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Chapter 57 - Capitulo 50

—Volviendo al tema, esa fue la primera y ultima vez que lo vi en persona. Hubieron otros días que recibía su mensaje a través de Génesis o revelaciones en sueños. Hasta terminar la tarea que me encomendó, recibí un total de veinte mensajes—comento aliviado. La mirada enojada de Orelia cambio a una pensativa y calmada.—Si te soy sincero, esa reunión no fue iniciada por ser el Héroe. La tarea, si bien era complicada y con un grado elevado de peligrosidad, existen otros individuos más capacitados para el trabajo.

>>En cuanto a sus creyentes, en la actualidad hay un total de diez mil. Hace medio año sucedió un incidente que erradico al sesenta porciento y debilito la organización que crearon, los Templarios<>Estuve un tiempo colaborando con los Templarios por temas de trabajo, ajenos a la Reina Demonio. Puedo corroborar su Fe hacia el Creador, vi en persona hasta que punto lucharon por su Fe. En mi opinión, son guerreros que no me arrepentiría de confiarles mi espalda y acompañaría a cualquier campo de batalla.

Los templarios son una organización hecha por los creyentes del Creador con una única misión: eliminar la Contaminación y Presagios del Fin. Su labor los llevaba a limpiar las mazmorras corrompidas, restaurar las civilización aun latentes, prevenir que los Presagios obtuvieran sus verdaderas formas y mantener alejados a la gente normal o no preparada del Mar Estrellado.

Como el trabajo de los Templarios estaba entrelazado con la tarea de Elías y los múltiples deberes que Génesis le imponía, ambos trabajaron juntos en la erradicación de Presagios del Fin y sus intentos por colarse en el universo u otras partes del piso. Pese a ello, la relación entre ellos siempre era laboral, nada mas. Uno por que tenia prohibido un vinculo mas profundo por la Reina Demonio, y el otro por la costumbre de mantenerse alejados de cualquiera que no perteneciera a la organización.

—Que alivio. No estamos tan mal—suspiro Orelia. El problema no estaba dentro del margen de error, sin embargo, la diferencia se podía compensar con la eliminación de ciertas mazmorras mutantes.—Una ultima pregunta:¿ por que la religión del Creador no es tan conocida? Por la cantidad de gente que mencionaste, los Templaros son una organización oculta al publica, ¿cierto?

—Si. Los templarios y todo lo referente al Creador esta oculto al publico. Son pocos individuos, los involucrados directa o indirectamente, que son aptos para saber la verdad—respondió. Noto un poco de duda en la chica y recordó como empezó la conversación.— Si te lo preguntas, Génesis no es la culpable del poco conocimiento del Creador. No sé con certeza por que el Creador y Génesis lo ocultan al publico, pero escuche que muy pronto se hará publico la verdad.

—Entiendo. Así que mis sospechas no son infundadas—murmuro muy bajo. Esas ultimas palabras de Elías le remarcaron que Génesis no cayo y el fin de aquel pacto estaba próximo a su fin. De ser así, con mayor razón tenia que ocultar a Elías.—Gracias por tu respuesta. En el momento que mas lo necesite, pagare mi deuda.

—Déjalo así. No siento que sea una información importante para los habitantes de esta isla—desestimo. La tranquilidad y extrañeza que percibía en Vanet indicaron que era consiente del Creador.—Mejor sigamos adelante. El tiempo apremia y todavía necesito conocer las diferencias entre mi conocimiento y sus costumbres.

—No aceptare un no como respuesta, Elías. Te devolveré este favor en un futuro. Yo si fuera tu, lo aceptaría. Necesitaras mucha ayuda en un futuro no muy lejano—remarco con su cola. Luego, se volteo sin recibir respuesta y retomo el paso.—Me adelantare. Le diré al líder que se atrasaron por la diferencia de nuestra tribu con la de afuera y me aburrí de esperar.

