—Espero que sea cierto —dijo Marlen.
—¿No les parece extraño que todos estos zombies no nos hayan atacado durante la noche? Según tengo entendido, el grupo de Miguel tampoco fue atacado por tantos —preguntó Noah
Adam no sabía la respuesta, pero no iba a quejarse por ello, anoche la pelea había sido tan fácil que todos pudieron descansar.
El grupo continuó avanzando sin encontrar muchos zombies poderosos. Adam se dio cuenta de que los zombies en las calles eran bastante menos poderosos que aquellos que podían encontrar en los apartamentos.
Además, para la suerte de todos, no había ningún zombie evolucionado poderoso, solo había Brawlers, Crawlers, algunos Glutons y otros tipos de zombies un poco más raros; con los cuales su grupo nunca se había enfrentado.
Mientras estaban embelesados con la visión, el celular de Adam sonó en su bolsillo.
—¿Terry? ¿Todo en orden?
—Si Adam, Rony fue capaz de alcanzar a Miguel. El grupo se ha reunido en el estacionamiento y todavía no han sido atacados, por lo que es una buena señal. Sin embargo, ha surgido un pequeño problema. El grupo del edificio de enfrente también ha salido y justo ahora los sobrevivientes están discutiendo con Miguel.
Adam frunció el ceño. Tracel mencionó dicho grupo, pero, luego de la llamada de Indi, a Adam se le había olvidado pedir más detalles sobre el mismo.
—El grupo parece estar tratando de convencer a Miguel para que les permitan prepararse y seguirles al refugio. Miguel está dispuesto a esperar, pero sabe que en cualquier momento tendrán problemas. Por cierto, algo preocupante. Desde el estacionamiento se ve el superbloque y está repleto de zombies, creo que hay miles de Stalkers en los pasillos y se están agrupando como si fueran una lata de sardinas. Además, también parece haber un gran número de zombies evolucionados en ese lugar.
—Esas son sin dudas malas noticias, creo que tendremos que prepararnos rápido para entrar a ese edificio —dijo Adam.
La presencia del grupo de Adam había atraído la atención de los zombies en la calle, que comenzaban a dirigirse hacia ellos. Adam tuvo que desviar su atención para acabar con los enemigos más cercanos.
Rony no tardó en aparecer y ayudarles a matar a algunos zombies. Cuando la presión sobre ellos disminuyó, Terry le habló a Adam de nuevo.
—Parece que todos están preparados para comenzar. El problema es que son muchas personas y pocos combatientes. El grupo de Miguel tiene 3, mientras que en el otro son 4. Y son casi 15 personas a las que tienen que proteger.
—Será mejor que avancemos entonces, no quiero que haya ningún problema.
—Adam, creo que retiraré a Rony, siento que pronto comenzará el combate y no quiero arriesgarlo.
Adam maldijo a Terry y se propuso a hablar con él.
—Te agradecería mucho si Rony pudiera quedarse y ayudarnos, te prometo que intentaré evitar que sea dañado.
—Ese no fue nuestro trato, Adam. Rony solo explorará y no se acercará al peligro y no voy a cambiar de opinión. Le permitiré acompañarlos hasta el bloque 2, pero nada más.
—Entonces más te vale que muestres otra habilidad útil para nuestra supervivencia, porque no sé si sea buena idea permitir que sigas viviendo en el refugio cuando aportas lo mínimo como combatiente —Noah interrumpió la conversación.
—Estoy seguro de que mis habilidades serán necesarias tarde o temprano. Además, por mucho que te quejes, yo aporto mucho más que todos los supervivientes que no pelean —respondió Terry.
—Por desgracia tienes razón, en algún momento tendremos que poner a trabajar a todos esos vagos —respondió Noah.
—Basta. Terry, retira a Rony si es tu deseo, pero me gustaría que en el futuro contribuyeras más en el combate. Construye otro drone o algo por el estilo. Necesitaremos toda la ayuda que podamos y que resguardes tanto a Rony no nos hace ningún favor.
—Está bien, lo pensaré. Ahora que lo dices, construir otro drone no parece mala idea, pero necesitaré más conocimientos en electrónica y robótica. Si consigues a alguien con el conocimiento quizá podríamos colaborar.
—Al menos permite que Rony continúe explorando los alrededores y que esté cerca en todo momento —pidió Adam.
—Está bien, pero lo mantendré bien lejos.
El grupo avanzó a través de la calle, sin sospechar que algo los observaba desde una ventana en la planta baja de uno de los edificios por los que cruzaban. El zombie en su interior, había sentido la presencia del grupo y ahora luchaba contra el impulso de permanecer en el edificio en el que se encontraba.
