Apreciar cada instante de la vida.
Ella desaparecerá.
¿Qué es real? y ¿Qué es mentira?.
¡¿Por qué las gotas no dejan de caer?!
La oscuridad inunda cada rincón de mi alma.
¡¿Por qué no hablas?! ¡Responde por favor! Seré mejor hijo, ¡Por favor despierta!
Solo... Habla una vez más.
[I Wanna Hear Your Voice Again]
"¿Por... porqué?... Te extraño mucho... Mamá". Se clava las uñas con fuerza en su pierna derecha, como soporte para evitar soltar el llanto.
"¿Eh? creo que te confundes". Dice ella con una sonrisa nerviosa. "Yo solo tengo un hijo y tiene 4 años".
"Pero...". Intenta decir algo angustiado, pero es interrumpido.
Un niño de 4 años sale detrás de ella y jalando su camisa pregunta. "¿Pasa algo mami?". Es Noah a esa edad.
"No, tranquilo, el joven se confundió". Dice ella mientras toma de la mano al niño. "Ven, vamos a escoger a tu pez".
-¿Pez?-. Noah aprieta el puño. "Bien... Lo siento, no volveré a molestar".
Sin dirigir la mirada se aleja de ellos; termina sentado frente al mostrador, observando hacia el pasillo en donde están escogiendo un pez. Hace presión en su frente, toma un gran respiro, siente una gran impotencia y odia no poder hacer nada.
"Este". Una voz, casi imperceptible por la distancia en la que se encuentran hace que Noah vuelva a levantar la mirada.
[Oblivion]
La vida humana está llena de experiencias, buenas, malas o neutrales. Las experiencias buenas, son algo que siempre quisiéramos recordar, que siempre quisiéramos poder volver a vivir, gracias eso lo podemos asociar a algún objeto o cosa, el cual nos permita recordar aquel momento, pero, qué sucede si aquella cosa nos recordara algo desastroso, algo que nunca quisiéramos volver a recordar o experimentar.
[Undo]
Desasiéndonos de aquella cosa, olvidando cada momento en el que tuvimos relación y enterrar todo muy, muy profundo en nuestro ser, para así, nunca más volver a recordar el dolor.
[...]
Una gota cae al pacifico mar, todo pierde su armonía.
Un pez millón fue el estímulo para recordar todo lo enterrado. Noah de 4 años sostenía uno entre sus manos, era de un hermoso color rojo con manchas negras, igual que el vestido favorito de mamá.
"¿Yo... tuve... un pez?".
Sus manos se helaron, las estanterías desaparecían una por una, el pasillo se tornaba completamente oscuro y su madre... cada vez de alejaba más de él.
Se pone pie, corre, corre, el pasillo no termina, cada vez se alarga más.
"¡Mamá!". Grita.
La silueta de su madre comienza a dejar de ser percibida por la distancia.
Noah se detiene, cae de rodillas.
"¡Aaaah!". Grita con toda su alma y da un puñetazo al suelo.
Al dar el puñetazo, se rompe como si de un delgado cristal se tratase y termina cayendo a un gigantesco mar. Nada a la superficie, al salir tose, tragó mucha agua, sus anteojos se cayeron en algún punto, por lo que no puede ver con claridad.
Su cara es de preocupación y cuando parecía que todo se había calmado, el mismo pez millón, rojo, aparece de entre la oscuridad del mar, ahora es comparable a una ballena; este comienza a asecharlo, dando vueltas al rededor suyo.
"No... por favor, no te quiero ver".
El pez salta creando olas y corrientes de grandes velocidades, lo que provoca que Noah se hunda. Lucha con todas sus fuerzas para evitar hundirse, pero es en vano; ya no le es posible respirar, todo se vuelve cada vez más oscuro mientras pierde la conciencia.
