-...
-¿Está bueno Shui?
-... … Si.
-Me alegro.
Shui y Lian estaban comiendo.
Lian había preparado una sopa de arroz y se las había arreglado para conseguir unos cuantos filetes de pescado y asarlos, después de todo, tenía muy poco que había siquiera tocado una sartén para cocinar por primera vez.
Tempest les daba muy poco presupuesto para poder vivir y Lian había tenido que aprender todo lo de una ama de casa en un tiempo muy corto para poder cuidar correctamente de Shui, sin embargo, desde hacía un par de días, la cosa comenzaba a cambiar.
-(... ¿Por qué? ¿Por qué la vigilancia de todos los agentes de Tempest se redujo a tal grado de que ya no veo ninguno? ¿Por que repentinamente aumentaron el dinero que nos dan? Gracias a ello pude hacer un poco más de comida pero… ¿Qué traen entre manos? ¿Por qué?)
-...
-...
-...
Shui miraba sin motivo alguno el bote de la basura del apartamento.
-¿Qué tienes Shui?
Shui sacudió la cabeza de lado a lado en señal de que no era nada.
-...
Lian vio el bote de la basura.
-(Ah… debe de estar pensando en los chocolates de esa mujer…)
Hace unos días, Lian y Shui habían recibido una visita de parte de Wu Mei Ling.
La visita había puesto al máximo el instinto defensivo de Lian y después de haberle gritado, Mei Ling se había ido extrañamente cabizbaja.
-(... ¿Qué demonios tenía en mente? Dejó una bolsa con unos chocolates en la puerta pero… no confío en nada que venga de ella… así que los tire pero…)
Lian le dirigió una mirada pensativa a Shui.
Tenía relativamente poco tiempo que Shui había estado presa de Tempest, y la habían torturado hasta el cansancio.
-(Probablemente ha de haber pensado que por fin podía haber probado un dulce después de tanto tiempo… después de todo lo que pasó… probablemente no le importaba si tenían veneno o no…)
Lian sacó una tarjeta de neón de su bolsillo, en ella ponía "200" por medio de un contador de números de neón incluido en la misma interfaz.
-...(Aun tengo Yuanes… tengo que comprar varias cosas antes de que me depositen otra vez pero… tal vez…)
Lian guardó su tarjeta y le dio una dulce mirada a Shui.
-Hey Shui.
-...
-¿Quieres ir por alguna golosina?
-...
Shui regresó su cabeza a mirar a Lian, sus ojos seguían tan vacíos como siempre, pero esta vez, había un pequeño gesto de expectación, era casi imperceptible, pero se escondía detrás de la cara sin emociones de Shui.
Shui agitó de arriba a abajo su cabeza en señal de afirmación.
-En ese caso vayamos por unas cuantas.
Lian levantó la mesa y puso todo en el lavaplatos para lavarlos una vez regresaran.
Lian recogió la llave de neón del apartamento y miró a Shui.
Ella llevaba un vestido de manga corta, pero, casi todas las partes de piel que se lograban ver, estaban cubiertas de vendas.
-...(No quiero que la vean mal…)
Lian abrió el guardarropa y sacó un suéter café que tenía guardado.
-Si bien, es mío, debería quedarte como suéter de manga larga, aunque en mi caso no lo hace… … (¿Cómo es que hay tanta diferencia de altura entre ella y yo? Solo nos llevamos 3 años… y aun asi… Yo mido 1.84… y Shui 1.55… ¿No se supone que tenemos los mismos genes?)
Lian le colocó el suéter a Shui para que cubriera sus vendajes.
El suéter cubre perfectamente bien sus brazos ocultando así sus vendas, sin embargo, el cierre no logra pasar la parte del pecho.
-(... … ¿Disculpa? ¿Que todo lo que no creció se le fue al pecho? … … Es fácilmente 3 copas mayor al mío…)
Lian se rinde en intentar cerrar el suéter por lo que queda abierto de la parte del escote.
Lian observa a Shui después de colocarle el suéter, Shui tenía una figura impactante para cualquiera, sin embargo, su cara sin luz la arruinaba horriblemente.
El ver así a su hermana pequeña, siempre despertaba ira hacia los que le habían hecho eso, pero despertar ira no iba a llevarla a ningún sitio.
Lian bajó la cabeza soltando un suspiro y después prestó atención a su pecho.
