UN NUEVO CAZADOR SANGUINARIO
La mente se vuelve inhumana en el momento que solo te importa una sola persona por sobre las demás.
—¿Qué clase de personas son estas? — murmuró con temor la joven Capricornio.
Bianca había noqueado por completo a Liceo con unos cuantos movimientos.
Y al levantarse, escupió sobre su cuerpo inmóvil.
—No olvides tu lugar, imbécil. —
Lo dijo de esa manera, ya que Liceo no pertenecía a los reclutas lidérales como Bianca, era parte del resto de los reclutas a cazadores normales.
En cuanto su obstáculo se había ido, tomó al Capricornio y lo guio.
La chica se resistía.
—¡Por favor, ayúdame! Por favor, ambas somos mujeres, no dejes que me hagan daño. Por favor. —
—Oh. Pobre chica, debe ser cruel todo esto para ti. ¿No es así? Bianca mostró una leve compasión por la chica. Pero… si tan solo me importará. —
—¿Qué? Preguntó confusa la chica, hasta que logró entender, llenándose de furia. Lo sabía, después de todo… ¡Todos los malditos cazadores son iguales, basuras inhumanas! —
En ese momento Bianca agarró con fuerza la cabeza de la chica y la estampó contra un árbol. Lo que hizo que se quejara de dolor.
¡Mhm!
—Presta atención. Yo no tengo tanta paciencia, si no quieres quedar como ese tipo de atrás, te sugiero que te calles y seas obediente. ¿Entendido? —
Aun con la cabeza presionada contra el árbol la chica asintió. En cuanto Bianca la soltó, agarró una soga y amordazó a la joven Capricornio.
Hecho un vistazo a su mapa y buscó una ruta donde no lograra encontrarse contra nadie.
—¡Bingo! Lo encontré, aunque… este camino está a pocos pasos de un acantilado cerca al mar. TSK. Chasqueó su lengua. No tengo opción. —
Al tener a su presa amordazada, pudo desplazarse con más facilidad y rapidez.
Pero al llegar al punto más alto de ese camino alguien las esperaba…
—Te estabas tardando, Bianca. —
—Tú… ¿Qué rayos haces aquí? —
Frente a ella se encontraba Tyler.
—Lo hiciste bien, pero supe que harías exactamente. De a poco se fue acercando. Por otra parte, entrégame la presa. —
—¡No! Y es mejor que pienses bien lo que harás, porque no me contendré. — respondió amenazante Bianca colocando a la chica detrás de ella.
Tyler ignoró sus palabras y siguió caminando hacia ella con una mirada llena de indiferencia, iba en dirección del Capricornio.
En cuanto se acercó para tomar el cuello de su presa.
Bianca lo agarró con su mano izquierda y con el brazo derecho pretendía darle un codazo en la cara, pero Tyler en ese instante usó su otro brazo para detener ese golpe directo.
—Que lista. —
Bianca se alejó rápidamente de Tyler.
No pudo evitar enojarse y apretar sus dientes fuertemente.
Sin inmutarse ambos se sumieron en una lucha intensa, tanto de agilidad y fuerza.
Al ver esta escena, la joven Capricornio se echó a correr aun amordazada, tenía que aprovechar esta oportunidad tanto como fuera posible.
Sin embargo, para su desgracia Bradley se encontraba cerca que poco después apareció frente a ella y al querer salir corriendo de nuevo le encesto un puñetazo en todo el estómago. Haciendo que se desplomara en el suelo al mismo tiempo que gemía de dolor.
—¡Mhm! —
Mientras se retorcía de dolor en el suelo, Bradley agarró la soga que la mantenía amarrada y comenzó a tirar en dirección hacia el camino arrastrándola sin importarle la chica adolorida.
Cuando llegó vio a Tyler sosteniendo a Bianca del cuello. En tanto ella trataba de soltarse.
Ambos se encontraban con varias heridas y manchados de sangre.
—Debiste rendirte cuando te di oportunidad. Ahora me has hecho enfadar. —
—No eres más que un maldito bastardo mentiroso y… traidor. — dijo Bianca con la boca manchada de sangre, pero con una leve sonrisa.
—¿Qué has dicho? —
—JAJAJA — se burló ligeramente.
—¡Responde! — gritó Tyler.
—Idiota, todos saben del miserable narcisista que haría cualquier cosa por dinero, incluso entregar a su pequeña hermana. —
Una colera gigantesca se apoderó de Tyler y una imagen fría parpadeaba en su retina.
Su ira daba escalofríos.
Arrastró a Bianca hacia al acantilado.