Ambos, Elías y Vanet, permanecieron en silencio. La declaración de Orelia ocultaba un peligro que asechaba en el misterioso y enigmático futuro. Ninguno tenia forma de corroborar el temor interno al oír esa información. La única manera de calmar sus inquietudes no era extender mas la conversación, que Orelia proclamo indirectamente que no continuaría, sino esperar hasta que se sintiera lista y explicara el tema a Vanet, y posteriormente a Raf y sus allegados.

—Vanet, te pido que me cuentes lo que diga Orelia—dijo. La chica estaba lejos y se aseguro que no podía oír la conversación.—Mi situación en la aldea no es tan estable para exigir algo de tal nivel. Es que...Presiento que la inquietud de ella esta relacionada conmigo. Su mirada me decía que es mi culpa.

—La verdad, es que ver esta faceta de Orelia me tomo por sorpresa. Un arranque como este no es propio de ella. Me aterra un poco que cambie de ahora en adelante—soltó sin apartar la mirada de su amiga. Un segundo después, observo como se perdía en el brillo de las estrellas y se sumergía en la oscuridad de la noche. Dudosa, miro a Elías y pregunto:—¿Que debería hacer? Nunca me espere o pensé que ocurriría una situación como esta. Cargaste con el titulo de Héroe mucho tiempo. ¿Que me recomendarías?

—Le preguntas a la persona menos indicada—sonrió con amargura. Viejo recuerdos bombardearon su mente y trajeron una soledad que le disgustaba.—He cometido errores que me persiguen el día de hoy por simples decisiones. Como tú, la inexperiencia en tratar con esas áreas me llevaron a tomar una decisión. Si viera a mi yo del pasado, lo golpearía por seguir ese camino que resulto garrafal para mi.

>>No soy el indicado para responderte, Vanet. Puedes pedirle a Raf que te aconseje, se ve como el tipo de individuo capaz de darte una buena lección. Sin embargo—,se detuvo. Cerro los ojos un instante, vio cada decisión que tomo hasta el momento y suspiro con calma.—Escoge tu camino sin arrepentirte. Sea bueno o malo, vive con tu decisión. Aprende de tus errores y aciertos para no equivocarte de nuevo.

Vanet se mantuvo en silencio. Reflexiono sobre el concejo del Héroe y entendió que la resolución de su decisión la llevaría a arrepentirse de un modo u otro. Sin importar el concejo que obtuviera antes de enfrentar la realidad, el desconocimiento detrás de la meta provocaría que se lamentara. Y al igual que Elías, acumularía errores que la seguirían el resto de su vida.

—Gracias—agradeció. Cambio la expresión conflictiva a una mas alegre y volteo su atención hacia el Héroe.—Es un buen consejo, lo aplicare. Muchas gracias por ayudarme.

—No me agradezcas, te dije un concejo que me dio un viejo amigo. Nada mas. Hasta yo trato de seguir esa lección, aunque se me dificulta demasiado—rio apenado. Tuvo que usar una lección de su difunto maestro y amigo, Alfred. Se rasco el cuello por el silencio incomodo en la zona y comento:—Por cierto,¿ por que no comenzamos el intercambio de información? Si tardamos mas de la cuenta, Orelia empezara a crear rumores vergonzosos para ambos.

—Si. Empecemos con ello—dijo sudorosa. Orelia a veces era un libro abierto y unas simples interacciones daban la suficiente experiencia para predecir su actitud.— Háblame de tus interacciones con los Panther Chameleon del continente. Céntrate en sus celebraciones y costumbres que viste y leíste en tu viaje. Preferible los relacionados con el tributo semanal.

Elías asintió y comenzó a relatar las vivencias y costumbres que averiguo y experimento de la tribu Panther Chameleon. Desde las comidas típicas suministradas a los visitantes, visitantes de honor, nuevos residentes y miembro honorifico, hasta las vestimentas y bailes que se exigían de las distintas celebraciones orientadas al tributo semanal. Cada pequeño dato que consiguió de experiencias cercanas y textuales fueron contadas de una manera resumida y concisa, que solo dos minutos bastaron para cumplir el pedido de la Chameleon.