A veces, el aburrimiento molesta mucho, no saber que hacer hace inmediatamente que el tiempo pase mas lento.
Pero, también hay que saber controlarse, si no, puedes terminar haciendo cualquier estupidez por entretenimiento.
Viendo esto, aquí empieza nuestra historia.
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Ring ring!
????: ¡Uoh!
Pego un salto del susto gracias al despertador que poseía en su habitación, eso junto al estar dormido en el borde provocó que se cayera de su cama dándose de cara contra el piso.
????: Auch. - se quejó.
Bastante enojado se levanto apoyándose con sus manos en el suelo.
????: ¿Ya es hora...? - murmuro, queriendo volver a su sueño.
No tardo nada en sacarse su pijama de encima, para ponerse ropa de instituto y salir corriendo por la puerta agarrando su mochila.
Corriendo por la calle lo más rápido que podía finalmente llegó a un edifico bastante alto, donde muchas personas con su mismo uniforme y edad estaban entrando.
????: "Justo a tiempo, como siempre."
A regañadientes entro al instituto por la puerta principal, caminando entre la multitud de personas la cual maldecía en su cabeza.
No tardo nada en llegar a su salón, entrando silenciosamente por la puerta. La clase aún no había empezado, llego a tiempo como había estado suponiendo antes
????: "Podría haber sido peor."
Por suerte desde su punto se vista, todos lo ignoraron, no era el más popular de su clase, mas bien era algo odiado por la antipático y cerrado que es con otros (y también por un par de temas aparte), pero el, ignorando los insultos casuales, agradecía esto, le daba mucha más tranquilidad de la que tendría normalmente teniendo que soportar a la gente.
Se acomodó en su banco apoyando la mochila en el suelo, se inclinó hacia delante apoyando su cabeza en el banco en un intento de dormir un poco mas.
Pero lamentablemente habiendo disfrutado unos sólidos 5 segundos la maestra había llegado al salón, sin este darse cuenta.
Y siguió sin darse cuenta hasta que la maestra dio un golpe en su banco para despertarlo, cosa que lo hizo que casi tropezara consigo mismo, provocando la risa de todos sus compañeros.
Maestra: ¿Kuro Agakiri?
Kuro: Aquí...- levanto la mano mientras se reincorporaba a su banco, aún con las risas de su compañero de fondo - "Maldita sea..." - mira como todos se ríen de él - "Me molestarán por esto un buen tiempo..." - suspiro volviéndose a acomodar en el banco.
Solo un par de personas en la sala no se reían, un chico pelirrojo sentado a unos cuantos bancos de el y una chica de cabello castaño oscuro en la punta del salón, que únicamente se limitaba a mirar.
El noto esto y miro a ambos, el chico volvió a leer un libro que se encontraba en sus manos y la chica desvió la vista nada más vio que la noto.
Luego de esa horrible clase de química, siendo ésta una de las razones por las que casi todos no querían empezar la semana, y un par de clases más, el descanso había llegado, haciendo que todos salieran corriendo al patio, solamente Kuro iba caminando, para cuando llegó, solo se sentó en un banco en el que no había nadie de momento, y agarro una galleta de avena que traía para empezar a comerla.
Kuro: "Siempre tan buenas" - maravillado mentalmente mientras disfrutaba cada bocado.
????: ¡Hey hey!
Interrumpiendo totalmente su tiempo de paz otro chico se acercó a él con una sonrisa en su cara, bastante similar en apariencia a el solo que un poco más bajo en estatura.
????: ¡Hermano hermano!
Kuro: Te escuché te escuché...- mira al chico - ¿Que ocurre Hatsu?
Hatsu: ¡Nada, solo venia a charlar contigo! - dijo alegre sentándose al lado de el
Kuro: Entiendo...- sigue comiendo sus galletas.
Hatsu: ¿Y que tal la vida en la residencia? - pregunto con una sonrisa ladeando la cabeza.
