Luego todo se difumina por un tiempo.
Despierto y siento que mi cabeza está en algo suave.
Estaba en el regazo de Tera, quien viste como una ejecutiva, camisa rayada, una corbata y un pantalón gris junto a unos tacones, su cabello plateado estaba recogido.
- Tardo un poco maestro- me dice y luego me toca la frente -bueno ya no está enfermo.
- ¿Enfermo? ¿a qué te refieres? Le pregunto mientras me levanto, la cabeza me da vueltas.
- Durmió durante 4 días, pensé que no lo lograría.
- ¿Casi me muero otra vez? Pregunto atónito.
- Mas o menos, su amigo el elfo paso varias veces a mirar su estado de salud, pero gracias a mis habilidades y el conocimiento que adquirí de usted, la fiebre no paso a mayores, de hecho, ahora debe sentirse mejor. Por cierto, mientras estuvo en ese estado decidí buscar trabajo y ¡cha-cha! Ahora trabajo en el gremio, en la parte de traducción y recopilación de manuscritos.
- Eso fue rápido- le digo impresionado, ¿pero? ¿cómo lo conseguiste si no eres ciudadana imperial?
- Si en esa parte la ayude- Enrs entra al "cuarto" -ella quedo registrada como un familiar tuyo y antes que lo preguntes son genéticamente idénticos.
- ¿Y eso cómo?
- Le dije que era un lazo de alma, prácticamente soy otra versión de usted maestro.
- En lo personal, no es que conozca muchos hechiceros, pero hasta donde tenía entendido, cuando un hechicero realizaba un pacto con un ser este no cambia su forma, a menos que fuera un cambia forma, pero tal parece eres la excepción a la regla- comenta Enrs.
- Solo cambie un poco mi aspecto a como era realmente, yo ya tenía forma humanoide, pero dependía del éter para mantenerla y ahora que el pacto esta completo solo necesito éter para usar mis habilidades.
- Siii, no entiendo nada- exclamo confuso ¿entonces Tera es otro yo?
- Correcto maestro, cualquier pacto que realice de aquí en adelante será una parte de usted.
- Bueno Augusto nos veremos más tarde, debo ir a trabajar, no debería decírtelo, pero el culto ha estado inquieto estas semanas- él se levanta y continua -Victoria también te envía saludos y lamenta lo ocurrido.
- Yo también debo trabajar maestro- dice Tera mientras busca en un pequeño cajón una chaqueta roja con el símbolo del gremio. -Puede descansar hoy.
- ¡Aguarda Tera, yo no voy a vivir como un zángano!, -aprovechare el día para buscar un trabajo también.
- Recomendaría que descansará, pero sabiendo que hará exactamente lo contrario, entonces adelante, aunque creo que el problema es la ropa- señala ella.
Si mi ropa estaba hecha un asco, tampoco me había bañado y estaba extremadamente desarreglado.
- Sobre eso, creo que puedo ayudar- exclama Enrs -ambos somos de la misma talla y casi igual de altos.
Enrs trae una caja y saca un poco de ropa (sencilla según él), me entrega una camisa blanca con listón, un pantalón de color caqui y unas botas altas cafés un poco desgastadas.
- Te debo mucho Enrs, en verdad eres un gran amigo- le digo.
- No hay problema, cuando consigas trabajo deberíamos celebrarlo como la última vez- me dice emocionado.
- Me parece buena idea- exclama Tera, -no he bebido en cientos de años.
- No puedo negarme esta vez, viendo lo que han hecho por mi- les digo a los dos.
Ambos se van a trabajar, Tera me recomendó que fuera al tablón de anuncios que esta junto a la fuente principal del pueblo, dijo que se pueden encontrar múltiples empleos allí escritos.
Me bañe y arregle lo mejor que pude, no podía quedarme como un vago, después de todo quiero recuperar a las niñas esa es mi meta principal, en que sea o no sea un hechicero solo es secundario, pero si puedo conseguir un buen trabajo seria genial.
Utilizo mi nueva ropa y busco en la caja que Enrs trajo, según él había todo lo que necesitaba un hombre soltero y en parte era cierto, una cuchilla para afeitarme, un pequeño espejo, jabón, toalla y otras cosas.
Me miro en el pequeño espejo y no me veo mal. Pero si estoy algo deprimido.
