Chapter 9 - CAPÍTULO 9- Mei y Nia.

CAPÍTULO 9- Mei y Nia.

(Pov- Kei.)

Tener un gran poder mágico no sirve de nada si mi cuerpo no es capaz de resistir ataques, tanto físicos como mágicos. ¡Debo volverme aún más resistente!

¿Y cómo puedo volver mi cuerpo más resistente? Fácil. Acostumbrando mi cuerpo al dolor y a recibir ataques. Mi propio cuerpo ganará resistencia gracias al dolor. El entrenamiento físico también es importante, pero por ahora me voy a concentrar en resistir ataques.

Drin y yo nos despertamos temprano para entrenar en el bosque, lejos de la sociedad. La habilidad [Teletransportación] que Drin y yo tenemos solo es para emergencias, así que llegamos a este lugar corriendo, como parte del ejercicio.

Drin me está golpeando, pero puedo darme cuenta fácilmente de que se está controlando. No tiene sentido ser lastimado con tan poco. Entre más dolor sienta, mejor.

—¡Con toda tu fuerza, Drin!

—P-pero, cariño...

—No te preocupes, solo hazlo, por favor.

—Sí... Está bien... ¡Perdón por esto!

Drin me dio un golpe tan potente en la boca del estómago, que me atravesó el cuerpo con su brazo y me quitó el 86% de mis puntos de vida restantes que me quedaban. Ah, ese último golpe realmente fue poderoso. No tengo ninguna duda de que usó toda su fuerza.

Si Drin y yo hubiéramos peleado cuando nos conocimos, no estoy seguro si podría haberla derrotado. Drin y yo compartimos la misma opinión, ambos estábamos muy igualados en cuanto a poder. Drin tiene más experiencia que yo, pero esa experiencia es solo con enfrentamientos sencillos, no en peleas a muerte. Son situaciones completamente diferentes, no es lo mismo pelear con una persona para entrenar que pelear a muerte contra una persona.

Los demonios no pueden darse el lujo de desperdiciar vidas demoníacas, así que no luchan a muerte entre ellos.

—¡Mierda, me excedí!

—N-no te... preocupes.

Duele tanto, pero no tanto como lo que esperaba que me doliera. Estoy satisfecho con este resultado.

Drin quitó su brazo de mi cuerpo y comencé a usar magia curativa para cerrar la herida y regenerar los órganos que fueron destruidos.

Oh... Bien... ¡Bien! ¡Mi resistencia ha mejorado bastante a comparación a mi yo de hace un año!

—Bueno, el entrenamiento matutino terminó. Regresemos. Se me antojaron unos nachos con mucho queso.

—Espera, cariño, siéntate, necesitas descansar y recuperar el aire.

—No te preocupes, estoy acostumbrado a esto, así que estaré bien.

—... La familia Molfer es más increíble de lo que investigué.

Mi cuerpo ahora es capaz de resistir ataques tan poderosos que podrían destruir... Mmm... ¿Con qué puedo compararlo? ¿Cabezas de Orcos? ¿Una casa...? Es difícil compararlo con algo realmente.

Diré que simplemente un simple puñetazo de Drin es capaz de destruir la cabeza de un Orco sin problemas.

—Vamos a casa. Necesito bañarme.

—Fufu. ¿Quieres que te acompañe?

—Ah... E-esto... P-pues... C-claro... Sí, por supuesto.

—Fufu. Te ves muy lindo avergonzado.

¡Kei, debes ser más atrevido! Ser un cobarde te hará ver débil. Quiero que Drin me vea como alguien genial. ¡No debo avergonzarla!

... Viene alguien.

Drin se transformó en gato y saltó a mi cabeza.

Yo comencé a hacer flexiones con un solo dedo, para seguir con mi entrenamiento y no llamar la atención.

No siento hostilidad, así que dudo bastante que sea un enemigo.

—Oh, vaya, vaya. Disculpa, jovencito, ¿tú fuiste el que hizo todo esto?