—Te daré una solo oportunidad, es mejor que respondas. ¡¿Quién lo divulgó?! —
—¿Planeas matarme? No tienes las agallas. Si lo haces mi padre esta vez si te matará. —
Finalmente, Tyler lo entendió.
Todo este tiempo fue el cazador Brett quien había estado detrás de todo esto.
Ya era tarde, su mano se había abierto y Bianca descendía hacia el vacío.
Lo último que pudo observar fue a un Tyler sin ningún tipo de remordimiento por lo que estaba pasando.
Bradley quedó completamente atónico.
—Tyler… —
Al acercarse al borde pudo alcanzar a ver como el cuerpo de Bianca se estrelló contra las rocas del mar, que por las grandes olas se perdió en cuanto tocó el agua.
—¿Seguirá viva? — preguntó Bradley curioso.
—¿Quieres averiguarlo? — respondió Tyler.
—Nahh. Estoy bien así. —
—Bien. Andando, no tenemos tiempo que perder. —
Agarró la soga de su presa y continúo arrastrándola por el camino. Ella no puso ninguna resistencia, había quedado aterrada con lo que acabó de ver.
***
Poco después estaban a nada de lograr llegar a la meta, pero…
Había intrusos en la entrada por la que debían pasar.
—Bradley. —
—¿Mhm? — preguntó Bradley.
—Deshazte de ellos. — respondió Tyler
—Dalo por hecho. —
Y corrió a toda máquina, golpeando y derribando a todos y cada uno hasta cubrir sus manos de todo tipo de sangre.
Dándole paso a Tyler de la mejor manera posible.
Y en cuanto paso la entrada una tenue luz se encendió y todos los dispositivos vibraron.
BRR
Al igual que un pitido intermitente resonó en sus auriculares.
—¡Fin de los eventos! Tenemos el ganador de esta competencia. Habló el cazador Kraken hacia todos. Los demás esperen indicaciones de sus instructores. —
Para luego aparecer frente a Tyler.
—Tienes suerte, muchacho. Tyler lo miró confundido. Ahora muchos buscan ser tu maestro y patrocinarte. —
Sintiendo un miedo sutil, Tyler preguntó.
—¿Quiénes? —
—Lo sabrás en su momento. Ahora estas personas te llevaran a la enfermería a tratarte luego a un lugar para que descanses, al igual que a tu compañero. Mañana partiremos de regreso a Kratos. —
Entonces solo tomó al Capricornio y se marchó. Mientras se iba la chica lo miró y Tyler con una señal de silencio la amenazó.
La chica lo miró con terror antes de irse.
—Uff. Eso fue intenso, de verdad. Joder, me siento mareado. — dijo Bradley.
—Vamos, debemos ir con ellos a la enfermería. —
***
Al otro día un bullicio intensó los despertó.
—¡¿Dónde rayos están ese par?! —
En el momento que Tyler abrió la puerta el cazador Brett se balanceo sobre él eufórico.
—¡Tu! ¡Maldito bastardo! ¿Dónde está mi hija? —
—Señor por favor cálmese, no puedo continuar así. ¡Por favor, señor! — gritaron algunos instructores mientras trataban de calmarlo.
—¿Hija? — preguntó Tyler.
—No te hagas el idiota. ¡Bianca! ¿Dónde está ella? —
—No sabía que era su hija, señor. Y sobre donde se encuentra, no sé nada al respecto. Ella nos abandonó y tomó otro camino por su propia cuenta en cuanto comenzó el tercer evento. —
—¡Mientes! ¡Habla de una vez! —
—¡Brett! Esta vez quien interfirió fue el cazador Kraken. Para con esto, de esa manera no resolverás nada. Ahora mismo la están buscando. Mantén la calma y vete. —
TSK
Chasqueó la lengua Brett furioso antes de marcharse.
—Ahora todos presten atención. Es hora de irnos. —
Y antes de marcharse observó por unos segundos a Tyler.
El shock sacudió el cuerpo de Tyler, pero lo soportó.
Todos los reclutas en sus habitaciones se apresuraron en alistarse.
***
Ya en Kratos.
Todos debían ir a sus casas y descansar hasta después de tres días que se anunciaría quienes tuvieron la suerte de al menos tener a un superior interesados por ellos, como su futuro maestro.
En cuanto Tyler y Bradley estuvieron en D´Mell.
Bradley estiró ambos brazos, completamente exhausto. —Me iré primero. Y bostezando se marchó. Nos vemos en tres días, señor cazador.
Tyler lo miró con el ceño fruncido por unos segundos.
luego sacó el dispositivo que le ofrecieron como recompensa por pasar en primer lugar la competencia y llamó a un número en especial.