Tomo las llaves, las guardo en el bolsillo del pantalón, salgo de casa y me aventuro a buscar trabajo.
Cerca de mi nuevo hogar hay una escuela, niños de todo tipo de razas asisten a ella, el camino empedrado y lámparas colgadas en las paredes de las casas dan una sensación tranquila, después de todo casi todo funciona con magia, como es un día entre semana no se ve mucha gente por las calles de mañana, casi todos se encuentran trabajando, quienes caminan por las aceras o viajan por las calles normalmente son los comerciantes o los policías. El distrito especial mixto es el más grande de todos ya que casi todos los ciudadanos viven en este debido a que es económico y el que más lejos esta del centro, caminando tardo 30 minutos para llegar, pero no me puedo quejar es agradable caminar para despejar mi mente.
Cuando por fin llego a la fuente principal, me llegan recuerdos de la primera vez que viaje a este pueblo con las niñas y K´vool (me pregunto que estará haciendo) y ahora estoy vivo gracias a Enrs y Tera, debo aprovechar esta oportunidad para mejorar.
Algunas personas veían el cartel y tomaban los trabajos, la gran mayoría de trabajos eran en relación a trabajos domésticos, (mayordomos y sirvientas) tal vez podía aplicar, pero no quiero estar sirviéndole a alguien sin saber cómo es realmente, la otra parte era de cocineros, ayudar en los establos, ayudantes en los almacenes, guardias, trabajos para sin magia al parecer, la paga no es mala, pero no es lo mismo que la paga de alguien que usa magia, claro está que esos son los trabajos básicos, para los sin magia que poseían estudios superiores (universitarios) los pagos eran altos y casi todos relacionados con la investigación, en esta nación se valora mucho el conocimiento, en parte es debido a las continuas guerras con las tres repúblicas, quienes utilizan armas avanzadas.
Tomo nota de algunos trabajos y decido ir a preguntar sobre ellos, me rechazaron en los de ayudante en almacenes y establos al igual que de guardia, ya que requerían de razas fuertes, no quiero hacer trabajos domésticos, así que solo me queda la de cocinero si en algo soy bueno es en ello, también perdí mi tiempo ya que me rechazaron, ser un sin magia es difícil o quizás sea porque soy humano y en la mayoría de los trabajos necesitan razas fuertes o quizás es porque soy un desconocido.
El primer día no conseguí empleo, el segundo día quise probar con los trabajos de mayordomo, pero la mayoría de las personas que querían contratarme no era precisamente para "trabajar" como mayordomo entonces decliné.
Me encontraba junto a Tera en nuestro nuevo hogar, había aprovechado las tardes para hacer aseo, los dos estábamos sentados en lo único que teníamos, el colchón, por el momento comíamos lo más sencillo posible ya que a Tera le pagaban mensualmente y de todas formas ella no necesitaba alimentarse, solo lo hacía por gusto.
Ya había perdido una semana y aun nada de trabajo. Bueno no esperaba conseguirlo a la primera.
- No se desanime maestro- me dice Tera, -nadie consigue empleo a la primera vez.
- Si, pero tú lo conseguiste al primer intento.
- Bueno eso es diferente, soy una diosa casi nada me es imposible.
- ¿Y porque me elegiste? -siendo sincero no tengo muchos puntos fuertes que digamos.
- Bueno maestro, lo elegí porque es un humano único, creo que vio mis recuerdos y sabe que fui criada por un humano, en un punto desconocido perdí todos mis poderes, pero gracias a usted recuperé parte de ellos y lo elegí porque vi su potencial, además de que me libero del sello en el que me encontraba.
- ¿Un momento estabas sellada en el lago? Pregunto curioso, a sabiendas que la "pesque" por accidente.
- Correcto, he hecho cuentas y estuve encerrada por casi 1000 años, creí que el impacto cultural me volvería loca, pero viendo sus recuerdos eso no me afecto, de hecho, me encantaría vivir en su mundo.
Me dejo caer en el colchón -si a mí también me gustaría estar allí de nuevo, pero ahora tengo un deber con mis hijas y dudo mucho que pueda regresar a mi mundo original.
- ¿Extraña su vida anterior?
