POV LARA
Hoy era el día que llegaba la madre de Cameron, pero tuve que irme pronto por la mañana para arreglar un par de cosas con el equipo y como sería lo que quedaba de nuestra temporada.
En este momento estaba sentada en la sala de conferencias en Manchester y preguntándome que mierda hacía aquí cuando no tendría que estar aquí hasta dentro de dos semanas más. Mi representante estaba asintiendo a todo lo que estaba diciendo, pero yo en este momento no podía estar más descentrada que otra cosa, quería estar en casa, que es el lugar en el que debería estar en este mismo momento.
"¿Lara?" preguntó uno de los dirigentes, por decirlo de alguna manera, de nuestro equipo "No sé qué es lo que coño habéis dicho, y ya os adelanto que yo debería estar en mis vacaciones y no sentada en esta sala."
"Lara, tienes que entender…" empezó otro de ellos, pero elevé la mano para que se detuviesen "No tengo que entender nada. Para empezar ya no sé ni por qué vine. ¿Acaso a vosotros os gustaría que os molestasen en vuestras vacaciones? No hace falta que me contestéis, porque sé la respuesta a esa pregunta. Asique para la próxima que molestéis en mis vacaciones os adelanto que no pienso aparecerme."
"Lara…" volvió a intentar el mismo hombre "Lara nada. Estoy harta de que penséis que por ser mujer no sé qué se hace, porque os puedo asegurar, sé más que la mitad de personas que estáis aquí sentados y que solo os preocupa los números que haga el equipo." aseguré enfadada.
"Para algo somos los que mandamos." dijo otro arrogantemente, haciendo que estuviese de peor humor "Podéis ser mis jefes y lo que queráis, pero no teneis ni la menor idea de lo que pasa en el box. Solo dais dinero esperando recibir más a cambio cuando el resto de las personas que estamos allí curramos para ganar carreras."
"Somos nosotros los que te pagamos." volvió a decir el mismo estúpido "Y somos nosotros quienes conseguimos el dinero con el que nos pagamos a nosotros mismos y a la misma vez el que ganáis para vosotros. ¿Acaso no os dais cuenta de quien tiene las de perder en caso de que dejemos de querer trabajar para vosotros?"
"Y por eso ningún equipo querría ter a una mujer de piloto." bufó, y mi enfado aumentó más si era posible "Pues echadme si es lo que queréis. Eso sí, nadie os asegura que lo que se haya dicho hoy aquí no salga a la prensa, ni mucho menos los pagos que se hacen para que mi coche no esté al cien por ciento."
"Eso es la tontería más grande que pudiste decir." dijo el tipo riéndose "No lo es. De no ser porque yo y MIS mecánicos revisamos el coche antes de cada clasificación y carrera, nunca quedaría donde estoy."
"Unos mecánicos que pagamos nosotros." aseguro el gilipollas "Pero unos mecánicos de mi confianza." aseguré "No quiero saber cómo te ganas su confianza." dijo con una sonrisa maliciosa en su rostro "¿De qué mierda hablas?" pregunté, a pesar de que ya me podía hacer una idea de lo que estaba hablando "Solo hay que ver como tienes a Edwards comiendo de tu mano."
"¿Acaso estás insinuando que me acuesto con todo lo que se me pone delante?" pregunté atónita de que lo estuviera insinuando "Eso es justo lo que estoy diciendo." aseguró con su sonrisa arrogante "No me lo puedo creer… Sam, ¿Qué me pasaría si termino con este contrato a final de temporada?"
"En principio tendrías que pagar una cantidad de dinero por los dos años de contrato que te quedan." dijo y asentí, porque eso es algo que podía hacer "Bien, pues que se haga." dije empezando a levantarme de mi silla para salir de aquí "¿Acaso piensas que otro equipo te querrá que no sea el nuestro?" preguntó el mismo estúpido "¿Sam?" pregunté girándome levemente en su dirección "Tienes ofertas de otros equipos, Herlitz y Collen los que más te convienen."
"Ahora si me disculpáis, me largo. Sam, arregla todo con estas personas, …" Iba a salir de la sala cuando una mujer entra en esta. En este momento estaba más enfadada que otra cosa, y estaba casi fuera de la puerta cuando esta ma agarra del brazo.