Kuro: Bien mientras la vecina de abajo no se queje del ruido porque se cayó algo - hablo para comer otra galleta - ¿Y la casa de acogida que tal?
Hatsu: Bien, parece que está vez no me quieren solo por el cheque.
Kuro: Eso está genial, alégrate - le da una palmadita en la cabeza - Tienes gente en la que confiar de por vida.
Hatsu: Pero ya podía confiar en ti hermano, ¿cierto?
Kuro: Pero no soy capaz de resolver todo, que esa familia te quiera será lo mejor para ti.
Hatsu: Hablo el antisocial sin amigos. - contesto, rodando los ojos. Conocia las prácticas de su hermano, no tenía ningún amigo en su clase. - Deberías sonreír más, tu cara siempre se ve deprimente. - menciono mirando al cielo.
Kuro: Lo mío es diferente, es lo mejor, para mi y para todos. - imitó lo hecho por su hermano.
Hatsu: Nunca me quieres decir porque piensas eso. - suspiro, rascándose la cabeza. - Socializa, siempre te quedas callado en todas las clases que nosotros tenemos juntos, no me quiero ni imaginar en las que no estoy.
Kuro: Lo dices como si fuera fácil...- come otra galleta - ¿Que clase tienes ahora?
Hatsu: Chino básico.
Kuro: No existe esa clase, te refieres a matemáticas ¿verdad?
Hatsu: ¡Es chino básico! - dijo con una gotita de sudor cayendo por su frente. - ¡Y en tres días hay examen! - hablo con una cara deprimente.
Kuro: Ni que fuera tan difícil. - soltó viendo a su hermano agonizar por el pensamiento del examen.
Hatsu: No estoy hecho para los números...
Ring ring.
El timbre en el patio sonó indicando la finalizacion del receso, dándole a Kuro recuerdos malditos de su despertador por lo similar que sonaba.
Kuro: Suerte en matemáticas. - dio ánimos, levantándose de su asiento.
Hatsu: Gracias, la necesitaré. - agradeció con una sonrisa.
Los dos se despidieron, habiendo Hatsu abrazado a Kuro sin que este se negara, ya sabía como era su hermano y no le iba a negar eso.
Las clases terminaron sin pena ni gloria, Kuro saliendo sin prisa del instituto en dirección a la residencia en la que vivía.
Narra Kuro:
Entre por la puerta abriendo con mi llave habitual, de vuelta a mi vivienda de dos, una habitación y un baño, bueno, no es fea como para quejarse.
Tire mi mochila bruscamente a la pared y me sentó en el escritorio del lugar, apoyando mi cabeza ahí.
Kuro: {Otro día igual.}
Mire hacia un lado viendo una foto enmarcada en la pared, éramos yo, Hatsu y nuestros padres.
Kuro: Hoy se cumple el aniversario de su muerte, ¿no? - intente recordar, tal vez estuviera equivocado por un par de días. - Ya han pasado 7 años, debería irme aprendiendo eso, ¿eso haría un buen hijo?
En mi defensa, ellos no eran buenos padres, para nada. Rara vez nos prestaban atención y eran capaz de mandarnos a actividades intrascendentes para deshacerse de nosotros un rato, ¿carpintería? ¿Es una broma de mal gusto o algo?
Kuro: Esta foto creo que papá la necesitaba para algo de su trabajo, tenía que disimular una familia feliz o algo así...- deje la foto apuntando contra la mesa, sin ánimo para verla.
Luego de su muerte Hatsu y yo entramos en proceso de adopción, varias veces lo adoptaron a el, claramente alguien de su personalidad era mucho más buscado.
Yo en cambio no fui adoptado ni una vez, y logré vivir acá gracias a un programa de pensiones y tener un poco de suerte.
Sinceramente no se que hacer, estoy aburrido hasta la muerte, estar solo en un lugar así mata la inspiración como nunca.
Narración normal:
Kuro abrió un cajón pegado al escritorio, sacando de ahí una libreta y un lápiz, la abrió y se pudo ver como estaba llena de dibujos, bastante buenos sin ser soberbio.