- Si la extraño mucho, aun me pregunto que estarán haciendo mis padres y mi hermano- no me gusta recordar lo que me hicieron durante 4 años, agradezco que no me hubiera vuelto loco, pero si me hubieran transportado en ese estado a un lugar lejano donde no estuvieran las niñas ya hace mucho estaría muerto ¿por cierto Tera en que rango te encuentras?
- Si lo piensa, desde el punto de vista de los juegos gatcha que van desde la E hasta Ex, soy Ex, debió a eso consumo cantidades insanas de éter para utilizar mis habilidades y por el momento usted no sabe cómo recolectarlo y menos utilizarlo, así que debemos practicar.
- Maki me dijo que los hechiceros ven el Éter de diferentes formas, ella lo ve como una mariposa y creo que yo lo vi con forma de polilla.
- ¿Y puede verla ahora? Pregunta curiosa.
- No, solo la he visto 2 veces y ambas veces fueron cuando te vi en forma humanoide.
- Creo que debemos practicar maestro, si quiere ser un verdadero hechicero es necesario que vea continuamente esa polilla.
- Pero me pareció extraño algo Tera.
- ¿Qué cosa maestro?
- Cuando la polilla se posó en mi mano, todo producía éter menos yo ¿sabes lo que significa?
- No maestro, es algo que solo usted puede averiguar, en eso no puedo ayudarlo.
En las noches Tera me explicaba teoría acerca de la hechicería, ella poseía cientos de libros sobre ello, los guarda en una especie de baúl antiguo, el cual podía hacer aparecer o desaparecer a su antojo y como se esperaba todos los textos estaban escritos en idiomas que no conocía, pero gracias al enlace de alma podía leerlos a gusto, ciertamente ella poseía un extenso conocimiento, pero tal como me dijo, me era imposible adquirirlos todos sin que mi mente estallara, así que solo me entrega una parte de sus conocimientos.
Tera se para en la mitad de la casa, choca las palmas de sus manos y crea un círculo arcano.
- Maestro, el conocimiento de su mundo me permite sintetizar materiales a gusto, puedo crear casi cualquier cosa que requiera material vegetal- ella crea un mueble de madera, una cama y todo tipo de muebles para adornar la casa. -no solo puedo hacer eso también puedo crear venenos, antídotos, toxinas y otras tantas cosas y si yo lo puedo hacer, también usted puede.
- ¡Increíble! Miro mis manos ansioso de hacer lo mismo, pero no sucede nada, era obvio.
- Maestro, esto no es un videojuego, se necesita practica para poder hacer esto y como sabe tengo miles de años de práctica.
Por ahora ya no debemos preocuparnos de los muebles, ella creo todo lo que necesitáramos.
- También puedo hacer crecer frutas y verduras- alrededor del circulo arcano crecen plantas las cuales tienen múltiples frutas y verduras, para mi sorpresa todas eran de mi mundo -es muy fácil cuando sabes de que están compuestas.
- Pero eso es de nivel atómico y molecular- le digo.
- Amo usted sabe todo eso, una cosa es que decidió ignorarlo cuando llego a este mundo, pero si quiere avanzar de verdad necesita recordar todo lo que ya sabía, y lo más importante ponerlo en práctica, además en un mundo como estos poseer dicho conocimiento y ser un hechicero le permite hacer muchas más cosas.
- Tienes razón soy un científico, creo que voy a necesitar un laboratorio- le digo mientras muevo los muebles y pruebo algunas frutas el cual voy a comprar por mí mismo- le digo.
Tera sonríe -entiendo maestro, no le gusta el camino fácil, entonces no vamos a necesitar nada de estos- ella separa las palmas de sus manos y todo se deshace, me quedo quieto como un idiota, todo lo que había movido se deshizo, mi esfuerzo fue en vano.
- Conseguiremos todo a la antigua, con trabajo y dedicación- me dice ella con una risa burlona.
- Debiste dejar los muebles- le digo cansado, de hecho, lo único que dejo fue la cama, en las noches dormía con Tera en su forma básica y en las mañanas ella regresaba a su forma humanoide, los dos quedamos en un acuerdo, ya que habitualmente a ella le gustaba estar desnuda e incluso me dijo que durmiera con ella mientras se encontraba en su forma humanoide, pero me parece indebido ya que ella es prácticamente mi ¿hija o hermana? Genéticamente idénticos, pero físicamente diferentes, así que le dije que lo haría si lo hacía en su forma básica, al principio no quería, pero al final accedió.
