Olas de energía entraron por todo el cuerpo de Adrián, su Diantan era fuertemente bombardeado por todo lado con energía entrante por todos sus canales de Qi.
Adrián sabía que no podía darse por vencido, incluso si su cuerpo empezaba a quemar, era un dolor que podía soportar.
Múltiples gotas de sudor aparecieron por todo su cuerpo.
Mientras la pequeña uña de agua se formaba.
Pero cuando estaba a punto de formarse por completo, un brillo violeta imperceptible para todo el mundo, ilumino su Dantian, apoderándose de la pequeña uña de agua.
Esta no se formó por completo, pero sucedió un cambio aún más aterrador, esta empezó a crecer descontroladamente.
Antes la pequeña uña de agua media unos 5 milímetros, si lograba formar una uña de agua con 10 milímetros entonces habría entrado al primer nivel de la condensación del Qi.
Pero ahora su uña de agua, empezó a medir 10 centímetros. Su Dantian no debería haber podido soportar tal cantidad de energía descontrolada, después de todo un cultivador primero templa su cuerpo para poder resistir un nivel más alto de energía.
Pero ahora sucedía lo inimaginable, y eso era algo que Adrián no podía detener, y tampoco lo deseo, sabía que su mascara del Diablo Celestial actuaria de alguna forma, pero no le importaba mientras podría hacerse más fuerte, aunque sentía como su cuerpo estuviera a punto de explotar.
Pronto esa uña de agua midió 5 metros, era algo increíble de ver, el cuerpo de Adrián se empezó a hinchar como un globo, de sus fosas nasales, y de sus ojos la sangra empezó a salir. Pero no detuvo su cultivo. Apretó los dientes y siguió cultivando.
Siguió comiendo píldoras como un desquiciado.
Pronto las mil píldoras empezaron a acabarse, en su Dantian se formó una segunda uña de 5 metros de alto y de ancho, el aura del cuarto nivel de la condensación del Qi, empezó a surgir de su cuerpo.
Un poder sin igual surgió dentro de esta cueva, nadie podía sentirlo, mientras la máscara del Diablo Celestial estuviera activada, el mundo nunca podrá saber la verdad.
El cuerpo de Adrián se hincho como un globo, acaparando toda su habitación, pero pronto empezó a estabilizarse, sin embargo, varios de sus huesos se rompieron en el proceso, al igual que tuvo una perdida masiva de sangre.
Pero sabía que lo había logrado, en circunstancias normales, Adrián hubiera explotado y convertido en una pulpa sangrienta por lo que había hecho.
Pero ahora, cuando su cuerpo volvió a la normalidad, solo pudo sentir una fuerza inexplicable.
Al terminar su sesión de cultivo, cayó al suelo agotado y con una respiración agitada, paso toda la noche comiendo sus píldoras curativas, y así termino acabándose por completo todas las mil píldoras que había fabricado.