CAPÍTULO 4- Seducir mujeres modo +18
Kei y Mei están caminando juntos por un pasillo. Mei está sonriendo, tan alegre como siempre, pues su querido hermano y héroe personal está a su lado, pero Kei está completamente rojo y está mirando el suelo.
Él actuó genial frente a todas sus compañeras de clases, pero solo era una actuación. El verdadero Kei nunca haría algo como eso, pues le da vergüenza, e incluso piensa que da pena ajena.
Kei es un chico con naturaleza tímida, que prefiere no resaltar, pero por motivos de su misión, debe dejar atrás esa naturaleza y actuar como si fuera otra persona.
—¿Eh?
Mei se da cuenta de que Kei está temblando nervioso y acaricia la cabeza de Kei.
—¿Qué pasa, hermano? ¿También te sientes mal?
—D-debo ir al baño. Espérame en el comedor... Y cómprame una hamburguesa.
Kei se aleja corriendo.
—Mierda, mierda, mierda, mierda...
Entra al baño y comienza a lavarse las manos en el lavamanos.
El baño es "normal". Este mundo parece medieval, pero está muy avanzado. No hay electricidad, pero este mundo está muy avanzado.
Es tan diferente a la edad medieval del mundo de Kei. La compra de esclavos es legal y no es raro ver a personas matándose entre ellas en duelos, pero dejando de lado esos comportamientos salvajes e inhumanos, el mundo está avanzado en cuanto a la higiene se refiere, como el uso de agua purificada, los baños privados y el uso de redes de agua potable para el uso personal.
—Me vi genial... Todas me respetan... Pero... Pero...
Se lava la cara y toma aire.
—Soy tímido... No puedo acostumbrarme a esto...
—Fufu. Vaya, vaya.
La profesora entró al baño y se acerca hacia Kei.
—Y pensar que los rumores eran ciertos.
—¿Eh?
Voltea a verla confundido.
—Profesora, el baño de las mujeres está al lado.
—Lo sé.- Dijo sonriendo.
Kei siente un escalofrío al ver esa sonrisa, pero ya es demasiado tarde para escapar.
Los ojos de la profesora se vuelven completamente rojos. Su piel se vuelve roja y le crece un cuerno en su frente.
Una cola negra salió de ella. Cola que comenzó a acariciar el rostro de Kei, que estaba tan asustado y confundido por la situación, que no sabía qué hacer.
—Ven conmigo, Kei.
Kei recuperó la cordura, se aleja de ella rápidamente y se pone en guardia.
—U-un demonio... Ya aparecieron.
La razón por la que Kei estaba tan asustado, no es por el poder de la demonio que estaba parada frente a él, él estaba asustado porque la presencia de esa demonio significaba que el Rey Demonio iba a aparecer pronto. Los demonios son seres desconocidos para Kei y, aunque Kei tenga mucha experiencia en cuanto a batallas, tiene 0 experiencia con demonios, así que no sabe exactamente lo poderosos que pueden llegar a ser o sus maneras de luchar.
Aparte, un demonio se infiltró y logró convertirse en una profesora en una escuela de élite, lo que significaba que logró burlar la seguridad y engañar a los altos mandos de la escuela. La profesora era un enemigo peligroso y misterioso, así que Kei no ha parpadeado desde que ella reveló su identidad, pues cree que, si él aparta la mirada, es su final.
Ella se acerca hacia él, pero él se aleja de ella.
—No te preocupes, no te mataré... Escucha con atención. Si te unes a mí, te daré poder. Tendrás fama, dinero y poder. Únete a nosotros, los demonios. Tendrás todo lo que siempre quisiste tener, algo que en este mundo no podrás tener. ¿Quieres seguir siendo menospreciado por ser hombre? ¿Quieres vivir en la sombra de tu madre y hermana? Si te unes a nosotros, podrás tener la posición que mereces.
—Es una tentadora oferta...
Él chocó con la pared, frenando a Kei, y la distancia entre ella y él se acortó en menos de dos segundos.
—Entonces...
Ella le acaricia la mejilla.