Era viernes en la mañana y por alguna razón que desconozco Astrea me esperaba en la puerta junto a su dragón, las personas del distrito especial salieron a ver aquella creatura, ser dueño de un dragón no es algo común, solo algunos nobles poseían estos, además domesticar uno era extremadamente complicado.
- ¿Cómo averiguaste que ahora vivo aquí? Le pregunte mientras me preparaba para salir a buscar trabajo nuevamente, Tera ya había salido a su trabajo en el gremio.
- Le pregunte a la oficial Victoria- responde, ella escondía algo en su espalda, "traje algo" dice mientras me entrega una canasta llena de comida -como agradecimiento por invitarme ese día- ella no me dirige la mirada.
La canasta estaba repleta de frutas.
- Te lo agradezco Astrea y también te agradezco por lo de aquí día- le digo.
Ella mueve la cabeza aceptando - ¿Qué va a hacer hoy?
- De hecho, voy a buscar trabajo, pero ¿Qué tal si damos una vuelta por el pueblo mientras busco ofertas? le digo.
- Hoy es mi día libre, así que puedo acompañarlo- responde, luego se despide de su dragón quien era acariciado por los niños, el dragón se aleja de los niños y vuela desapareciendo entre las nubes.
- ¿Y entonces que te trae aquí? ¿dudo que solo sea para visitarme? Le pregunto mientras caminamos por el pueblo, como siempre ella lleva su uniforme de sirvienta, las personas miran de reojo a la joven bruja.
Muchos piensan que debe servir a una familia noble de otro lugar, pero cuando la detallan bien pueden observar el sello de dragón que lleva bordado en la liga que lleva en su brazo derecho, sello que solo llevan las sirvientas de la bruja Velvet.
- Es mi día libre y pensé en visi—viajar para ver cómo se encontraba- exclama mirando al suelo.
- Entiendo, agradezco tu preocupación, por cierto- intento mirarla a los ojos, pero siempre esquiva mi mirada, enserio es rara ¿Cómo se encuentran las niñas?
- Se me prohibió hablar de eso- responde ella.
Bajo los hombros decepcionado y deprimido, así es esto entonces, no tengo ni idea de cómo se encuentran ellas.
Mientras caminaba junto a Astrea ella me cuenta como es su día a día en la mansión de su ama.
- Habitualmente no hacemos mucho en la mansión, la ama Velvet solo nos ordena hacer los quehaceres diarios y ya, la mayor parte del tiempo funcionamos como misión hospitalaria, ya que casi todas estudiamos medicina- relata ella.
- Eso es bueno, creí que solo eran sirvientas comunes y corrientes, pero en realidad son una especie de ONG.
- ¿Qué es una ONG? Pregunta ella.
- Disculpa, a veces uso palabras que no conocen, ustedes funcionan como organización hospitalaria ¿así como los templarios?
- No, nosotros no hacemos lo mismo que la iglesia, los templarios son solo unos asesinos, pero si es correcto, la ama Velvet siempre dice que debemos ayudar a quienes lo necesitan, en especial si son brujas.
- Creo que a mí no me trato muy bien- le digo a Astrea -pero si ella ha ayudado a cientos de personas no puedo discutirlo.
- A nosotras no nos agradan los humanos sin magia o que sea de clase baja, solo son una molestia, un estorbo y una pena para el imperio- comenta ella sin medir sus palabras.
- Entiendo, entonces me despido.
- ¿Por qué? -Pregunta ella sin comprender que acaba de insultarlo.
- Soy ambas cosas- le digo mientras estiro los brazos alejándome.
- Espera no quise decir eso- exclama ella, pero sus pocas expresiones pareciera que mintiera.
- Si lo que sea, nos vemos- digo mientras aumento la distancia entre los dos -gracias por la canasta.
Astrea se queda en la mitad de la calle mientras Augusto se aleja molesto, ella no comprende que acaba de insultarlo, era la primera vez que lo visitaba y ya lo había arruinado, aun así, seguiría intentándolo, solo para comprender que era ese sentimiento.
Augusto siguió su camino en busca de trabajo.
Mientras caminaba decidió darse una vuelta por el gremio, había querido ir desde hace mucho con sus hijas, pero ahora solo iría a visitar a Tera en su trabajo.
