka con una media sonrisa.
— ¿Qué? Oye; esa vez me apretaste la nariz. No podía respirar — dijo Shinji, herido en su amor propio.
— ¿Insinúas que si no te apretara la nariz lo harías mejor? — preguntó Asuka, levantando una ceja.
— Por supuesto — respondió Shinji, ofendido.
— Pruébalo — demandó la pelirroja.
— ¿Qué?
Shinji miraba con los ojo como platos a la pelirroja, sin poder creer el desafío que ella acaba de lanzar, ni mucho menos el cómo habían llegado a esto. Pero aquí estaba Asuka, sentada junto a él, observándolo con una sonrisa desafiante.
Era como si Shinji observara por primera vez a la pelirroja. Se veía tan distinta a como es habitualmente. Asuka estaba actualmente en una actitud tranquila, risueña y algo coqueta. Esta visión no congeniaba con la pelirroja gruñona que él conocía tan bien. Aun así, no podía negar que le agradaba esta nueva Asuka.
Miró detenidamente a la chica, que aún estaba esperando su respuesta, momento en que su mente registró lo condenadamente hermosa que es Asuka; sin dudas una de las chicas más hermosas que había conocido en su corta vida. Cualquier chico mataría por tener una oportunidad con una belleza como ella.
Por su parte, si bien Asuka estaba disfrutando de Shinji mirándola con cara de idiota, como si recién hubiera descubierto lo linda es; también es cierto que se estaba impacientando.
— ¿Y bien? ¿Vamos a hacerlo o te quedarás contemplando lo linda que soy por el resto del día? — preguntó Asuka, sacando a Shinji de su ensoñación y haciendo que se sonrojara furiosamente.
Asuka miró con diversión al sonrojado Tercer Elegido y se acercó a él, mientras que Shinji tragó sonoramente al ver como el rostro de la pelirroja se acercaba peligrosamente. Al mirar sus ojos, supo que ella iba muy en serio con esto. No tenía escapatoria.
Armándose de valor, Shinji se obligó a no escapar de esto, ya que estaba seguro de que la pelirroja volvería a ser la misma cascarrabias de siempre si él huía como un cobarde. Es así como el joven Piloto EVA comenzó a acercar lentamente su rostro al de la pelirroja.
Shinji pudo sentir el dulce aliento de Asuka en su boca, su suave respiración, el aroma de su cuerpo. Se sintió levemente embriagado y atontado por la esencia de la chica, al punto en que no fue consienta del momento en que sus labios se encontraron, fundiéndose en un tierno beso.
Esta vez, Asuka no le apretó la nariz.
Con el correr de los segundos, ese suave y tierno beso se fue transformando lentamente en un beso más intenso y apasionado. La pareja podía sentir la suavidad y la calidez de los labios del otro, su calor y su proximidad. Casi sin darse cuenta, sus lenguas se encontraron y comenzaron a entrelazarse y masajearse, aumentando el placer que ya estaba experimentando. Finalmente la falta de oxígeno los obligó a separarse con un profundo suspiro de satisfacción.
Ambos jóvenes se observaron a los ojos por un momento. En ese momento Shinji fue remecido por entero, ya que esos hermosos ojos azules no lo miraban con odio, por el contrario, lo miraban con…
— ¿Cuánto tiempo más piensan estar conversando? Tienes que volver a tu celda, Ikari — dijo Reagan, apareciendo de pronto, con cara de poco amigos.
Asuka le dedicó una mirada de odio al Agente de Seguridad, que aparentemente no se dio cuenta de lo que estaba pasando.
— Está bien. Ya voy — dijo Shinji, resignado. El ambiente ya estaba irremediablemente roto.
Muy a su pesar, Asuka tuvo dejar las cosas hasta aquí, ponerse de pie y salir junto con Shinji al corredor. Como la salida de NERV quedaba hacia el lado contrario al que se dirigía Shinji, era el momento de la despedida.
— Hasta mañana. Y gracias por la ropa — dijo Asuka con una sonrisa, mientras se ajustaba un poco la ropa, sin poder dejar de sentirse bien al llevar puesta la ropa de Shinji.
— No fue nada. Disculpa por lo de antes en la ducha, yo…
— Olvídalo — dijo Asuka restándole importancia, comenzando a alejarse por el corredor, pero a los pocos pasos se volteó con una sonrisa traviesa — ¡Ah! Casi lo olvido. Tenías razón. Eres mejor que el "Shinji Hentai".
Shinji sonrió por el comentario y vio como una igualmente sonriente Asuka se alejaba por el corredor.
— ¿Son ideas mías o esa chica llevaba un vestido amarillo momentos atrás? — preguntó Clinton, señalando el negro atuendo de la pelirroja, momento en que ambos Agentes miraron a Shinji, levantando una ceja.
