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Chapter 21 - Sin opciones

"Hhaaahh…hhaaahh…hhaaahh" Seth apoyo la espalda en la puerta de la fortaleza mientras trataba de tomar aire después de una gran persecución por parte del golem.

Después de escapar del bosque mientras aún era perseguido por el golem, Seth llego hasta la pared del acantilado. Rezo por tener buena suerte y escogió corrió hacia la derecha, en vez de hacia la izquierda, y luego de 20 minutos como si el mundo lo hubiera favorecido por una vez, llego a la fortaleza.

Cuando cruzo las puertas abiertas, se preparó para luchar contra el golem, sin embargo aunque pasaron varios minutos, el golem no ingreso a la fortaleza.

Extrañado, Seth se asomó para mirar hacia el exterior y vio al golem quieto mientras sentía que la gema roja en su cabeza lo parecía estar mirando.

El golem se quedó un tiempo quieto, antes de dar la vuelta y regresar al bosque.

Ahora, Seth por fin podía sentirse a salvo en la fortaleza abandonada que resulto ser su salvadora.

"Tu maldito…¡Algún día te destruiré!" Seth grito en dirección hacia donde había desaparecido el golem, y aunque ya no lo podía ver, igual quiso desahogar su frustración.

"Bueno…vamos a comer" Pasando toda la noche en vela y corriendo prácticamente todo el día, Seth tenía demasiada hambre para hacer cualquier otra cosa.

Seth llego hasta el cadáver del oso y comenzó a despellejar un pedazo de carne. Teniendo en cuenta que en el bosque no había prácticamente ningún animal, lo que significaba poca o casi nada de carne. Seth decidió comer de poco a poco la carne del oso, para que no se le acabara muy rápido pero que tampoco se pudriera.

Ahora solo quedaba el tema del agua, Seth tenía que volver al riachuelo para poder beberla, sin embargo el golem lo perseguiría en cuanto saliera de la fortaleza y las sombras también lo atacarían en cuanto se hiciera de noche.

A lo máximo, Seth solo tenía 20 minutos desde que el golem se desactivaba y las sombras se volvían activas. Tal vez un poco más de tiempo si usaba relámpagos para alejar a las sombras.

Seth espero un día completo, lo suficiente para recuperarse un poco pero no tanto para que la sed lo afectara. Espero hasta la tarde calculando más o menos el momento en el que el golem se desactivara y rodeando sus piernas en relámpagos, corrió a toda velocidad hacia el riachuelo.

"Glup…glup…glup…hhaaaa" Seth bebió y bebió hasta saciarse y con un pedazo de piel de oso que lavo lo más rápido posible en el riachuelo, Seth creo un tipo de cantimplora provisional y la lleno lo suficiente para que durara varios días. Viendo que ya habían pasado 20 minutos y las sombras no tardarían en salir a cazar, Seth corrió a toda velocidad hacia la fortaleza.

Al llegar a la seguridad de las puertas, pudo ver como de igual manera que el golem, las sombras tampoco se atrevían a invadir la fortaleza, o tal vez simplemente no podían.

Todo el cuerpo de Seth estaba lleno de heridas causadas por las sombras cuando agoto sus relámpagos y solo le quedo tratar de esquivar todo lo posible.

Sentándose sobre la cama y dejando la cantimplora de piel de oso a un lado con cuidado para que no se regara, Seth se recostó y miro al techo antes de dormir.

"Ahora…¿Qué hago?"

***

En un trono hecho de tierra, una hermosa mujer apoyaba su cabeza sobre su mano mientras miraba una enorme pantalla que flotaba unos metros sobre el suelo.

"Hombre…Que persona tan molesta, ¿Qué lleva?, ¿Una semana así?, ¡Sal de una maldita vez, cobarde!"

Apretando sus dientes hasta que comenzaron a rechinar, la mujer suspiro antes de levantarse de su trono y comenzar a caminar hacia una habitación.

"¿Y quién diría hace 1000 años que una simple barrera me detendría?"

La mujer se quedó en silencio como si esperara una respuesta antes de suspirar y salir de la sala del trono.