"¿Puedes quedarte un segundo?" preguntó la mujer "No pinto nada aquí, al final me dejaron claro lo que piensan de mí y no pienso trabajar en un lugar así." le aseguré, y esta se giró en la dirección a estes con una gran sonrisa en su rostro "Chicos, estáis despedidos."
"¿Quién coño te crees para despedirnos?" preguntó el tipo más estúpido que me había cruzado en los últimos años "Vuestra jefa, y no quiero que ella se vaya de mi equipo, asique largo." dijo señalando a la puerta "Nuestro jefe era un hombre la última vez que lo comprobé."
"Hasta que te lo follaste debo suponer, porque déjame decirte que esto es lo que me dejó él al divorciarnos." aseguró y me quedé mirando para ella sin entender nada "Si claro, y yo me lo creo." bufó otro "Lo puedes hacer, pero largo de mi edificio, no quiero que volváis a pisarlo."
La mujer pasó unos papeles a los señores eses y estes una vez leído, levantan la vista en la dirección de ella y se podría decir que la miraban con arrepentimiento. "Esto no…" empezó el estúpido que se había atrevido a decirme esas cosas "No nos despida… Por favor…" rogó otro.
"Eso haberlo pensado antes de hablar como le hablasteis a ella. Ahora largo, y no volváis o llamo a la policía. Lara, te pido que te quedes, por favor." Miro en la dirección de Sam, porque en este momento estaba más que confundida que otra cosa, y por si cara, él también lo estaba. Mientras esos tipos salen de la sala, la mujer estira su brazo en la dirección en la que estaba antes sentada. Sam asiente y yo acabo por hacerle caso.
"Siento todo lo que te hicieron pasar eses energúmenos." dijo la mujer "No es la primera vez que me lo dicen." dije encogiéndome de hombros, pero eso no implicaba que no me molestase menos "Pero no menos molesto."
"Cierto, mejor dígame de que quiere hablar, porque para empezar no debería ni estar aquí." dije cruzándome de brazos y pasando de sentarme "Lo sé, pero quiero que consideres quedarte con nosotros los años que te quedan de contrato."
"¿En un equipo el cual las personas que lo dirigen no me quieren? Creo que paso." le aseguré, empezando a salir por la puerta "Eso era antes, porque a pesar de que mi exmarido no era como estos energúmenos, no le importaba demasiado la empresa, pero ahora estoy yo, y si me interesa, sobre todo tenerte a ti en el equipo."
"No entiendo." dije con el ceño fruncido "A pesar de que no sé nada de coches, y menos de F1, me gustaría aprender de ellos y quiero que sigas haciendo historia, si puede ser, con nuestro equipo claro está." aseguró la mujer, y cada vez estaba entendiendo menos "¿Qué gano yo con todo esto?"
"Tu seguirás en el equipo, escogerás todo tu equipo de mecánicos y gente del alrededor tuyo, al final esa siempre debió ser elección del piloto en mi opinión, y yo haré todo lo necesario para que, en un principio, no haya esa clase de tipos en nuestro equipo." aseguró y me quedé pensando un par de segundos "Vaya… esto sí que no me lo esperaba."
"Imagino. Este deporte es principalmente de hombres, y contigo en él, estás haciendo una diferencia. Estás demostrando a todo el mundo ahí fuera que una mujer puede ser mejor que cualquier hombre ahí fuera. El sueño de miles de niñas alrededor del mundo puede continuar contigo y ahora Amelia."
"¿Qué gana usted con esto?" pregunté, intentando entender lo que estaba pasando "Yo nada. Quiero que nuestro equipo de la imagen de que cualquiera puede llegar a conseguir sus sueños. Y me gustaría aprender que es este deporte de la mujer que hizo historia en el deporte."
"Cualquier piloto le puede enseñar más de lo que yo puedo hacer." dije sinceramente "Pero yo quiero aprender de la mejor." aseguró con una gran sonrisa en su rostro "No sé qué decir, la verdad."
"No tienes por qué decir nada aún. Solo te pido que al menos estés hasta final de temporada. Con los cambios que se aplicarán en nuestro equipo espero poder convencerte." contestó entrelazando sus dedos en la mesa "¿Y qué cambios serían esos?"