Luego de haber recorrido unas 75 páginas llego a una hoja en blanco, y empezó a dibujar nuevamente.
Finalizando luego de 15 minutos un boceto rápido de una bestia extraña.
Kuro: Mh....- apoya el lápiz - Menos mal que recuerdo bien las cosas que veo en sueños, siempre me salvan, pero como lo llamaban ahí?...- anoto un nombre al lado del dibujo.
Nightmare wolf.
Kuro: Si que da bastante miedo una vez que lo ves bien jeje - se acuesta en el respaldo de la silla - Mmmmh, ¿ahora que podría dibujar? - se preguntó a si mismo
...
...
...
Que interesante.
Kuro: Gracias...Espera. - miro a todos lados - ¿Que fue esa voz?
¡Realmente interesante!
Un círculo rojo cubierto de símbolos se estaba formando en el techo de la habitación, el pelimarron se levanto de su silla mirando impactado aquel circulo el cual solo se hacía más grande con cada segundo.
Kuro: ¿Que es esto? - pregunto sudando sin poder mover un músculo de la impresión.
Habra que ver si te mantienes interesante, niño.
Y el círculo empezó a emanar una luz potente, tanto que le nubló la vista a Kuro mientras este se estaba tapando los ojos con los hombros.
Y antes de que pudiera reaccionar, todo lo que veía se volvió negro, no podía ver, no podía escuchar, ni siquiera sentía la capacidad de respirar, solo el, en un aparente limbo.
...
...
...
Narra Kuro:
????: ¡Hermano, hermano!
Esos llamados hicieron eco en mi cabeza, reconocía muy bien esa voz, finalmente pude escuchar algo luego de no saber cuánto tiempo estuve sin consciencia.
Parecía estar tirado en el piso, por la sensación que tenía en mi cuerpo entero.
Abrí los ojos poco a poco y ahí vi quien me estaba llamando, esos mechones marrones iguales a los míos acompañados de una mirada preocupada.
Kuro: ¿Ha-Hatsu...?
Un poco atontado me levanté del suelo notando como mi hermano tenía lágrimas en los ojos al verme, parece que había estado inconsciente lo suficiente para que se desesperara.
Kuro: Que paso, ¿me dormí en clase otra vez?
Hatsu: Que bien que estés aquí hermano...
Nuevamente me dio un abrazo, con lo afectado que el parecía estar únicamente lo correspondí, luego me encargaría de preguntar más
Kuro: Hatsu, estoy bien - dijo acariciándole la cabeza - Pero...- se empieza a poner morado y moverse descontroladamente - No puedo respirar
Hatsu: ¡Cuando te vi caer aquí pensé que estabas muerto! - grito llorando y abrazándolo aun mas fuerte
Kuro: Hatsu, no respiro... - mis ojos se empiezan a poner en blanco
Hatsu: Ups. - lo soltó haciendo que vuelva a caer acostado al piso - Me deje llevar... - dijo limpiándose las lagrimas
Kuro: Aire...- volviendo a respirar - Fiu, vi mi muerte cerca.
Hatsu: Pues...Teniendo en cuenta la situación...tal vez este la de ambos cerca. - miro los alrededores. - Me olvide de todo al verte aquí pero...Si, estamos jodidos.
Kuro: A que te refieres - pare de hablar cuando mire hacia el mismo lugar que el - ¿Que esta pasando...Hatsu...?
De la nada me sentí diminuto, diminuto ante la magnitud de lo que se encontraba frente a mi. Una sala oscurecida sin ninguna luz real, salvo por una vela en medio de todo, sentados alrededor de ella, una gran cantidad de estatuas de tamaño colosal reposaban sobre sus asientos.
Narrador normal:
Hatsu: ¡No tengo idea, esas estatuas aterradoras no movieron ni un solo músculo! Pero yo y varios chicos de las clases aparecimos aquí, tu fuiste el último que llegó...