***

"Bien…es todo o nada"

Seth suspiro y apretó su agarre en la lanza que había hecho de un pedazo de madera que recogió hace unos días en la media hora que tenía seguridad para poder salir sin que lo atacaran.

Seth cruzo la puerta de la fortaleza cuando una ráfaga de aire hizo que su capa hecha de piel de oso se ondeara levemente.

Seth tuvo varios días antes de que se acabara la carne de oso para hacer varias manualidades. La cantimplora provisional que se rompía a cada rato, una lanza de madera que seguramente con pocos usos se acabaría rompiendo y una capa de piel de oso que lo protegía del frio en la noches. Además la capa al ser de un animal bautizado era bastante más resiste que la piel de un oso normal, lo cual le daba propiedades defensivas que Seth apreciaba.

La capa era solo un trozo de piel amarrada en un nudo sobre el cuello de Seth ya que era la única forma de mantenerla sobre el sin que se cayera, tampoco era muy cómoda y a Seth le picaban los brazos, pero era mejor que nada.

Seth miro a los alrededores durante unos segundos antes de correr hacia el frente mientras se adentraba al bosque con la ilusión de encontrar algún animal del cual alimentarse. También recogería varias yerbas en el camino y las probaría con suerte de que ninguna fuera venenosa.

Concentrando relámpagos en sus oídos, Seth trato de escuchar algún ruido en el silencioso bosque además de sus pisadas y latidos del corazón. También rezando con tal de que el golem se hubiera cansado de el y lo dejara en paz.

Esta vez tuvo que salir temprano por la mañana ya que aunque tendría que lidiar con el golem, por lo menos pasarían muchas horas antes de que las sombras salieran a jugar.

'Vamos…¡Vamos…!, ¡Por favor!' Después de varios minutos recorriendo el bosque sin signos de vida, Seth comenzó a impacientarse. En cualquier momento se encontraría con el golem y sus rayos le darían una cálida bienvenida.

Seth no tenía muchas opciones, mejor dicho, solo tenía dos.

Arriesgarse y cazar durante el día tal como estaba haciendo o convertirse en un lindo esqueleto que sería encontrado quien sabe cuántos cientos de años después por alguien que entrara en la fortaleza abandonada. Opción de la cual no estaba dispuesto a elegir, no después de haber logrado escapar de esa prisión.

'¡Aunque sea uno!, ¡Solo una maldita ardilla!'

Seth recordó la ardilla que había sido asesinada por el golem el primer día que salió a explorar, y rezo por encontrarse con alguna otra, aunque solo fuera una.

20 minutos pasaron y Seth no lograba encontrar a ninguna ardilla ni a ningún otro animal, pero tampoco se había encontrado al golem, lo cual le dio algo de esperanza a que el golem se hubiera dado por vencido.

Sin embargo para su suerte, 1 hora después de silencio absoluto en el bosque, Seth escucho un movimiento en un arbusto a algunos metros de él.

Lo más silencioso que pudo, Seth se acercó lentamente hacia donde había escuchado el sonido y parándose detrás de un árbol, observo cuidadosamente lo que fuera que había generado el sonido.

'¡Bingo!' Mirando la ardilla que olfateaba el pasto, Seth levanto la lanza y se preparó a lanzarla hacia la ardilla apuntando lo más cuidadosamente posible para no desaprovechar esta única oportunidad que la naturaleza le había brindado.

'Bien…quédate, quieta pequeña amiga' Seth cerro uno de sus ojos para apuntar mejor y cuando estaba a punto de lanzar su lanza hacia la ardilla, un rayo rojo salió disparado desde el otro lado del bosque que no solo atravesó a la ardilla si no que el rayo era tan potente que básicamente pulverizo el cuerpo entero de la ardilla dejando solo una cola sin cuerpo y humo que crecía desde el suelo en un círculo desprovisto de pasto.

La cara de Seth se derrumbó cuando vio los sucesos de la muerte de la ardilla sin que el pudiera hacer prácticamente nada.

Sin embargo la llegada del golem no lo asusto, no. Seth estaba completamente furioso.

"¡Tu maldito bastardo!, ¡Lo hiciste a propósito!"