"Incluir a más mujeres en este, ayudar a otras niñas y mujeres a seguir su sueño. Solo te pido que me des hasta final de temporada para mostrarte el empiece de cambio en el equipo." Me lo pensé durante un par de minutos, porque a pesar de lo que habían dicho esos estúpidos, yo estaba bien con el equipo con el que trabajaba, y me molestaría dejarlo, lo admito, sé que este equipo puede llegar a más.
"Está bien, tiene hasta final de temporada para convencerme." dije y esta no tarda nada en levantarse de la silla y venir a mi lado "Genial, y, por cierto, puedes llamarme Serena." dijo "Como quieras, ahora si me disculpa, vuelvo a mis vacaciones."
"Por supuesto, que tengas un buen resto de vacaciones Lara." dijo con una gran sonrisa y estrechando mi mano "Gracias, yo también lo espero." Con eso tanto Sam como yo salimos de la sala de conferencias y nos vamos hacia el ascensor discutiendo mis posibilidades si al final acaban por no convencerme.
"¿De verdad Herlitz me ofreció contrato?" pregunté sorprendida a Sam "Prácticamente todos te quieren en su equipo Lara, por lo que no sé por qué te sorprende." dijo con una gran sonrisa en su rostro "No me lo esperaba, al fin y al cabo, tienen a Cameron."
"¿Qué mejor que tener cuatro títulos mundiales, bueno, mejor dicho, cinco títulos en un equipo?" preguntó y me quedé pensando un par de minutos "Puede ser, no sé." contesté encogiéndome de hombros "También tengo oferta de Collen para cuando se retire Eric."
"Eric tardará en retirarse." le aseguré "Por lo que se rumorea no." rebatió "¿Qué?" pregunté sorprendida "Es lo que se dice, pensé que tu sabrías mejor que nadie." dijo y en mi mente me golpeé, porque Eric no se retiraría sin decirme nada antes "Puede ser, mejor avísame si hay cualquier cambio en el contrato con estos. Esperemos que lo que diga es cierto."
"Parecía convencida." dijo después de unos segundos en silencio "Eso parecen todos hasta que no lo están. Mejor estar atenta a otras ofertas por sea caso." contesté "Te avisaré si hay más y tú me avisas de lo que decidas."
"Está bien, hasta otra Sam." dije estrechándole la mano "Hasta otra, y cuídate Lara." contestó y asentí. Una vez fuera del edificio, me despido de Sam y empiezo a andar en la dirección contraria para despejarme un rato, cuando una mano agarra mi brazo y hace que me gire para ver quién es.
"¿Cameron? ¿Qué haces aquí?" pregunté sorprendida de verlo aquí "Bueno, como mi madre no quería venir a Reino Unido para coger cosas para el resto de la temporada, decidí venir yo a por ellas y así poder verte también." dijo con una gran sonrisa en el rostro "¿Cómo sabías que estaría aquí?"
"Tu hermana me dijo que te habían llamado los jefazos y que tuviste que venir a Manchester para ello, por lo que me decidí pasar. Déjame decirte que tus jefes no son los mejores para haberte llamado durante tus vacaciones." dijo negando y asentí, porque al menos hasta hace unos minutos, eso era cierto "Lo sé, y créeme que me molestó, pero al parecer eso cambió."
"Pareces sorprendida." dijo observándome "Es que lo estoy, solo espero que cambie para mejor." contesté "¿Acaso no es lo que te esperabas del equipo?" preguntó sorprendido "¿Del equipo con el que trabajo cada fin de semana? Si, ellos son los mejores, pero al parecer los jefes pensaban que voy haciendo favores sexuales para llegar a donde estoy."
"¿En serio te lo dijeron?" preguntó y podía notar como su ira aumentaba "Claro que sí, que así es como llamé tu atención al parecer." dije negando "¿Qué? Ahora mismo voy a hablar…" empezó dándose la vuelta para entrar en el edificio, pero antes de que hiciese algo, le cogí el brazo.
"Cameron… Fueron despedidos… no debes preocuparte por lo que digan de mí…" le aseguré, intentando que se calmase "Claro que debo hacerlo… esos tipos son unos gilipollas por pensar eso de ti…" empezó, pero le puse la mano en el rostro, para que centrase su mirada en mí "Lo sé, y aprecio que te preocupes por mí y todo, pero no es la primera vez que me lo dicen."
