Poseían un aura orgullosa e intimidante, claro que para los Everett esto sería como tratar con algún nuevo ducado de imperios extranjeros, arrogantes y orgullosos, pero clara que debían mantener amabilidad en todo momento.
La familia invitada fue llevada primero a tomar el té, para después estar en el pequeño banquete en donde se haría oficial la propuesta ante los padres de la futura novia. En la sala de té, los padres de ambos conversaban algunos temas de la capital así como los hijos mayores mantenían una conversación aparte de los adultos, en cambio la pareja que pronto estaría comprometida estaban sentados en un lugar aparte de las demás conversaciones.
Ares tomaba el té con tranquilidad, era uno de sus sabores favoritos, lavanda, fresco y de buen olor que era agradable al tomar, en cambio Evan tomaba el té de una forma más delicada con elegancia, digno de sus modales que debía tener para subir al trono, esto no le parecía extraño a ella, era claro que la mayoría de los candidatos debía tener ese tipo de etiqueta, hasta ese momento no cruzaron alguna palabra, era incómodo para ambos.
— ¿Disculpe quiere otra tasa de té? —. Evan levantó la mirada algo sorprendido por la repentina pregunta.
— Claro, por favor. Y puedes hablarme formalmente. —. Ella sirvió el té, y cruzaron miradas. — Sabes pronto estaremos comprometidos.
— Si... Eso lo sé, pero me tomó por sorpresa, o porque es la primera vez que te veo —. Lo miro directamente, sabía que el tenía cierta intención de intimidarla.
— Eso es correcto, pero si quiero tener una buena relación con mi futura esposa debo tener una buena comunicación contigo querida Ares —. No podría esperarse menos de aquel hombre, el favorito del emperador.
— Me alegra escuchar eso, yo también espero que nos llevemos bien en nuestro futuro matrimonio Evan —. Llamarlo por su nombre era una falta de respeto, pero la expresión de él no cambió, sonrió un poco para ella.
— El honor será mío de poder contraer matrimonio contigo Ares —. Ambas miradas eran fuertes, pero ella sabía que este hombre no podía ser quien tomara el trono.
Las pequeñas charlas terminaron, ya era hora del banquete, cada familia tomó el lugar específico para cada uno, los padres debían estar a un lado del novio y la novia, estos debían quedar frente a frente, pues sería el día donde ambos quedarían unidos en un compromiso que debía ser "irrompible".
— Yo Braiden Laurent, heredero del ducado Laurent, al servicio del emperador, mi lealtad pertenece a Salem Di Andromeda, entrego a mi cuatro sucesor Evan Laurent en compromiso.
— Yo Delanie Laurent, esposa del heredero al ducado Laurent, entrego a mi cuarto hijo en nombre del imperio Salem Di Andromeda, en compromiso.
Citaron esas palabras como si estuvieran esperando por salir hace años, la determinación al seguir el compromiso y la voluntad del emperador Hugo, eran piezan claves en el matrimonio que se realizaría. Al ser la voluntad del emperador en persona, teniendo como favorito a su hijo la familia Laurent llevaría a cabo cualquier cosa por el orgullo de ser la casa que dio a luz al futuro emperador.
— Yo Evan Laurent, cuarto hijo de la familia Laurent, candidato a sucesor del imperio, elijo como futura consorte real a la primogénita del ducado Everett, para unirnos en compromiso por el imperio Salem Di Andromeda.
Claro... Ella se dio cuenta con solo mirarlo, la postura, el traje, sus palabras fuertes, llenas de orgullo y privilegio, la voz grave, su apariencia era algo importante, un emperador debía ser el rostro de su imperio, ese rostro hermoso claro que debía tener una esposa digna, el mismo emperador Hugo la había elegido por una razón.
— Yo Benjamin Everett, segundo hijo del gran ducado Everett al servicio del emperador Hugo, mi lealtad está al nombre del imperio Salem Di Andromeda, entrego a mi unigénita.
— Yo Rosela Everett Hana, unigénita del gran ducado Hana, esposa de Benjamin Everett, entregó a mi única hija, por el imperio Salem Di Andromeda, en petición directa del emperador Hugo.
Rosela al ser hija de uno de los ducados con mayor poder militar del imperio, su familia al igual que la de su marido, tenían una relación más estrecha con el emperador, eso significaba que su posición social era mucho más elevado entre todos, incluyendo a los candidatos al trono, esa era una razón para que tuvieran que tener una mejor presentación que el ducado Laurent, además de poder decir el nombre del emperador sin tener alguna restricción.
— Yo Ares Everett Hana, unigénita del matrimonio al servicio directo al emperador Hugo, por lealtad al imperio Salem Di Andromeda, aceptó el compromiso con el cuarto hijo del ducado Laurent candidato oficial al trono.
Un nudo en el estómago, el sudor frío recorriendo su cuerpo, eran advertencias de cosas que en el futuro no serían buenas para la recién comprometida Ares, todos levantaron sus copas llenas de vino, brindando por el compromiso de la casa Laurent y la casa Everett Hana.
Sin dejar de mirarse los jóvenes recién comprometidos tenían pensamientos muy diferentes sobre el futuro. Ella pensó que tal vez no sería tan malo perderse en ese mar azul de los ojos de su prometido.
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