-Así que nos vas a cuidar tu.
-Si… probablemente no sea lo mejor que les podemos ofrecer… pero haré todo lo que esté a mi alcance.
Roberto habló de frente con Lian y Shui, ellos estaban en un pequeño campamento en la cordillera Qin, parecía que ahí era el sitio en el que sería el último bastión de defensa.
Las líneas de defensa se habían distribuido siendo la línea principal ciudad Ziu y donde probablemente se iba desarrollar la batalla principal, en cuanto al resto, el cuartel médico y de rezagados se ubica en la cordillera Qin justamente en donde estaban en ese momento Shui, Lian y Roberto.
-Si tienen alguna duda, pregunten sin problema, no sé qué tanto pueda responder, pero aquí estoy.
Shui levantó rápidamente la mano.
-¿Qué pasa?
-¿Dónde está Fernando?
-Oh, él… … estará participando en el frente principal, al menos eso tengo entendido.
-Ya veo…
-No se preocupen, si hay gente que puede sacar adelante esta guerra, definitivamente son ellos.
-De verdad espero creer eso.
-... Yo también, porque son mis amigos.
-Je… entiendo.
Las aeronaves de la legión comenzaron a movilizarse hacia el frente.
-Está comenzando.
-Si…
-... … … Dios nos ampare.
~-~
Las unidades de Tempest se aproximaban peligrosamente hacia ciudad Ziu, las unidades de la legión los estaban esperando ahí, estaba por comenzar una enorme batalla campal y la tensión entre ambos bandos.
-Sun, dile a las tropas que avancen… no comiences a cargar a Zeus II aún, utiliza mejor cañones de plasma… creo que nos quedaban cuatro ¿No?
-Si…
-Entonces que ellos abran el telón, no tengo idea de donde carajos este Xhinz pero era de esperarse… y Mao debe haberlo seguido… ah… … simplemente demos todo lo que tenemos en este ataque. Jhon y Sonia saben que deben hacer.
Dark Ringu terminó de ladrar órdenes hacia Sun quien sin una mejor noción de que hacer simplemente las acató.
Sun salió de la sala de mando de Zeus II en donde se encontraba con Dark Ringu, el gigante artillero ya no estaba oculto al haber perdido el absoluto factor sorpresa en el último ataque.
-Que los cañones de plasma se preparen… y que el resto de unidades estén en sus posiciones para pelear de primera mano.
-¡Si!
Sun salió de Zeus II y se dirigió a la línea frontal del ataque que estaban realizando.
-Este es mi terreno… Estoy muy enojado así que me desquitaré con cualquiera que se cruce en mi camino.
Los cañones de plasma empezaron a cargar energía en sus cañones tal como había especulado la orden.
Estaban por enfrentarse todas las fuerzas disponibles que tenían ambas facciones.
6200 activos entrenados conformaban las fuerzas de la legión y los ascendidos.
3500 activos entrenados y 4500 mutantes sin pensamiento conformaban las fuerzas de Tempest.
Tempest contaba con un escuadrón de 2000 aeronaves, 4 cañones de plasma y 400 vehículos equipados con torretas antiaéreas de proyectiles de hado.
En cuanto a las cartas pesadas de Tempest, tenía a su disposición a Wu Sun, Dark Ringu, Jhon White, Takahashi Sonia, Zeus II e Igarashi Seigen, todo esto debido al paradero desconocido de Chen Xhinz y Li Mao.
Los ascendidos y la legión tenían a su disposición 1500 aeronaves de los ascendidos, 300 PHSSA, 4 escarabajos que habían sobrevivido del asedio a ciudad Ziu y el sistema de defensa que ciudad Ziu tenía listo para usar.
Las cartas pesadas de los ascendidos y la legión eran Tokisaki Tome, Konoe Sophia, Toujo Eliot, Leal Bosques Trejo, Zhao Sayuki, Hayashi Akira y Fernando Ramirez del Rio.
El último acto de esta travesía estaba por dar inicio con una pieza agitada.
-... Fuego.