-(Mamá… ¿Por que le diste a Shui todos los genes del pecho…?)
Shui mantuvo su mirada en Lian con un gesto que claramente estaba diciendo: "¿Qué pasa?"
-Ah… vamos Shui.
Lian sujetó la mano de Shui y salieron juntas del apartamento.
~-~
-... (Esta es la quinta ciudad que vengo a investigar… llevo ya un par de días encargado de buscar a las princesas… agote mis 5 primeras opciones… no parecían estar ni en el escondite más obvio ni en el más protegido… las escondieron bien…)
Fernando miró a su alrededor, en ese momento, se encontraba en una ciudad pequeña ubicada casi al centro del territorio controlado por Tempest, venía camuflado por supuesto, su cabello se habia vuelto de color castaño y en esta ocasion portaba un pantalon de mezclilla azul claro, un polo y una chamarra deportiva azul claro con franjas blancas.
-(Ya que agoté mis primeras 5 opciones… llegue a esta ciudad… es la más cercana a la quinta opción pero… no hay nada peligroso o interesante en ella, está rodeada de bosque, no tiene super construcciones, no hay mucho tránsito de automóviles o camiones… es una ciudad rezagada parece… lo único que me inquieta… es el hecho de que no hay ni un solo vigía de Tempest…).
Fernando había encontrado a guardias y agentes de Tempest por doquier en las anteriores ciudades que había visitado, los había burlado por supuesto, a pesar de no ser el mejor espía de la legión, él tenía grandes cualidades de infiltración como todos los discípulos del hado.
-(¿Me estaré perdiendo de algo?)
Fernando agudizó su percepción del hado, la extendió lo suficiente como para que detectara toda la ciudad, podía hacerlo ya que era una ciudad pequeña.
Sin embargo, hacer eso requería por supuesto, concentración, y estar parado en el tránsito mientras hacía eso, podía verse sospechoso, por lo que busco una banca y se sentó en ella.
-...
Fernando logró detectar una presencia de hado significativa, estaba en un edificio alto y parecía no moverse de ahí.
-(... ¿Quién es? Es definitivamente mucho más fuerte que cualquier guardia de Tempest que me haya encontrado… parece que no puede moverse de ahí… puede estar cuidando algo y no me ha detectado)
Fernando desplegó una pequeña parte de su visor y utilizó el modo telescopio para agudizar su vista hacia ese sitio.
-...
La imagen no era muy clara al no ser precisamente un dispositivo especializado para ello, pero le permitía ver una figura de su objetivo y en este caso, esa silueta era suficiente para saber quién era, pues tenía orejas de gato y su figura era la de una mujer.
-... Wu Mei Ling…
Fernando giró su dispositivo hacia donde parecía estar viendo aquella mujer.
-Los edificios no me dejan ver… no me queda de otra… tendré que acercarme.
Fernando guardó la parte de su visor y se levantó de la banca hacia ese lugar.
Tras caminar por unas cuadras, llego al sitio, parecía ser una cafetería al aire libre.
-... Vaya, que acogedor…
Fernando dio un vistazo al edificio donde estaba Wu Mei Ling.
-... (¿No me habrá notado aún? Sería muy extraño que no lo hiciera, tengo mi hado oculto pero… bueno, de momento eso no me interesa, puede que tenga tiempo contado.)
Fernando revisó detalladamente el sitio.
Analizó rápida y eficazmente a todas las personas que estaban sentadas en las mesas exteriores, ninguno le llama específicamente la atención hasta que su vista encuentra a alguien en específico.
-... … … Ella…
La vista de Fernando se cruzó con la figura de una chica de pelo morado de menor estatura que él, la chica al parecer estaba comiendo un postre de una manera muy silenciosa.
Fernando saca una foto de su bolsillo y la observa con detalle, en ella, se observa a un hombre de misma estatura que una mujer de pelo morado y otra mujer de pelo morado pero más pequeña de estatura.
-... Gao Shui… Bingo…
Fernando voltea a ver nuevamente hacia el edificio donde está Mei Ling, ella no se ha movido en absoluto
-(... Veamos cuánta libertad quieres darme).
~-~
Shui estaba disfrutando de un pay helado que Lian le había comprado en una cafetería cercana a su apartamento.
