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Chapter 25 - CAPÍTULO 24- La abuela de Kei.

CAPÍTULO 24- La abuela de Kei.

¿Cómo funciona el sistema de poder mágico en este mundo? Es sencillo. Al nacer, las personas heredan la magia de sus madres o abuelas. Y la magia se mejora con los puntos que se obtienen al derrotar monstruos y enemigos más poderosos. Los puntos varían dependiendo del peligro que representan los monstruos para la persona. Si una persona débil derrota con mucha dificultad a un simple duende, recibe por ejemplo 100 puntos, pero si una aventurera de clase S lo derrota, no recibe nada, debe derrotar 50 duendes para recibir un solo punto.

Con cada 10,000 puntos, el estatus mejora, dependiendo de la configuración del estatus. Kei tiene programado su estatus para usar sus puntos para mejorar más sus puntos de vida y su poder mágico, a comparación de su fuerza, agilidad e inteligencia, que las mejora con entrenamiento físico y estudiando.

Los nobles poseen la mejor afinidad mágica. Ellos pueden conseguir más puntos y mejorar más rápido a comparación de los plebeyos. Los plebeyos deben esforzarse el doble o triple para mejorar, por eso las familias nobles son muy respetadas.

En este mundo, la belleza y el poder son muy importantes, es por eso que los nobles se esfuerzan para ser guerreros poderosos... Bueno, solo las mujeres nobles. Los hombres nobles se encargan de administrar los negocios y tierras, o simplemente son envíados a otras familias nobles más importantes para ser esposos de alguna mujer importante. Básicamente, esclavos sexuales y caras lindas.

En este mundo, comúnmente, las personas solo pueden usar uno o dos atributos de magia, pero existen pocas personas capaces de usar más de 3 atributos de magia.

Reima Molfer, la madre de Sei Molfer, era famosa por su perfecto control de la magia. Puede usar todos los atributos de magia. Sei Molfer solamente puede usar 7 atributos de magia.

Es por eso que la familia Molfer es famosa.

—¡Uwaaaah!

Kei fue golpeado por el enorme puño del Rey Orco y salió volando, pero logró mantener el equilibrio y aterrizar en el suelo.

El Rey Orco comenzó a reír mientras que las piernas de Kei temblaban, pero solo tiemblan por el cansancio. El rostro de Kei no refleja miedo, refleja alegría y confianza, pues tiene una sonrisa en su rostro.

—Vaya, vaya...

Kei le dio una lamida a la herida que tiene en su brazo derecho, saboreando su propia sangre, mientras sus ojos analizan las heridas que le provocó al Rey Orco con su espada.

Solo tiene dos heridas bastante visibles, y se ubican en los hombros del Rey Orco, las demás son más pequeñas y no sangran tanto como las heridas de los hombros.

—Ya veo... El punto débil son sus hombros. ¡Drin, usa magia de agua y oscuridad!

Drin estaba usando un arco mágico para disparar flechas mágicas que ella misma creaba, distrayendo al Orco mientras Kei lo atacaba. Gracias a eso, Kei tuvo tiempo suficiente para atacarlo en varias partes del cuerpo, buscando los puntos débiles.

—¡Claro, cariño!

Prepara su arco y una flecha mágica apareció.

La punta de la flecha estaba rodeada por un líquido negro. Magia de agua combinada con magia de oscuridad.

Mientras ella se preparaba, Kei estaba luchando con el Rey Orco.

Estaba muy agotado y el Orco prácticamente estaba ileso.

Kei protege su cuerpo con magia, así que casi no estaba herido, solo tiene pequeñas heridas en sus brazos y rostro, pero nada grave. ¿Por qué no usa armadura? Su magia lo protege mucho mejor. Las armaduras las usan las personas que no saben usar magia en sus propios cuerpos, pero en la familia de Kei son expertos en ese tema.

El Rey Orco rugió furioso e intentó golpear a Kei.

Él esquivó el puño agachándose y miró a los ojos al Rey Orco, furioso.

—¡Te apesta la boca! ¡¿No conoces los cepillos de dientes?!

El Rey Orco juntó sus manos e intentó aplastar a Kei, pero él de nuevo esquivó el ataque.

—¡Tú no eres el jefe final! ¡No perderé contigo!

Kei saltó y el Rey Orco intentó golpearlo en el aire.