"Peor me lo pones, no te debieron decir algo así nunca." contestó y asentí, porque sabía que era cierto "Así no es como trabaja esto, te lo puedo asegurar." contesté dejando caer mi mano por su brazo "Dime al menos que esto no interpondrá en mis oportunidades."
"¿De qué oportunidades hablas?" preguntó con curiosidad, porque parecía preocupado por algo serio "De las que pueda tener contigo, de la relación que quiero tener contigo." dijo mirándome a los ojos "Vaya, y eso que solo hace un par de horas que tuvimos nuestra primera cita."
"Puede ser que te suene precipitado, pero en serio que quiero tener una relación contigo. Me gustas Lara, nunca sentí esto por ninguna chica en mi vida, en serio. Me encanta pasar tiempo contigo y siento que cada vez lo que siento por ti es más fuerte… No puedo evitar imaginarme una relación contigo… Y te prometo que haré lo que sea necesario para que nadie te vuelva a decir cosas así… que haré lo que sea necesario para hacerte la chica más feliz…"
Sabía a qué se estaba refiriendo desde un principio, pero me encantaba ver el brillo que sus ojos tenían cuando hablaba de algo que le gustaba, lo que al parecer yo también era una de esas cosas, y lo que describió, yo también lo sentía, por lo que me acerco a él y lo callo con un beso. Sé que nos estábamos besando en el medio de la calle, pero realmente me daba igual, era el mejor beso que había tenido en mi vida, suave y el cual me decía lo que no lograba explicar con palabras.
En el momento que nos separamos, sus manos estaban en mi cadera, mientras las mías estaban en su cuello. ¿El brillo del que hablaba antes? Había desaparecido para uno mucho más brillante si eso era posible. Su sonrisa se ampliaba con el paso de los segundos y yo no podía hacer otra cosa que no fuese devolvérsela.
"¿Acaso no es que no besabas hasta la segunda cita?" preguntó sorprendido, pero podía ver como su sonrisa aumentaba "¿Y quién te dice que no la tuvimos ayer?" contesté devolviéndole la sonrisa "¿Me dejaste con las ganas de besarte? Eres cruel Lara Gallego."
"Lo deberías saber de sobra, meu rei." aseguré riéndome "¿Qué quiere decir eso?" preguntó y volví a mirar para él "¿Meu rei?" pregunté suponiendo que era lo que quería saber "Si, no es la primera vez que me lo dices."
"Significa mi rey, es una manera de decir en casa." contesté "Mmm, me gusta como suena. No quiero imaginar todo lo que puedes decir." dijo más para si mismo que para mí "Te puedo mantener una conversación entera si quieres, pero te aseguro que no tiene nada que ver con el lenguaje especifico que podría usar en otras circunstancias… con menos ropa de por medio…"
"A veces pienso que te gusta jugar conmigo." gruñó y me reí, porque eso era lo más cierto que podía decir "Oh, no sabes cuanto me gusta, meu rei. Ahora mejor vayámonos a por las cosas de tu madre para poder volver."
"¿Y pretendes que ande con lo que despertaste hacia el sur?" preguntó con lujuria presente en su mirada "Deberías, al fin y al cabo, no es la primera vez que lo haces." aseguré con una sonrisa que prácticamente ocupaba todo mi rostro "Me gusta tu juego más de lo que debería."
"Lo sé, ¿por qué piensas que lo hago?" Nos reímos y me quedé delante de él mientras arreglaba su pequeño problema y luego empezamos a caminar hacia lo que parecía un coche, lo que hace que me tense.
"Solo vengo a por unas cosas, luego decides en que podemos irnos al aeropuerto." Realmente no tenía nada que pensar, porque sé que el aeropuerto quedaba a un par de horas caminando, y a pesar de que no tenía problema con eso, también quería llegar cuanto antes a casa, por lo que no me quedaba otra manera que subirme al coche que por lo menos eran de los que corrían.
"No… podemos ir en el coche."" dije, tomando una bocanada de aire "¿Segura? Nos vamos a encontrar con atasco." dijo con tono preocupado "En algún momento tendré que intentar superarlo ¿no? Además, estarás ahí conmigo, sé que no dejaras que me pase nada."