Shui sabía que era un capricho el que ella no hubiera podido olvidar los chocolates que Lian había tirado a la basura, por ello, no sabia si era correcto el haber cedido al deseo de querer un postre.
Sin embargo, Lian parecía apoyar ese comportamiento porque según ella, indicaba que Shui comenzaba a recobrar su antiguo ser.
La horrenda experiencia del último año, había hecho que Shui perdiera toda esperanza y expectación de la vida, había cerrado sus sentimientos y emociones lo mas que había podido para poder protegerse de la tortura constante a la que habia sido sometida.
Sin embargo, Lian la había logrado sacar de ese horroroso sitio a base de sudor, sangre y lágrimas de esfuerzo, solo para encontrar a su querida hermana, hecha polvo por los golpes.
Lian se había encargado de Shui por completo después de liberarla, al inicio, Shui había perdido tanta voluntad, que ni siquiera podía hacer nada por sí misma.
Para gusto de Lian, sus esfuerzos comenzaban a dar frutos, muy lentamente, pero Shui comenzaba a recuperarse, más físicamente que mentalmente, pero era un avance.
El mismo retraso en la recuperación mental de Shui, le impedía pensar el por que a Lian le gustaba que Shui comenzára a tener caprichos, pero por el mismo factor por el que Shui no lo comprendía, simplemente dejo de pensar en ello y siguió disfrutando su pay.
Lian había ido a comprar un par de bebidas y un par mas de postres así que Shui estaba sola en una mesa donde nadie la miraba, o eso pensaba ella.
-Buenas tardes señorita.
Shui giró su cabeza hacia aquella voz.
Provenia de un joven de cabello negro largo, este vestia una chaqueta deportiva y un pantalon azul.
Por alguna razón que Shui no comprendía, aquel joven la miraba como si la hubiera estado buscando.
-...
-... (tal vez fue una mala jugada el anular el tinte de mi cabello… demasiado tarde para pensar en ello) ¿Puedo preguntar su nombre?
-...
Shui no estaba segura de que responder, aquel joven estaba siendo muy cortés con ella.
En el tiempo que había sido torturada, había aprendido a ver intenciones malignas en los ojos de las personas, y gracias a ello, sabía más o menos qué esperar cuando la llevaban a torturar.
Sin embargo, Shui no sentía ninguna mala intención proveniente de aquel joven, de hecho, desde que había salido de aquella celda, no la habia sentido de cualquier persona que se le acercara, ni siquiera aquella mujer gato a la que Lian le había gritado como si la odiara de toda la vida.
-Oh vaya… que descortés de mi parte… Me llamo Fernando Ramírez del Rio, soy… eso no importa…
-... S… Shui.
-Shui ¿Eh? Es un lindo nombre.
Fernando se sentó frente a Shui.
Shui no sabía exactamente cómo reaccionar.
-Dime Shui, ¿Vienes sola?
-...
-Entiendo… (... El suéter cubre la mayoría pero…)
Fernando activó sus visión de hado y analizó a Shui.
Fernando observó cómo el cuerpo de Shui estaba plagado de heridas, cicatrices y contusiones, la gran mayoría eran graves y dificultaría los movimientos de cualquier persona normal, pero al parecer no lo hacen tanto con Shui, probablemente ya se había acostumbrado a ellos debido al largo tiempo que había pasado con ellos.
Lo que menos le gustaba a Fernando, eran esos ojos, vacíos y sin luz.
Fernando conocía bien esos ojos, los había visto de primera mano y los veía varias veces en sus misiones.
Eran los ojos de una persona a la que le habían quitado la esperanza y la expectación de la vida, los ojos de una persona que solo esperaba morir y liberarse.
Las heridas de Shui estaban vendadas y tenían rastros de estar siendo tratadas con hado, pero al parecer, quien quiera que las estaba tratando no tenía gran experiencia en ello, por lo que lo estaba haciendo de forma muy cuidadosa y lenta debido a la ineficiencia causada por la inexperiencia… o simplemente ni siquiera lo estaba intentado de verdad.
-... ¿Fuiste herida?
-...
-Ya…
Fernando acercó su mano y le dio la vuelta en una seña a Shui para que tomara su mano.
-¿Puedo?
Shui miró sin entender el gesto de Fernando durante un tiempo.
Más por memoria muscular que por conciencia, Shui acercó su mano hacia Fernando quien la tomó suavemente.
