Seth se despertó en un lugar totalmente blanco, confundido, miro a su alrededor en busca de algo.
A un 10 metros atrás de él había un árbol muerto, completamente desprovisto de hojas.
Certificándose que no había nada más cerca de él, Seth se acercó con precaución al árbol muerto. Llegando su base, Seth tuvo que levantar la cabeza para ver bien el árbol. Este tenia por lo menos 10 metros de alto desde la base hasta lo más alto.
Seth bajo la mirada y se enfocó en el tronco. Se podía ver como la madera estaba comenzando a pudrirse y se resquebrajaba por algunos lados.
Seth coloco suavemente la palma de su mano contra la corteza del árbol, sintiendo un sentimiento cálido dentro de él.
Un sentimiento de pertinencia, como si hubiera encontrado algo que había perdido hace mucho tiempo y por fin lo conseguía.
Justo cuando Seth fue a quitar la mano, sintió un corrientazo eléctrico el cual hizo que su cuerpo se sobresaltara un poco, todo su brazo con el cual estaba conectado con el árbol, estaba entumecido.
Sin embargo, Seth no sintió miedo en absoluto, fue como si estuviera creando una conexión con el árbol muerto.
Quitando la mano del árbol, Seth vio como pequeños relámpagos comenzaban a rodear algunas partes del tronco.
Pronto los pocos relámpagos comenzaron a duplicarse hasta que el tronco fue rodeado completamente por rayos.
Seth retrocedió unos pasos por precaución y miro en silencio como se desarrollaba la escena frente a él.
Pasaron unos minutos y los relámpagos comenzaron a desvanecerse, revelando el tronco oculto.
El tronco del árbol había recuperado toda su corteza y las partes que parecían podridas ya no se podían ver, era como ver un árbol perfectamente sano a excepción de que este aun no tenía ninguna hoja.
Seth volvió a acercarse y coloco nuevamente su mano sobre el tronco, esta vez acariciando lentamente la corteza.
Como si el árbol hubiera sentido su toque, otra corriente eléctrica recorrió todo el cuerpo de Seth, esta vez entumeciendo todo su cuerpo y expulsándolo del mundo blanco en donde se encontraba.
Jadeando por sentir todo su cuerpo entumecido, Seth se encontró acostado sobre una cama en una pequeña habitación oscura.
Sintiendo que podía volver a mover sus extremidades mientras el entumecimiento se desvanecía. Seth se acostó sobre el espaldar de la cama y miro su cuerpo vendado.
Todo su cuerpo dolía por las heridas del combate que aún estaba vivido en su mente. Pero aun así, Seth no podía dejar de notar algo extraño en su cuerpo.
'Me siento… ligero' pensó mientras apretaba los puños.
Seth trato de levantarse lentamente y acercarse al único mueble aparte de la cama en la habitación.
Un escritorio viejo junto a una silla estaba junto a la pared al otro lado de la habitación, sobre el cual había una jarra de agua.
'Ohhhh, que refrescante' tomando la jarra y vaciándola en un instante, Seth volvió a dejarla sobre el escritorio y miro el espejo pegado en la pared.
Mirando su reflejo, Seth tocó su pelo negro que le llegaba a los hombros después de varios meses sin mantenimiento. Con su mano derecha rozo la piel cerca de sus ojos recordando los eventos del combate.
Todo su mundo se había puesto en cámara lenta, fue gracias a esto que logro sobrevivir.
Fue gracias a este poder extraño que había podía esquivar el cuchillo que amenazaba por arrebatarle la vida.
Se miro a si mismo al espejo, y viendo su reflejo, noto como en sus ojos azules a veces aparecían pequeños relámpagos.
Notando esto, de repente algo le hablo en su mente.
[Has sido bautizado]
"¿Eh? ¡E-Espera!" como si el mundo no quisiera darle tiempo para procesar todo, continúo hablando.
[Cuando el abismo reinaba, el Dios del rayo fue uno de los primeros en rebelarse contra ellos]
[Sacrificándose por el mundo, el rayo fue desterrado de la existencia, pero su sacrificio fue el nacimiento de una nueva esperanza]
[Eres el nuevo portador del rayo, uno de los seis elementos primordiales del mundo]
[Tienes la capacidad de controlar levemente los rayos]
"¿C-Como?" tratando de procesar toda la información derramada en su cabeza.
Seth cayo sobre la cama sin fuerza.
Mirando al techo recordó las palabras que había escuchado hace unos instantes en su cabeza como si hubieran sido grabadas a fuego en su memoria.
[Eres el nuevo portador del rayo…]
'¿Rayo?, ¿Elementos?, ¿Dios del rayo?, ¿Abismo…?, no entiendo nada" ahora Seth tenia muchas preguntas y por mucho que quisiera preguntarle al mundo las respuestas que necesitaba, no volvió a escuchar nada en su cabeza.
Mientras Seth se mataba la cabeza pensado en todo lo que le había sucedido en una tan pequeño transcurso de tiempo, la puerta de la habitación se abrió con fuerte golpe y un hombre vestido con una armadura ligera hablo fuertemente.
"Prisionero 16, es hora de la comida" esperando en la puerta, el guardia miro a Seth mientras este se paraba y salía de la habitación.
'No se puede pensar con el estómago vacío' pensó Seth mientras seguía al guardia.
Volviendo a caminar por otro pasillo, Seth llego a una gran habitación ruidosa.
"Ayer gane otra vez, ese debilucho ni si quiera logro hacerme retroceder" hablo un hombre musculoso mientras estaba sentado comiendo con otras personas.
"Tch, no he logrado recuperarme de mis heridas todavía" otro hombre hablo.
Por todos lados se podían ver personas sentadas en grupos mientras comían y charlaban entre ellos. Seth miro a su alrededor y noto como el guardia de antes había desaparecido.
También noto que nadie le estaba prestando atención, como si fuera muy normal que una nueva cara llegara.
Todo era parecido a una prisión, sin embargo, todo lo que había escuchado de peleas en bandas y descontrol no se podía ver aquí.
Aunque eran ruidosos, todos se enfocaban en lo suyo sin crear problemas.
Seth camino hacia donde parecía que estaban sirviendo comida, tomando una bandeja y haciendo fila. Vio como algunas personas comían solas y en absoluto silencio, mientras que otros solo yacían sentados en algunas mesas en los extremos de la habitación mirando directamente a la nada.
Cuando llego su turno de recibir su comida, Seth vio como le daban un pure extraño, un pedazo de pan y un vaso de agua.
'Es mejor que nada…'
Luego, camino hacia una mesa vacía y sentó a disfrutar de su comida, aunque aun sabia horrible, después de despertar tenía demasiado hambre y no se preocupó en absoluto por el sabor.
Mientras mordía el pan duro, Seth se sobresalto cuando alguien puso una bandeja frente a él.
Levantando la mirada, Seth vio a un hombre grande que vestía una camisa blanca como todos los demás prisioneros, una gran cicatriz en la cara y pelo corto bien peinado. Pero lo que mas resaltaba del hombre eran dos orejas de lobo y una cola que colgaba de su cadera.
'Que no sean problemas por favor…'
"¿Estas pensado que voy a causar problemas verdad?" dijo el hombre con una gran sonrisa en la cara.
'Vaya…' Seth se rio internamente.
"Algo así" dijo tranquilamente.
"Esta bien, todos piensan como tu al principio ¡JAJAJAJA!" el hombre se rio a carcajadas mientras Seth lo miraba extrañamente.
"Solo quería hablar contigo por el gran espectáculo que montaste, prisionero 16"