Capítulo 6.
Jane se levantó temprano para desayunar y hablar con su madre antes de ir a trabajar. Jane se vistió para después guardó su uniforme, al salir de su habitación su madre estaba concentrada haciendo el desayuno, así que se sentó.
Después de un rato la madre de Jane terminó, comenzaron a desayunar, durante todo el rato que pasó Jane no había dicho nada por miedo a que algo sucediera antes de poder firmar el contrato de su nuevo trabajo, así que estaba dudando en decirle hasta que tomo el valor para contarle.
—Mamá...—levanta la cabeza—tengo que decirte algo.
—¿Qué pasa? No hablaste en todo el desayuno.
—Ayer hable con un empleado de una compañía muy buena, me ofrecieron trabajo y una buena paga—sonrisa ligera—.
—Estoy orgullosa de ti, hija, como siempre lo estuve y estaré.
—Bueno, debo irme o llegaré tarde al trabajo.
Jane la abrazo y se fue corriendo, mientras miraba la hora de cada momento que pasaba hasta que llegó y vio a Kelly hablando con alguien que no se distinguía afuera en las ventanas de la tienda. Ella entró sin ninguna importancia de con quien hablaba hasta que escucho su nombre.
—Ahora no saludas a tu mejor amigo Jane.
—¿Ian? —se da la vuelta mirando a Ian—¿Qué haces aquí?
—Un "hola, ¿cómo estás?" sería mejor, pero estoy aquí para ir a un club esta noche.
—Tengo que ir a un lugar antes de las 6pm así que no se si pueda ir.
—De eso no te preocupes te llevaré y después iremos a que te cambies, hoy conocerás hombres guapos y se divertirá.
—Bien, pero aún falta mucho para que me vaya, así que te puedes ir y te veré luego—lo empuja despacio hasta la salida—Gracias por venir.
—Está bien, ya me voy.
Después de que se fue Ian, ella sólo suspiro y miró a Kelly con una sonrisa para después ponerse a trabajar de nuevo, todo el día se la paso concentrada, pero Kelly la detuvo antes de que siguiera con lo siguiente que debía hacer.
—Jane...—la toma del brazo—puedo hablar contigo.
—¿Qué sucede Kelly?
—Qué sucede... Eso es lo único que dirás, ¿qué te sucede a ti? Llegas, te comportas totalmente diferentes y después te vas sin decir adiós.
—Lo lamento, he estado distraída todo el tiempo y no pensé en cómo te afectaba a ti. No era mi intención.
—Bueno, ¿qué tanto piensas?
—Cosas sin importancia, pero trabajaré en otro lado desde mañana.
—¡¿Qué?! ¿Dónde?
—No digo que aceptare, pero tal vez en la compañía Feng, hicimos un acuerdo y hoy iré para saber si firmare o no.
—Eso es asombroso, estarás trabajando en uno de los mejores lugares de la ciudad.
—No es gran cosa, mejor dime, ¿iras con nosotros en la noche al club?
—Quisiera, pero debo resolver cosas importantes. Es mejor que trabajemos si no terminará mal—evadiendo el tema—.
—¿Eh? Está bien.
Durante toda la tarde sobrante no dejaron de hablar sobre temas sin importancia hasta que llegaron a ser las 5pm y Jane se fue para verse con Iker nuevamente, ella tenía planeado irse antes de que llegara Ian, pero él llegó temprano para recogerla.
—"Okey aún no llega, puedo..."—.
—¡Jane!
—¡Ian! ¿Tu... qué haces aquí?
—Vine por ti, ¿se te olvido? Sube te llevaré a donde quieras— baja del auto para abrirle la puerta—.
—Ah... Sí, claro—subiéndose al auto—.
—Bueno, ¿a dónde la llevo madame?
—A la compañía del grupo Feng, pero no preguntes el porqué.
—Está bien, sabes que no me gusta entrometerme cuando no sea conveniente.
Durante todo el camino Jane platicó con Ian sobre qué harían esa noche en la fiesta, después de un rato llegaron a la compañía Feng, Jane le dijo a Ian que la esperara mientras regresaba.
Cuando entró a la compañía vio demasiada gente con uniforme y Jane se sintió diferente, así que se miró con una indiferencia, pero decidió ir a preguntar por Iker con la secretaria.
—Ehm... Señorita... Señorita—intenta llamar su atención—.
—Espera una persona me habla, ¿qué quiere...— la juzga con su mirada—Usted?