Los cañones de plasma abrieron fuego lanzando 4 grandes proyectiles esféricos de plasma en dirección a ciudad Ziu.
Las esferas de plasma se aproximaron rápidamente hacia la ciudad pero cuando estaban por golpear a las unidades aéreas de la legión, el sistema de defensa de ciudad Ziu desplegó escudos lo suficientemente grandes para defender a sus aliados del ataque.
-¡A LA CARGAAAAAA!
Todos los vehículos, activos, mutantes y aeronaves de Tempest iniciaron su avance, a su vez, las unidades de los ascendidos y de la legión hicieron lo mismo.
Los proyectiles de plasma y hado volaban por todas partes… explosiones, sangre, miembros, fuego, agua, tierra, viento, luz, oscuridad, pureza, metal ardiendo, había un sin fin de elementos y objetos volando sin parar en la zona de combate, ni siquiera habían pasado 5 minutos desde que el ataque había iniciado pero las repercusiones comenzaban a mostrarse.
Ambos bandos estaban dejando todo lo que tenían en la batalla.
~-~
-Ya empezó.
Roberto suspiro un poco mientras movía inquietamente su pie. Estaba sentado en el sitio que le habían encomendado para cuidar a las princesas pero su nerviosismo por la batalla que estaba ocurriendo muy cerca de él lo tenía muy ansioso.
En el corto tiempo que había estado en China, había vivido un sinfín de experiencias, pero sin duda alguna la que más había estado presente en su cabeza desde que ocurrió, fue el hecho de ver a la muerte cara a cara.
Sus manos ya no estaban limpias, aunque fuera un criminal calificado como terrorista, había ejecutado con sus propias manos una vida, y también había experimentado el terror de que sus seres queridos o el mismo terminaran al borde de la muerte… o murieran.
Todas experiencias no lo habían llenado con miedo, sino con determinación. Había comprendido que la situación de ser un protector del mundo del hado no era una tarea sencilla y mucho menos amable, pero había reunido la valentía para poder decir con seguridad "Debo hacer esto".
Todo lo que había vivido en el escaso lapso de tiempo conformado por poco más de un mes, le había bastado para saber que era una experiencia que no dejaría que sus amigos y seres queridos vivieran de ser posible, esa misma determinación lo mantenía ansioso por no estar en la línea de defensa principal.
Comprendía el hecho de que su misión era muy importante, pero el no ver con sus propios ojos una batalla de ese calibre lo tenía al filo de la cordura.
-... … …
Roberto comenzó a hacer escaleras infinitas con los dedos por nerviosismo.
-... … ¿No sabes qué está pasando?
-... … Por desgracia no … el canal de comunicación que se me otorgó tiene la finalidad de avisar exclusivamente de las cosas que involucren de la forma más directa a mi misión…
Lian y Shui estaban junto a Roberto, su presencia tan cerca de los hechos se debía al hecho de que existía la posibilidad de que fueran requeridas de manera inmediata para el sello interno de la cueva, pero por la misma razón, necesitaban tener escolta.
-... Me pregunto si Fernando estará bien…
-Fernando es muy fuerte… además, una carta pesada como lo es un discípulo del hado, no se soltara desde un inicio en una revuelta así.
-... Bueno…
Shui no parecía muy aliviada con la respuesta, pero no podía hacer nada más en ese momento. Las dos hermanas de pelo morado trataban de lidiar con la ansiedad y los nervios a su manera.
Lian se movía en la silla que habían colocado para ella, volteaba a ver para todos lados aunque no registrara lo que veía y jugueteaba con sus manos.
Por su parte, Shui había encontrado un palito en el suelo y raspaba sin fin el piso sin dibujar nada en específico al estar completamente cubierto de hierba.
-Ahh…
En ese momento, el comunicador de Roberto sonó.
"Roberto, soy Tome, por favor ven a mi posición junto con las princesas inmediatamente"
-De acuerdo, voy en camino.
Roberto se levantó de la silla y dirigió su mirada a Lian y Shui.
-Tome nos llama, ¿Podrían acompañarme por favor?
-Si, vamos.