Al dia siguiente fuimos al colegio por primera vez juntos, me sentia muy feliz.
Entramos tomados de la mano mientras reiamos, o mejor dicho yo reia mientras que Sasuke se limitaba a sonreir. Las miradas de todo el colegio nos miraban atentamente sin atreverse a saludarnos siquiera ya que colocamos un muro entre nosotros y ellos. Entramos al salón y nos sentamos juntos.
Neji se nos acercó junto con Hinata sonriendo.
-¿Asi que están comprometidos chicos? - decia Neji - No dejo de sorprenderme
- Cierto - siguió Hinata - Fue una sorpresa
El timbre sonó y el docente entró. Nos colocamos de pie para saludarlo. Así comenzó la clase de historia y el sueño me atacó sin piedad. Sujetando mi cabeza mis ojos se me cerraban. Cuando no pude más me acosté en el banco a dormir directamente. Sabia que Sasuke sonreia con mi actitud.
Un olor dulzón empezó me llegó de no se dónde seguido de un frio intenso y una misteriosa niebla azulada empezó a entrar desde las ventanas y la puerta. Todos mis compañeros, Sasuke incluido, quedaron petrificados. Me incorporé para ver asombrado aquello.
El profesor empezaba a reir de.una forma que le iba deformando el rostro. Parecia estar derritiendose como si estuviese hecho de cera. Los ecos de su risa resonaban por el lugar. La niebla los envolvía a todos.
El frio congelaba más aún, volteé para ver a Sasuke y ví sus labios morados. Lo toqué para comprobar que su temperatura iba descendiendo. Mi propia piel comenzaba a ponerse grisásea. ¿Qué estaba sucediendo?
De repente aparecieron unas negras cadenas desde el interior del suelo y fueron envolviendome como si de serpientes se trataran. Sentia cómo me aprisionaban haciendo que mis huesos empiecen a crujir.
No podia moverme, le pedí ayuda a Sasuke que estaba a mi lado pero él no se movió. Un gigantesco rostro apareció en el pizarrón como si estuviese dentro de la pared.
-Naruto Uzumaki - decia aquel rostro con voz de bajo - Cambiaste el destino de Sasuke pero enturviste el tuyo. - Las cadenas negras empezaban a asfixiarme - Nada podrás hacer por tí miamo.
La risa de Negato retumbó en el lugar al tiempo que Sakura se colocaba de pie y volteaba para mirarme con odio intenso. Ella se fue acercando a alguien que se corporizó de repente en el salón. Era Nagato y Sakura se acercó a él mientras decia:
- Nagato acabará contigo Naruto, te sacará del medio y Sasuke será nuestro
Sentí que me faltaba el aire junto a las risotadas de Sakura y Nagato resonando de fondo. Mi cuerpo se estaba despedazando y Sasuke se levantó para dirigirse a la puerta ignorando mi dolor. Nagato y Sakura quisieron tocarlo pero les fue imposible, él se fue del salón.
- Naruto - me dijo Nagato - Me alejaste de Sasuke pero te tengo a tí, me vengaré primito.
- Me quitaste a Sasuke - rugía Sakura - Ahora yo te quitaré lo que más aprecias....tu libertad y luego tu vida...
El dolor me enloquecia en verdad, llamaba a Sasuke pero él ya no estaba a mi lado. Nagato y Sakura se fueron acercando a mí con esa maldita sonrisa macabra como si de una pelicula de terror se tratase. La voz del rostro que apareció en el pizarrón retumbó en el lugar:
- Sasuke no te ayudará, tú enturviaste tu propio destino por salvarlo a él pero ¿a cambio de qué?
Dolor, mucho dolor sentia tanto fisico como emocional. Su cuerpo estaba lastimado y su corazón sangraba.
- No es cierto....Sasuke me....ama...y me....ayudará....
Cuando sentí que iba a morirme desperté sobresaltado, estaba sudando por cada poro de mi piel y respiraba entrecortado. Miré a todas partes desesperado en busca de algun indicio del extraño sueño que tuve pero nada. Me dolia el pecho y mi corazón latia a más no poder.
El profesor seguia hablando. Estaba temblando. Sasuke me miraba preocupado Me incorporé de golpe interrumpiendo la clase:
-Perdón profesor....no me siento bien....voy al baño....
-De acuerdo
-Hey ¿qué pasa? - me preguntó Sasuke pero lo ignoré y me fuí.
No podia más del dolor de mi pecho. Entré al baño y me mojé el rostro reiteradas veces intentando calmarme, despues de todo fue una pesadilla. Me miraba mi cuerpo en busca de lastimados pero nada sin embargo aquel sueño fue tan real. Me apoyé en la mesada resporando profundo.
Aquello fue....fue....¡Un genjutsu! Y quien sea que lo usó en mi me liberó porque asi lo decidió. ¿Quién pudo hacerme tal cosa? El chakra ¿de quién?
