Drogo estaba hablando y bebiendo o más bien fingiendo que bebía con Peter, sin dejar de vigilar a Alhelí, sus ojos vieron como ella se empezaba a alejar de Cassy y Luna, así que se levantó y fue hasta donde ella estaba, pero mientras iba abriéndose paso entre la multitud de personas acaloradas, escuchó los pensamientos y la conversación de unos hombres que estaban muy cerca de Alhelí.
- Mira a esa belleza...- Señaló uno con el mentón a su compañero.
-Jajaja, quizás está sola, ¿Verdad?- El segundo la miró con mucha codicia y lujuria. Ambos no dejaban de verle las piernas y como la falda de ella se subía con sus atractivos movimientos.
- Pero que hermosa- Pensó uno de ellos, dio unos pasos adelante hipnotizado por ella. Pero una fuerte mano en su hombro lo detuvo.
- Ella es mía- Le susurró Drogo al oído.
-Asi...? Pues no veo tu nombre en ella, idiota- Drogo se contuvo, hizo crujir su cuello y una mirada amenazante ensombreció su rostro.
- No lo volveré a repetir...- Su mandíbula se tenso y un pequeño apenas audible siseo salió de entre sus dientes.
Los hombres quedaron atónitos, con los ojos abiertos y la lengua pegada a su paladar sin poder pronunciar nada...
-Eh... Lo.. lo... sentimos, ya... nos vamos- Uno de ellos apenas si pudo pronunciar las palabras, se fueron alejando poco a poco hasta que desaparecieron de su vista.
Drogo cambio su expresión y su rostro volvió a la normalidad, se acercó a Alhelí que estaba en su propio mundo, la tomó de la cintura y acercó su boca a su oído.
-Dijiste que no te alejarías de mi, amor- La abrazo rodeandole la cintura con sus fuertes brazos.
- Jeje, no es mi culpa que tú no quisieras bailar, ¿Cambiaste de opinión? -
-No me pude resistir al ver como te mueves- Le empezó a besar el cuello, dándole pequeñas mordidas.
Ella se dio la vuelta y se sujeto de su cuello, se dejó llevar de nuevo y empezaron a mover sus cuerpos como si que fueran uno sólo, rozaban las puntas de sus narices, también sus labios, hasta que sintieron que no había nadie más a su alrededor, ambos se perdieron en la mirada del otro, y en medio de caricias, besos, risas y pequeños gemidos de satisfacción por estar con el otro, Drogo la fue halando llevándola a un rincón oscuro, donde no había nadie, ella nisiquiera se dio cuenta cuando él la tomó aún más fuerte de sus caderas y la empezó a besar como si no hubiera un mañana.
En el pequeño espacio, la acaricio de las piernas, ella enterró sus dedos en el cabello de él, sus labios se deseaban cada vez más a medida que el momento se iba intensificando, Drogo la sostuvo de las dos piernas y la levantó cargandola y elevandola del suelo, comenzó a besar su cuello y poco a poco iba descendiendo, hasta llegar a besarle el pequeño rubí que colgaba en medio de su escote, ella arqueó su espalda pegándose más a él, pero unos pequeños golpes en una de las paredes a lo lejos los interrumpió...
- Ya vamos a llegar Peter- Bufó Drogo en dirección opuesta a donde ellos estaban.
-Ya.. debemos volver...- Alhelí tenía entrecortada la respiración.
- Si, pero... retomaremos esto luego, ¿De acuerdo?- Él la puso de nuevo en el suelo lentamente, y le dio otro beso profundo e intenso que provocó que Alhelí sintiera escalofríos en todo el cuerpo debilitandole las piernas y los sentidos.
Luego salieron de ahí, y se reunieron con los demás, fue una noche muy divertida y satisfactoria, se tomó muchas fotos ella sola y con todo el grupo.