—¿Aceptas?
Él se dio cuenta de lo inteligente y valiosa que ella es. No cualquier persona podría infiltrarse y hacerse pasar como una profesora en una de las escuelas más importantes del mundo. Eso le dio una idea a Kei, idea que podría fallar y terminar muy mal, pero si sale bien, la situación de Kei mejoraría en un 1,000%, pues tendría a su disposición información muy valiosa.
Kei sonríe y ella se sonroja. Se puso nerviosa por la sonrisa de Kei y su cuerpo comenzó a ponerse caliente.
—¿Q-qué me pasa?
—Debo ignorar mi timidez. Magia de hada: alas.
Dos pares de alas rojas salen de su espalda y comienza a flotar.
—Vaya, vaya... ¿Acaso eres una Súcubo? ¿O simplemente eres una pervertida?
—¡¿Qué me hiciste?!
Kei le acaricia la mejilla y acerca sus labios a los de ella.
—¿Te sientes caliente?
—¿Q-qué hiciste?
Pequeños gemidos salen de su boca y se acaricia la entrepierna.
Kei está usando "Seducir mujeres". Ninguna mujer puede resistirse a ese poder, incluso las mujeres demonios pueden ser afectadas. Kei no lo sabía, solo se arriesgó.
—Sabes, incluso antes de saber que eras un demonio, me sentí atraído hacia ti, pero no sé por qué. Eres muy hermosa, pero hay algo más en ti que me gusta, y creo que es tu inteligencia. Me gustan las chicas inteligentes. Es la primera vez que me gusta alguien, aunque no esperé que fuera una chica demonio... Fufu. ¿Qué pasa? ¿Por qué no intentas atacarme?
—¡M-maldito!
Ella intentó golpearlo, pero se detuvo antes de que su puño toque el rostro de Kei. Las mujeres que estén bajo la influencia de la habilidad de Kei, no podrán hacerle daño.
—¿Q-qué?
—¿No quieres pelear? Mucho mejor. Sinceramente, no quiero golpear a la primera mujer que me gusta. Aparte, eres muy hermosa, no me atrevería a lastimar un rostro tan bello.
—¿H-hermosa?
Kei le acarica los labios.
—¿No quieres divertirte un poco?
Le da un beso en los labios y comienza a tocar sus pechos.
—Son suaves y firmes.
—N-no me toques...
Aunque se niega, su cuerpo no hace nada para evitarlo y sigue permitiendo que Kei le siga tocando los pechos pues, aunque no quiera aceptarlo, le está gustando.
Está muy excitada, tanto que dejó de resistirse y las ideas de atacar a Kei se desvanecen poco a poco.
—No puedo matarla todavía.- Pensó Kei.
Es correcto. Él quiere conseguir información sobre los demonios. Si la mata, no conseguirá la información que quiere.
—¿Estás excitada? Tengo 12 años. Estás enferma...
Se acerca a su oído y le susurra.
—Me estás excitando también.
Le da un beso en su oreja y ella deja escapar un grito de placer, asustando a Kei.
—¡N-no grites!
La toma del brazo y desaparecen. Habilidad: [Teletransportación].
[Teletransportación: Habilidad que le permite al usuario aparecer en lugares que ya ha estado antes, con solo imaginar el lugar y pensar la fórmula mágica. Solo puede ser usado una vez cada 12 horas.]
•
•
Aparecieron en la habitación de Kei. La habitación de Kei es enorme y limpia, igual de ordenada como la habitación que tenía en su vida pasada, con la única y gran diferencia que, a diferencia de su habitación en su mundo original, su habitación actual tiene un enorme cuadro con la pintura de Kei y Mei, siendo golpeados por su madre. Una pintura que su madre ordenó poner en las habitaciones de sus hijos, para que la odien y les recuerde que, si no se vuelven más poderosos que ella, nunca serán capaces de vengarse y derrotarla.
—Mierda, eso estuvo cerca. Gimes muy fuerte.
Kei se aleja de ella y se quita la camisa, mientras que ella intenta recuperar el aire.