Fernando genera un par de partículas de hado de agua lo que generan miedo en Shui haciendo que tiemble un poco y repliegue su mano.
-(Oh… deben haberla tratado mal con hado…).
Fernando, al ver eso, moldea sus partículas de hado de agua hasta que parecen pequeños animales de agua, conejos precisamente.
-Tranquila, no te haré nada, mira.
Fernando hace que los conejos se acerquen a Shui quien se queda viéndolos fijamente.
Instintivamente, Shui acerca su mano a uno de ellos.
El conejo de agua hace un gesto de olfatear la mano de Shui y después frota su cabeza en la mano de Shui.
La composición de agua del conejo hace que la mano de Shui quede ligeramente húmeda, pero al parecer logra calmar el miedo de ella.
-¿Lo ves?
-...
Shui vuelve a extender la mano hacia Fernando, quien vuelve a tomarla.
-(... No soy tan bueno como Vesta o Rena en tratamiento médico, pero este nivel de heridas, si bien puede ser mucho para alguien sin hado despertado como ella… no es nada para mi, por lo que puedo manejar esto fácilmente)
Fernando, tras analizar bien las heridas de Shui, genera 3 partículas de hado de agua y genera un suave manto de agua con ellas que empieza a envolver a Shui desde su mano.
-Manantial de agua pura.
Fernando no era un gran sanador, de hecho, era de los peores de los discípulos del hado en ese aspecto, por lo que había recortado la diferencia creando una definitiva sanadora.
El idioma del activador de la definitiva de Fernando era español, por lo que Shui no había entendido el significado de las palabras, sin embargo, esas dudas fueron dejadas atrás por un motivo diferente.
El hado de agua era comúnmente generado de color azul, por lo que el agua era de color azul en las tecnicas, pero esta vez, el agua era completamente incolora.
Una sensación fresca envolvió a Shui quien giraba constantemente su cabeza mientras observaba su cuerpo, el manto de agua había envuelto su piel suavemente.
Una gran sensación de alivio y libertad comenzó a recorrer el cuerpo de Shui, las heridas, cicatrices y contusiones que la molestaban, dejaban de hacerlo.
Shui no entendía porque, pero lo podía ver en las heridas de sus manos.
Estaba siendo sanada, Lian estaba haciendo lo mismo, pero era mucho más lento y después de ello, Lian quedaba tan agotada que casi se desmayaba.
Unos segundos después, la sensación de frescor despareció del cuerpo de Shui, el manto de agua se había absorbido en su piel dejándola sin una sola gota de agua encima, sin embargo, ya no sentía molestias, las punzadas que la habían acompañado por tanto tiempo, se habían ido.
Rápidamente, con un muy leve sentido de ansiedad, Shui se quitó el suéter lo suficiente como para sacar su brazo y quitar un poco las vendas.
Lo confirmó con sus ojos, ya no tenía heridas.
La sorpresa se logró asomar en los ojos de Shui, lo que provocó una sonrisa en el rostro de Fernando.
-(Que bien, la luz de su mirada no está perdida)
-... ¿Shui?
Lian había regresado, traía un par de pasteles más en un par de cajas muy bonitas de repostería y también traia un par de cafés en sus propios vasos.
-Lian…
Lian observó a Shui, vio como se había quitado el suéter y parte de las vendas, específicamente, veía como ya no tenía heridas.
Lian dirigió inmediatamente su vista hacia Fernando, el había sacado discretamente una libreta y una pluma.
-No podía soportar el que tuviera esas heridas, así que la cure.
Mientras decía eso, Fernando estaba escribiendo en chino con gran precisión sin siquiera mirar hacia la libreta.
Lian miró con cautela a Fernando mientras dejaba las cosas en la mesa, aun no se había sentado por la misma cautela, la vida no había sido tan considerada con ella como para que un ángel que curara a su hermana gratuitamente apareciera de la nada.
-Oh vamos, no me mires de esa manera, no soy alguien peligroso.
A la vez que Fernando dijo eso, levantó el cuaderno discretamente e hizo una seña a Lian para que la leyera.
{Eres Gao Lian ¿Cierto?}
-¡!
El hecho de que Fernando conociera su nombre la sorprendió, por lo que la lógica de Lian comenzó a trabajar.
