La dolorosa vida de Ángel.
CAPÍTULO 23
Esta situación es bastante rara... Extremadamente rara. Digo, pues... ¿Cómo decirlo? ¡¡Esta familia está loca o es suicida!! ¿Por qué ella no me mató cuando tenía la oportunidad de hacerlo? ¿Por qué desperdició una gran oportunidad?
Yo no entiendo nada... ¿Qué pasa realmente? ¿Ellos saben algo que yo no? ¿Qué tratan de hacer realmente?
Yo... Yo realmente no entiendo nada.
Llegamos al sector 3.
Crismei está dentro de mi camisa, en su forma como hada... Qué adorable es. Nunca me cansaré de verla.
Bien, ahora debemos derrotar al tercer enemigo.
—Bien, son las 10:43 de la mañana, aún tenemos mucho tiempo.
—Oye, mira, es el anciano que estaba con Merteo, supongo que es uno de los jefes.
Crismei señala con su dedo índice a un anciano comiendo un pan, sentado en medio de la calle... Se ve raro. ¿Querrá pelear en medio de todos? ¿Eh? No veo armas ni siento ningún mal presentimiento. No siento hostilidad en él... ¿Eh?
Se ve tan débil... Hasta yo, sin magia, creo que podría derrotarlo.
—¿Segura? Se ve... indefenso... No tengo ningún mal presentimiento... Pero, por si las dudas, conviértete en espada.
—¡Sí!
Crismei sale de mi camisa, se convierte en espada y la tomo con mi mano derecha.
—Bien... Aquí vamos.
Me acerco al anciano. No quiero matar a un anciano, así que simplemente lo dejaré inconsciente. Aunque también me da miedo matarlo de un golpe. Se ve demasiado frágil.
Es más, si Sonia estuviera conmigo, a él le daría un infarto con tan solo ver la sonrisa de Sonia, así de frágil es.
—No se ve que quiera pelear... Qué raro.
Me paro frente al anciano.
—¿Es un jefe?
Levanta la mirada y me sonríe.
—Sí, lo soy, pero no quiero pelear.
... Esto... Ah... ¿Qué?
—¿No quiere pelear?
¿Entonces gané? ¿Tan fácil...? Digo, no me quejo, pero esto es demasiado raro. Esta familia parecía poderosa, pero no me han dado ningún problema... Ah, no, sí, me violaron, pero no me han hecho ningún daño físico... Esto es demasiado bueno para ser verdad.
—Espero que ganes tu pelea, el destino del mundo está en tus manos.
¿Qué? Sus palabras me dejan más confundido de lo que ya estoy.
¿A qué se refiere con eso?
—¿Qué dices?
Saca una navaja de su bolsillo. ¿Q-qué planea hacer con eso?
—Suerte, guerrero... La necesitarás. ¡Sacrificio Dex!
Se encaja la navaja en su cuello y me alejo de él asustado.
—¡¿Eh?!
¡M-maldito idiota, no era necesario! ¡No planeaba matarte! ¡¿Por qué toda tu familia tiene tantos deseos de morir?!
Su cuerpo empieza a brillar y se vuelve polvo que se lleva el viento.
Es escena sería linda, ¡si tan solo supiera el contexto! ¡Necesito detalles! ¡¿Por qué se suicidó?! ¡No lo iba a matar!
—¡¿Se suicidó?!
¡Obviamente lo hizo, pero necesito una confirmación! T-tal vez él haya usado un hechizo que lo convierte en polvo y se fue a otro lugar.
Crismei vuelve a su forma humana.
—Él se suicidó, Ángel.
Definitivamente esto está muy raro... ¡Pasen el contexto completo antes de morir!
¡Todos se suicidan sin decirme las razones! ¡¿Esto se trata del demonio que mencionó Nerma?!
¡¿El destino del mundo está en mis manos?! ¡¿Buena suerte en mi pelea?! ¡¿Qué tratan de decirme?!
—¿Por qué lo hizo...? ¿El destino del mundo está en mis manos? ¿A qué se refiere?
—No lo sé, todo esto es muy raro.
—Primero Nerma, que no aprovechó la oportunidad que ella tenía para matarme, y ahora el anciano se suicida sin dar pelea... Esto es demasiado raro... Vámonos, supongo que solo quedan dos jefes, Merteo y Andrea.
Lo principal es el rescate de Cristal, después pensaré en esta situación.
No tengo tiempo para investigar sobre esto.
—Vamos.
Definitivamente todo esto es raro... Investigaré más tarde.
•
•
30 minutos después, por fin llegamos. Nos tomó tiempo llegar a este lugar, pues caminamos, no corrimos. Nos tomamos nuestro tiempo para analizar la situación y reflexionar si se trataba de una trampa o no.
Estamos parados frente al casino Veninfe. Crismei está en su forma humana, a mi lado.
Este lugar tiene el apellido de la familia en su nombre, aquí deben de estar.
—Casino Veninfe... Supongo que aquí deben de estar... Creo que es un poco obvio.