—Por favor, acuéstate en la cama.
—N-no puedo hacerlo con un niño.
—Ya veo... No eres tan enferma...
Chasquea los dedos y un vapor lo rodea.
—Bueno, supongo que usaré el hechizo que un enano me enseñó.
Comienza a crecer y su ropa se destruye.
—Los enanos crearon este hechizo para pelear contra el ejército del Rey Demonio. El enano que me lo enseñó me dijo: "Los enanos somos fuertes, pero somos pequeños y lentos. Este hechizo nos permitirá luchar y ser más rápidos."
El vapor desaparece. Se transformó en una versión de él más mayor, en un chico de 18 años.
—Bueno... ¿Comenzamos?
Él se acerca hacia ella, poniéndola más nerviosa de lo que ya estaba. El cuerpo de Kei la excitaba más, y como Kei es guapo, tenerlo frente a ella la ponía demasiado nerviosa.
—N-no... E-espera...
Ahora él es más alto que ella, y Kei lo aprovechó para darle el golpe final. Él le acarició la barbilla y le levantó la mirada para que sus miradas se crucen.
—Te gustará.
Le dio un beso, y ella no se resistió, al contrario, comenzó a seguirle la corriente y también lo besó.
Después de más de 10 segundos de besarse, Kei separó sus labios y sonrió.
—¿Subimos de nivel?
La empuja despacio y ella cae sobre la cama.
—Eres muy linda.
—¿L-linda?
—Sí... Eres hermosa.
Acaricia su abdomen.
—Eres fuerte... Quítate la ropa.
Ella quiere negarse, pero no puede. Terminó aceptando su destino.
—S-sí...
Se quita casi toda su ropa.
Ahora ella está en ropa interior, que es rosa.
—Tienes un hermoso cuerpo.
Kei acaricia sus pechos y dulces gemidos salen de la boca de ella.
Toques, caricias, besos, palabras lindas. Kei hizo todo lo que sabía que se hacía antes de tener sexo. Investigó sobre ese tema para no fallar cuando llegara el momento de hacerlo.
Durante 5 minutos, Kei la acarició, la besó, le dijo cosas lindas... En pocas palabras, la excitó más.
La profesora terminó sucumbiendo ante el placer, y quería experimentar el siguiente paso.
Como Kei no se quitaba los pantalones, ella se terminó desesperando. Se quitó la ropa interior y le mostró su parte privada, una vista que impresionó y asustó a Kei, pues su habilidad resultó ser más poderosa de lo que pensó, aunque él ya había experimentado con su habilidad en el pasado, pero era la primera vez que llegaba tan lejos con una mujer.
—H-hazlo... M-mete tu cosa en mí... Por favor.
—Creo que es suficiente.
—¿Eh?
Se aleja de ella y se estira.
—Debo ir a la escuela, Mei se enojará conmigo si tardo más.
—¡¿Eh?! ¡¿Por qué?!
—Debo comer con mi hermana.
—Y-ya veo... ¿P-podemos hacerlo después?
—No, debo investigar a los demonios... Tal vez nunca lo hagamos.
—¡I-imposible! ¡¿Por qué no?!
—Investigar a los demonios me tomará mucho tiempo... Pero... Creo que tú puedes ayudarme.
—¿Y-yo? ¿C-cómo?
Kei sonríe y se acerca a ella.
—Únete a mí. Dame toda la información que tengas. Si lo haces, te convertirás en mi novia. Te garantizo placer, un hogar y amor. ¿Aceptas?
—¡Acepto! ¡Seré tu novia! ¡Te protegeré con mi vida, cariño!
Kei sonríe y le acaricia la cabeza.
—Gracias.
Una marca con forma de estrella aparece en su frente, la marca de un familiar.
[Maldición detectada. ¿Desea eliminarla?]
—¿Una maldición...? Sí.
[Maldición eliminada.]
[Contrato familiar finalizado.]
—Eres mi "familiar" ahora. No puedes hacerme daño y harás lo que yo te diga.
—¡Sí, lo haré!