— Llévenme a mi jaula. Estoy cansado y quiero dormir — dijo Shinji avanzando por el pasillo, sin ganas de contestar la pregunta, manteniendo una gran sonrisa en los labios.
Pero pese a que Shinji se encontraba verdaderamente cansado, no pudo conciliar el sueño al llegar a su celda y recostarse en la cama. A su mente volvía una y otra vez la conversación que tuvo con Rei y lo que ocurrió con Asuka en los vestidores. Fue una larga noche de insomnio y por su cabeza pasaban una y otra vez las caras de dos hermosas chicas. Una de hermosos ojos color escarlata y otra con cabellos como el fuego.
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Era una hermosa mañana de lunes en Tokio-3, y por lo general todos los jóvenes se encontraban en la escuela a esa hora. Pero tres jóvenes en especial no podían darse ese lujo, ya que ese día tenían un ejercicio de Simulacro de Combate.
— ¿Estás bien, Shinji? No tienes muy buena cara — preguntó Misato, mirando fijamente al chico.
— No te preocupes, es solo que anoche tuve insomnio y no pude dormir mucho — respondió Shinji, restándole importancia.
— Entiendo. Espero que eso no interfiera con el ejercicio — comentó Misato con una mueca.
— De, descuida. Estaré bien — dijo Shinji, con algo de nerviosismo.
Misato estrechó un poco los ojos ante la nerviosa afirmación de Shinji, pero finalmente lo atribuyo a la falta de sueño. Lo que la mujer no sabía es que el nerviosismo de Shinji, era en realidad causado por encontrarse de pie entre las dos causantes de su falta de sueño.
— Bien chicos, pongan atención, ahora les explicaré en qué consiste el ejercicio — dijo Ritsuko.
Por los siguientes minutos la científica pasó a explicar el ejercicio desplegando una serie de gráficos en uno de los gigantescos monitores del Centro de Mando, ya que la operación sería llevada a cabo como si se tratara de un ataque real, pero justo en ese momento todas las alarmas comenzaron sonar como locas.
— ¿QUÉ ESTA PASANDO? — demandó Misato.
— Acabamos de detectar un objeto no identificado a 87 kilómetros de Tokio-3 — informó Hyuga.
— ¿Identificación? — preguntó Ritsuko.
— MAGI acaban de confirmar un Patrón Azul — informó Maya.
— ¡¡Un Ángel!! — dijo Misato.
— ¿Es esto parte del ejercicio, Misato? — preguntó Asuka.
— No. Esto es real — respondió Misato con seriedad.
— Tenemos visual del Ángel — dijo Hyuga.
— ¡Pónganla en pantalla! — exigió Misato.
Una vez que el Ángel fue visible por el gran monitor principal, se hizo un profundo silencio en el Centro de Mando de NERV. Nadie se atrevió a decir una sola palabra. Lo que sus ojos veían por el gran monitor era algo demasiado irreal; como si hubiera sido sacado de la peor de sus pesadillas.
¡No! Esto era incluso peor que eso.
— ¿Es alguna especie de broma de mal gusto? — preguntó Misato con los ojos desorbitados.
— Me temo que no. Ese es el Ángel — dijo Ritsuko, sin saber cómo sentirse al ver esa cosa.
— No puede ser verdad. Esto no puede ser verdad — dijo Asuka, negando con la cabeza mientras miraba horrorizada la cosa que tendría que enfrentar.
Ese fue el momento en que Kaji ingresó al Centro de Mando y se congeló al ver la imagen del Ángel en el monitor principal. A su mente vino una sola palabra…
— ¡BARNEY!
Sí, era tal como dijo Kaji.
Por una de estas ironías del destino; o simplemente porque Dios tiene un muy negro sentido del humor, el último Ángel que había aparecido, lo hizo con una forma peligrosamente similar a "BARNEY". Ese conocido; y odiado dinosaurio púrpura que cantaba canciones estúpidas, y del que se rumoreaba era el hijo gay no reconocido de Godzilla. La única diferencia era que sus manos y patas eran un poco más largas, con filudas garras y tres largas espinas a cada lado de la espalda.
— Bueno, mírenlo por el lado positivo — dijo Shinji, atrayendo la atención de todos — Pudo ser un "Teletubbie".
Continuará...
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Notas del Autor: Como pudieron apreciar el presente capítulo fue bastante sentimental, pero era algo necesario para establecer un punto importante para más adelante. Solo espero haberlo hecho bien con Rei y Asuka, ya que me complicó bastante la parte de esas dos. Sobre lo del final de capítulo; bueno… eso fue un poco de humor negro.
La idea de poner a "Barney" como el malo de la historia, no es mía. Esta es una idea que se inspiró de algunos hechos ocurridos en el fic "La Marca de la Esperanza", que es un entretenido X-Over entre Sailor Moon y Dragón Quest.
Bueno, eso es todo por hoy, nos leemos en el siguiente capítulo: "EL ATAQUE DE BARNEY"