Para cuando el zombie reunió suficiente voluntad para vencer a sus instintos, el grupo ya se había alejado y el zombie perdió el interés. Adam y los demás avanzaron dejando atrás el bloque 3 y acercándose a la plaza de la urbanización. La vieja estatua, de un intelectual de antaño que luchó contra la esclavitud, aún se alzaba en el medio de un descuidado jardín.
La pequeña plaza albergaba también algunos negocios de venta de comida y varios edificios tenían, allí mismo, sus entradas principales. Lamentablemente, su antigua tranquilidad se había perdido, reemplazada por los gruñidos de un gran grupo de zombies.
—¿Qué es eso?
Miriam observaba uno de los árboles en la esquina de la plaza. Al principio, Adam no entendió a lo que se refería, pero unos segundos después lo entendió. En la parte inferior del árbol había algo que lo rodeaba por completo, una gran masa palpitante.
El grupo estaba muy lejos para identificarla con la ayuda del Sistema, pero todos sintieron un escalofrío al mirarla.
—Sigamos, en los próximos días nos encargaremos de esa cosa.
Todos siguieron adelante, matando a los zombies en su camino y esperando no llamar la atención de lo que sea que fuera esa cosa. Adam le ordenó a Rony que se adelantara y contactara de nuevo con Miguel.
Mientras tanto, en el grupo que guiaba Miguel, los supervivientes se agrupaban detrás de los carros, intentando no estar a la vista del superbloque. El estacionamiento había sido limpiado de todos los zombies, pero nadie estaba tranquilo. Los cientos y cientos de zombies en los pasillos del superbloque hicieron temblar a todos.
Miguel también observaba el edificio con temor. Desde sus apartamentos, no tenían visión directa hacia el superbloque, por lo que ninguno de ellos se había dado cuenta de la cantidad de zombies en el mismo. Si todos hubieran atacado durante la noche, todos habrían muerto.
Pero aún más preocupante para él, era que los zombies se estaban multiplicando de alguna manera. Había hablado con Zack, en el otro grupo, y él le dijo que cuando se enfrentaron al zombie alado, en el estacionamiento, el superbloque no había estado tan lleno de zombies. De un día para otro habían aparecido cientos de ellos.
—¿Crees que el grupo del bloque 4 pueda abrirse paso? Hay muchos zombies allá afuera.
—Si alguien puede en esta urbanización son ellos. Según tengo entendido, han limpiado el superbloque del bloque 4. Además, se han enfrentado a más de seis zombies evolucionados.
Zack sintió un escalofrío. Al igual que el grupo de Miguel, ellos habían matado a uno en su propio edificio. El zombie al que se enfrentaron era lento y torpe, pero parecía resistir todos los ataques como si nada. El [Steel Zombie] que su grupo había enfrentado los llevó al borde de la desesperación. Tardaron varias horas en matarlo debido a que ninguno de sus ataques parecía funcionar.
Zack miró a Miguel, no sabía a qué clase de zombies se habían enfrentado porque el viejo no quería decir nada sobre ello, pero él sabía que el grupo de Miguel tenía antes más combatientes.
Sus pensamientos quedaron interrumpidos por una gritería. Zack y Miguel se voltearon para observar lo que sucedía y ambos quedaron horrorizados por un segundo. De uno de los edificios adyacentes salieron muchos zombies y, peor aún, uno de ellos, de complexión delgada y con uñas largas, los observaba desde la entrada.
—Apártense de allí. ¡Rápido!
Los supervivientes no tardaron en huir. Ivy era la más cercana al grupo de zombies que se acercaban, por lo que lanzó una bola de oscuridad y eliminó a un gran grupo.
¿Por qué están saliendo ahora? Se preguntó Miguel. Sin embargo, pronto apartó tales preguntas de su mente, pues no era el momento para ellas. El zombie que les observaba desde la entrada del edificio le preocupaba.
Zack, por su parte, sacó una espada y cargó contra los zombies más cercanos. Leonard se situó en la parte de atrás y se preparó para usar su balón cuando fuera necesario.
Otro de los luchadores del grupo de Zack, llamado Anin, sacó un par de dagas y se posicionó detrás de Zack. Los zombies que se acercaban demasiado a él terminaban muriendo de precisos cortes en el cuello.
La situación parecía bastante estable, hasta que el zombie evolucionado hizo su movimiento. Miguel lo perdió de vista casi enseguida, pero pudo captar hacia donde iba.
—¡Zack! Cuidado.
Zack, por suerte, reaccionó enseguida y dio un paso atrás muy rápido. Esquivando las uñas del zombie por muy poco. Aterrado, intentó identificar a su enemigo.
[Zombie Ambusher].
Zack levantó su espada y atacó, pero el zombie esquivó sin mucha dificultad y retrocedió hacia el edificio a gran velocidad, desapareciendo en la entrada.