TIIIIIN
El sonido de un teléfono se mantuvo sonando hasta que alguien contestó, pero en ningún momento habló.
Entonces Tyler fue quien lo hizo.
—Soy Tyler Kaminari y quiero saber sobre la salud de mi madre. Cristal Kaminari. —
Finalmente, alguien habló. —Espere un momento, por favor. Enseguida le pasaremos la llamada con el medico encargado. —
TIIIIIN
—¿Eres tú, Tyler? —
—Si, Dr. Kallet. ¿Cómo está mi madre? —
—Su estado es delicado, ha estado soportando las quimios. Por lo tanto, dentro de tres días la someteremos a cirugía. Deberías venir. —
—Lo haré. —
—Bien. —
La llamada culminó.
Poco a poco retomó el camino en dirección a su casa, no quería llegar porque sabía que se encontraría solo, pero aun así debía hacerlo.
Se encontraba sumamente cansado, tanto que durmió por dos días seguidos.
Cuando despertó se encontraba desorientado por completo, reviso la fecha y fue corriendo a cambiarse para ir hacia la clínica donde se encontraría su madre.
Luego de varias horas, finalmente había llegado, pero para su mala suerte su madre ya se encontraba en cirugía.
Estaba impaciente así que no podía mantenerse en un solo lugar, por un momento decidió ir al baño.
Al estar por salir unas enfermeras cruzaron los baños y alcanzó a escuchar su conversación.
—¿No es demasiado cruel el Dr. Kallet, con ese muchacho? —
—¿A qué te refieres? —
—Todo el dinero que piensa cobrarle. ¿No lo sabias? —
—¿Es mucho? —
—No es solo mucho, es demasiado. Los intereses que ha colocado en esa cuenta sobrepasan los que normalmente se cobran y estoy segura que hará que se vuelva una deuda interminable. ¿Qué tramará? Pobre muchacho. —
PIIIN
—ay no. Cambio de turno. Apresúrate. —
Tyler pudo escuchar toda su conversación y la ira invadió toda su mente.
Sabía que toda esa ayuda no era gratis, pero saber esto le colmó la paciencia.
En eso el Dr. Kallet salió del quirófano, Tyler apenas y podía controlar su irá, su respiración se había acelerado al punto de volverse caliente.
En cuanto el Dr. lo vio abrió su boca.
—Oh, llegaste. En buena hora, tu madre salió bien de la cirugía. —
—¿Eh? — dijo confundido
—Podrás verla en cuanto la pasen a su habitación, ten paciencia. —
La alegría sobrepasó la ira, ahora solo le importaba su madre.
—Y sobre tu deuda, lo podremos hablar después. —
Al decir esto se marchó.
A pesar de esas palabras que lo enfurecieron nuevamente, trato de ignorarlas ahora lo único importante era su madre.
Ya todo listo lo dejaron ver a su madre, el alma le volvió al cuerpo al poder ver que aún seguía luchando por sobrevivir.
Pasó el resto del día junto a su madre.
En la tarde regresó a D´Mell.
Debía prepararse, ya que al otro día debía escoger un maestro
Y dando inicio a su nueva vida, donde lo primero que haría seria sacar a su madre de ese maldito lugar y pagar esa absurda deuda.
***
Llegado la mañana siguiente Tyler se preparó y se dirigió a la estación, como era costumbre se encontró con Bradley en el camino.
Al llegar a la estación y luego a su campo de entrenamiento.
Todas las miradas cayeron sobre ellos, esto les pareció extraño, pero poco después notaron como la mayoría de reclutas estaban reunidos cerca de lo que eran aparentemente carteles digitales.
Ambos se acercaron.
Las cejas de Tyler y Bradley se movieron con sorpresa.
Debajo de sus nombres tenían múltiples nombres de varios cazadores de rango superiores tanto de esta estación como de otras estaciones.
Pero los nombres que realmente le llamaron la atención fueron:
La líder
El superior Kraken
Y el que menos se esperaban.
El cazador Brett
—Vaya, vaya. Mira nomas lo que tenemos aquí, hermano. ¿A quién elegiremos? — preguntó Bradley.
—¿No es obvio? Nuestro objetivo es la cima. — respondió.
—Ya veo. —
Al acercase y tocar la pantalla con su nombre, esta mostró un enunciado donde debían colocar sus pases que desde el principio de su entrenamiento les fue entregado.
En cuanto se les cedió elegir, Tyler no lo dudo y escogió su pase directo hacia el punto más alto de todos los cazadores.
La única persona que podría posicionarlo en el mismo nivel en el que este se encontraba, al convertirse en su maestro.