Kei usó su magia de viento para impulsarse otra vez y saltar. Es como usar el salto doble en un videojuego.

Gracias a ese doble salto, Kei esquivó el ataque del Rey Orco.

—¡¡Ahora!!

Una flecha disparada por Drin atravesó por completo el hombro izquierdo del Rey Orco y él comenzó a gritar de dolor, dándole a Kei un par de segundos de ventaja.

Kei tomó su espada con ambas manos.

—¡Ataque final! ¡Ataque Dragón!

Kei usó todo su poder mágico para mejorar el ataque de su espada.

Usando todo su poder mágico y su fuerza, Kei atravesó el pecho del Rey Orco con su espada, destruyendo su corazón.

—¿Eh? ¡¿Lo logré?!

Kei no podía creer que su plan funcionara... Aunque el Rey Orco no se rendía todavía.

El Rey Orco golpeó fuertemente a Kei con su puño y lo aplastó contra el suelo.

—¡¡Cariño!!

Antes de morir, el Rey Orco siguió golpeando fuertemente a Kei con sus puños.

—¡Cariño!

Drin se apresuró e intentó rescatar a Kei, disparándole una última flecha al Orco, que atravesó el hombro derecho del Rey Orco.

Al Rey Orco no le quedaba fuerza ni energía. Dejó de golpear a Kei y cayó al suelo, muerto.

Por supuesto, como Kei ya no tenía poder mágico, no pudo proteger su cuerpo de los ataques que estaba recibiendo, pero afortunadamente, los primeros golpes que recibió no fueron tan peligrosos, pues al quedarse sin corazón, la fuerza del Orco disminuyó en gran medida, pues usaba su poder mágico para mejorar sus puños, mejorando su fuerza, pero al quedarse sin corazón, ya no podía seguir usando magia, pues sin el corazón, no se puede usar magia.

Aunque los golpes que recibió fueron menos poderosos, eso no significa que Kei no sufrió daños.

Tiene los huesos rotos, sus pulmones fueron perforados por sus huesos, no puede respirar, está perdiendo demasiada sangre y su visión es borrosa. Un humano normal ya estuviera muerto, pero Kei tiene un cuerpo fuerte y es capaz de resistir ataques poderosos.

[Puntos de vida restantes: 17.]

—¿17 puntos de vida? Vaya, vaya... E-eso estuvo cerca.- Dijo Kei. Su voz apenas se podía escuchar.

Si pudiera llorar o gritar de dolor, él lo haría. Está sufriendo demasiado. Kei está muy acostumbrado al dolor, pero eso no significa que le guste sentirlo. Gracias a que está acostumbrado al dolor, puede moverse y seguir peleando mientras su cuerpo sufre, pero eso nunca quitará el hecho de que Kei sufra dolor y no le guste.

—¡Magia curativa!- Dijo Drin, acariciando el pecho de Kei.

Un brillo rojo rodeó a Kei y sus heridas están desapareciendo rápidamente, pero eso solo duró unos segundos.

El brillo desapareció y Drin cerró sus puños con fuerza. Está frustrada. Ya no tiene poder mágico y se siente una inútil, pero Kei le acaricia las manos, para tranquilizarla.

—No... te preocupes, Drin.

Kei levantó lentamente su mano derecha y 10 pociones mágicas aparecieron frente a él. Las pociones son frascos con líquidos rojos. Son muy caras, pero efectivas. Solo un noble puede darse el lujo de comprarlas.

—D-debo tomarlas rápido...

Sin perder el tiempo, Drin tomó una de las pociones y la abrió.

—Lo siento, me quedé sin poder mágico, cariño.

Le ayudó a Kei a beber las pociones.

Kei bebió las 10 pociones y se levantó del suelo, como si nada le hubiera pasado.

Todas sus heridas se cerraron y dio una voltereta hacia atrás para celebrar.

—¡Me siento mucho mejor! Debo comprar más pociones curativas. Te lo dije, Drin. Aunque tengamos magia curativa, debemos tener pociones mágicas de emergencia.

—¡Eres muy inteligente, cariño! ¡Nunca dudaré de ti otra vez!

—Bueno, aunque tener pociones mágicas es muy común.- Pensó Kei.

—Pero las pociones son muy caras... Y recibiremos muy poco dinero.