[My depth]
-Derek tenía razón...-
[//]
-...era yo quien tuvo un pez, ahora que lo recuerdo... Él nunca tuvo alguna mascota. Aquel día mi madre terminó pronto de hacer su trabajo, era ella la que trabajaba haciendo vestidos; como se acercaba mi cumpleaños, quiso complacerme con alguna mascota, así que fuimos a aquella tienda. Entramos, yo estaba maravillado por todos los animales que había, me acercaba a las jaulas intentando acariciarlos y mi madre me regañaba; al principio yo quería un perro, o un gato, pero, mi madre decidió irse por algo más pequeño, para que le demostrara que podía ser lo suficientemente responsable para cuidar una mascota...-
[Deeper]
-...al ver todos aquellos peces quedé impresionado con los tonos de color que tenían, pero, hubo uno, que resplandeció más que todos los demás... Y es que era idéntico al vestido favorito de mi madre, por lo que se lo pedí sin dudar. Lo tenía en un escritorio de mi habitación, mi madre siempre insistía en que lo dejara en la sala, pero yo me negaba, al final, siempre se quedó conmigo. Pasaron días, en realidad fue bastante tiempo, recuerdo que cumplí los 5 años y seguía resplandeciendo como la primera vez que lo vi...-
[Deeper Deeper]
-Pero... lo tuve que sellar, muy dentro mío. El día comenzó bastante frío, me levanté, lavé mi cara y fui a desayunar con mi madre; mi padre no estaba, tuvo que salir temprano ese día, después de eso me senté a ver el televisor, mientras mi hermanita me molestaba, como eran vacaciones, yo, un niño de 5 años, no había mucho que hacer por las mañanas. Pasaron horas, el clima no mejoraba, en cambio, cada vez parecía más nublado. Llegó la hora de comer, en mi mente hubo una chispa la cual hizo que recordara a Fist, así es como nombré a mi pez...-
[///]
-...siempre todos los días al despertar, lo iba a ver y le daba comida, sin embargo, aquel día, me olvidé por completo. Me levanto de la silla, mi madre me pregunta que qué ocurre, le dije que nada, mientras subía por las escaleras. Entré a mi habitación, me acerqué a su pecera... Estaba inmóvil; tomé una lapicera que tenía en mi escritorio e intenté hacer que reaccionara, pero... no sirvió de nada. Comencé a llorar realmente fuerte, era la primera vez que experimentaba lo que era la muerte en sí. Mi madre llega corriendo, preocupada, creyendo que me había lastimado; le dije que Fist no se movía, me observo con una mirada de tristeza que nunca olvidaré...-
[I... Can´t...]
-Eran alrededor de las 6 pm, mi padre volvió del trabajo. Yo no había podido dejar de llorar en toda la tarde, mis ojos estaban hinchados. Mi madre le contó todo a mi padre, así que ese mismo día decidieron que volveríamos a la tienda de mascotas para comprar otro pez. Todo estaba muy oscuro y ya comenzaba a llover. Llegamos a la tienda pasadas las 7 pm, fuimos a la sección de peces, pero... Ninguno me llamaba la atención, en mi terquedad yo no quería un reemplazo, yo quería al original Fist. Al final terminé haciendo berrinche ahí mismo y escogieron un pez cualquiera-
[...Breathe]
-Antes de salir de la tienda, el dueño me dijo. "Solo... recuerda, que por más rápido que quieras hacer pasar todo, al final, lo más seguro será ser una tortuga, dejando que todo pase a su debido tiempo...". Lo dijo intentando tranquilizarme y quedó marcado en mi memoria, desde entonces mantengo en mi mente a las tortugas como un camino seguro-
[Is it?]
-Salimos de la tienda, el viento nos golpea con agresividad, ya no es solo una pequeña lluvia, ahora es tormenta. Subimos corriendo al coche, el sonido de las gotas, aun siendo agresivo, me parece bastante agradable. Mi padre enciende el coche, mi madre arrulla a mi hermana para que se calme y yo me pongo cómodo en los asientos traseros.-
[I can´t hear]
-A 2 cuadras de llegar a casa, un coche nos enviste a toda velocidad impactando en la parte delantera izquierda del nuestro. Recuerdo solamente parpadear y aparecer de cabeza. Mi padre quedó totalmente pulverizado, mi hermana aplastada por las láminas dobladas y mi madre... quedó grabada en la corteza de mis parpados, la mitad de su rostro cortado por mitad, gracias al filo del metal y cristales que salieron volando. Quedé aterrado, intentaba gritar, pero mi voz no salía, tenía muchos huesos rotos y no podía ni si quiera salir del coche; en realidad no se ni como, pero logré quitarme el cinturón, nuevamente intentaba gritar, pero mi voz era muy débil, solamente podía... llorar. Me arrastré con la fuerza de mi mano sana, saliendo por la ventana rota. Mi llanto sonó a la par de un rayo, hice todo lo que pude para acercarme a donde debería estar mi madre. Estiré mi mano, solo pude sostener pequeño pedazo de la prenda que utilizaba; no podía, dejar de sollozar. "¡¿Por qué no hablas mami?! ¡Por favor! regáñame, castígame, enójate conmigo, pero di algo". Aquella lluvia... nunca cesaría.
2 personas vestidas de negro se acercaron, con tanta lluvia, no podía ver quiénes eran. Me lleno de miedo y no puedo si quiera reaccionar, cierro los ojos e intento no hacer ningún ruido.
"¿Si? hola, objetivo equivocado ¿Qué hacemos con los cuerpos?". Parece que uno de ellos está hablando con alguien por medio de un walkie talkie.