Kuro: "Bueno...Esto si que es raro." - se levanto mirando fijamente la estatua - ¿Alguien probó acercarse a la estatua?
Hatsu: No, todos siguen impactados, les da miedo acercarse.
Kuro: Hum. - vio a los otros chicos del lugar.
Eran alrededor de 30, de donde reconocía a varios, estaban entre ellos el chico pelirrojo y la chica de pelo castaño de esta mañana por dar un ejemplo, junto a un chico grandote y musculoso de cabello negro oscuro.
Kuro: "Tenia que estar el aquí?" - pensó a desgana - "Akira Lagiri, uno de los mayores idiotas del instituto y..." - le sale una gotita de sudor - "Extrañamente popular..." - reconoció con una gota de sudor bajando por su mejilla. - Si nadie se ha acercado a las estatuas...- dijo en voz alta mientras se inclinaba hacia delante.
Todos miraron al pelimarron, pensando que iba a ir como un loco sin saber verdaderamente bien el riesgo de acercarse, pero antes de que le dijeran que se detenga.
Kuro: Yo tampoco iré se lo que me espera. - se sienta en el piso con los brazos y piernas cruzados - He leído las suficientes novelas de fantasía como para saber que acercarse a un grupo de estatuas gigantes, nop, gran error.
Y todos cayeron al piso dada a la gran decepción de la valentía del chico.
Kuro: Pero es cierto que nos vamos a morir si nos quedamos sin hacer nada por mucho tiempo, ya sea por falta de alimento, o por otra razón, así que me sorprendería que no hubieran intentado esto.
Se agachó quedándose apoyado sobre sus cunclillas, el suelo no estaba precisamente limpio, tampoco bien cuidado, así que solo se limitó en agarrar una piedra.
Kuro: Puntería no me falles.
Y lanzó la piedra hacia la estatua más grande dándole completamente en la cara cayendo la roca al suelo.
Kuro: ¡Hey, estatua! ¿Estas viva o solo estás de decoración? ¡Responde de una vez! "Y así es como se llama la atención de una estatua." - se aplaudió mentalmente - "Es una forma segura de comprobar si esta vivo, y no ser calcinado en el proceso...A no ser que tenga una rayo a distancia pero estábamos en la misma situación de todas formas."
La estatua no movió un solo músculo por el ataque del chico, dando a entender a su vista que no tenía vida.
Kuro: Parece que no está con vida...- agarra otra piedra y la vuelve a lanzar dando otra vez.
Hatsu: ¿Porque fue eso...? - pregunto viendo cómo su hermano lanzaba más piedras
Kuro: Nunca hace mal comprobar. - falla tirando otra piedra - Mierda, necesito más puntería. - mira a los demás - Y estos quedándose sentados, van a ayudar o que? ¿Acaso tienen algo mejor que hacer?
Maldición, niñatos de mierda.
Esas palabras resonaron en todo el lugar dándole inundando una gran presión nada más termino la frase
Kuro: "Bueno...Creo que me equivoqué..."
Todos los presentes se fueron hacia atrás al escuchar esas palabras, intentando averiguar de donde había venido esa voz.
Una de las estatuas se empezaba a abrir desde dentro, emanando una luz dorada a la vista de todos quienes solo se aterraron mas y empezaron a retroceder.
????: ¡¿Que hiciste idiota?! - grito uno de los chicos del grupo.
Kuro: ¡Dudo que prefieres morirte de hambre de todas maneras!
Akira: ¡No tuviste que haber hecho eso imbécil, ahora vamos a morir!
Kuro: ¡¿Quien lo dice?! ¡Yo nos veo bastante vivos!
¿Se quieren callar?
La misma voz resonó ahora muy enojada, todos voltearon a ver a la estatua notando como una persona enorme salia de ahí, haciendo que muchos ya empezaran a sacar lagrimas del miedo.
Kuro: - toma aire - "Aquí vamos..."
