Parado sobre la arena, Seth miraba el cadáver de su oponente tendido sobre el suelo mientras escuchaba los gritos de entusiasmo de los espectadores.
'Es la primera vez que no me desmayo'
Era el tercer combate de Seth, en el cual tuvo que enfrentarse a un hombre más o menos de su tamaño. El hombre empuñaba una lanza con la cual se defendió bien de Seth por los primeros minutos de combate.
Sin embargo cuando Seth tuvo suficientes heridas para que la sangre se escurriera por su cuerpo, todo cambio. El hombre paso de estar a la ofensiva y se puso inmediatamente a la defensiva. Su oponente había aumentado su enormemente su velocidad lo cual llevo que después de 10 minutos de combate el hombre sucumbiera cuando la espada de Seth le atravesó el corazón.
Seth miro como los relámpagos se acumulaban en la punta de su espada ensangrentada antes de desaparecer.
Lo que había hecho para acabar con su oponente fue utilizar los relámpagos colocándolos en la punta de su espada para poder atravesar la armadura de cuero que cubría las zonas vitales del hombre.
La espada atravesó con facilidad la armadura sorprendiendo a su enemigo pero dejándolo sin oportunidades de hacer nada cuando murió al cabo de unos instantes.
Lo que acababa de hacer Seth no fue para nada fácil, podía manejar con mayor facilidad los relámpagos a través de su cuerpo como conductor, pero hacerlo en un objeto como la espada fue mucho más difícil, lo que le costó a Seth demasiada energía y mucha sangre desperdiciada al intentar imbuir solo una pequeña parte de su espada con relámpagos.
Seth camino hacia la salida de la arena por primera vez mientras pensaba en cómo podía usar su habilidad. Ya no le importaba pensar en las personas que mataba.
Aunque solo habían sido 3 personas las cuales enfrento desde que llego al coliseo y a los cuales tuvo que arrebatarles la vida, Seth no se dejó influenciar por los malos pensamientos y solo los desecho.
Sabía que tenía que sobrevivir y que seguramente en un futuro seguiría matando a muchas más personas.
Como era la primera vez que salía consciente del coliseo, tuvo que dejar sus armas en la sala donde se había armado con ellas y también devolver su armadura.
Una vez devueltas, varios guardias lo guiaron a su habitación donde el mismo se hizo cargo de sus heridas las cuales no habían sido tan graves en comparación de sus dos anteriores combates.
Una vez termino de encargarse de sus heridas, Seth se dirigió al comedor a encontrarse con Ardur. Tomando su bandeja como siempre y sentados en la mesa a esperar, ya que Ardur aún no había llegado.
Pocos minutos después, Ardur llego y comenzaron a hablar tranquilamente sobre el combate que Seth acababa de tener
"Oye chico, si no es malo preguntar, ¿Cómo llegaste aquí?" preguntó Ardur con curiosidad.
Seth pensó un momento antes de responder, si en verdad nunca lo habían hablado no era porque no quisiera, simplemente no se le había pasado por la cabeza.
"Me metí con las personas equivocadas y me capturaron" respondió Seth con sinceridad, mientras recordaba los eventos que sucedieron en el almacén.
"Desde de hace algunos años que estoy viviendo en los barrios bajos, si bien tenía una buena vida en comparación con las personas que viven en las zonas más centrales de los barrios bajos, aún era una vida muy difícil"
"Eso solo empeoro con los recaudadores de deudas, los cuales venían cada semana a tomar el dinero por el cual mis abuelos con los cuales vivía habían ganado trabajando duro día a día"
"Sin embargo todo cabio cuando mis abuelos murieron de una enfermedad, lo cual es bastante común en los barrios bajos. Pero, por eso me puse demasiado bravo para pensar correctamente, lo que me llevo a enfrentarme directamente a los recaudadores"
"Y…, el resto es historia" termino de explicar Seth.
"Ya veo…, no fue una vida fácil" asintió Ardur mientras continuaba comiendo. "Lo siento por ti, chico"
"Está bien…, en cambio. Dime como llegaste tu"
Ardur también se quedó en silencio unos segundos antes de responderle a Seth.
"Yo era un soldado, un soldado del único reino bestia. Shrlenka" Ardur miro al techo del comedor como si recordara viejos tiempos antes de continuar.
"En una misión de reconocimiento nos vimos emboscados por varios hombres que superaban a mi unidad en fuerza y en números. No tenían la misión de capturarnos vivos, solo nos querían muertos. Sin embargo algo en mi les llamó la atención y me trajeron a este lugar"
"Reino de Shrlenka…" murmuro Seth.
"Aunque el reino humano y los demás reinos no están en guerra ahora mismo, no se puede decir que en un futuro sea lo mismo. Siempre hay escaramuzas entre los ejércitos de cada reino." Ardur levanto dos dedos mientras le explicaba a Seth.
"Por ejemplo el reino de las bestias Shrlenka y el reino humano Hemphis, no han estado en guerra durante más de 200 años. Pero, los humanos estuvieron en guerra contra el reino de los vampiros Angras, hace 50 años"
"Aunque la guerra entre ambos bandos acabo cuando discutieron después de varios años los términos de cada lado. No se sabe a qué acuerdo llegaron ambos reinos, pero la guerra termino extrañamente después de 5 años"
"Por otro lado el reinos de los elfos Litengard, y el reino de los dragones Ocarios, se han mantenido neutrales durante más de 500 años"
"Y mejor no hablo de los otros reinos que han desaparecido a lo largo de los años. …A lo que quiero llegar, es que entiendo por qué atacaron a mi unidad, pero nunca podre perdonarlos" Ardur gruño ferozmente.
Seth noto como Ardur siempre que hablaba de su pasado era invadido por mucha rabia. Pero esta vez se quedó en silencio en vez de decirle cuanto lo sentía.
"Por eso la paz en la que viven todos los reinos solo es de papel, todos los reinos están esperando un error de cualquier para dar una excusa de empezar una guerra contra los demás reinos" termino de explicar Ardur mientras tomaba su ultimo bocado de pure.
'Ugh, odio la política. Espero nunca tener que meterme en esos problemas' Seth se froto la frente mientras continuaba su conversación con Ardur antes de volver a su habitación y descansar por el día de hoy después de su combate.
Como esta vez no había quedado tan herido, era muy probable que le asignaran otro combate muy próximamente, teniendo eso en cuenta. Seth se dispuso a entrenar todo lo posible con tal de salir de aquí, siguiendo ese loco plan de Ardur.
Con el estómago lleno, Seth se durmió rápidamente mientras soñaba en comer algo que no fuera un pure que supiera a barro seco y también poder dormir en una cama de verdad.