Jimin estaba aprendiendo cada vez más de su trabajo detrás de la barra, y siempre se divertía junto a BamBam, se habían hecho buenos amigos, al igual que de Jackson.
El rubio tenía curiosidad todavía por lo que hacía su jefe los lunes, no dejaba de recordar aquella escena en donde lo vio a punto de follar con un pequeño.
—¿Te gusta quién?
BamBam miro sorprendido al pequeño, escuchando atento cada palabra que decía.
—No me gusta, solo... Tengo curiosidad de lo que hacen los lunes.
Dijo guardando unos vasos.
—¡Lo sabía! Quieres ser uno de ellos.
El bar estaba casi vacío, y Jackson aprovecho para ir a hablar con sus amigos.
—¡Wang!
BamBam lo regaño al ver las mejillas de Jimin de un color carmesí.
—Debes pensar muy bien antes de meterte en eso. No es fácil.
—Si está el jefecito será sencillo.
Bromeo Jackson a lo cual BamBam lo golpeó y Jimin bajo la mirada.
—¿Por qué no hablas con él?
Lo ánimo BamBam.
—Es que... No sé cómo me verá... Y si me desp..
—¿Que dije de hablar en la hora del trabajo?
La voz de Yoongi los sobresalto, obligándolos a callar y seguir trabajando.
—Jimin a mi oficina.
El nombrado lo ve con confusión, y luego lo siguió, escuchando risas por parte de sus compañeros.
—Te he escuchado hablar con tus compañeros sobre lo que viste aquella vez.
Hablo el mayor luego de cerrar la puerta de la oficina.
—Yo...
—Por lo que he escuchado ¿Quieres pertenecer a esto?
Pregunto sin rodeos su jefe, esperando una respuesta de su parte