Un hombre de cabello blanco se pudo distinguir como aquel gigante, con una x cruzando ambos ojos y una mirada fulminante al grupo, sobre todo a Kuro.
????: Me estoy empezando a arrepentir de aceptar esto, no pudimos ni terminar de hablar tranquilamente entre nosotros. - murmuro para luego mirar específicamente a Kuro. - Mocoso irritante, ¿quien te crees como para lanzar piedras? ¿Acaso quieres morir antes de empezar con esto siquiera?
Kuro: Que yo sepa le lance las piedras a la estatua de atrás, no entiendo porque te quejarias. - hablo señalando a la estatua - Y tuvo resultados, al fin saliste.
????: Me dan ganas de simplemente eliminarte de la faz de la existencia, de una manera tan fuerte. - sonrio. maleficamente levantando el brazo
Kuro: Hazlo entonces, aunque aquí hay algo que no me cuadra. - sonrio aunque el resto de su cuerpo temblaba, algo que no concordaba mucho. - Escuche la voz de una mujer al venir aquí, y se ve que definitivamente tu no me querrías haber traído aquí, así que...- lo señala a el - ¿Quien me trajo aquí? Tu no fuiste, ¿no? - sonrió aun mas ampliamente mientras sudaba por la presión impuesta - Que hablen las estatuas de atrás, anda.
????: ¡Crei que solo tenias tus dibujos, pero ahora sí me convenciste! - sonó una voz femenina
Todas las estatuas de atrás empezaron a brillar también, del mismo modo que lo hizo la primera, provocando que 9 siluetas más salieran de todas las estatuas, cada una con apariencia diferente, las luces de algunas de las estatuas atravesaron las paredes yéndose de ahí.
????: Jaja, ese niño si que sabe, te desafío Min-chan, responde responde! - hablo un hombre de cabello verde oscuro.
????: Parece que uso bastante la lógica... - hablo una mujer pelimorada con un parche en el ojo izquierdo - Minari, sabes que prohibimos amenazar a los jugadores de los demás, ¿acaso lo olvidaste?
Minari: Para nada, solo era para asustarlo.
????: ¡¿Asustarlo?! Te vi levantando la mano, casi matas al aliado de mi jugador desgraciado, ¡¿sabes la desventaja con la que iría mi elección sin un maldito aliado?! - grito un chico de cabello azul.
????: Mejor cálmate Asu, no queremos una pelea a puño limpio ahora. - hablo la mujer pelimorada
Asu: Pero no es justo Cami, ¡casi lo mata!
Cami: Ya, y por eso no queremos que maten a alguien en serio, ahora...
La pelimorada volteo a ver a una chica peliblanca, de un tono similar a Minari solo que un poco más claro.
Cami: Masari, ¿porque siquiera le hablaste? Se suponía que no teníamos que dar la impresión de tener consciencia en el primer momento, ya es raro para ellos ser transportados de la nada, escucharnos solo los confundiria más.
Masari: ¡Perdón perdón! - hablo poniéndose las manos en las mejillas emocionada - ¡Ustedes saben porque me emocioné, finalmente me dejaron intervenir en el juego cuando antes no me dejaban, se ve que les falta imaginación! - río con felicidad, generando un pequeño enojo en varios de sus compañeros.
Kuro: "Así que ella me trajo aquí por ese vórtice rojo..."
Akira: ¡Hey, gigantes! Seguimos aquí! ¡¿De que mierda se trata esto?! ¡Porque si me van a decir que tenemos que salvar al mundo del mal mejor mandenme a casa!
Minari: Calla. - voltea al chico peliverde que se burlo de él - ¿No pudiste elegir a alguien mejor Rigu?
Rigu: Será divertido ver como se las arregla en el juego, ¿a que si? Cuando llevemos dos años en el juego podrás criticar mi decisión.
Minari: Si es que sobrevive.
Los otros gigantes se mantenían indiferentes a la conversación, no veían alguna razón para unirse y tampoco estaban de humor para lidiar con ellos.