—No te preocupes, Drin. Las pociones valen 1,000 monedas de oro cada una, y ganaremos solamente 10 monedas de oro por hacer esta misión. Pero recuerda, Drin, no hacemos esto por dinero, lo hacemos por la fama. Aparte, mi familia es una de las más ricas del país. Y mis dos prometidas pertenecen a familias más ricas que la mía. Si nos quedamos sin dinero, simplemente puedo pedirles prestado.

—Es cierto. Fufu. Me gusta tu forma de pensar, cariño.

—Creo que mi poder como protagonista es tener buena suerte. Solamente me quedaban 17 puntos de vida. Realmente tengo mucha suerte... Aunque preferiría ser más poderoso.

—Por cierto, las aventureras se acercan. Puedo escucharlas.

—Gracias. Voy a guardar la espada y cambiarme.

Por cierto, las pociones que tomó Kei son muy caras, pero son de alta calidad, es decir, son muy efectivas. En otras palabras, objetos tan ridículamente caros, que solo familias de élite como la de Kei saben en dónde comprarlas.

Las aventureras observaron sorprendidas los cadáveres de los Reyes Orcos, mientras Kei y Drin comían en el suelo, intentando recuperar energía. La magia de transformación no usa demasiada energía mágica, así que pueden usar esa magia incluso estando muy debilitados.

—¡¿Realmente los vencieron?!

—¡Son muy poderosos!

—¡Quería verlos pelear! ¡Llegamos tarde!

—¡Nia, Crisfa, son increíbles!

Kei, en su forma como aventurero, se acercó a ellas junto con Drin, que estaba usando su forma como aventurera.

—Yo derroté a la Reina Orco, y Nia derrotó al Rey Orco. Bueno, guardaré los cadáveres. Vámonos.

Las aventureras estaban teniendo un día normal y tranquilo en el gremio, pero esa tranquilidad terminó cuando "él" llegó.

—¡¡¿En dónde está la empleada que pensó que yo no podría derrotar a un monstruo de clase A?!! ¡¡Trae tu trasero para acá, me quiero burlar de ti!! ¡¡Aventureras que se rieron de mí, pónganse en fila y llámenme "papi Crisfa"!!

Al entrar al gremio, Kei gritó eso.

Kei se estaba muriendo de la vergüenza por decir eso, pero eso es algo que Crisfa, su personaje, diría, y eso lo va a diferenciar de Kei Molfer.

Drin lo jaló de la oreja, aunque le dolió hacerlo. Solo lo hizo porque Kei le dijo que lo hiciera.

—No tenemos tiempo para eso, Crisfa.

—Ah, es cierto. ¡¡Maestro del gremio, venga!! ¡¡Terminamos una misión de clase A en tiempo récord!! ¡¡¿En dónde está mi premio?!!

—Oye, Crisfa, no es necesario gritar.- Dijo el maestro del gremio.

Ella se acercó a Kei y cruzó los brazos.

—¿Tienes evidencia de lo que dices?

—Fufu. Por supuesto, linda. Y dile a tu empleada que quiero una disculpa escrita y grite por las calles: "¡¡Crisfa es el mejor!!" Si no es mucha molestia.

Kei cruzó los brazos y comenzó a reír.

—¡¡Hoy da inicio a la leyenda del Dios Crisfa!! ¡¡Deberían comenzar a rezarme!! ¡¡Chicas, les doy permiso para que se enamoren de mí, pero les aviso que mi corazón le pertenece a la comida!!

—¡¡¿Quién en su sano juicio se enamoraría de ti, ridículo?!!- Le gritó una aventurera.

—¡¡Tu madre!!

—¡¡¿Quieres pelear?!!

—Nop, no quiero lastimar a la hija de la mujer que amo.

—¡¡Desgraciado!!

Una aventurera saltó sobre él y comenzaron a pelear, aunque Kei simplemente está esquivando sus ataques.

—Wow, hija, casi puedes tocarme. Ah, los niños, crecen tan rápido.

—¡¡Estás muerto!!

El maestro del gremio suspiró y les dio un golpe en la cabeza a ambos.

—¡Kya! ¡Me dolió!- Dijo Kei, quejándose, pues su cuerpo sigue adolorido.

—Deja de perder el tiempo y ven conmigo.

—Sí, sí.

Kei volteó a ver a la aventurera y le guiñó un ojo.

—Adiós, hija. Me saludas a tu mami.

—¡Más te vale vigilar tu espalda!