La noche avanzaba y mientras más tarde se hacia el club se llenaba también, Cassy empezó a embriagarse de verdad, y su lado más cómico se hizo presente, Alhelí y Luna se reían a más no poder, Fred tuvo mucho éxito con la joven que había sacado a bailar desde el principio, al parecer era también estudiante de la Universidad, y en los momentos que él se entretenía con Peter y Drogo, ella se unía a la locura con Cassy, Luna y Alhelí. Se llevaron muy bien y la confianza de las 4 era como de un grupo de chicas que había crecido juntas desde la infancia. Su nueva amiga se llamaba Sara.
Peter y Drogo ya la conocían pero nunca le habían hablado, al igual que ellos ella tenía su propio secreto y ellos lo sabían pero como en el mundo de los humanos, en su propio mundo habían reglas y muchas de estas iban a comenzar a perjudicar a su nueva integrante, Alhelí.
Llegó la medianoche y alguien inesperado se hizo presente en el club. Alhelí iba saliendo del baño cuando una voz familiar la llamó.
-Srta. Janer, me alegra encontrarla aquí- El profesor Sebastián se le acercó.
-Oh, profesor. Mm... no esperaba encontrarlo aquí-
-Jejeje, yo también sé divertirme- Él le dedicó una sonrisa sincera. - Por cierto, hoy se ve...- La miró de la cabeza a los pies. -Muy hermosa...- Ella parpadeó varias veces y sus mejillas se ruborizaron.
Drogo fue a buscarla ya que se había tardado, escuchó las risas de ella y el profesor a lo lejos así que apresuró el paso, cuando llegó rápidamente la abrazo.
-Preciosa, ¿Creí que nunca saldrías?-
-Lo siento, me encontré con el profesor y me distraje- Ella lo abrazo también.
- Por favor, mientras estemos fuera del campus sólo dígame Sebastián- Intervino.
-No puedo hacer eso, profesor- Sebastián se acercó sin importarle lo bien sujeta que Drogo la tenía.
-Hazlo, y yo te diré Alhelí- Ella lo miró asombrada, escucho un leve gruñido salir de Drogo y se aferró más a él.
-Tranquilo- Le susurró a su novio. -Bien, ya nos tenemos que ir, fue un gusto verlo aquí, profesor-
-Jejeje, está bien, ojalá la próxima vez tenga la oportunidad de sacarte a bailar Alhelí- Drogo hizo un movimiento brusco en dirección a Sebastián pero ella lo detuvo.
-Adiós. Vámonos- Saco a Drogo de ahí a como pudo y lo halo hasta llegar a la barra, Peter estaba riendo junto a Fred.
Inmediatamente los vio y escucho los pensamientos de Drogo, este último estaba verdaderamente enfurecido, en su mente sólo pasaban mil maldiciones dirigidas a Sebastián.
Alhelí lo llevo hasta una parte apartada y tomó su rostro con sus dos cálidas manos.
-Mi amor, tranquilo. No tienes porque enojarte...- Drogo trato de tranquilizarse tomándola por la cintura y mirándola fijamente.
-Tuvo suerte que tú estuvieras en medio, maldito perro...-
-Ya, ten calma, ¿Si? Jeje, creo que... me ha gustado verte celoso- Se mordió el labio inferior. Drogo sonrió y le dio un tierno beso.
-La próxima no me voy a contener..- La sujeto más fuerte contra su cuerpo. -Eres mía...- La beso confirmando sus palabras.
Paso una media hora más, y salieron del club, Fred y Sara se fueron juntos, Peter acompañó a Luna para ayudarla con Cassy, las llevo hasta los dormitorios de la Universidad.
Alhelí iba exhausta y mientras regresaba con Drogo a la mansión, se quedó dormida en el auto.
Cuando llegaron, él la llevo hasta su habitación, Nicolae y Lourie los esperaban en la entrada, pero como iba dormida tuvieron que esperar hasta el siguiente día para saber que tal le había ido en su primera noche conviviendo con sus nuevos amigos.