—Estaré a tu cuidado a partir de hoy.
—¡Igualmente, cariño!
Kei comienza a besarla, y ella también lo besa, incluso más apasionadamente que antes.
[Seducir mujeres]. Las mujeres que se enamoren de Kei, no pueden hacerle daño y harán lo que sea para que Kei sea feliz.
Segunda chica: Drin Freipa.
Raza: Demonio.
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Kei, en su forma normal, se sienta junto con Mei, en una mesa, en el comedor de la escuela.
Kei está completamente rojo y nervioso. Rojo de la pena e impotencia porque hizo algo "horrible", obligó a una mujer a enamorarse de él, pero lo hizo por el bien de su misión. Y nervioso porque se enteró de algo muy malo, que afecta a todos en el mundo.
—¿Qué pasa, hermano?
—N-nada... Solo estoy un poco cansado.
—Come, debes recuperar tu energía.
—Sí, gracias.
Kei cierra los ojos y toma aire.
—Esto es malo... Los demonios atacarán en 5 años... Debo volverme más fuerte... Al menos conseguí una nueva compañera... Y es un demonio... Supongo que eso es bueno.- Pensó Kei.
Mientras tanto, Drin estaba dormida en la cama de Kei, recuperándose.
Estaba desnuda y sudorosa. Era más que obvio lo que pasó.
—Cariño... Eres increíble...
Estaba hablando dormida, confirmando su enamoramiento, pues lo llamó "cariño", estando dormida.
[Seducir mujeres]. Una habilidad tan peligrosa, que las mujeres de ese mundo tienen suerte de que el poseedor de esa habilidad sea un chico amable y sin maldad en su corazón porque, si fuera lo contrario, un violador en serie estaría recorriendo el mundo y se saldría con la suya.
Kei se prometió a él mismo solo usar su habilidad cuando fuera necesario, y si obligaba a una mujer a enamorarse de él, él se enamoraría de ella también y no la abandonaría.
Pero Kei nunca se imaginó que más mujeres se iban a enamorar de él, incluso sin necesidad de usar su habilidad.
—Kei... Tan adorable.- Dijo la bibliotecaria, que lo miraba desde lejos.
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Después de la escuela, Kei y Drin estaban caminando juntos por los enormes pasillos de la mazmorra.
Las paredes y el piso están hechos de piedra.
Drin está usando una armadura ligera y vestimenta ligera. Usa una falda corta negra y una blusa blanca. Su piel es blanca rosada y sus ojos son azules. Su cabello es blanco y corto. El cuerno desapareció... Parece humana. Se ve diferente, pues Kei le dijo que cambiara de forma, para que puedan caminar juntos y que no sospechen de su identidad como demonio.
—El piso número 34 es muy tranquilo... Demasiado tranquilo...
—¡No te preocupes, cariño, yo te protegeré!- Dijo Drin, sonriendo dulcemente y levantando ambos puños.
—Recuerda, yo pelearé, necesito los puntos.
—Sí, lo sé...
Una canasta de comida aparece en sus manos.
—Hemos estado aquí por 12 horas. ¿No quieres comer algo? Lo hice con amor.
Al escuchar esa última palabra, él recuerda las palabras de Nia.
(—La comida es deliciosa como siempre, Nia.
—¡G-gracias! Lo hice con amor.)
—Con amor...
Kei sonríe y se sienta en el suelo.
—Claro, comamos algo.
—¡Comamos juntos, cariño!
Se sienta junto con él y saca la comida de la canasta.
—Por cierto, cariño, ¿te puedo preguntar algo?
—Claro.
—¿Cómo conseguiste tanto poder?
Esa es una duda que Drin tiene desde que supo de la existencia de Kei Molfer. ¿Por qué un hombre se volvió poderoso? Ella se pregunta eso, pues Kei es una existencia rara. El padre de Kei también es poderoso, pero el caso de Kei es incluso más extraño, debido a la corta edad de Kei.