—Sí... Entremos.
—Vuelve a tu forma como espada.
—Sí.
Crismei se convierte en espada y la tomo con mi mano derecha.
—Vamos.
Abro la puerta y una chica con un sombrero negro y usando un vestido negro nos da la bienvenida muy alegremente.
—¡Bienvenido! ¡¿Vienes por Merteo y Andrea?!
La veo confundido... ¿Por qué este día es tan raro?
—Supongo que sí.
—¡Sígueme, es por aquí!
La chica empieza a caminar y la sigo.
Veo todo a mi alrededor, hay ruletas, juegos de cartas, bingo, entre otros juegos de azar.
Juegos populares de mi mundo.
—Este mundo no es muy diferente a mi mundo... Aquí también una semana son siete días, un mes son cuatro semanas, y un año son doce meses. Las horas también son iguales, y ahora descubrí que también hay casinos iguales que los que hay en mi mundo, obviamente sin las máquinas... Es demasiado parecido... Están muy avanzados... ¿Por qué no habrá electricidad?
Digo, son inteligentes. Para aprender hechizos se necesita ser inteligente y memorizar muchas fórmulas mágicas. ¿Por qué no han inventado máquinas o mejorado las ciudades?
Este mundo no aprovecha su potencial... O, tal vez, hay otro motivo por el cuál no hay electricidad.
—Es aquí.
La chica abre una gran puerta. Los jefes finales están aquí. Si los derroto, Cristal será libre de nuevo. No puedo fallarle... No otra vez.
Ya le fallé una vez, por mi culpa fue secuestrada, no quiero fallarle otra vez.
—¡Suerte!
Veo un gran salón... Es como un teatro. Hay filas de sillas, en donde están sentadas decenas de personas con trajes elegantes. También hay un enorme escenario.
En el escenario está Merteo y Andrea.
—¡Nuestro invitado especial llegó!- Dijo Merteo.
Todos voltean a verme y me dirijo a ellos.
Me da pena que me vean tantas personas, pero no tengo tiempo que perder.
—¿Qué tiene planeado?
—¡Las apuestas se han cerrado!- Dijo Andrea.
—¡Traigan a la chica!- Dijo Merteo.
Dos hombres suben al escenario y jalan con unas cadenas a Cristal, que tiene las cadenas en su cuello y brazos.
—A-Ángel.- Dijo Cristal asustada.
Esos ojos tristes, llenos de lágrimas... N-no veo ninguna herida, pero está asustada... Cristal, perdón por ponerte en peligro... Soy un inútil.
—Cristal... Perdóname...
¡N-no, no tengo tiempo para sentirme culpable! ¡Ella me necesita, debo salvarla!
—¡Déjala!- Digo enojado.
Me dirijo a ellos corriendo.
—¡Las piernas!
—¡Sí!- Dijo Crismei.
Salto al escenario y me paro frente a ellos.
—¡La acción comenzará!- Dijeron Merteo y Andrea.
Los hombres bajan del escenario y extienden sus manos, apuntando al escenario. Aparece un campo de fuerza azul casi transparente alrededor de nosotros.
¿Así evitarán que escape? Podré ser muchas cosas, pero no un... Ah, sí, soy algo cobarde, pero no abandonaré a una amiga.
—¡Las reglas son simples, el que sobreviva, ganará!- Dijo Merteo.
Me acerco a Cristal... No se ve herida... ¿No le hicieron nada?
—¿Estás bien? ¿Te tocaron? ¿Te lastimaron? ¿T-te hicieron algo malo?
—E-estoy bien... G-gracias por preocuparte por mí... No me hicieron nada.
Suspiré aliviado.
Saber eso me tranquiliza... Yo fui el único que fue violado.
—Me alegro. Al menos cumplió su palabra.
—¿S-su palabra?
—El líder me prometió que no te haría daño cuando acepté su desafío. Me alegra tanto saber que cumplió su.. palabra...
—Ángel...
Sí, no pude evitar llorar. Cristal está a salvo. No me perdonaría si por mi culpa, Cristal hubiera terminado violada o torturada.
Me alegra tanto saber que está bien e ilesa.
—Estoy bien gracias a ti...
Cristal me abrazó con fuerza.
—G-gracias por protegerme.
—Pero yo fui el que te puso en peligro.
—No, tú no sabías que esto iba a pasar. No fue tu culpa... Gracias por salvarme... Muchas gracias.
—... No... Gracias a ti por no odiarme.
Ella me limpió las lágrimas de mis ojos y me sonrió.
—Nunca podría odiarte. Eres mi héroe.
... ¿Héroe...? No... No lo soy... Yo la puse en peligro... Estoy lejos de ser un héroe... Muy lejos.
—Gracias por no odiarme. Eres demasiado amable, Cristal.
Me alejé de ella y corto las cadenas de sus brazos con mi espada.
—Espera, deja te quito las del cuello... ¿Cómo lo haré sin lastimarte?
—¡Ángel, toma!- Dijo Merteo.