Tera era un espíritu antiguo, conocía múltiples idiomas de diferentes razas, pero no sabía nada sobre el trabajo o el uso del dinero (o eso me dijo), nos dirigimos primero al gremio del pueblo ya que estaban buscando a una persona que supiera escribir y hablar diferentes idiomas.
El edificio del gremio estaba construido de roca, por su estructura parecía tener más de 100 años, en su entrada había dos grandes árboles que le daban sombra, seguido por un camino sencillo empedrado parecido a una serpiente, la puerta de madera fina suena cuando la cruzamos, algunos aventureros observan diferentes anuncios pegados en tablas clasificadas por dificultad, también otros sentados alrededor de mesas bebiendo y comiendo, muchos de ellos iban vestidos elegantemente, según entendí a ningún aventurero se le permitía entrar con su armadura o armas. Parecía más un club social de alta sociedad, para convertirse en aventurero se debe pagar una cuota, la cual es descontada de la paga de las misiones completas.
El gremio se encuentra hermosamente decorado, cuadros finos, mueblería de calidad, los empleados la mayoría son humanos o semihumanos finamente vestidos
- ¿Estas perdido humano o buscas trabajo? Me pregunta un semihumano vestido de traje, llevaba una copa en la mano.
Le agradezco y solo le digo que estoy buscando a alguien.
Luego el semihumano se lleva su mano a la barbilla y me mira -Un momento me pareces conocido.
- No creo, de hecho, vivía lejos, así que dudo que dudo que me conozcan.
- No creo que si lo conozco- el semihumano se rasca la barbilla, luego chasque los dedos como signo de recordar - ¡tú eras el premio del bar!
- ¿El que? Cierro los ojos con fuerza y recuerdo.
- ¡Oigan miren quien está aquí! Exclama con burla el gigante semihumano.
Sus compañeros se acercan y me saludan encerrándome.
No es el tipo de popularidad que esperaba gracias a una idiotez que hice con Enrs.
- ¿Oigan y donde está la ganadora? Exclama uno de ellos.
- Ahora entiendo porque ella se metió de lleno a ganar- dice una mujer.
- ¡Llámenla, vamos a reírnos un rato de sus expresiones!
- Ya quiero verla.
- ¡O miren es el padre de las lindas niñas! Comenta una.
Las risas estallan en el gremio entre los aventureros y quienes trabajan allí.
- ¡Oigan dejen de molestar a mi maestro! Se une Tera separando a las personas. Gracias al cielo aparece.
- ¿Tu maestro? Comenta un aventurero.
- Si es mi maestro- ¿acaso pasa algo con eso? Le dice ella mientras se cruza de brazos.
- Bueno en realidad casi somos hermanos- respondo.
Tera se ve decepciona al escuchar "hermanos"
Los aventureros y trabajadores del gremio vuelven a lo suyo un tanto tristes ya que no pueden seguir molestándome.
Ella me toma de la mano.
Eso causa envidia en algunas mujeres quienes se muerden el labio o hacen un gesto, cosa que le encanta ver a Tera.
Los dos llegamos a su oficina, la cual es ciertamente es fina. Tiene una pequeña matera, un estante lleno de documentos, dos sillas adornadas, su puesto de trabajo esta excesivamente ordenado, algunas plumas y lápices están guardados en una especie de vaso ornamental. Ella me invita a sentarme.
- Maestro, aunque me emociona que me visite, no debe hacerlo una costumbre ya que ahora me encuentro ocupada en mi trabajo.
- Disculpa Tera, solo quería saber cómo era el gremio- le digo a ella.
Ella suspira -Si es un buen lugar, el trabajo es constante en especial en el ámbito legal, descifrando documentos o traduciendo textos, siempre estoy ocupada.
- Lo siento Tera- me disculpo con ella.
- No se preocupe maestro, solo no vuelva a hacerlo.
Alguien golpea la puerta de su oficina.
"Pasa" dice ella con diligencia, mientras busca unos documentos.
Una joven semihumana abre la puerta.
- Tera el maestro del gremio te necesita- comenta ella mientras mira un documento que lleva en sus manos, -cuando termines podemos ir a comer donde el jefe Gars- luego la joven desvía su mirada.
- Hola Bast- la saludo.
Rápidamente ella sale y cierra la puerta, dejando caer unos documentos.