"Eso es cierto. ¿Vamos entonces?" preguntó, cogiéndome la mano y dándome un apretón. Mientras Cameron me dirigía al lado del copiloto, el cual en casa era el lado del conductor, me abrió la puerta, tomé una respiración profunda y me metí en el coche. Después de que cerrase la puerta, no tardó nada en entrar al coche y acelerar por la calle. Para suerte mía no había demasiado tráfico y cuando Cameron notaba que me ponía nerviosa, me cogía la mano y empezaba a hacer círculos con su pulgar, lo que hacía que me calmase un poco. También debo decir que no iba demasiado lento, lo que ayudaba.
Después de una media hora, llegamos al aeropuerto y en el momento que aparcó, bajé rápidamente de este y esperé a que Cameron llegase a mi lado el cual no tarda demasiado.
"¿Cuánto dura el vuelo?" pregunté "Unas dos horas, tenemos suerte de que no tenemos que esperar, el avión nos está esperando." contestó con una gran sonrisa en su rostro "Suerte." dije devolviéndole la sonrisa "Suerte la mía que puedo tener toda tu atención."
"Muy convencido suenas, Edwards." vacilé "No, solo tengo la esperanza de que así sea." respondió "Bueno, pues puede ser que tengas suerte." contesté sin que la sonrisa desapareciese de mi rostro "El tío más afortunado."
"Podría ser, teniendo en cuenta que tienen que meterse conmigo para llamar mi atención…" continué vacilándolo "Ja ja, muy graciosa." dijo sarcásticamente "¿Qué? Es lo que se dice." aseguré, al final, él mismo lo había dicho en la entrevista.
"No sabía que eras este tipo de persona." contestó y me quedé mirando para él "¿Entonces cómo me imaginabas?" pregunté con curiosidad "No sé, siempre me pareciste una chica muy callada, menos… como es la palabra en español…"
"Puedes decírmela en inglés si no te sale." dije riéndome "Sassy." contestó "¿Enserio? ¿Me esperabas menos atrevida?"
"¿Fuera de la pista? La verdad es que no, no lo esperaba." aseguró "¿Qué más esperabas?" pregunté con curiosidad "Que no te gustase hablar de tu vida demasiado. Por lo que pude ver, sé que te gusta escuchar, pero pensé que sería más complicado que compartieses algo de tu vida como lo haces, sobre todo con lo que le pasó a tu padre."
"Me gusta hablar de mi vida, porque al final tengo una familia que me quiere, unos vecinos que me apoyan y un trabajo que adoro, no podría pedir más en mi vida si te soy sincera. Y lo de mi padre… puedes tener claro que no me gusta hablar de ello, igual que a ti no te gusta hablar de lo que le pasó a tu hermana, yo no hablo de lo que le pasó a mi padre y menos cuento que no soy capaz de subirme a un coche que no vaya a trescientos por hora… Hay ciertas cosas que no se tienen por qué saber."
"¿Por qué me lo contaste entonces?" preguntó, curiosidad evidente en su voz "¿Después de que me vieras como me viste me hubieses creído cualquiera cosa que te dijese?" pregunté, sabiendo cual iba a ser la respuesta "De no haber escuchado a Bianca y Eric buscando por tu móvil como locos y a el segundo preguntando si era por lo mismo de siempre, hubiese creído que solamente tenías ansiedad."
"Pero sabías eso, por lo que lo que te dijese no te iba a convencer fácilmente. Y después de que me ayudases creo que valía la pena que te lo contase." contesté "Me alegra haber estado ahí para ti."
"Y aunque no lo pareciese en un principio, a mí me alegra que estuvieses allí. Lo que me hace preguntarme ¿Qué hacías en el hotel?" pregunté intentando entender que es lo que pasó ese día para que él estuviese ahí "Oh, eso, Eli se estaba quedando en ese hotel porque en el nuestro no tenían sitio para ella. Iba a buscarla para ir a la gala juntos."
"Eli es alguien importante para ti ¿verdad?" pregunté, pero sabía lo que me iba a contestar "La que más. Su madre es francesa y cuando ella era pequeña, decidió venirse a Londres para pasar tiempo con sus padres. Éramos vecinos de ellos y tanto yo como mi hermana salíamos a jugar cuando nos la cruzamos."
"Y desde esa quedasteis como los mejores amigos." dije asintiendo "Si. Ella decidió hacerse fisio mientras yo quería llegar a la F1 como fuese." respondió "¿Cómo acabó trabajando para ti?" pregunté de nuevo "Seguíamos en contacto, y una vez Ellie me dijo que había terminado la carrera, la llame para que fuese mi fisio. Mejor tener a alguien en quien confiar que a nadie."
