Chapter 54 - Pisos de madera

Los pasillos de madera y la luz colorida de las lámparas de aceite fueron lo que terminaron de sacar del aturdimiento a Adam y los niños, no se sentía igual que atravesar una pintura, atravesar este espejo te dejaba algo atontado.

*Ja, ja, ja* La risa del viejo en su espalda fue lo primero que escuchó Adam tras salir al otro mundo.

—Me salvaste la vida, héroe—Dijo entre risas el viejo en su espalda—Como recompensa déjame mostrarte un buen truco: acércame al espejo.

Adam se dio la vuelta y dejó al viejo al costado del espejo. El espejo de este mundo era distinto al del mundo reverso: estaba hecho de plata y tenía la decoración de diablitos con tridentes. Lo más llamativo era que la inscripción grabada en el espejo había cambiado y en el idioma del piso medio decía: 'Mira tu suerte, mira tu condena, mira tu muerte, pero no mires de más o te perderás'

Tras acercarse, el viejo estiró la mano y la metió en el espejo, sumergiéndola en su superficie, luego la retiró y sacó un libro verde. Dejó el libro verde en el suelo y volvió a meter la mano dentro del espejo.

Inmediatamente, el libro verde se hundió en el suelo de madera, como si se tratase de agua hasta desaparecer de la vista de Adam. Acto seguido el viejo volvió a sacar el libro verde del espejo y dijo con una sonrisa:

—Si algún día pierdes algún libro que esté vinculado a tu alma, puedes encontrarlo de esta forma. Por ejemplo: la biografía de tu padrino. Si se destruye la biografía puedes sacarla de nuevo también, pero envuelve tu mano con hojas de caracteres mágicos para hacerlo.

—Eso no parece una biografía…— Dijo Adam observando que en el lomo del libro verde estaba escrito el nombre Abel, mientras que las biografías eran todas idénticas y solamente se diferenciaban por color, por lo que no tenían nada escrito en sus tapas o lomo.

—Es una biografía, pero una bastante especial…—Comentó el viejo con una sonrisa irónica—Espero que te sea útil el consejo, por lo demás recuerda lo de envolver tu mano, si no se te congelara la mano al generar otra biografía idéntica.

—Es un buen consejo, muchas gracias—Dijo Adam con una sonrisa bastante feliz por haber ayudado a alguien y descubrir un secreto a la vez—¿Dónde te llevo para que te curen?

—A los guardias de las escaleras—Dijo el viejo mirando sus piernas, el sangrado se había detenido por el torniquete que había hecho, pero no aguantaría mucho si no se curaran—Arriba está la enfermería, así que estaré bien, solo ayúdame a llegar a los guardias de las escaleras, héroe.

—Perfecto, también vamos para arriba—Dijo Adam volviendo a tomar al viejo, para su sorpresa el viejo había dejado a su padrino en el suelo, por lo cual pregunto:

—¿No te preocupa que alguien más use a tu padrino?

—Al parecer reviviste con pocos recuerdos, héroe…—Respondió el viejo con una sonrisa irónica—Nadie puede utilizar un libro vinculado a tu alma, pero tampoco te culpo, los buenos métodos de resurrección son complicados de conseguir. En mi primera resurrección también había olvidado casi todo… Fue realmente problemática.

—¿Reviviste?—preguntó Adam mientras avanzaba hacia el hexágono 3 para llegar a los guardias.

—Una cuantas veces: ¡Nunca me rindo!—Dijo el viejo con una sonrisa amarga—A la larga la mayoría de bibliotecarios muere porque el tiempo te mata de infelicidad. Pero yo nunca me rindo, algún día voy a conseguir lo que busco.

—Lo que buscas debe ser bastante importante...—Respondió Adam con una sonrisa amarga—Para haber sufrido tantas veces este mundo. Yo ya no sé si aguantaría una sola resurrección más.

—No, solo es un libro inútil—Respondió el viejo con una sonrisa amarga—Es otro libro verde y su lomo también tiene la inscripción: 'Abel', durante mucho, mucho tiempo, lo vengo buscando, pero sigo fallando.

—Debe ser muy frustrante—Comentó Hermes con algo de pena—Haber vivido tantas vidas y no haberlo logrado.

—Todo lo contrario…—Respondió el viejo con calma—Lo divertido es el proceso de buscarlo, probablemente lo tire al infinito cuando lo encuentre. Aunque al parecer me estoy quedando sin tiempo…

—¿Por qué no te queda tiempo? No me pareces tan viejo—Comentó Apolo con curiosidad

—Soy joven, pero la biblioteca no lo es…—Comentó el viejo de forma críptica—Parece que tendré que comenzar mi búsqueda de cero en unos años, pero bueno, al menos eso también será emocionante.

—Espero que lo logres antes de que mueras…—Comento Apolo tratando de darle ánimos

Finalmente, el grupo llego hasta las escaleras, que por suerte estaban bastante cerca. Adam, sabiendo que las preguntas llegarían, se sacó los anteojos. Con el tiempo el joven descubrió que su identidad de héroe solía solucionar una gran cantidad de problemas y más aún con los guardias.