Cuando llego al sitio donde vivía, Alex King dejos sus cosas en un rincón, Estaba en el primer piso de una residencia, era húmedo en verano, y frío en el invierno, y casi no hay privacidad, el apartamento donde vivía era realmente pequeño, y solo contaba con una habitación, y esta pertenecía a su madre.
Desde muy pequeño, Alex solía compartirla con su madre, pero a medida que fue creciendo decidió dejar la habitación para su madre, y solía dormir en el suelo en la pequeña sala.
Alex fue directo a la habitación de su madre, Ella le había encargado llevar hoy al hospital, cuando fuera a visitarla, una pequeña caja que era de mucho valor sentimental para ella, al entrar a la habitación, él reconoció de inmediato la caja, desde pequeño recordaba que su madre cuidaba esa caja como si de un tesoro se tratara, y siempre que el intentó averiguar el contenido de la misma, su madre lo evadía.
Sentía mucha curiosidad, de por qué su madre pidió llevarla hoy al hospital.
Al llegar al hospital, Alex la encontró sentada en su cama, La señora Estela estaba en sus cuarenta, pero quizás por el deterioro de su enfermedad, se veía como una mujer de avanzada edad.
«Madre, ¿Qué haces sentada en la cama? Sabes que tienes que descansar».
La señora Estela sentada a la cama lucia realmente preocupada.
«Alex, hijo, acércate, siéntate a mi lado, ¿trajiste lo que te pedí?»
Alex King asintió entregándole la pequeña caja a su madre.
«Necesito contarte toda la verdad sobre quien es tu padre».
Alex frunció el ceño, como si su temperamento hubiera cambiado, y dijo fríamente: «Madre, yo no quiero saber quién es ese hombre, si él no se preocupó por nosotros, ¿Por qué debería preocuparme por él?»
«Hijo, primero escucha lo que tengo que contarte, y después de que sepas la verdad, tomas una decisión».
Alex se sentó al lado de su madre, mientras esperaba a que ella le contara su historia.
«Hace 25 años yo trabajaba en casa de la familia King, una de las grandes familias en Soleil City, yo era la dama de confianza de la señora de la casa Charlotte».
En ese momento Estela no podía contener las lágrimas mientras hablaba.
Estela miró a los ojos a Alex mientras le decía: «En casa de la familia King conocí a tu padre, Alexander King, él era el único hijo del hermano menor del patriarca de la familia, desde niño estuvo estudiando en los Estados Unidos, y después de graduarse regreso a la familia.
Poco después nos enamoramos, y nos casamos en secreto de la familia, para que no se opusieran a nuestra relación.
Pero eso no le agrado al patriarca de la familia, y desde entonces siempre vio de mala manera a tu padre».
«¿Qué paso con mi padre?» Dijo Alex sorprendido.
Estela dijo apresuradamente: «Hijo, tu padre fue diagnosticado con cáncer de páncreas cuando tú tenías 2 años, debido a que no teníamos dinero para pagar la factura del hospital, tu padre murió cuando tú tenías 4 años».
Alex estaba muy sorprendido, «Pero madre, si mi padre era de la familia King, ¿cómo no tendría dinero para pagar al hospital?» Pregunto Alex, sintiendo como todo su mundo se derrumbaba con esa simple pregunta.
Estela ya no controlaba su llanto: «Hijo, aunque tu padre era de la familia King, la familia nos abandonó a nuestra suerte a la familia de tres».
«¿Pero por qué nos abandonaron? ¿Por qué no nos querían?».
«Hijo, hace 17 años la familia King desterró a tu padre.
Ellos se molestaron con tu padre, porque tu padre se empeñó en invertir en una nueva empresa en los Estados Unidos, del ramo de empresas tecnológicas e internet.
Y quería que la familia King invirtiera parte de su capital en ella.
El patriarca de la familia King, el tío de tu padre, le prohibió a tu padre invertir en esa empresa, en ese entonces.
Años antes, innumerables empresas se fueron a la quiebra y muchos inversores fueron arruinados por unas empresas similares.
Pero tu padre era muy tenaz, y decidió invertir la mayoría de su propio dinero en comprar acciones de esa empresa, y así demostrarle a la familia King, que él tenía razón.
Pero poco después, el precio de las acciones empezó a bajar, y tu padre estaba perdiendo dinero.
Cuando la familia King se enteró, convocaron a una reunión donde le exigieron a tu padre, que vendiera todas las acciones que acababa de comprar, y se sometiera a arresto domiciliario durante dos años, por desobedecer al patriarca de la familia, o sería desterrado.
Porque el fracaso de tu padre, sería tomado como una vergüenza para la familia King.
Y como tu padre se negó, fuimos desterrados de la familia».
Alex muy confundido pregunto: «Entiendo, pero hay algo que aun no comprendo.
¿Por qué mi padre no vendió las acciones que había comprado para pagar su tratamiento?».
«Cuando tu padre compro las acciones, las coloco en un fideicomiso a tu nombre, y hasta que tú cumplieras 22 años, esas acciones y el dinero generado de ellas, no podían ser tocados.
Aún falta un año para que se cumpla el plazo.
No debía decirte nada aun, pero me dio mucho miedo el que pasara algo, que me impidiera contarte toda la verdad, y por eso decidí adelantar todo.
Tu padre tomó esa decisión, mucho antes de saber que sería desterrado de la familia King, y cuando todo paso, ya era muy tarde para deshacer lo hecho.
En esos días fue cuando la enfermedad de tu padre empeoro, pero él se negó a usar el poco dinero que le quedaba, en comprar medicina.