"Déjenlos ahí, que la policía los limpie". Escuche de respuesta. "El jefe los espera con ansias para sancionar su error".
Apaga el walkie talkie. "Mierda, te dije que había que revisar bien la placa con esta lluvia, ahora quien sabe qué tipo de castigo nos pondrán". Dice uno de ellos.
"Cállate imbécil, yo solo hice lo que ordenaron". Responde el otro y continúan alegando en lo que se alejan.
Recuerdo cada cosa de la que dijeron, según ellos, matar a mi familia fue un error, pero ese tipo de errores no son perdonables. Yo, comenzaba a perder la conciencia, estaba perdiendo mucha sangre y gracias a mis huesos rotos muy apenas podía respirar.
-Terminé hundiéndome en la oscuridad de la noche-.
[Re//4U]
"¡Acepto!". Dice una voz femenina.
-Ah... ¿Qué?-.
Noah recupera la conciencia con un gran respiro, aún mantiene la sensación de estar ahogándose; observa al rededor, está en un restaurante de lujo, hay una multitud de personas rodeándolo y frente suya, está Marlene, viste un conjunto negreo con un vestido transparente, que demuestra madurez; esta se encuentra entregándole la mano. Noah viste, un pantalón negro junto con una camisa del mismo color, que solamente tiene una línea de color rojo, bastante delgada en su lado izquierdo, comenzando en el hombro, hasta terminar; quedando en armonía con sus anteojos.
"Q-... ¿Qué... sucede?". Dice Noah, un poco pálido, intentando comprender lo que pasa.
"Acepto ser tu esposa". Le responde Marlene con una linda sonrisa.
-¿Aún no vuelvo?-. Piensa. "Pero...". Al tratar de decir algo siente la mirada de las personas que lo juzgan cual criminal.
"Ven, amor". Marlene hace que se ponga de pie, lo abraza y besa frente a todos.
Solo pudo escuchar los murmullos de la gente, junto con los disparos de fotos. Después del beso, Marlene jala de la mano a Noah, pasando y empujando a todos. Noah entre cierra los ojos, se sienten pesados, como si no hubiera dormido en semanas. Llegan a lo que parece ser la puerta del baño del restaurante. Marlene voltea, lo mira, Noah se da cuenta, pero sus ojos no le permiten verla con claridad.
Al cruzar la puerta, una nube de polvo los golpea, por lo que tosen un poco. Marlene suelta la mano de Noah, Noah intenta respirar. Se encuentran una bodega, parece estar abandonada, hay poca luz y parece ser de noche.
"Muy bien... hay cosas que aclarar". Dice Marlene con tono brusco.
Noah sin saber que responder, comienza a vaguear por la bodega. Cada paso dado levantaba polvo, por lo cual, caminaba tranquilo, además de continuar con los parpados pesados. En la bodega había un montón de escritorios, sillas, estantes, cubierto por una manta sucia, Noah se acerca a lo que parece ser un estante.
"Ey, te estoy hablando". Vuelve a decir Marlene, pero de forma molesta.
Noah la ignora, toma con sus 2 manos la manta para poder quitarla, pero...
"No me hagas caso, estoy harta, harta, harta, harta...". Dice Marlene en tono alto.
Noah no logra quitar la manta, cuando de reojo observa a Marlene con un revolver disparándose.
"¡Marlene!". Grita desesperado mientras corre a donde estaba ella.
No pudo ni reaccionar cuando recibe una cachetada.
-Q... ¿Qué?-
Marlene lo abofeteó.
"¿Qué te sucede? deja de gritar y ponme atención". Dice Marlene muy molesta.
"Pero... este... yo v...". Noah intenta decir algo, pero lo confuso de la situación no se lo permite.
"Te decía... no podemos continuar así, no puedo casarme contigo, solo dije que si frente a ellos para no hacerte sentir mal, pero no podemos seguir de esta forma". Se gira y da unos pasos dándole la espalda a Noah. "Por favor... No vuelvas a buscarme, haremos, como que esto nunca sucedió". Se detiene y voltea con él. "Aunque... siempre te querré".
"Ma... Marlene". Intenta correr para detenerla. "¡Espera!". Dice en una bocanada de aire.
Al alcanzar su hombro, las respuestas comenzaron a ser aún más confusas; Marlene se volvió agua y desapareció, a la par que las esperanzas de Noah.
-Solo... ¿Por qué?-
[0070r1200n0092]
"Próxima parada, estación número 0070r1200n0092, el tren tomará un descanso, así que pueden bajar e ir al baño con tranquilidad". Suena en su mente, aquella voz, con efecto de radio.