La líder.
***
Una vista panorámica de la cuidad de Kratos entró en la visión tanto de Tyler como de Bradley.
—Es hora. Una voz suave pero imponente entró en sus oídos. Bienvenidos diaria de un cazador. —
En ese momento ambos chicos portaban la vestimenta particular de los cazadores con renombre, incluso la máscara de depredador.
—No olviden que esta es la última prueba del reclutamiento, pasarla solo depende de ustedes. — dijo Rachel.
Ya en marcha.
La líder le dio unas cuantas indicaciones las cuales le servirían en su cacería.
Primer punto.
[Los capricornio, han desarrollado la habilidad de camuflarse entre los demás signos sin ser notados, por ende, es difícil identificarlos.
Pero siempre en alguna ocasión al menos uno, pierde el enfoque y se delata por sí solo.]
En cuanto tocaron las calles de las fronteras de Kratos observaron pacientemente su alrededor.
Y una milésima de segundo Tyler logró notar algo inusual a través de su mascara.
Un sujeto.
Segundo punto.
[Como es de conocimiento general, el emblema de los capricornio es imposible de ver a simple vista. Entonces en caso de dudar de alguien en particular se debe tener al menos la leve sospecha de que sea una presa.
Caso contrario podría sufrir de fuertes denuncias en su contra.]
Tyler mantuvo distancia de su ahora objetivo, pero sin perderle de vista.
Mientras pasaba el tiempo el sujeto comenzó a impacientarse y se fue alejando del lugar poco a poco.
De un momento a otro, corrió despavorido hacia uno de los tantos callejones de esa parte de la ciudad. Tyler lo siguió en el acto.
Su velocidad era bastante decente.
Lo que llevó a Tyler a acelerar aún más.
De pronto un mensaje entró en sus oídos.
—¿Hacia dónde se dirige? — preguntó Bradley.
—Callejón ´time´ cerca de la frontera con D´Mell. Esta por cruzar el puente. —
—No escapará. —
La gente que cruzaba constantemente el puente, obstaculizaba su visión en cuanto avanzaba.
Llegando a un poco donde perdió de vista su presa.
Apresuradamente trató de encontrarlo de nuevo, pero se le estaba haciendo imposible, en ese momento conocer D´Mell le podría servir de algo.
Al haber finalmente cruzado el puente, observó todos los puntos posibles de huida y se dirigió a uno en especial.
Bradley le seguía el paso desde otro punto.
Y cuando menos lo espero.
Su presa se encontraba acorralada por él y Bradley.
—¡Hey tú! ¿Qué signo del zodiaco eres? — preguntó con ironía Bradley.
—Tauro — respondió el sujeto tartamudeando.
—Muéstranos tu emblema. —
—Ya se los dije. ¿No es suficiente con eso? ¡Por su propio bien apártense los dos! — gritó el sujeto.
Bradley mostró una sonrisa de entusiasmo y se fue acercando al tipo poco a poco.
—¡¿Crees que bromeo, imbécil?! Yo-
Y antes que pudiera terminar sus palabras su cabeza se estrelló contra el suelo de un momento a otro.
Lo que llevó a Tyler a observarlo por un instante y volver a estrellársela una y otra vez hasta sangrar descomunalmente dejándolo fuera de combate.
—Tyler… — dijo Bradley algo impactado.
Cuarto punto.
[La fuerza bruta es recomendable solo en el caso de que la presa (El Capri) se resista de forma insistente. Pero en todo caso se debe evitar acabar con su vida para recibir su debida recompensa.]
Sin esperar más, Tyler cortó su pantalón en el muslo derecho del sujeto sospechoso para no encontrar nada en ese lugar.
Entonces le quitó uno de sus zapatos y descubrió que efectivamente se trataba de un Capricornio.
De inmediato lo informaron a Rachel y a la estación. Al entregar a su primera presa, rápidamente esto se volvió uno de los pocos logros obtenidos por un par de novatos en servicio.
De alguna forma Tyler poseía un olfato para los Capricornio, talvez haber pasado muchos años junto a uno le dio cierto nivel de ventaja.
Efectivamente así inició un nuevo cazador sanguinario. Y un dúo ejemplar sin precedentes.
Y como depredador Tyler obtuvo una máscara de un zorro colorado, representando su gran olfato y agilidad en el campo.
A diferencia de Bradley que le otorgaron una máscara de coyote. Por su gran fuerza y habilidad de adaptación en cualquier clase de ambiente que se encuentre.
En el momento que Tyler obtuvo su recompensa se dirigió con Bradley hacia … a la clínica donde se encontraba su madre.
