Las clases pasaron sin sobresaltos ni nada por el estilo pero veia el cambio de actitud de todos hacia mi persona. Pese a ésta máscara que llevaba puesta seguia siendo el mismo.
Neji me seguia tratando como siempre lo hizo y eso me gustaba. Él se me acercó durante los recreos para charlar de diversas cosas evitandome la molestia de tener que esquivar a extraños y pesados.
Estabamos en la confiteria del colegio él y yo charlando mientras que discimuladamente miraba a Sasuke quien estaba junto a esas tres pesadas que me caian muy mal en verdad.
Cual peor una que la otra, no entendia cómo podia soportarlas Sasuke pero no era de mi incumbencia. En ese momento Hinata, prima de Neji, se nos acercó sentándose con nosotros. La miré más que asombrado ya que era la primera vez que se me acercaba y me hablaba.
Frunci en ceño pero Neji se apuró a salir en su defensa:
- Mi prima nunca tuvo el valor para hablarte Naruto, aunque no lo parezca es muy timida.
Se notaba que era timida pero me molestaba que recien haya tomado valor para hablarme cuando descubría que era un Uzumaki, o sea alguien de su mismo nivel social. En fin, por respeto a mi amigo Neji no le dije nada.
Con el correr de los dias los primos Hyuuga se hicieron mis mejores amigos y Sasuke seguia siendo tan solo un compañero más con quien apenas intercambiaba palabra alguna.
Aquello me molestaba tanto que fuera del colegio también lo ignoraba limitandome a enseñarle a moldear el chakra por las tardes en la mansion donde ahora solia vivir.
- Concentrate Sasuke, relaja tu mente y no pienses en nada. Será mas facil - le decia aquella tarde - Según mi madre ustedes los Uchiha tienen un enorme potencial y el Sharingan aparece con el estress o una intensa angustia. Mala forma de aparecer pero es lo que hay. Sin embargo no es lo único.
- ¿Hay más?
Como respuesta le di un papel y le pedi que concentre su chakra en ese papel. Eso serviria para saber qué elemento tenia y según eso empezaria a aprender las técnicas de sellados. Asi lo hizo y el papel se incendió.
-Fantastico Sasuke, tienes la naturaleza del fuego. Me lo suponia
-¿Por qué?
- Los Uchiha se caracterizaron por dominar las tecnicas de fuego a la perfección. Mira - le mostre el diario de mi madre donde hablaba de ello.
-¿Me...me lo prestarias? Por favor, te juro que lo cuidaré
- Por favor Sasuke, que ningún miembro de tu familia lo descubra. Es el tesoro más preciado que mi madre me dejo. Te suplico...
- Nadie, absolutamente nadie, lo encontrará. En cuanto haya dominado lo basico y aprendido lo necesario te lo devolveré.
Miraba a Sasuke y en verdad confiaba en él pero sentia que estaba traicionando a mi madre, por suerte mi padre que nos estuvo escuchando apareció con su acostumbrada sonrisa.
- Haces muy bien hijo - dijo - Tu madre estaria de acuerdo con tu decisión
-Papá - dije sorprendido
- Sasuke cuidará el diario de Kushina, yo también confio en él
- Gracias señor Namikage - dijo Sasuke sonrojado
- Solo te pido que cuando se lo devuelvas a mi hijo procura que ningun Uzumaki se entere de su existencia.
- Entiendo perfectamente- dijo Sasuke - Así lo haré.
Luego mi padre se retiró dejándonos solos nuevamente para seguir con nuestro entrenamiento. Así pasaron varios dias y personalmente podia ver el progreso de Sasuke. Aunque fuera de eso opté por ignorarlo ya que él asi lo hacia en el colegio. Yo lo haria fuera de ese lugar entonces.
En esta ocasion nos enfrentariamos para ver qué tanto habia progresado en una batalla real. Por suerte los Uzumaki contaban con sitios para éste tipo de "deporte". Asi llegamos al ginmasio de mi clan que al verme con Sasuke quienes alli estaban abrieron sus ojos asombrados.
Pero mi abuelo sabia perfectamente mis planes y como contaba con su aprobación nada podían decir. Además honestamente me importaba muy poco sus opiniones.
- Quiero la pista mas grande - le pedi a la chica pelirroja que estaba en administración ignorando su mirada. Sabia que era una prima lejana pero no la sentia así. Ella me dió unas llaves y sonriendo la sujete - Gracias
Asi seguimos camino. Sasuke con su mascara de fria indiferencia desconcertaba mas aún. Fuí conciente de que ella tomó el telefono e hizo unas llamadas acaloradas mientras nos adentrabamos al ginmasio.
Sonrei mientras decia a Sasuke:
- Parece que tendremos público ¿sabes?
- Si, ya lo veo - en él se formó una leve sonrisa.
Nos adentramos a un sitio que en verdad me dejó boquiabierto por lo gigantesco y extraño que era.