-(Me conoce, lo que significa que también conoce a Shui… no lo dijo de frente por lo que puede suponer que está alerta en caso de que nos estén vigilando… si le importa la vigilancia… no es de Tempest… ¿Quién es?) … Que… ¿Qué haces aquí?
Fernando comenzó a escribir nuevamente en la libreta mientras seguía hablando y viendo a Lian.
-Hace poco un amigo me pidió un favor, dijo que era muy importante para él, así que vine a cumplir mi promesa.
Fernando levantó el cuaderno.
{Lee Zoil está vivo}
-¡!
La sorpresa invadió a Lian, lo que había leído era impresionante para ella, levantaba una leve esperanza de que su querido amigo estuviera tan siquiera con vida.
-¿De… De verdad?
-Si, vengo de su parte después de todo.
Lian finalmente se sentó, ella sabía que si realmente venía de parte de Zoil, no había forma de que fuera una mala persona, pero necesitaba pruebas, ella quería creer que eso era cierto, pero lamentablemente no podía creer en una afirmación vacía.
-... ¿Cómo sé que es cierto?
-Mi amigo me dio esto, dijo que podía ayudarme.
Fernando sacó de su bolso la copia de la foto que Zoil le había dado y se la mostró a Lian.
-¡! (Esto es… no hay duda, ¡Viene de parte de Zoil! ¡Solo Zoil, Shui y yo tenemos esta foto!)
Un rostro sonriente se dibujó en la cara de Lian, para ella era un alivio el saber que no habían sido las únicas sobrevivientes a aquella masacre.
-¡Ahem! (Ahora… si esta persona logró llegar hasta aquí significa que logró burlar toda la seguridad de Tempest, por lo que es una persona fuerte y de confianza si Zoil le pidió esto, el problema recae en que yo no puedo saber si realmente no me están vigilando o no, mi nivel de detección puede no ser suficiente para detectarlos, y no quiero echar a perder el esfuerzo de esta persona) Uhm… ¿Puedo preguntar su nombre?
-Soy Fernando, un placer señorita…
-Lian, uhm… ¿Por qué habla de esa forma? creo que aquí solo estamos nosotros… (Vaya… creo que eso no sonó muy discreto)
Fernando comienza a escribir rápidamente en su libreta.
-Oh… es solo una costumbre mía, disculpen si suena muy extraño.
Fernando levanta el cuaderno.
{Si te están vigilando, el edificio alto detrás de ti a 1 km, no voltees}
-(Así que si nos están vigilando… eso significa que cambiaron a quienes lo están haciendo y ya no alcanzo a detectarlos… ok, sigamos de esta manera entonces).
Lian golpea un poco sus mejillas para poder poner una cara un poco seria y seguir la conversación.
-¿Cómo se encuentra su amigo?
Fernando empieza a escribir en la libreta.
-Esta bien, hace unos días se lastimo, pero con el paso del tiempo se recuperara, no se preocupe. (es normal que quiera saber de Zoil, además, para forjar un lazo de confianza creo que es mejor darles la verdad)
Fernando levanta el cuaderno.
{Fue herido en la en la batalla por la defensa de la ciudad angular hace unos días, actualmente los mejores médicos de los ascendidos se encargan de su recuperación, no te preocupes, estará bien}
-(Vaya… me siento mal por que haya sido herido otra vez pero… me alegra que al parecer se vaya a recuperar)... Uhm… entonces… ¿Usted es parte del grupo al que pertenece su amigo?
-Humm… tal vez sería más correcto decir "refuerzo" del grupo de mi amigo.
-... ¿El grupo de su amigo es lo contrario a este? (Espero que capte el hecho de que me refiero a este grupo como Tempest… si dice que si, entonces Zoil está del lado de los Ascendidos… en ellos podemos confiar)
-Si, eso es correcto, el grupo de su amigo nos pidió ayuda y hemos venido a ayudarlos, las cosas cambiarán de tornas pronto. (Bueno… eso de pronto y tornas no es como que lo pueda asegurar, pero en este momento necesito generar esperanza y confianza por medio de verdades y de lo que quieran oir).
-Ya veo… es un alivio… … ¿Puedo ver a su amigo?
-Me temo que eso sería difícil… Mi amigo no podría venir fácilmente a este lugar… y creo que a usted no le gustaría salir de aquí.
Fernando comienza a escribir nuevamente en la libreta.