—Ah, ¿puedo ver al señor Takagi?
—Ja... Crees que solo diciendo eso te dejaré pasar niña, eres una de muchas que quieren verlo para llegar con el presidente Feng
—Lo lamento, pero no está entendiendo… No me interesa ver o conocer al presidente Feng, vengo a ver a Iker Takagi.
—Eres tan molesta, ¡¿No entiendes que te vayas?!
—No puedo irme, señorita.
—¡Eres tonta, dije que te fueras! —levanta la mano para darle una cachetada—.
Jane no sabía qué hacer, sabía que si la detenía la tomarían a ella como quien la lastimó primero, así que no hizo nada, pero antes de que pudiera darse cuenta la mano de alguien detuvo la mano de la secretaria.
Ella levantó la cabeza para ver quién la había detenido y vio a James Feng con una cara seria, mientras veía a la secretaria y sostenía a Jane con la otra mano.
—Presidente...—baja la mano—.
—Está señorita te dijo que vino a ver a mi asistente y no la dejaste pasar.
—No presidente... Ella me insulto y yo solo...
—¡Cállate! —mira a Jane—¿Qué sucedió aquí?
—Ah...—sorprendida—ella no me dejaba ver a Iker, digo, al señor Takagi, aunque le dije que era necesario y me empezó a gritar hasta que me intentó pegar.
—Bien, vamos adentro—se la lleva de la mano—esta despedida, recoja sus cosas en menos de cinco minutos o te iras sin ellas.
—Pe…Pero... Presidente, lo lamento, por favor no.…—llora mientras se tira al suelo—.
Mientras Jane iba junto a James a su oficina no dejaba de pensar en lo que había pasado con la secretaria y como la había salvado James. —"Él me ayudó, pero porque me siento tan extraña... No, debo concentrarme"—.
Cuando Jane regresó a la realidad ya estaban en la oficina de James y estaba intentando que ella le hiciera caso para seguir con el tema del contrato.
—¿Señorita Yagami?... señorita Yagami...
—¡¿Ah?! Lo lamento, estaba pensando en algui... Algo—lo mira a la cara—¿qué preguntaba?
—Antes de que te distrajeras en alguien, le decía que mi asistente Takagi ya me contó sus condiciones.
—Bueno, ya que las sabe, ¿aceptara o no?
—La segunda condición es un no.
—Entonces me iré de aquí, fue un gusto—se levanta del asiento—.
—¡Espera! Está bien, entonces serás mi pareja solo firma el contrato que tienes enfrente.
—Me alegro que entienda—firma el contrato—mucho gusto, soy Jane Yagami, su mujer por un mes con la paga de 15,000 dólares.
—Bien, nos vemos mañana.
Jane salió de la oficina haciendo una reverencia, después de salir Ian la seguía esperando, así que se fueron para ir al club. Después de unas horas los dos estaban llegando al club, ella llevaba un vestido que le ajustaba y parecía muy sensual en ella, mientras que Ian tomaba le ofrecía a Jane que tomará, pero se negó hasta que, después de un rato de insistencia aceptó.
—Bébelo Jane, es un club se supone que debemos divertirnos.
—Está bien, pero deja de insistir—bebé el trago que Ian le ofrece—ah... Esto es...
—Debiste beberlo despacio, ¿quieres otro?
—No creo que sea bueno, dije que ya no bebería—pone el basó en la mesa—.
—Vamos, Jane, solo dos más, te aseguro que ni te sentirás ebria.
—¿Por qué eres tan bueno convenciendo? Está bien…
Cuando Jane ya había tomado esos dos tragos más, no tenía ni idea de donde estaba y sabía que Ian estaba bailando, mientras ella esperaba hasta que alguien se sentó al lado de ella con una sonrisa y aunque ella estaba un poco ebria pudo distinguir su cara fácilmente.
—Hola linda, ¿viniste sola a este club?
—Yo... No le conozco, señor—le apunta con el dedo en la nariz—.
—¿Quieres ir conmigo a mi habitación de arriba? Lo disfrutarás de verdad.
—No, yo no me junto con extraños—se voltea—quiero quedarme aquí.
—Vamos, no te pasara nada—la toma del brazo y la cintura—.
—¡Dije que no!... No soy lo suficientemente tonta—pelear por alejarlo—.
—Deja de pelear, linda, tienes un bonito cuerpo. Vamos a divertirnos.