Asu: ¡Hey, mejor empecemos esto ya! ¡No quiero pasar más tiempo compartiendo plano con mortales! ¡¿Y si me contagian de su inutilidad?!
Rigu: Tacaño, como si fueras productivo de por si.
Kuro: ¿Dijo...?
Hatsu: ¿Mortales...?
De repente, la mano de cada uno de los chicos presentes empezaron a brillar muy fuerte que al deshacerse la luz notaron como tenían un brazalete dorado en su mano
Kuro: ¿Un brazalete? - miro confundido, intentando quitárselo sin éxito.
Observando mejor su brazalete tenia escrito su nombre completo mas un 2,5 al lado de este, sin algún detalle mas de todos los brazaletes salio una luz señalando a otros compañeros entre si.
Su brazalete señalaba con un color dorado muy intenso al chico pelirrojo el cual se veía igual de sorprendido que el, y muy difuminado a la chica pelinegra con lentes, mientras que con el resto estaba totalmente apagado.
Pero esto no solo era con el, todos tenían los mismos señaladores desde sus brazaletes, cada uno de estos apuntando a diferentes personas, su hermano, era el único que no tenia ningún señalador.
Kuro: ¿Uh...?
Minari: Esta bien, ahora. - chasquea los dedos
Haciendo eso todos los chicos desaparecieron y reaparecieron nuevamente acomodados, cada uno mas cercano a la gente que señalaba la pulsera, efectivamente estaba al lado del pelirrojo y la chica con lentes, busco a su hermano con la vista y noto como este estaba en la otra punta de la sala, con una expresión totalmente asustadiza.
Kuro: "¿También nos controlan aquí?"
Minari: Bien bien - hablo visiblemente enojado - Les explicaré que es esto y que es lo que van a hacer - tomo aire y empezó a hablar - Como ya lo habrán imaginado, y si no lo hicieron tampoco me interesa, nosotros somos los dioses que controlan todo, acéptenlo o no da igual la verdad, no es como si cambiara mucho las cosas. - afirmó con el asentimiento de bastantes dioses - Nuestro trabajo cuidandolos a ustedes y su planeta es muuuuuuuuuy aburrido, se los dice el dios que gestiona el orden por dios. - sostuvo su cabeza, miles y miles de años con estos imbeciles hasta a el lo había afectado. - Así que decidimos hacer un juego, y ustedes son los personajes de el.
Los estudiantes presentes no sabían que responder, claramente tenían sus preguntas en mente pero la declaración los había dejado totalmente en blanco, sin saber siquiera que decir.
Minari: Les explicaré lo básico - levanta un dedo - Hace años llevamos creando un mundo y hoy lo terminamos, así que ustedes serán transportados ahí. - levanta un segundo dedo - Es un juego de supervivencia, su objetivo es mantenerse con vida, si mueren de manera natural serán llevados de vuelta a su mundo, pero si algo más los mata. - sonríe - Su vida acaba ahí, el ganador se decidira entre todos teniendo en cuenta cosas como logros, asesinatos y demás. - levanta un tercer dedo - Cada uno de nosotros eligió a uno de ustedes. - chasqueo los dedos de su otra mano, los dioses apareciendo detrás de un estudiante, incluido el, que apareció detrás de Hatsu - Por lo que significa que los representamos, ustedes son los personajes que elegimos.
Todos sudaron frió por las explicaciones, era un juego totalmente brutal en el que se jugaban la vida, la que iban a tener y la que tienen ahora.
Minari: Tendrán algunas habilidades especiales enlazadas al juego, y hablando de enlaces. - levanta un cuarto dedo - Los brazaletes que tienen marca su cercanía, si están totalmente dorados significa que aparecerán en el mismo lugar, si están difuminados a unas decenas de kilómetros de distancia, y apagados puede llegar de un par de ciudades si son los que más cerca están, a el otro lado del mundo podría ser otra opción. - aclaro bastante serio - Los emparejamientos los elegimos en base a como se complementan cada uno, que tan compatibles son, junto a los saberes de cada uno
Todos seguían iguales, excepto uno, el pelinegro se encontraba impactado y asustado, pero no por el.