Ah, una Elfa. Y es hermosa. Ah, la típica Elfa de cabello rubio y pechos grandes. Y se ve que es una persona amable. Gracias. Llevo tanto tiempo acostumbrado a ver Elfas locas adictas al sufrimiento humano, que conocer a una Elfa amable es agradable.

Creo que se enojará conmigo por el desastre que hice. Drin y yo destruimos muchos árboles durante nuestro enfrentamiento amistoso.

Me levanté del suelo y me sacudí el polvo de las manos.

—Le pido una disculpa por el desastre que hice durante mi entrenamiento, pero, en nombre de la familia Molfer, le prometo que no me iré hasta arreglar todo. Me disculpo por el inconveniente.

—¿U-un noble en este lugar...? D-debes tener tus razones. Perdón por molestarlo.

—Ah, pero... No... Nada. Que tenga un lindo día.

—I-igualmente.

La Elfa se fue lo más rápido que pudo... Ah... ¡Ahhhhhhhh! ¡Odio que me tengan miedo por ser un Molfer!

—Fufu. Así se hace, cariño. Hasta con solo mencionar tu apellido asustas a las personas. Y no te menospreció por ser hombre, lo que significa que ya tienes una gran reputación, que hasta los Elfos que viven en el bosque no se atreven a meterse contigo, incluso sin confirmar si realmente eres Kei Molfer. ¡Estoy saliendo con un tipo peligroso, ¿eh?! Fufu.

—¡Ahhhhhhhh! ¡No lo digas de esa manera, me hace parecer un chico malo! Pero tienes razón, tengo cierta reputación que no me hace ver como una buena persona. Ah, no importa. Por cierto, no sabía que aquí vivían Elfos.

—Yo tampoco. Además, esa Elfa anciana parecía ocultar algo en su interior, pero dudo bastante que sea alguien peligrosa para nosotros.

—¿Anciana?

—¿No te diste cuenta? Ella debe tener mínimo 700 años.

—Ah... Oh... Bueno, se ve joven para mí. Parece una mujer de 20 años. Bueno, no importa... Yo también sentí algo raro en ella, pero después investigamos. Limpiemos el desastre. En la tarde regresemos a plantar nuevos árboles.

—¡Vámonos!

Una Elfa anciana... Esa mujer me pareció interesante.

Drin y yo entramos a la piscina juntos. Ya hicimos el amor, ya nos vimos desnudos mutuamente, así que no me importa bañarnos juntos. ¡Debo ocultar mi lado tímido!

Estoy usando mi forma adulta. Si me baño con mi forma normal, Drin podría sentirse incómoda. Todavía tengo 12 años, y los cumplí hace poco. Este cuerpo sigue siendo demasiado joven.

Drin me tomó de los brazos para que yo la abrazara.

—Nunca me imaginé que bañarme con una persona sería tan relajante, cariño.

—Digo lo mismo. Pensé que sería más incómodo, pero es bastante relajante.

—Fufu. Dime, cariño, ¿hiciste algo parecido en tu vida pasada?

—Nop. Morí sin haber tenido novia. Ni siquiera di mi primer beso.

—E-entonces... ¡¿Yo fui tu primer beso?!

—Fue la primera vez que besé a una chica por amor... Y la primera vez que tuve sexo por amor.

Pero... no fue mi verdadera primera vez... Mejor no pienso en eso.

—¡L-lo mismo va para mí, cariño! Lo más parecido a un beso antes de conocerte, fue cuando una loca llamada Rose me besó bromeando, ¡pero te prometo que solo sentí asco, hasta nos terminamos peleando a golpes!

... Ese nombre... Ese nombre me trae malos recuerdos.

—¿No tuviste pretendientes, Drin? Eres muy hermosa. No dudo que hayas tenido a más de un demonio detrás de ti.

—No, además, no estaba interesada en socializar. Solo hablaba con mi superior y mi compañera de trabajo, pero era mujer, y mi superior, Zero, era un simple demonio con apariencia de niño pequeño, no me interesaba.

