En la sala de estar, todos permanecían en silencio mientras escuchaban a Abigail. Todos lucían absolutamente serios. Las revelaciones que escuchaban eran demasiado; simplemente era desconcertante. ¿Quién hubiera pensado que todo esto era mucho más complicado de lo que pensaban? ¿Quién hubiera pensado que Abigail era en realidad la guardián de dragones reencarnada?
—Creo que Dinah es esa mujer que se parece a mi madre. Vi que su cara todavía estaba quemada cuando despertó dentro de esa cueva de cristal —dijo Abigail, mirando hacia abajo.
—Podría tratarse de cirugía plástica —respondió Alicia—, y Abigail asintió. Aunque Alicia sabía que la cirugía plástica no era la única forma de que Dinah adquiriera la cara de la madre de Abigail, Alicia no mencionó esas otras posibilidades. Y... el hombre del que hablaba Zeke anoche debería ser... el medio-brujo Zeres... —continuó.