Seth vio como desde atrás de uno de los árboles se asomaba el mismo golem de siempre y se quedaba en silencio mientras lo miraba fijamente, o eso pensaba Seth al ver la gema roja incrustada en su cabeza.

"Ahora no me importa si muero, ¡Pero juro que por lo menos te llevare conmigo, maldito hijo de puta!"

Seth se mordió el antebrazo causando que su sangre brotara antes de convertirse en relámpagos que rodearon sus piernas y su lanza de madera.

Seth corrió a la velocidad que su piernas imbuidas en relámpagos se lo permitían, hacia el golem que estaba a unos 20 metros de él.

El golem no se quedó quieto y comenzó a disparar rayos desde su posición.

Seth esquivo los rayos sabiendo que cualquier golpe seria mortal, recordando los eventos de su primer encuentro con el golem y la pobre ardilla que fue pulverizada literalmente hace escasos momentos.

Gracias a su velocidad, Seth logro esquivar por poco lo rayos varios rayos que se interponían en su camino. Pero aun con su velocidad, los rayos seguían siendo demasiados rápidos.

Si no fuera Seth si no otro cualquier bautizado que se enfrentara al golem, seguramente no lograría esquivar los rayos antes de morir y ni siquiera ver como paso.

Seth incluso se vio obligado a usar relámpagos en sus ojos para evitar con más precisión los rayos ya que aun a simple vista eran difíciles de seguir con la mirada.

Habiendo cerrado casi la mitad de distancia entre el golem y el en un solo instante, Seth ya había esquivado por lo menos más de 10 rayos.

Los rayos no solo eran potentes sino que la cadencia de disparo del golem era increíblemente rápida.

Pero nada de eso importo y Seth continuo hacia el golem, mientras dejaba que varios rayos le impactaran superficialmente con tal de no dejarse detener.

"¡Toma esto!" Seth lanzo un ataque con su lanza hacia adelante mientras apuntaba al gran cristal rojo en la cabeza del golem.

Sin embargo el golem lejos de quedarse quieto y dejarse impactar por el ataque de Seth, levanto sus brazos de piedra en forma de cruz y detuvo la lanza.

Seth siempre se había enfrentado a enemigos hechos de carne y hueso, y aunque tuvieran armadura que aumentaran su defensa. Un ataque de su arma imbuida de relámpagos era suficiente para atravesar cualquier defensa. Sin embargo cuando su lanza impacto contra los brazos del golem, todo lo que paso fue que su lanza estallo en mil pedazos, dejando a Seth con solo un pedazo de madera roto en la mano.

El golem y Seth solo se quedaron quietos como si el tiempo se hubiera detenido.

"Oh…esto…no se ve bien" El golem no espero más y con su brazo derecho lanzo un golpe hacia el abdomen de Seth

Usando todo los relámpagos para cubrir su único brazo, Seth trato de cubrir su estómago ante el golpe del golem que lo mando a volar varios metros antes de que chocara con el tronco de un árbol.

"Blerghhh" Seth vomito todo lo que había desayunado por culpa del golpe del golem. Ese golpe no solo lo había mandado a volar sino que también le había roto un par de huesos en el brazo, dejándolo inservible.

Sin poder levantar el brazo, Seth se limpió la boca con la capa de piel que aún se mantenía firme amarrada a su cuello.

"Aun no…" reuniendo todos los relámpagos restantes en sus piernas, Seth supo que solo podía dar un ataque más antes de quedar completamente agotado. En cambio el golem estaba perfectamente bien.

Seth no podía percibir un aura del golem, lo que lo llevo a sospechar que el golem estaba por lo menos dos rangos más alto que él. Posiblemente un iluminado.

Pero a Seth no le importo nada de esto, él estaba preparado para morir pero no antes de darlo todo contra su oponente.

"¡Vamos!" Seth comenzó a correr de nuevo hacia el golem, sin embargo no dio más de 10 pasos cuando giro la cabeza instintivamente sintiendo otro peligro detrás de él.

Logrando ver lo que había detrás de él, Seth no pudo evitar maldecir su mala suerte en silencio.

"Eran dos…" recibiendo un gran golpe en su nuca de un segundo golem que salió de la nada. Seth cayo inconsciente al suelo.