—Dijo que la dejaras en paz idiota—lo toma del brazo fuertemente al hombre—.
—¿Tú quién eres?¡¿Acaso quieres morir?!
—"Mhm, me lo dice a mi o al hombre lindo... Que importa, tal vez ambos están locos."
El hombre que la había salvado la cargo, ella intento negarse, pero él le prometió que no haría nada, también que no podía, así que Jane acepto, cerrando sus ojos para relajarse, ya que sentía que podía confiar en aquel hombre, no tardo en abrir los ojos y estaba siendo cargada a una habitación a que descansara, miro que era el presidente Feng, parecía un poco molesto, aunque su tono de voz era tan tranquilo.
—¿Tu…tu qué haces aquí?
—Pará ser tu salvador me mordiste conejito.
ANTES DEL CLUB CON KELLY:
Kelly iba saliendo de trabajar a las 8pm se encontró con el presidente Feng en su auto, ella estaba confundida, sin embargo, James le pidió que subiera al auto, aunque no entendía, estaba temblando por dentro.
—¿A dónde fue Jane?
—¿Por qué le diría? Ella es mi amiga y no puedo traicionarla.
—Soy su pareja, ¿acaso quieres que te muestre donde lo dice? No querrás que termines perdiendo todo, tu madre enferma necesita que consigas dinero.
—Entiendo, confiare que es cierto, ella está con su amigo Ian, ambos fueron aun club nocturno a encontrarle pareja.
—"Esa mujer, acaba de firmar un contrato como mi mujer y hace esto, eso no se quedará así, te encontrare mi conejito"—.
—¿Está bien, señor Feng?
—Bájate del auto, tengo asuntos que atender con tu amiga.
—Abajo del auto—"Lo lamento, Jane, espero que resultes bien"—.
James no dejaba de pensar en lo que le había dicho Kelly, no podía creer que después de que firmara un contrato con él sobre ser su amante, aunque no debía meterse en su vida privada, le molestaba demasiado.
No tardó mucho en llegar al club y encontrar a Jane peleando con un hombre, así que la ayudó y se la llevó a su suite vip para que descansara, ya que no podía tocarla, era un hombre de palabra y contrato en esta ocasión, en el camino Jane parecía estar soñando en comida, mordió a James haciendo que él se enfureciera hasta que llegaron a la habitación y en poco tiempo Jane recuperó la conciencia, aunque estaba aún un poco ebria.
EL PRESENTE:
Jane se levantó rápidamente, aunque un poco mareada, intentó irse antes de que le hiciera algo el presidente Feng, pero él la tomó del brazo y la cintura sin dejarla irse.
Mientras la miraba a los ojos ella seguía ebria por tomar tanto, así que no sabía lo que hacía.
—Ahora que lo veo bien, se ve muy lindo presidente—le sonríe—pero quiero irme, porque no quiero estar con alguien que firmo no tocarme y aun odio.
—¡Tu!... Deja de odiarme, te prohíbo que me odies y estás ebria para irte.
—Tú no eres nadie para detenerme, chico lindo, y mucho menos para decirme que me prohíbe algo, así que adiós.
—¿Qué quieres para que no te alejes? Ya firmamos el contrato de que serias mi amante, pero sigues alejándome.
—Yo pude aceptar, sin embargo, un pedazo de papel es solo eso—se aparta—puede ser lindo, pero no me conoce nada.
—¡Tu nombre es Jane Yagami, tienes 24 años! Y... Pedí esto para ti—muestra una bandeja de dulces frente a ella—.
—Tu… No, sin importar lo mucho que me quieras convencer, te odio y siempre te odiare—toma un chocolate—ahora si me voy lindo.
Antes de que pudiera irse se tropezó con la alfombra y terminó cayéndose encima de James haciendo que se besara con él y sus ojos se encontraron.
Jane estaba realmente cerca, pero intentó levantarse hasta que James la tomó de la cintura y no la dejó ni pararse del suelo.
—¡Déjame ir! —lo golpea en el pecho—.
—No soportas la idea de estar cerca de mí, pero me acabas de dar tu primer beso.
—Eso fue un accidente, déjame ir—molesta—yo no quiero estar cerca de ti.
Mientras los ojos de James no dejaban de mirarla, Jane no podía creer que había perdido su primer beso con el presidente que tanto odiaba, pero con sus ojos sollozos, aunque también molestos, lo miró fijamente y se sentía extraño para ella con solo verlo.