Kuro: ¡Espera! - reclamo gritando. - ¡Esto...Esto tiene que estar mal! ¿Como es que?- fue interrumpido
Minari: ¿Es que tu hermano está en el otro lado? - termino su oración. - Me lo sigo preguntando, veras, al fijarnos notamos algo curioso, y divertido - señaló a Hatsu. - Para ti es una ayuda del 100% tener a tu hermano cerca...- sonrió burlón - Pero para tu hermano parece que hasta le perjudicaría estar contigo, es más, estar con cualquier persona le perjudicaría, no sabemos porque, pero ante la duda, y siendo el mi jugador, lo dejamos solo.
Hatsu: ¡¿S-Solo?!
Minari: Descuida.- lo mira con la misma sonrisa - Te elegí por algo, no tendrás problema alguno.
Chico: ¡Pe-Pero esperen! - grito desde donde estaba - ¡¿Po-Porque no nos dejan a todos en un grupo?! ¡¿No seria algo mejor para mantenernos con vida?!
Minari: Tal vez pero...
En la cara de Minari y varios dioses aparte de el se formo una sonrisa aterradora, asustando a todos por la crueldad y superioridad que desprendían, viéndolos como si fueran meros objetos
...
...
...
¿Que tendría eso de divertido?
Todos los brazaletes de los alumnos empezaron a brillar en ese momento, expandiendo su luz con cada segundo que pasaba.
Kuro: "Mierda, ¡¿esto está empezando ya?!" - penso, intentando quitarse el brazalete nuevamente. - ¡HATSU! - llamo a su hermano desesperado.
Pero al verlo bien, vio como su hermano estaba aterrado, temblaba mucho y apenas era capaz de mantenerse el pie del miedo que tenía, hasta le salían lágrimas del terror.
Con la distancia que tenían sabia que no iba a llegar hacia el, e incluso si lo hiciera, no cambiaría el orden de aparición para nada, por lo que era inútil.
Viendo que no podía hacer nada apretó sus puños con impotencia, viendo con odio a todos los dioses sobretodo a Minari, pero ninguno le prestaba atención.
Iba a gritar de nuevo pero se paró antes de siquiera empezar, le faltaba mucho aire, inhalaba y exhalaba pero no lo recuperaba, es como si se estuviera agotando.
Noto como esto no le pasaba solo a el, el resto de personas se veían sudadas, algunos hasta ya se habían desplomado en el piso mientras los brazaletes no paraban de brillar aún mas.
Kuro: "Maldición, estos brazaletes..." - toma todo el aire que podía - ¡¡HERMANO!! - lo llamo de vuelta
Aún aterrado Hatsu vio a su hermano cuando este lo llamó, usualmente solo lo llamaba por su nombre así que, que haya usado la misma forma que el tiene de referirse a el logro llamar su atención.
Kuro: ¡¡ESCÚCHAME BIEN!! - lo señaló
...
...
...
¡¡SOBREVIVE!!
Kuro: ¡¿ME ESCUCHASTE?! ¡¡SOBREVIVE, NO DEJES QUE NADA TE DAÑE!! ¡¡SOLO AGUANTA, ESPÉRAME!! ¡¡JURO QUE TE VOY A ENCONTRAR TARDE O TEMPRANO!! - exclamo agitado.
Sus palabras resonaron en todo el lugar, Kuro ya se había quedado sin aire, se derrumbó en el suelo cansado, el brazalete se estaba llevando la energía de todos.
Hatsu no tardo en caer al piso también del cansancio, y antes de que ya nadie pudiera ver ni oír nada, el pelimarron logró escuchar a su hermano responder.
Hatsu: He-Hermano...
...
...
...
Te esperaré.