—Un demonio con apariencia de niño... Suena interesante. ¿Qué hacías para la Reina Demonio, además de ser informante?

—Solo fui informante, aunque trabajé un tiempo en un laboratorio con la comandante Akane, pero principal fui una informante.

—Fuiste muy importante... ¿No te estarán buscando?

—No pueden darse el lujo de buscar demonios débiles como yo, no se quieren arriesgar tanto. No te preocupes, cariño, estaremos bien.

Drin me besó en la mejilla y me sonrió.

—Sí... Lo estaremos.

Espero poder protegerla.

Después de bañarse y cambiarse de ropa, Kei salió de su casa.

—Ya terminé la tarea y ya hice mis ejercicios matutinos... Ya me puedo ir.

Drin, en su forma como gato, está en su cabeza.

Hoy es el primer día de descanso de Kei. Los estudiantes de la clase S estudian 3 días y descansan 4.

Las clases son muy complicadas y sus tareas son difíciles también. Por obvias razones, les dejan mucha tarea.

Pero Kei no tiene problemas con eso. Desde pequeño, estudió todos los libros de historia, matemáticas y magia que había en la gran biblioteca de su casa. Las clases que son difíciles para otros, para él son fáciles. Y las tareas las terminó en una hora.

Cuando estudia, su inteligencia aumenta, y como tiene la habilidad "Puntos dobles", su inteligencia aumenta el doble.

—¡No es justo!

Mei abraza a Kei por la espalda.

Está llorando, pues ella quiere ir con él, pero él le dijo que no.

—¡Quiero ir contigo, hermano! ¡Quiero salir contigo!

—Ya te lo dije, no saldrás conmigo hasta que termines la tarea.

—¡No entiendo nada! ¡Ayúdame! ¡O pásame la tarea! ¡Por favor, hermano! ¡No seas malo con tu tierna y hermosa hermana!

—Si te la paso, no aprenderás nada. Y no tengo tiempo para ayudarte, mi pedido ya llegó.

—¡No seas malo, hermano! ¡Quiero ir contigo!

Kei queda en shock por esas palabras, pues son las mismas palabras que Nia, su prima, una vez le dijo, y el tono con el que Mei y Nia lo dijeron, era muy parecido. Tan parecido que, por unos segundos, Kei vio a Mei como Nia.

—¿N-Nia?- Pensó Kei.

(Tiempo atrás.)

—¡No seas malo, hermano! ¡Quiero ir contigo!

Nia estaba abrazando fuertemente a Kei, mientras lloraba.

—Nia, la competencia de natación será lejos y tienes que ir a la escuela. No puedes faltar.

—¡No me importa, quiero verte ganar!

—Lo siento, Nia, pero no debes descuidar tus estudios... Ya sé. Nia, si yo gano, te dedicaré mi victoria y te compraré un regalo.

Los ojos de Nia se volvieron brillantes al escuchar esa tentadora oferta.

—¡¿En serio?!

—Sí, es una promesa.- Dijo sonriendo, mientras levantaba su dedo meñique.

—¡Gracias, hermano!- Dijo Nia, mientras su dedo meñique abrazaba al dedo de Kei.

Kei recordó esa escena y estaba a punto de derramar una lágrima, pero se resistió y lo evitó, para no preocupar a su hermana.

—Mei se parece demasiado a Nia... Zius, no sé si hiciste esto por mí, pero gracias.- Pensó sonriendo.

Para Kei, Nia era su mejor amiga. Ella nunca lo juzgó cuando era gordo. Sí, gordo. Kei perdió a sus padres en un accidente cuando tenía 10 años. Se deprimió y comenzó a comer demasiado.

Las chicas lo consideraban feo y los chicos se burlaban de él.

Pero Nia nunca se burló de él. Ella lo apoyó y siempre estuvo a su lado.

Y cuando dos chicas lo hicieron llorar, ella le ayudó a entrenar y adelgazar.