La pista tenia diversos escenarios hechos de distintos elementos. La parte de montañas rocosas, el área de las praderas, luego el verde cesped. ¿En verdad exisitian pistas asi? Recuerdo que mamá me habia hablado de estos lugares de entrenamientos del clan Uzumaki pero nunca lo crei posible de existir.
Alrededor habia gradas para espectadores que deseen vernos. A Sasuke no pareció asombrarlo y empezaba a preguntarme qué podria sorprenderlo en realidad. Sin embargo me dijo:
- Es enorme en verdad. Más de las que mi Clan solia tener
-¿Qué? ¿Tu clan también tiene sitios asi?
-Si, pero están abandonados ya que mi bisabuelo y su generación fueron los últimos en poder moldear el chakra....hasta ahora...
Una sonrisa se dibujó en nuestros labios mientras nos dirigimos al sector de montañas donde cada quien saltamos colocandonos sobre una enfrentándonos mutuamente.
-¿Listo Sasuke? -pregunté golpeando mis puños
- Listo
Ambos nos lanzamos a la vez utilizando nuestros brazos para detenernos mutuamente. Varios pares de ojos estaban centrados en nosotros pero hice lo posible para que no me afecten y me concentre en la batalla.
Ambos saltamos hacia atrás y al llegar al suelo hicimos los sellos correspondientes para aumentar el poder de nuestros chakras y volver a atacar. Estabamos usando taijutsus pero potenciados por nuestros propios chakras.
Nuestros golpes entrechocaban generando chispas rojas y celestes retumbando por doquier.
Saqué un Kunai y se lo lancé pero para mi sorpresa él lo detuvo con su mano derecha fácilmente mientras me miraba desde la cima de una de las montañas.
- Supongo que ésto no es todo lo que tienes ¿eh...Naruto? - dijo arrojando el Kunai al suelo.
Sonrei con placer ya que hacia tiempo que no me divertia asi y eso que acababamos de empezar. Desde que mi madre murió dejé de tener éste tipo de entrenamientos. Miré a Sasuke a los ojos. Él iba en serio, en verdad queria demostrarme su progreso y quizas algo más. Interesante.
-Eso tendrás que descubrirlo por ti mismo...Sasuke
Volvimos a atacarnos mediante el enfrentamiento cuerpo a cuerpo en el cual descubria el potencial de Sasuke ya que estabamos parejos. Podia seguirme el ritmo facilmente y eso me encantaba ya que necesitaba en verdad de alguien asi para poder entrenar mejor y sin problemas. Las montañas comenzaban a agrietarse debido a nuestros golpes.
En un momento determinado hice los sellos y exclamé:
-¡Técnica de clon de sombras!
Al instante aparecieron cinco iguales a mi, eran clones con cuerpos reales. Ésto asombro no solo a Sasuke sino al público en general ya que podia sentir los murmullos.
Hablamos todos juntos:
-¡Y bien Sasuke! ¿Qué harás ahora?
Como respuesta él sonrió y empezó a hacer los sellos mientras saltaba colocandose a una prudente distancia y exclamó:
-¡Katon! ¡Gokakyu no jutsu!
De su boca salió una inmensa bola de fuego que desintegró a tres de mis clones de sombra en un instante dejandonos a todos mas que sorprendidos. Increible su progreso, para alguien que hasta hace pocos dias atrás era incapaz de moledar el chakra, hacer aquello era toda una proeza. Sasuke en verdad era un genio.
Luego se acercó a otro de mis clones y lo pulverizó en un segundo. Utilicé al ultimo clon para formar una de mis más recientes técnicas. En un minuto tuve en mi mano derecha una esfera hecha de chakra.
-¡Estupendo Sasuke! ¡Me asombras en verdad! - dije disponiendome a lanzar mi técnica - Pero veamos cómo sales de ésta. - Al ver aquello, él volvía a hacer los sellos.
-¡Rasengan!
-¡Katon! ¡Gokakyu no jutsu!
Ambos nos lanzamos hacia el otro al mismo tiempo y un gran destello seguido de un fuerte entrechocar de tecnicas resonó en el lugar provocando fuertes temblores en todo el edificio como si de un terremoto se tratara.
Nuestras técnicas entrechocaron explotando y llegando al otro causandonos heridas por todo nuestros cuerpos bajando nuestros chakras a casi cero. Caimos al suelo rocoso agotados en verdad. Pero mi padre me sostuvo e Itachi sostuvo a Sasuke evitando que nos estampemos contra el duro suelo.
Respirabamos entrecortado pero los dos sabiamos que el trabajo estaba hecho. Ahora restaba practicar y entrenar por nuestras cuentas.
- Felicidades...Sasuke... - dije antes de caer inconciente
- Gracias...Naruto... - escuché que me dijo antes de que la oscuridad se apodere de mi.