"Eso es cierto." Entramos en el avión y nos sentamos el uno frente al otro. Hacía tiempo que no estaba tan contenta de estar con alguien que no fuese mi familia o mis amigos cercanos. La verdad se sentía genial.
Después de unos minutos, nos abrochamos el cinturón para el despegue, y luego de unos diez minutos, los sacamos y Cameron se levantó a la nevera para cogernos unas botellas de agua.
"¿Nunca llevaste a tu hermana contigo durante la temporada?" pregunté y él asintió con una sonrisa en su rostro "Oh, créeme, la llevé, siempre estaba conmigo desde que había empezado F1. Decía que esa era su manera de evitar que me fuese con toda tía que se me pusiese delante y mantenerme con los pies en la tierra."
"Pues se ve que hizo un gran trabajo contigo. Me hubiese gustado conocerla." aseguré "Créeme, de haberte conocido, habría perdido a mi hermana del infarto que le daba con el simple hecho de verte delante."
"¿Por qué?" pregunté, confusa "Mi hermana era una gran fan tuya. Nunca la había visto emocionada por lo que hacía, pero en el momento que apareciste se la veía emocionada. Es más, a pesar de que estaba en mi box escuchando mis radios, siempre podía escuchar donde estabas, no callaba."
"Eso me hubiese encantado verlo." dije riéndome "Seguro que sí, y ahora que lo pienso, en personalidad te pareces bastante a ella." aseguró "¿Y eso es algo bueno o malo?" pregunté "No hay nada malo en ti Lara, y al menos podré recordar a mi hermana por el simple hecho de como eres."
"Entonces genial, ahora seré yo la que te mantendré con los pies en la tierra." respondí sonriendo "¿También harás que no me tire a todo lo que se me ponga delante?" inquirió, y sabía que no estaba diciéndolo en serio "¿Acaso necesito hacerlo?" pregunté elevando una ceja.
"No, la verdad es que no." dijo sin que la sonrisa desapareciese de su rostro "Eso pensaba yo." respondí "¿Qué te parece si luego de recoger las cosas de mi madre tenemos una segunda cita?"
"Solo hace un par de horas que tuvimos nuestra primera cita." dije, pero realmente no me importaba "¿Acaso existe alguna regla que diga que no se puede tener la segunda cita después de unas horas de la primera?"
"Vale, vale, está bien. Podremos tener esa segunda cita. Lo que no te prometo es que haya beso." dije vacilándolo "Entonces tendré que encargarme de conseguirlo. No podría vivir un minuto más sin tus labios."
"¿Acaso no tienes una frase menos escuchada?" pregunté riéndome "Tengo, pero me las guardaré para más tarde. Será mi manera de conseguir mi beso." aseguró y me reí más si era posible "¿Acaso les dices eso a todas las mujeres?"
"Solo a las que me atraen." dijo sonriente "Entonces a todas." dije riéndome "Te equivocas, solo a una." respondió con una gran sonrisa, pero sabía que estaba hablando en serio "Vaya, pues que chica más afortunada."
"Lo es." El resto del vuelo lo pasamos hablando de todo, y una vez aterrizamos, Cameron se levantó y extendió su mano en mi dirección, la cual terminé por coger. Bajamos del avión cogidos de las manos y salimos del aeropuerto.
"Espero que no te moleste una hora de caminata." dijo Cameron "No lo hace, pero ¿por qué lo haces?" pregunté, haciéndome una leve idea de la razón "Creo que ya fue suficiente por hoy enfrentarte a tu miedo ¿no crees?" preguntó y negué, porque a pesar de que podía ser cierto, no implicaba que lo tuviese que hacer "No necesitas hacerlo."
"Pero quiero que estes cómoda, por lo que sí, necesito hacerlo. Además, no me molesta tener que andar durante una hora la verdad, mientras sea contigo a tu lado." aseguró "Y yo pensando que ibas a dejar tus frases…"
"Dije que no te diría las que nunca escuchaste no las otras." aseguró "Tienes razón, no lo dijiste." Y con eso empezamos a caminar por las calles de Londres, sin separar nuestras manos en ningún momento. Espero poder hacer esto más veces en un futuro con él la verdad.