-Bueno, me gusta esta ciudad, es muy bonita, creo que regresaré aquí a menudo… sin embargo, por hoy creo que regresaré a mi casa… ya se está haciendo tarde.
Fernando levantó la libreta.
{Las ayudaremos, pero nos puede tomar un poco de tiempo, sean pacientes por favor}
Fernando tiende su mano a Shui quien la sujeta en forma de despedida, después Fernando tiende la mano a Lian.
-Bueno… espero que nos volvamos a ver.
-Si…
Lian tiende la mano a Fernando para despedirse.
-... Oh…
Después de darse la mano, Lian siente una especie de tarjeta de papel de su mano y la levanta discretamente para poder verla.
{Tratare de estar en contacto lo más que pueda, no puedo darte un numero de telefono o algo rastreable debido a que las pondría en peligro. si ves una pequeño pájaro de agua, significa que estaré cerca y él te guiará, yo las buscaré, no se preocupen}
Tras dejar la tarjeta a Lian, Fernando se aleja de la cafetería.
-... (Confío en usted… Fernando).
~-~
Fernando ya se había alejado lo suficiente de la cafetería así como de Lian y Shui, ya no estaba a la vista de nadie ahí.
Sin embargo, por alguna razón, se había adentrado en un callejón un poco oscuro y estrecho.
-...
Fernando caminó hacia dentro del callejón hasta que estuvo lo suficientemente adentro.
La razón era sencilla, lo estaban siguiendo.
Pero Fernando había notado otras intenciones en la persona que lo seguía, por lo que había decidido hacer una apuesta, si salía mal, simplemente podía desenganchar la pelea y salir de ahí lo más rápido posible.
-... ¿Y bien? ¿Te limitaras a observar?
Fernando habló al cielo, sin embargo, él sabía que la persona que lo seguía lo había oido, pues estaba lo suficientemente cerca como para detectarla pasivamente.
Del techo de uno de los edificios que formaban en callejón, una figura se puso de pie.
Rápidamente, bajó del edificio con una pirueta y aterrizó suavemente en el suelo frente a Fernando.
Era una mujer, muy hermosa por cierto. Aquella mujer portaba un Qipao corto de color rojo con dorado, su cabello largo de color negro resaltaba debido al rojo de su vestimenta; las medias color negro y los ligeros que portaba se habian hecho lucir debido a la pirueta que habia hecho para aterrizar.
A pesar de la espectacular figura de aquella mujer, lo que más destacaba de ella, eran orejas orejas de gato negras las cuales lucía orgullosamente como miembro de los hombres gato.
-Sabía que eras tú, Wu Mei Ling.
-...
Mei Ling acomodo su postura para pararse correctamente.
-... ¿Por qué no entras en guardia?
-Porque se que no vienes aquí a pelear.
Fernando respondió la pregunta de una forma muy ligera, tal vez para demostrar que aunque Mei Ling tratara de enfrentarlo, ella no podría ganar debido a la evidente diferencia de capacidades o tal vez solo por el ego característico de Fernando.
Lo que sí era un hecho, es que la afirmación parecía haber aliviado un poco la tensión de Mei Ling.
-¿Cómo estás tan seguro de ello?
-Me estuviste observando ¿Cierto?, Desde que Vesta te encontró supusimos que realmente no tenías malas intenciones, pero no estabas tomando el camino correcto. Si hubieras estado devotamente del lado de Tempest, o aun lo estuvieras, no me hubieras dejado hablar con personas tan importantes como las princesas.
-...
-¿Y bien? ¿Qué es lo que necesitas?
-... Voy a ir directo al grano, ¿Porque están luchando contra Tempest?
-Mmmm, esa es una pregunta cuya respuesta variará un poco dependiendo a quien le preguntes.
-Eso no es lo que te pregunté.
-Oh… perdón… Ahem. Nosotros luchamos contra Tempest debido a que es nuestro deber, los protectores de las facciones de Hado nos encargamos de proteger a la población de la gente que sabe usar el hado pero lo utiliza para malos propósitos. Cubrimos los ataques y tratamos de no involucrar a la población en medida de lo posible, sacrificamos nuestras vidas en son de brindar una vida segura y libre de ataques terroristas de hado.
-... ¿Y por qué ocultan el cómo entrenar el hado?
-¿Has oído hablar de la guerra ancestral?