Volteo a ver a Merteo y me doy cuenta de que me lanzó una llave y la atrapo.
—Es la llave de las cadenas.
Definitivamente todo esto es demasiado raro... ¿Así son las peleas en un mundo mágico?
—¿Gracias?
Libero a Cristal de las cadenas.
—Bien, aléjate un poco, esto se pondrá intenso.
Me dirijo a ellos.
—¿Comenzamos?
—¡Claro!- Dijo Andrea.
—¡¿Qué te parece una pelea sin magia?! ¡Solamente armas!- Dijo Merteo.
—¡Por mí está bien!- Digo con una mirada seria.
Los dos gritan al mismo tiempo: "¡¡Espada sepo dex!!"
Espadas blancas aparecen en sus manos derechas.
—¡Vamos!- Dijeron los dos emocionados.
Me dirijo a ellos y los dos me intentan atacar al mismo tiempo. Me protejo con mi espada, provocando que nuestras espadas choquen.
—¡¡Esto será divertido!!- Gritaron emocionados.
Cristal, prometí salvarte, y eso haré.
Esta es la prueba final, y no planeo fallarla.
•
•
(Pov- Cristal.)
Siempre fui considerada una inútil y un estorbo para todos.
Mi familia es conocida e importante porque nuestro poder mágico es increíble, y mis hermanos y mi padre son caballeros que encabezan el ejército de nuestro país.
Pero yo... Yo soy un simple estorbo para ellos. Nací con muy poco poder mágico. No importaba lo mucho que me esforzaba, no podía acercarme a mis hermanos. Mi manejo con la espada apesta, así que me rendí y comencé a estudiar la magia.
Pero también soy una inútil en eso... No sirvo para nada.
Todos se burlan de mí por ser la peor en todo, incluso mi familia me consideraba un estorbo y una molestia. Me odiaban por arruinar la reputación de nuestra familia.
Me acostumbré demasiado a la soledad, hasta que él llegó a mi vida.
Alguien me defendió por primera vez de las personas que me molestaban. Alguien no me juzgaba por mi apariencia poco atractiva o por ser una inútil.
Y esa persona está peleando para salvarme en este mismo momento.
—¡Ángel, eres bueno esquivando!
—¡Deja de esquivar nuestros ataques y pelea como hombre!
—¡Claro que debo esquivarlos, no quiero morir, idiotas!
Su manejo con la espada es la de un novato, pero sus movimientos son tan rápidos que apenas puedo seguirlos.
Esquiva casi sin problemas los ataques... Él es realmente increíble.
Apenas nos conocemos, pero con el poco tiempo que hemos hablado, me di cuenta de la gran persona que es él.
Él es alguien amable, que se preocupa por los demás. Alguien que protege a los débiles. Alguien que trata a todos por igual... Él es... simplemente increíble.
Se arriesgó a tanto solo para salvarme. Él podía irse y abandonarme, pero decidió aceptar el desafío de esta familia para salvarme, a pesar de que su vida estaba en peligro.
Arriesgó su vida para salvarme... A mí, una inútil que no sirve de nada... Él me salvó.
Yo... Yo no sé cómo agradecerle lo que hizo por mí... Es la primera vez que alguien es tan amable conmigo... Sí...
Definitivamente estoy enamorada de él.
Apenas lo conozco, podría confundir el agradecimiento con amor, pero no me importa, me arriesgaré. Ángel es un chico demasiado amable con las personas y las trata con respeto, sin importar el estatus social. Es poderoso, derrotó a un Golem. ¡Él arriesgó su vida para salvar a los plebeyos! Eso es algo que ningún noble sería capaz de hacer.
No soy digna de ser su esposa, pero podría ofrecerme como su... No... Ángel no es ese tipo de persona, lo presiento. Él nunca aceptaría estar con más de una chica.
Durante el viaje, conocimos a un comerciante que tenía dos esposas, y Ángel lo miró con asco.
Él sintió asco de eso. Le pregunté al respecto y dijo que no es normal en su mundo tener más de una novia.
No sé si tenga alguna oportunidad con él, pero no me rendiré... No lo haré... ¡¿Eh?!
—¡Ángel!
N-no, por favor, no.
—Oh, vamos, ¿ya no puedes seguir?
A-Ángel tiene heridas por todo su pecho y brazos. Está perdiendo demasiada sangre.
Ellos están igual de heridos, pero ellos no me importan. ¡Ángel está perdiendo demasiada sangre!
—Jeje. Nos divertiremos mucho con esa chica cuando te...
Ángel no dejó que él terminara de hablar e intentó atacarlo.
Ese hombre se protegió con su espada y Ángel le dio un cabezazo.
—No incluyas a Cristal en esto.
Se alejó de él y se paró frente a mí.
—No te preocupes, Cristal, no permitiré que te hagan daño.
Volteó a verme y sonrió.
—Ganaré esta pelea.
—S-sí.
Tan... Lindo y genial... Está arriesgando su vida por mí... Yo, alguien que apenas conoce... Es un verdadero héroe... Mi héroe.