El olor peculiar del lugar le traía recuerdos.
Los gritos de dolor de voces diminutas que se mantenían resonando con constancia.
Al estar en recepción.
Tyler se dirigió con un tono de voz tan frio e indiferente hacia una de las enfermeras que apenas y ella pudo responder.
—Llama al Dr. Kallet y dile que he venido por mi madre. —
La enfermera solo asintió con su cabeza.
—¿Qué es exactamente este lugar? Hermano. — preguntó Bradley curioso.
—No hagas nada innecesario, hasta que te lo diga. —
Sin decir ni una palabra Bradley entendió lo que quería decir Tyler.
Finalmente apareció aquella cara que Tyler despreciaba.
—Oh. Bienvenido Tyler, ven toma asiento de seguro estas muy cansado. —
—No he venido a eso. Tyler agarró la bolsa en su hombro y se la lanzó. Esta es la paga por todos los servicios médicos que le has dado a mi madre, mi deuda con todo e intereses. Alista a mi madre me la llevo ahora. —
El doctor quedó impactado, para luego una leve ira floreció en su iris.
—Espera Tyler, esto es muy apresurado de tu parte. Tu madre apenas y se está recuperando, necesita más observaciones, medicinas y mas importante ¡me necesita como su doctor! —
Tyler entrecerró los ojos y lo miró fijamente.
—No pregunté tu opinión, de ahora en mas no quiero tus sucias manos sobre mi madre. Tráemela ahora o iré por ella yo mismo. —
—¡Te arrepentirás de esto, Tyler! Hazme caso. —
Y antes que terminara de hablar Bradley le encestó una enorme patada al molesto doctor en todo el estómago.
—Que ruidoso. Pareces un infante que ha perdido su juguete. —
Estando en el suelo Bradley no dejó de golpear al doctor.
Por su parte Tyler miró hacia las enfermeras y les hizo una señal con la cabeza en lo que ellas con nervios lograron entender.
En poco tiempo las enfermeras trajeron a Cristal lista para dejar esa fastidiosa clínica.
—Para Bradley, es hora de irnos. —
—¿Mhm? Bien, como digas. Es bueno volver a verla señora Cristal. — dijo Bradley dando una breve reverencia.
En ese momento el Dr. Kallet se arrastraba por el suelo aun herido tratando de alcanzar a Cristal.
—E… Espera Tyler, Cristal no debería-
Casi al mismo tiempo Tyler furioso aplastó la mano del sujeto en el suelo.
—No te vuelvas a acercar a mi madre, idiota. —
Una risa amarga flotó en los labios de Tyler mientras se marchaba de ese lugar.
Desde ese momento Tyler internó a su madre en uno de los mejores hospitales de Kratos, sirviendo como referencia la estación y su influencia en la enorme cuidad.
***
El tiempo fue pasando.
Tanto Tyler como Bradley habían logrado pasar la última prueba y no solo eso, lograron capturar dos presas mas antes de terminar los tres meses.
Siendo una mujer y su hija, una pequeña niña.
Con el trascurso del tiempo, un año había pasado.
Y Cristal se mantenía aun en recuperación de su enfermedad de la mejor manera.
El récord de Capricornio capturados por Tyler y Bradley contaba ahora con ocho presas.
Algo poco visto por novatos en el área.
—Espero haber superado las expectativas que tenía sobre nosotros, mi señora. ¿O me equivoco, líder? — preguntó Tyler.
—Por supuesto las superaron. — respondió Rachel.
—Bien. Entonces tengo algo que pedirle. —
—¿Qué es? —
—Asígnenos a la estación central de Kratos. —
La mirada de Rachel se endureció. —¿A qué se debe esa petición? No te es suficientes nuestras enseñanzas. ¿Es eso? —
—No me malinterprete líder, mi madre se encuentra allí, además… Tyler se encontraba de pie con una expresión rígida. Tengo un asunto pendiente con alguien, que debo encontrar y probablemente se encuentre en ese lugar. —
—Ya veo. Rachel sonrió desde su lado. Tienes suerte Tyler. Los reyes han puesto los ojos en ti y Bradley, nos ordenaron ponerlos a su servicio en el momento que recibimos esta carta, que fue el día de hoy. —
Las cejas de Tyler se movieron con sorpresa. —Eso quiere decir… —
—Efectivamente, no solo irán a la estación central de Kratos, sino que también trabajarán exclusivamente para los Reyes. Felicidades. —
Los ojos de Tyler se sacudieron ligeramente para después sonreír y responder.
—Sí, esta bien. —
(Lo dije antes. Te encontraré Dalia) pensó.
…