Punto de vista de Lezus Loughty:
-Que absurdo…- Murmure mientras miraba el cielo.
No tengo la motivación para levantarme, así que me limite a contemplar el cielo.
Recordé mi pelea, o mejor dicho paliza, contra la maestra Avadon.
"Ni siquiera dure segundos…"
Mentiría si dijera que no quería llorar.
Mis esfuerzos de estos últimos años se sienten como si no sirvieran para nada.
Se que ella es una existencia peligrosa, tan peligrosa que mi cuerpo se congelo en su ultimo ataque, esa sensación era similar…
"…A los demonios"
Como un lago sin ondulaciones, mi mente estaba tan clara que observaba lo que ocurría en el fondo de este y, de repente, un gran roca callo en este lago. La comprensión me golpeo y me desconecte de la realidad.
"Arte demoniaca"
-Como no lo relacione…- Dije a la vez que reprendía por ser tan ciego.
"Quien tendría un arte demoniaco tan poderoso sino fuera demonio…pero…¿Por qué me lo impartió?"
Me resulto extraño que no nació ni un sentimiento negativo de mi, por lo contrario, solo había…confusión.
"Ella dijo que esta arte esta destinada a matar demonios…¿Por qué?"
Más y más preguntas entraron a mi cabeza.
-HAAA…- Solté otro suspiro.
Agite en mi cabeza de un lado al otro y me levante de un salto.
"No estoy seguro de que sea un demonio"
Con ese pensamiento avente todas mis dudas y preocupaciones al fondo de mi conciencia, lo guarde en un cofre, lo encadene y lo avente junto a mis demás preocupaciones.
-Solo enfócate en el entrenamiento…- Me repetí en voz baja a la vez que usaba mi corredor de alma para encontrar a Sasha.
Estaba un poco nervioso y muy emocionado.
Voy a ver a Sasha después de un año.
Estaba emocionado de mostrarle todo lo que aprendí y cuanto he mejorado.
Comencé a trotar a ala vez usaba mana para mejorar mi velocidad. Luego de trotar por unas cuantas horas, finalmente llegue a donde estaba Sasha.
Al verla mi mente sufrió un corto circuito.
- ¡T-Ti-TIENES CUATRO COLAS! – Grite de forma involuntaria.
Ella se dio la vuelta y se abalanzo sobre mi.
-Guau-
Me tiro al suelo y comenzó a lamer mi cara.
La incredulidad que antes mi inundaba fue remplazada por felicidad y comodidad.
-Yo también te extrañé- Dije a la vez que la abrazaba -Te extrañe mucho…-
Pronto mis ojos se tornaron borrosos y las lagrimas comenzaron recorrer mis mejillas.
-Guau-
-No estoy llorando-
-Guau-
-No lo estoy...-
***
Cuando me desperté era el medio día.
Me encontraba abrazando a Sasha, con cuidado, deje de abrazarla y me puse de pie.
Hice una bola de agua, me lavé la cara y mis pensamientos, que antes eran confusos, se volvieron claros.
Me di la vuelta y comencé a examinar con más cuidado a Sasha.
-Si que cambiaste…- Murmure al terminar de examinarla.
Excluyendo las cuatro colas, Sasha se volvió más grande.
Su altura era similar al de mi torso, si se paraba en dos patas fácilmente supera mi altura. Sus patas, tanto delanteras como traseras, son más robustas y musculosas. Su pelaje es más grueso y saludable, además de que su pelo, similar al de una nube, se volvió un poco más profundo. El anterior gris se volvió más claro y el azul un poco más profundo.
Actualmente, Sasha era similar a la flor de caballero.
La flor de caballero es mi flor favorita, esta compuesta por los colores blanco, gris, azul y morado, sin embargo, es inservible…. Es una de las flores más extrañas del mundo, además de que no es una planta con propiedades especiales, no es un ingrediente que puede ser usado en la alquimia o en la transcripción de formulas...solo es hermosa…
El pelaje de Sasha era una combinación de estos colores, formaban una armonía perfecta y no había una línea que marcaba el inicio del otro color, es tan hermoso que estas tonalidades se volvieron mi nueva combinación favorita…
-Despierta Sasha- Dije a la vez que la balanceaba de un lado a otro.
-Guau-
-Necesitamos prepararnos para irnos al templo de la diosa del agua- Dije a la vez que intentaba pararla, pero simplemente caía a un lado.
-Guuuaauu-
Ante sus palabras sufrí un gran golpe y casi vomito sangre.
-Se que no tengo nada, pero preparemos cazando algo y llenando nuestros estómagos- Respondí aun sufriendo las secuelas del anterior ataque.
-Guau- De mala gana, Sasha se levanto y nos dirigimos al río.