-¿La guerra ancestral? Creo haber oído ese término un par de veces…
-Fue una guerra de escala mundial causada porque el hado era de conocimiento público.
-¡!
-Jamás obligamos a nadie a aprender el hado, jamás los obligamos a pertenecer a este mundo, pero si deciden hacerlo, los entrenaremos y haremos que cumplan las reglas que nuestros antepasados forjaron a base de sangre y sacrificios en aquella época. Sin importar que época sea, si un poder que podría considerarse anormal es descubierto, jamás faltará el que quiera usarlo para dominar, por ello se oculta de la población… pero aun así, surgen grupos terroristas que aprenden a usar el hado, formando organizaciones como ARASHI… o Tempest.
-...
-¿Necesitas algo más?
Mei Ling se quedó en silencio un momento, sus orejas estaban caídas en señal de tristeza.
-... ¿Ustedes… pueden vencer a Tempest?
-Esa es una pregunta extraña, no se trata de si podemos o no, tenemos que hacerlo. Por culpa de Tempest, la gente de China está sufriendo, el número de muertos ya ha superado las 6 cifras y podría estar a más de la mitad de las 7… daremos hasta el último aliento de nuestra vida para detener a Tempest, y eso incluye evitar que consigan la técnica legendaria de clase sagrada, ya sea que la consigamos nosotros o simplemente evitemos que caiga en manos equivocadas.
-Ya veo…
-Aun así, creo que podemos hacer caer a Tempest, tenemos un brutal estratega de nuestro lado, con el suficiente tiempo y la información, Tempest caerá tarde o temprano.
Mei Ling esboza una muy discreta sonrisa la cual Fernando alcanza a ver.
-Bien, son suficientes preguntas de tu parte, supongo que es justo que yo pueda hacer algunas.
-Bueno… si…
-¿Ya descubriste la verdad de Tempest?
Mei Ling esbozó un rostro difícil de comprender.
-Tomaré eso como si… pero parece que aún mantienes tu cordura, me alegra saber que no hayas caído en la locura.
-... Estuve a punto de…
-Ya veo… creo tener una idea de que quieres lograr pero… déjame preguntarte esto… ¿Qué piensas hacer ahora?
-... Las personas en quienes confiaba… no puedo confiar en ellas… la que me acompañó desde pequeña… hizo algo imperdonable…
-La masacre de la aldea en la cordillera Qin… solo la guardia de la aldea fue cosa tuya ¿verdad?
-... Mi hermano… eso… yo…
-Entiendo… debe ser difícil, pero no contesta mi pregunta, ¿Que vas a hacer ahora?
Mei Ling levantó su mirada con determinación y miró fijamente a Fernando.
-Lo vi, tú puedes devolverle la luz de los ojos a esa chica… ustedes pueden.
Mei Ling le lanzó un pequeño rectángulo a Fernando quien lo atrapó suavemente, era un microdriver de neón.
-451786, esa es la contraseña del driver.
-¿Por qué me das esto?
-... Tempest está mal, está haciendo sufrir a gente inocente por un motivo absurdo… no hay nadie en quien pueda confiar de parte de mis… de los que creía eran mis compañeros… y… no puedo quedarme de brazos cruzados, yo sí puedo hacer algo.
-... ¿Y que podría contener esto?
-... Llámalo una ventaja estratégica… son los detalles de un transporte que ocurrirá pronto y dejará vulnerable una ciudad pilar… no se como probarte que es información verídica pero… haré todo en mis manos para un fin correcto… por ello quité los guardias de Tempest, no les dejaban hacer realmente nada… aunque ahora… tengo la confianza de gente que no quisiera que confíe en mí… y la que quisiera que lo hiciera… desconfía de mí… con justa razón.
-Entonces… ¿jugarás el papel de espía?
-Si eso sirve para hacer caer a Tempest… los ayudare todo lo que pueda.
-Entiendo… animo con esas dos… hacer que entiendan tus intenciones será difícil.
-Es un mísero precio comparado con los pecados que he cometido, estoy dispuesta a aceptarlo… pero también haré todo lo que pueda para expiarlos.
-Suerte. Si podemos confirmar la información, contare contigo.
-Claro.
Fernando salió rápidamente de la ciudad alejándose así de Mei Ling.
-Aquí Fernando, localice a las princesas… y también… Tengo posible información importante.