Con la cabeza llena de numerosas preguntas y dudas que no paraban de aumentar cada segundo, Aureus miro la masacre que se estaba produciendo justo frente a él.
Los goblins estaban masacrando a los aventureros y solados con un impulsó imparable impropio de criaturas inferiores como son los goblins.
El barón Emilio hacía mucho que había escapado, arrojó a su supuesto amigo Maron, el mago de fuego, hacia adelante mientras el corría con todas sus fuerzas.
Lo peor de todo es que la goblin femenina de nivel 2 ni siquiera se movió, simplemente estaba disfrutando del dolor y el sufrimiento de los asquerosos invasores humanos mientras sus guerreros se daban festín con la tierna y deliciosa carne que tienen los humanos.
Por lo que Aureus podía ver, quedaban menos de 20 personas, más de 100 humanos fueron asesinados mientras que los goblins, que se supone que son los más débiles en el mismo nivel, solo tuvieron unas 20 bajas, un resultado impactante que jamás debía producirse.
Cada segundo más personas morían, aplastadas por la inexplicable fuerza mostrada por los goblins multados.
Aureus no presto atención a estas personas, miró a los goblins, antes se preguntaba por qué los goblins eran tan fuertes, ahora parece que la respuesta es obvia.
Su fragmento de alma, lo controlaron de alguna manera para evolucionar a las criaturas deseadas sin que se vuelvan sus sirvientes.
"Artemis", una sola palabra fue suficiente para que Artemis entendiera lo que tenía que hacer.
¡En un instante, cientos de agujas de llamas salieron disparados a una velocidad sobrenatural, atravesando las cabezas de todos los goblins en un pequeño instante!
El silencio reinó de repente sobre el tenebroso bosque.
Zact, John y Sam quedaron paralizados al instante, mirando a Artemis con una expresión increíble, pero no pudieron decir nada, ya que un segundo después cayeron inconscientes.
El ruidoso campo de batalla cayó en un silencio sepulcral, los 3 humanos eran los únicos vivos, el resto estaba muerto o habían huido hace tiempo.
"Carga a los 3, Artemis", Aureus ordenó, un momento después extendió sus alas y empezó a volar pausadamente hacia la dirección indicada.
"Ahora, empieza a explicar, Critus", Aureus hablo en un tono que no permitía un no por respuesta.
[...]
[Suspiro, ¿Por dónde empiezo?]
El artefacto de origen continuo su tan esperado monologo un segundo después.
[Bueno, comenzamos por la razón de las acciones de los dioses, no estaba allí en ese momento, pero es dolorosamente obvio, orgullo y miedo]
"¿Orgullo y miedo?"
[Los dioses son criaturas interesantes, son las criaturas más cobardes que existen, pero al mismo tiempo son 10 veces más orgullosos que un demonio del orgullo, su orgullo no permite que nada este por encima de ellos, por lo que en el momento en que te sintieron, lo más probable es que idearon ese plan para matarte]
"¿Pero por qué no matarme directamente?", preguntó Aureus con confusión, no tenía sentido que no lo mataran y en su lugar idearon esta artimaña rastrera.
[Por la misma razón, miedo, si el mundo descubriera que han cortado el nacimiento de una raza eterna, serían purgados y aniquilados por sus actos, los que tengan inmensa suerte de sobrevivir acabarían como mortales, destinados a ser como los seres a los que miraban desde arriba, de nuevo, su orgullo no se lo permite]
Aureus lo entendió más o menos, "Los dioses son básicamente un grupo de bastardos hipócritas que no pueden aceptar que nadie sea superior a ellos"
[Básicamente]
"¿Por qué no decírmelo antes?, podría haberle dicho a Reus que envíe gente a buscar"
[Cuando no íbamos, le contacte telepáticamente y me hice pasar por ti, ahora ya habrá enviado personas a buscar por todo el mundo]
Aureus paso por alto la parte de hacerse pasar por el mientras hacia una pregunta que llevaba tiempo molestándolo, "¿Y lo de ser un aventurero, querías que me tomará unas vacaciones o algo?"
[¿Crees que soy tonto?, esto es para que te infiltres en las fuerzas superiores humanas]
Aureus, no hablo, espero a que el artefacto de origen continuará.
[Si tuviera una mano, me la apostaría a que los dioses humanos tienen en sus manos 1 o 2 de tus fragmentos, teniendo en cuenta lo mucho que les gusta conspirar, y esos no serán tan fáciles como este, dudo que sean como un dios monstruo, que deja algo tan valioso en manos de un monstruo cualquiera]
"Mmm..., ¿entonces he tenido suerte?"
[Demasiada, esto facilita mucho las cosas, pero tendrás más preguntas, pero ya hemos llegado]
Justo frente al dúo apareció una montaña magníficamente grande de varios kilómetros de altura, en el centro de la rocosa u empinada montaña se encontraba una cueva con una entrada circular de más de 20 metros de diámetro, un aura peligrosa se escapaba de la cueva, señalando el peligro extremo en las profundidades del oscuro pasadizo y alejando a los tontos ignorantes que albergan en sus cabezas la idea suicida de explorar sus profundidades.
Aureus no se detuvo ni un mero instante y entro en la cueva, la sensación de vacío se volvía cada vez más fuerte por segundo, como un agujero negro en crecimiento que lo devora todo a su paso, su esto sigue así, acabara cayendo a la locura.
El interior de la cueva era un simple pasadizo rocoso que se volvía cada vez más ancho por segundos, después de bajar uno o dos kilómetros, se encontraron en una gran extensión subterránea de alrededor de 500 metros.
Vale la pena señalar que dentro la energía era mucho más densa ... y olía muy mal, como si se hubiera arrojado aquí a propósito la basura más asquerosa y olorosas posible.
En la periferia de la extensión se firmaban docenas de casas talladas directamente en la piedra, en el centro se encontraba una pequeña colina de piedra de unos 20 metros, en la cima de esa colina se encontraba un trono de piedra rústico en que estaba sentada una goblin femenina de 4 cuernos.
Bueno, digo goblin, pero aparte de la piel verde y las orejas afiladas, es exactamente igual a un humano, un humano inesperadamente hermoso, de hecho.
[Hoho, esto es interesante]