***
El tiempo paso rápidamente. Después de comer y bañarnos, finalmente llego el señor Gadrel.
-Hola muchacho- Dijo el señor Gadrel mientras se sentaba y agarraba uno de los peces que cazamos.
-¿Señor Gadrel, usted me acompañara a el templo de la diosa del agua? – Pregunte a la vez que terminaba el pescado que tenia en mi mano.
-Si, me lo encomendó la señora Avadon- Respondió mientras terminaba el pescado a una velocidad impresionante.
"Que alivio" - Pensé.
Verdaderamente es un alivio que me acompañara la persona más normal, o la que ha generado más confianza en mi, además de que el es una de las leyendas vivientes en los cuentos que he leído.
"…El es como mi ídolo"
En los cuentos y leyendas del `Alquimista Errante´ es un alquimista que alcanzo el rango de maestro. También hay una leyenda del alquimista errante que menciona que salvo a la humanidad de ser masacrada por los Asuras, Nefilims y demonios, en un ataque conjunto…aunque no se si sea cierto.
-¿Cuándo nos vamos?- Pregunte un poco emocionado por aprender cosas de el.
-Mmmm…- Se llevo la mano a la barbilla -Lo más conveniente es que salgamos hoy-
Mire el cielo y observe que el sol ya se estaba ocultando.
Intente hablar, pero antes de poder hacerlo el señor Gadrel me interrumpió.
-Toma. Ponte esta ropa y nos vamos a la plataforma de teletrasnportación- Estiro un par de prendas que parecían más cómodas, similar a las suyas, y comenzó a observarme con más detenimiento.
-…¿Por que el cambio?- Pregunto a la vez que me señalaba.
No comprendí lo que pregunto.
-¿Cuál cambio?- Cuestione a la vez que me ponía las nuevas prendas.
-Bueno muchacho, ¿No te haz visto en un espejo? -
-No hay espejos aquí- Respondí a la vez que me acomodaba mi ropa.
El señor Gadrel saco un espejo de su anillo y me lo puso enfrente de mi.
-Oh, eso...- De repente la realidad me golpeo y recordé en ese día que casi muero -Bueno…cultivé la respiración de las fuerzas opuestas y mi cuerpo se volvió así- Me encogí de hombros al no saber la verdadera reacción.
-Ya veo…¿También gastaste tu energía del alma?-
Su pregunta me sorprendió.
-Si…- Hubo un silencio y me vi obligado a explicar -La respiración de las fuerzas opuestas consiste en usar tu energía del alma para templar el cuerpo y por un descuido gasté demasiada energía. Lo que ocasiono que sufriera una desconexión del espíritu…o eso creo- Dijo al no estar completamente seguro de esto.
-Entiendo- Asintió Gadrel y comenzó a caminar -Levántate, ya nos dirigimos al teletransporte-
-Bien-
Me alineé junto al señor Gadrel, caminando a la par, y en tan solo una hora, llegamos al puerto de teletransporte.
-AAAHHH…UFFF…AAAHH- Inhale y exhale en repetidas ocasiones para recuperar mi condición.
Pareciera que caminamos, sin embargo, por cada paso recorríamos varios kilómetros.
Mis sentidos estaban entumecidos, ese viaje fue similar a rodar por una montaña a la vez que estas sumergido en el agua, a la vez que terminaste de comer, a la vez que estas paralizado, a la vez que…
-Lezus- La voz de el señor Gadrel me saco de mis pensamientos.
-¿Qué ocurre señor Gadrel?- Pregunte mientras refrescaba mi cara con agua.
-Toma-
El señor Gadrel me aventó una pulsera.
Por reflejo la atrape.
-¿Qué es esto?- Dije mientras me lo ponía.
-Un almacenamiento espacial-
La indiferencia en su voz me aturdió, rápidamente mordí mi dedo y dejé caer la sangre sobre este.
Mi sangre pronto desapareció y la pulsera, que era completamente negra, se volvió tan brillante como el oro. Era más similar a una pieza de joyería que a un almacenamiento espacial.
Moví mi conciencia a la pulsera.
- ¡¿QUÉ ES ESTO?!- Grite de forma involuntaria al ver el contenido de la pulsera.
- ¿Sorprendido? - Pregunto Gadrel con una sonrisa.
-P-Por supuesto- Dije al ver lo que estaba en mi pulsera.
-JAJAJAJA…Te lo explicare después, por ahora súbete a la matriz e iremos a una ubicación que necesito visitar antes de partir al templo de la diosa-
Me apresure al subirme.
Cuando estaba apunto de hablar, el señor Gadrel me interrumpió.
-Esto puede ser incomodo…Solo resiste…- Dijo con un suspiro.
Intente hablar, sin embargo, mi vista se vio deformada.