—Uy, que amenazante sonó. ¿Estás en tu etapa de rebeldía?

Drin lo volvió a jalar de la oreja y lo obligó a caminar.

—Deja de perder el tiempo.

—P-perdón, Nia.

Kei y las chicas siguieron al maestro del gremio, y la aventurera chasqueó la lengua frustrada y regresó a su mesa, junto con sus compañeras.

—Tsk. Que hombre tan molesto.

—Es un chico bastante ridículo.

—Aunque es muy gracioso.- Dijo una chica hada, hablando muy bajo.

—¿Gracioso? ¿Lo llamaste "gracioso", Angmia?

—S-sí. A-a mí me pareció un chico divertido.

—Tsk. Es solo un asqueroso insecto.

—¡I-increíble!

Mirkia estaba observando los cadáveres de los Orcos y de los Reyes Orcos, mientras Kei y Drin cruzan los brazos con orgullo.

Kei y las aventureras se reunieron con ella en la parte trasera del gremio, en donde los cadáveres de los monstruos se guardan.

La carne de algunos monstruos es comestible, así que el gremio guarda los cadáveres en este lugar para luego vender su carne.

—¡A partir de ahora, todas ustedes serán aventureras de clase D!

Un gran salto de la clase F a la clase D, considerando que es el primer día de todos ellos.

Para subir a la clase D solo se necesita obtener logros como derrotar monstruos de clase B y A, por lo que no tuvieron dificultades para subir, pero para subir a la clase C, B, A y S, deben cumplir con ciertos requisitos, y solo se les da la oportunidad a aquellos que el maestro del gremio piensa que se lo merecen.

Las aventureras festejaron su logro y Kei simplemente bostezó, mientras se moría de la vergüenza por dentro.

—¡¡Uwaaaah!! ¡¡¿Por qué tuve que diseñar a mi personaje con esa personalidad tan rara?!!- Pensó.

Suspiró y tomó de la mano a Drin, sorprendiendo a Drin, que se sonrojó al sentir la suave mano de Kei.

—Nia, vámonos. Chicas, recojan la recompensa, mañana me dan mi parte. Necesito descansar.

—¡Espera! Queremos festejar con ustedes.- Dijo Kiana.

—Gracias a ustedes, nosotras somos aventureras de clase D.- Dijo Nerfa.

—Lo siento, pero necesito descansar... Mañana hagan otra fiesta. Realmente necesito descansar.

Drin las observó con una mirada intimidante, activando su sed de sangre.

—Él casi muere. Necesita descansar.

Todas comenzaron a temblar de miedo y Kei le acarició la cabeza a Drin.

—No te enojes. Vámonos.

—¡S-sí!

Mirkia estaba observando demasiado a Kei, bastante feliz, pues se dio cuenta de que Kei es más poderoso de lo que imaginaba.

—Según el informe, Kei derrotó a la Reina Orco... Realmente es el hijo de Sei Molfer.- Pensó sonriendo.

Kei, en su forma normal, entró a su casa. Drin, en su forma como gato, estaba en su cabeza.

—Buenas noches. ¿Ya está lista la cena? Me muero de hambre.

Una mujer parecida a Sei Molfer, pero más mayor, se acercó a Kei.

Parece una mujer de 50 años, aunque tiene más años de los que aparenta.

—Bienvenido, Kei.- Dijo la mujer, sonriendo diabólicamente.

Al escuchar su voz, Kei comenzó a temblar de miedo.

—¿P-por qué ella está aquí? ¡Debo escapar!

Kei estaba a punto de irse corriendo, pero ella lo atrapó y lo abrazó con fuerza.

—Te extrañé, Kei.

—¡¿Es un enemigo?! ¡¿Un pariente malvado?!- Pensó Drin.

La mujer comenzó a darle besos en la mejilla a Kei.

—¡Sigues igual de lindo, Kei!

Su personalidad cambió. Parecía una mujer malvada y tenebrosa, ahora parece una mujer buena y amable.

—H-hola, abuela.

—¡¿Es la abuela de Kei?! ¡¿La legendaria Reima Molfer?!- Pensó Drin, sorprendida.

(Nota del autor: Esta historia pertenece al universo de "Humanos Contra Demonios". No es necesario leerla, pero se las recomiendo, pues la historia es mucho mejor. Si te gustan los Isekai, te va a encantar. Dejen comentarios, plox. :,v)