Si ella fuera otra mujer, Kei le hubiera contestado que solo se volvió poderoso gracias al entrenamiento de su madre, pero él decidió contarle toda la verdad a las compañeras que consiguiera. La confianza solo nace con la verdad. Si Kei le oculta su verdadero objetivo y pasado, y si Drin lo descubre, su confianza hacia él desaparecería. Kei prefiere evitar guardarle secretos a las personas importantes para él. Si quiere la confianza de Drin, él debe contarle la verdad. Ambos han estado hablando mucho durante el tiempo que han estado en la mazmorra, conociéndose mejor. Kei se dio cuenta de que Drin era una chica muy amable y educada, siente una gran confianza por ella a pesar de que apenas se conocen, por lo que quiere ser siempre sincero con ella.
—¿Prometes no decírselo a nadie?
—¡Lo prometo! ¡Será un secreto que me llevaré a la tumba!
—Gracias... Está bien... Soy un héroe invocado. Por ser hombre, no recibí ningún poder divino... La Reina del país llamado "Desmol" me vendió por ser hombre... Intentaron violarme, pero dos de mis compañeras héroes me salvaron y logré escapar... Sufrí una reencarnación... No puedo decirte el por qué, pero un Dios me reencarnó en este cuerpo... Gracias a ese Dios, me volví fuerte. Recibí el poder llamado: "Puntos dobles". Recibo el doble de puntos... Gracias a eso, puedo mejorar rápidamente. Supongo que ese sería un breve resumen de mi situación. Más adelante te contaré la historia completa, tal vez mañana. Solo es por precaución, espero que comprendas.
—I-increíble... ¡Mi cariño es un héroe! ¡Eres increíble, cariño!
—Gracias... Pero es un secreto.
—No se lo diré a nadie, cariño... Te contaré un secreto mío.
—No es necesario.
—No, quiero hacerlo. Tú me contaste algo muy personal... Es mi turno.
Drin toma aire.
—Yo... Yo... ¡Era virgen! ¡Tú fuiste mi primera vez! ¡Y tengo 2,620 años!
—Es verdad... No puedes mentirme... ¡G-genial! ¡Y a pesar de tener tantos años, eres muy joven y hermosa! ¡Increíble!
—Jeje... Hermosa... Escuchar eso me hace feliz.- Dijo con una dulce sonrisa.
Kei se sonroja y sonríe. Para él, ella es la chica más hermosa del mundo en ese momento... En pocas palabras, se enamoró. Es un enamoramiento natural. Eso fue demasiado rápido, pero Kei no le tomó demasiada importancia.
—No pareces un demonio... Eres muy adorable... Bueno, comamos.
—¡Espero que te guste!
Una flecha estuvo a punto de atravesarle la cabeza a Drin, pero Kei se dio cuenta del ataque a tiempo y saltó sobre Drin, protegiéndola con su cuerpo, aunque no era necesario, Drin estaba a punto de destruirla con un ataque mágico de fuego, pero debido a que Kei saltó para protegerla, inconcientemente desactivó su magia para dejar que Kei la protegiera.
La flecha, al impactar con el cuerpo de Kei, se destruyó y cayó hecha pedazos al suelo.
Drin solo podía ver con admiración a un Kei cuyo cuerpo estaba siendo rodeado por rayos rojos y sus ojos se habían vuelto rojos.
—Cariño...
—Mejor comemos en una zona segura, olvidé que seguimos en la mazmorra.
Los rayos dejaron de salir de su cuerpo y sus ojos volvieron a su color natural.
—Ah, eso estuvo cerca, ¿eh?
Drin lo abrazó con fuerza y le dio un gran beso en la mejilla.
—¡Eres mi héroe, cariño!
—N-no fue nada, n-no te preocupes. Tú harías lo mismo por mí.
—¡Por supuesto que sí, cariño!
La timidez de Kei regresó a su cuerpo. El actuar demasiado genial o fingir que no es tímido tiene sus límites, límite que ya fue superado hace mucho y Kei ya no puede ocultar su timidez.
—M-mejor vayamos a una zona segura y disfrutemos de la deliciosa comida.
—¡Vamos!