-Naruto
La voz de Sasuke me sobresaltó al punto de alejarme de golpe. Mi novio se asombró de mi reacción y me abrazó intentando calmarme. El me ama y siempre me ayudará....siempre. No podia evitar de temblar.
-Sasuke
-¿Qué pasó?
- Un genjutsu Sasuke....lo usaron contra mí...
-¿Qué? - Sasuke me miró asorado - ¿Qué dices? ¿Quién puede ser?
- No....no lo sé Sasuke....yo....
Respiré profundo y me separé de él. No podia depender de nadie, no era tan débil. Pero él volvió a abrazarme por lo visto no tenia planeado dejarme ir. Eso me tranquilizó.
-Mi amor indagaremos quien puede usar el chakra como nosotros.
El timbre sonó y ambos salimos del baño. La mañana fue desarrollandose sin problemas pero cuando llegó la última hora fuí a la biblioteca en busca de un libro para poder hacer la tarea que la profesora de matemáticas nos habia dado.
La biblioteca estaba vacia asi que aproveché para ir en busca del libro en la sección trasera. Fue cuando la ví, me habia seguido al parecer. Los ecos de sus pasos se fueron acercando a mi mientras volvia a usar el genjutsu en mí.
-¿Karin? - dije confundido- ¿Qué...qué haces?
-Destruir tu mente - me dijo ella con frialdad - No dejaré que te quedes con mi Sasuke
-¿Es una broma? ¿Cómo es que...?
- ¿Puedo usar el chakra? Simple, también soy una Uzumaki solo que mi madre fue expulsada del clan por tu abuelo
- ¿Qué? ¿Por qué hizo eso?
- Por amar a alguien que el lider del clan no aprobaba. Tu madre hizo lo mismo pero como era su hija te recibió a ti con los brazos abiertos - queria moverme pero me resultaba imposible - Ahora no solo dejas de ser un plebeyo sino que te comprometes con mi Sasuke. Pero me ocuparé de tu mente ya que descubri que eres débil en tecnicas de genjutsus.
Nuevamente me sumergió en un mundo de pesadillas donde Nagato y Sakura volvian a atacarme y Sasuke me abandonaba. Donde mi cuerpo padecia dolores indescriptibles.
"Sasuke....ayúdame...ven por mí....por favor...."
La oscuridad me envolvia otra vez y empezaba a desesperarme. Hice los sellos y susurré:
- ¡Liberar!
Pero no pasaba nada, repetí el proceso un par de veces pero nada. Sabia que si eso no funcionaba estaba perdido. Karin Uzumaki, no dejaria que me derrote.
- Sasuke....Sasuke....¡Sasuke!
Repentinamente me desperté, volvia a estar en la biblioteca y Sasuke estaba a mi lado. Me habia liberado del genjutsu de Karin. Estaba tan débil que mi novio me tuvo que sostener para evitar caerme.
- Sasuke....me oiste
- Por supuesto.
-Karin....
- Lo sé, ella es una de tu clan.
-¿Cómo lo supiste?
- Porque al enfrentarla ella misma me lo dijo pero huyó. Es muy astuta.
-¿Escapó?
-Si
- Está obsecionada contigo Sasuke
Salimos del colegio y llegamos a casa, hablamos con mi abuelo sobre lo sucedido a lo que él se asombro porque no recordaba a la madre de Karin. Pero nos prometio ocuparse del asunto. Por supuesto que ella no fue al colegio durante una semana.
Mi abuelo las recibio de nuevo en el clan pero castigó a Karin por lo que me hizo. Cuando ella regresó al colegio tenia el apellido Uzumaki y llevaba una actitud muy diferente a la que solia tener. Mas altanera aunque seguia siendo amiga de Ino y de Sakura y continuaba acosando a Sasuke.
Pero mi actitud tambien empezaba a cambiar con respecto a ella y a Sakura. Karin miraba por encima del hombro a casi todos, con excepcion de sus dos amigas, Sasuke, Neji, Hinata y yo.
Aunque a mi me despreciaba era mas que evidente pero no podia demostrarmelo porque mi abuelo le habia dejado bien en claro que si no me respetaba la echaria tanto a ella como a su madre del clan definitivamente y ambas sabian lo que eso significaba.
Perder todo privilegio y mudarse a un barrio mas humilde. Alguien como ella se sentiría más que humillada.
Sasuke sonreia por la situación sin darle importancia a ninguna de las tres que lo acosaban. Las clases se volvian mas interesantes cada dia.
Uno de esos días saliamos del colegio cuando alguien me sujetó por detrás tapandome la boca con un pañuelo que estaba impregnado de un olor extraño.
Aunque luché senti que las fuerzas desaparecian y la oscuridad se adueño de mí.