(Tiempo atrás.)

Kei, de 14 años, estaba leyendo una carta.

—Realmente eres muy feo, gordo...

Kei leyó una carta que le dejaron en su mesa.

Era una carta rosa con un corazón.

Él pensó que era una carta de amor, pero su corazón se rompió al leer la carta.

—¡¿En serio pensaste que era una carta de amor?!

—¡Qué patético eres!

Dos chicas estaban paradas frente a él, riéndose, pero él simplemente sonrió y las miró.

—¿Carta de amor? Nunca pensé que lo fuera. Era obvio que era una carta de broma. Por cierto... ¿quiénes son?

—¿Eh?

—Lo siento, pero no las reconozco... ¿Ustedes hicieron esto? Les recomiendo que usen perfume en las cartas, será más convincente.

—¿E-estás bromeando?

—¿Eh? ¿Bromeando? Lo siento, no tengo talento para las bromas... Bueno, me retiro.

Se levantó de su asiento y se alejó de ellas.

Ellas eran las chicas más hermosas y populares de su salón de clases.

Kei dijo eso para no darles el gusto de verlo enojado o triste.

Después de llegar a su casa, él comenzó a llorar.

Esa broma le afectó demasiado... Así que decidió adelgazar.

Durante 6 meses, Kei se dedicó a entrenar su cuerpo.

Con ayuda de Nia, adelgazó.

Se volvió atractivo, pero él no lo creía. Él todavía se consideraba feo, pero a él no le importaba eso. Él solo quería ser delgado, nunca pensó que quería ser guapo.

Y cuando entró a la preparatoria, una de las chicas que lo molestó se le declaró. Él pensó que era otra broma y la rechazó inmediatamente, rompiendo su corazón.

Y después de eso, se le declararon 4 veces más y también las rechazó, pensando que también estaban bromeando con él.

—Bueno, Mei, te propongo un trato. Si terminas la tarea, haré lo que tú quieras. ¿Te parece un trato justo?

—¿Lo que yo quiera...? ¡Es un trato, hermano!

—Estoy seguro de que me pedirá un postre mágico o que le haga su tarea la próxima vez.- Pensó Kei.

Pero Mei no tenía planeado pedir eso, tenía planeado pedir otra cosa.

—¡Es mi oportunidad para conseguir un beso de Kei!- Pensó Mei emocionada.

Era un pedido bastante atrevido, pero si ella se lo pide, Kei diría: "¿Un beso? Claro, no hay problema." Y le daría un beso en la mejilla.

Kei le daba besos en la mejilla a Nia cuando ella se lo pedía, pero él pensaba que era normal hacerlo, pues eran familia.

—Bueno, me retiro... Iré corriendo, será un buen ejercicio. Adiós, Mei, cuando regrese, revisaré tu tarea. Espero que lo hagas bien.

—¡No cometeré ningún error, te lo prometo!- Dijo con orgullo.

—Adiós.

Kei se aleja corriendo rápidamente y suspira.

Drin, que estaba en su cabeza, se sujeta fuertemente del cabello de Kei, mientras lo huele. El olor del cabello de Kei es muy agradable y bonito, tanto que Drin no se cansa de olerlo.

—Bien... Drin, tendremos nuestra cita y luego recogeremos mi pedido.

—¡Una cita con mi cariño! ¡Lo esperé con ansias!

—Cuando nos alejemos lo suficiente, volverás a tu forma humana... Y ponte los lentes que te regalé. Te ves más hermosa con lentes.

—¡¿H-hermosa?! S-sí, ¡usaré los lentes! ¡Usaré lentes toda mi vida!

—Por cierto... ¿Qué dijo la princesa?

—Nada. Después del ataque de ese demonio, la fiesta se canceló. No pude hablar con ella... Pero estoy segura de que intentará hablar contigo otra vez.

—Ya veo... ¿Y Charlotte?

—Ella se fue de la fiesta después del ataque. Ya no sospecha de ti.

—Perfecto.