Tu padre me dijo, que no seriamos aceptado de nuevo en la familia, y que el dinero que quedaba, tenía que durarnos hasta que se cumpliera el plazo del fideicomiso.
No quiso ser tratado, porque decía que con el dinero que quedaba, no podría curarse, y solo llevaría a nuestra familia de tres a la ruina».
Estela no habló más, solo le paso a Alex la vieja caja.
Alex King Tomó la caja de madera en su mano y la miró con atención, luego, con un poco de fuerza, abrió la caja de madera con un chasquido.
Cuando la caja de madera se abrió, una fragancia extrema escapó de repente, y Alex tomó un sorbo, solo sintiéndose renovado. Dentro de ella no había muchas cosas, solo dos viejos sobres, una carpeta con documentos y muchas fotos desgastadas.
Al apartar el sobre, una foto resalto, en ella se veía a una pareja joven con un bebe de brazos, la mujer también era bastante alta, tenía el cabello largo, y su piel era blanca como un copo de nieve.
Ella fue impresionante; Sin embargo, esta atractiva mujer parecía gélida y parecía preocupada por la expresión de sus cejas.
El hombre era alto, vestía un traje bastante elegante, y su rostro denotaba inteligencia, su mirada estaba dirigida a la mujer de la foto, y por como la estaba viendo se podría decir que este hombre amaba mucho a la mujer.
Detrás de la foto con una escritura delicada se podía leer:
Segundo cumpleaños de nuestro hijo Alex.
Solo leer esa línea hizo que todo el cuerpo de Alex King se conmocionara, dos lágrimas rodaron por su rostro, mientras veía de nuevo la foto donde estaba junto con sus padres.
«Hijo, es mejor que vayas a la casa, y revises todas esas cosas con calma» Dijo Estela mientras tomaba de las manos de Alex.
Alex King cerro la caja de madera, se levantó, se acercó a su madre, y después de darle un beso en la frente, le dijo «Madre, te recompensaré por tantas cosas que has sufrido todos estos años, así sea lo último que haga».
Al salir de la habitación del hospital, Alex fue a buscar al médico de guardia, para preguntar por el estado actual de su madre.
Por la información del doctor, Alex se enteró de que su madre necesitaba ser tratada con urgencia, y someterse a un tratamiento largo y costoso para superar su enfermedad.
Todo el proceso no podría retrasarse más de un mes, porque se pondría en riesgo la vida de su madre.
Al preguntar por el precio del tratamiento en la administración del hotel, Alex contuvo el aliento.
Todo el tratamiento de su madre, saldría por 150.000 $, Y debía ser cancelado en 3 partes, 50.000 $ antes de comenzar el tratamiento, 50.000 $ a mitad del tratamiento y el resto, sería 1 mes antes del finalizar el periodo de recuperación.
Alex se fue a su casa muy preocupado al pensar de donde obtendría el dinero para la operación de su madre, En su casa, Alex tomo el primer sobre que estaba en la caja que recibió de su madre, dentro encontró una carta y al leerla se dio cuenta de que era de su padre dirigido a él.
Hijo, si estás leyendo esto, es que estoy muerto, lo siento, sabía que iba a morir, y no quise arrastrar a nuestra familia a la miseria después de mi muerte.
Tu madre intentó convencerme de que me tratara, pero yo sabía muy dentro de mí que ya no había oportunidad (creo que un hombre a punto de morir, tiene el derecho de actuar un poco egoísta).
Me hubiese gustado tener tiempo para enseñarte tantas cosas, así que escribí esta carta para ti, con las que considero son las cosas más importantes.
Cuida de tu madre, eres el hombre de la casa, ella te ama más que a nada en este mundo.
Le pedí a tu madre, que después de mi muerte, se fuera lejos de la familia King, y que te criara como una persona común.
Que aprendieras el precio del trabajo duro, debes apreciar a las personas por lo que valen y no por lo que tienen, nunca oprimas al débil, ni sucumbas ante el fuerte.
Siempre sigue tu corazón.
Te ama
Papá.
Alex King estaba conmovido, Sus manos temblaban, siendo el, una persona que toda su vida había pasado necesidades, que siempre se sintió abandonado por su padre, pero ahora sabía la verdad sobre él, y sintió el amor de su padre por medio de esa carta.
El segundo sobre, la carta de su padre le explicaba, todo lo referente a al fideicomiso a su nombre.
Su padre había decidido usar un banco con poca fuerza en el país, para evitar las trabas que la influencia de la familia King podía ponerle si lo hacía en un banco más antiguo, donde seguro su familia tendría mucha influencia.
Dentro de la carpeta los documentos estaban membretados con el nombre del banco «Fortis Bank SA / NV - Hong Kong».
Alex King no reconoció este nombre, y eso le dio un sentimiento de pérdida, en tantos años, muchas cosas pudieron haber pasado, en ese tiempo muchos bancos cerraron o se fueron a la quiebra, puede que el banco que uso su padre, fuera uno de ellos.
Era necesario el descubrir que había pasado con el banco, y si quedaba algo de los bienes que dejo su padre, quizás con ese dinero podría pagar los gastos de hospital de su madre.
Toco el bolsillo de su pantalón en busca de su teléfono para usar el navegador de internet y buscar información del banco.
Pero cuando busco en sus bolsillos no lo encontró.
Recordó que la última vez que uso su teléfono, fue en el auto de Lucy Williams cuando lo saco para ver la hora.
«Debo haberlo dejado en su auto». Pensó.
Alex decidió ir a un ciber café cercano, a investigar que paso con ese banco, pero sin importar lo que descubriera, lo importante es que el tubo un padre que lo amo.